¡Vaya arbitrajes sufre el Athletic!

Ya llevo quejándome tiempo del tema. De hecho uno de mis anteriores comentarios lo acabé, diciendo que esperaba que el árbitro pasase desapercibido, que fuese imparcial.

Da la sensación que se ríen de ti (Foto: El desmarque Bizkaia)
Da la sensación que se ríen de ti (Foto: El desmarque Bizkaia)
Pues nada más lejos de la realidad. Los dos últimos arbitrajes que hemos recibido han sido calamitosos. Para empezar, contra el Sevilla fue Prieto Iglesias el que nos puso las cosas imposibles. De hecho el Comité de Competición le ha dado la razón al Athletic en uno de los errores importantes del colegiado, al quitarle la tarjeta amarilla a Laporte, dejando claro que no fue penalti el pitado. Es decir, que el segundo gol no debería haber subido al marcador. Laporte sin tarjeta pero el equipo se queda con ese marcador. Sobre el penalti a Aduriz nada que decir… Casualidad, el que sí fue penalti, el árbitro no lo vio. Y el que no existió, se lo inventó. Esto son las paradojas de la vida.
En Castellón no hubo problemas de penaltis ni jugadas dudosas. El problema en Villarreal fue que Velasco Carballo, vio y no vio lo que le dio la gana. Ni él ni sus linieres ni el cuarto árbitro. Se ve que ejerzo de adivina pero vistos los partidos de Bailly este año contra el Athletic ya avisé que había que tener cuidado con él. La verdad es que tampoco me voy a dar ningún mérito por adiviarlo, simplemente era una evidencia. En el partido de Liga a Kike Sola le dio hasta en el carnet de identidad. El miércoles pasado en Copa hizo lo mismo con Aduriz y con todo el que se acercaba a su zona (como pudo comprobar también Beñat). Y esta semana las jugadas que ha tenido con Aduriz son de auténtica vergüenza. Le tenían que haber expulsado dos veces. En la primera jugada en un salto le da un codazo en la cabeza, ya de por sí merecedor de tarjeta amarilla, que no la vio. Le debió parecer poco al marfileño porque al quedarse Aritz dolorido en el suelo le pisó. Vamos roja directa. Ah, y para coronar el despropósito de la jugada, aparte de no sacar ninguna tarjeta a Bailly, la tarjeta se la llevó nuestro delantero centro por protestar.
Y si eso no fuera suficiente, el mismo jugador, Bailly, en una disputa por alto, le clavó la rodilla otra vez a Aritz en la espalda. Aquí sí se llevó la amarilla, pero la jugada igual era incluso de roja. Un fenómeno el marfileño. Tampoco Eraso se libró de su entrada.
Así mismo, Soldado en otra jugada sin venir a cuento le pega por la espalda a Etxeita un golpe sin balón ni nada. Por supuesto sin consecuencias. Etxeita se dio la vuelta y le miró alucinado, como nos quedamos todos, alucinados. Excepto Velasco Carballo que por supuesto no vio nada. Velasco Carballo no vio nada. Los linieres tampoco y el cuarto árbitro tampoco. Curiosamente el cuarto árbitro hace poco nos dejó con un jugador menos cuando se chivó que San José se había revuelto para empujar a un jugador que le había dado una patada por detrás… pero que casualmente esa patada no vio nadie porque le sacaron una roja a Mikel, el contrario se fue tan pichi y solucionado el problema. ¿Por qué tenemos tan mala suerte? ¿O no es cuestión de suerte?
Y ahora voy a lo importante. ¿El Athletic hace algo ante estos continuos atropellos? Ya sabemos que el Comité no va a rearbitrar si no se le pide, pero… ahí debería entrar el Athletic. Primero solicitando que a Aritz se le quite la tarjeta. E incluso voy más lejos. Yo denunciaba a Bailly, enviando las imágenes de las entradas y que el Comité haga lo que deba. Ya está bien la tomadura de pelo. Nuestra Junta directiva algo tiene que hacer. En un programa de radio le he oído a Iturralde González que eso no lo hacen los clubs para curarse en salud y que luego no les ocurra a ellos. Pero lo que está claro es que si los clubs denunciasen, los jugadores se cuidarían muy mucho de hacer ese tipo de cosas tan a menudo porque con la cantidad de cámaras que hay ahora se les pilla siempre. ¿Por qué no les interesa a los clubs? No lo entiendo.
Todo esto lo uno a que el domingo vamos a Barcelona, donde se están quejando amargamente por las entradas que le hicieron ayer a Messi. Entradas todas repetidas mil veces en la tele y para mí entradas normales, de tarjeta amarilla y tarjeta tuvieron. Eso sí nada o poco dicen de los dos pisotones de Alves y Mascherano, que debieron ser fortuitos ambos (¡JA!). También se habla de la de Caicedo sobre Ter Stegen. Para mí tres rojas como tres casas, pero… Lo de los arbitrajes es un desastre. Allí el artista fue Fernández Borbalán. Por cierto, Televisión Española no tenía imágenes de las entradas de Bailly. ¡Qué casualidad! De verdad, que todo me parece una vergüenza. Mientras, por las entradas a Messi, el Barça se pasará los cuatro días llorando hasta que lleguemos nosotros el domingo, los siguientes primos y hasta por tirar a saque de banda nos sacarán tarjeta. Encima con Mateu Lahoz. Así que lo tengo muy claro, el domingo hacía rotaciones y dejaba a los jugadores que quiero que estén frescos para la Copa el miércoles, sin jugar. Total, va a dar lo mismo lo que hagamos, seguro que nos la lían de alguna manera, porque en Barcelona nos ha pasado de todo. Las cosas más rocambolescas. Os recuerdo algunas. Iraizoz hizo un penalti con el labio a Henry. Sí sí. ¿A que os acordáis de la patada que dio el francés en la cara a Gorka y fue sancionado con penalti? Otra el puñetazo de Rivaldo a Mari Lacruz, con por supuesto tarjeta para nuestro jugador. Salivazo de Eto’o a Expósito. Agresión de Valdés a Toquero,… Y no me invento nada, por si no me creeis he encontrado en Youtube un vídeo con la voz del gran Jose Iragorri, que introduzco, en el que nos dice lo que pensamos todos: «Vamos allí, nos ganan, encima nos dan de leches y volvemos nosotros con algún jugador expulsado». Así que, ¡Cuidado Athletic!
Salga con quien salga Txingurri (mejor los suplentes): ¡Aúpa Athletic y a por el Barcelona!

Desastre múltiple en el Pizjuán

Esta temporada en Liga con los equipos que suelen estar arriba estamos haciendo buenos o muy buenos partidos, pero… nos está pasando como en el Pizjuán el sábado. Jugamos, tenemos más oportunidades que el rival, les achuchamos pero… en un detalle o dos se nos van los puntos.

Vaya desatre el árbitro Prieto Iglesias (Foto: Pablo Viñas)
Vaya desatre Prieto Iglesias (Foto: Pablo Viñas)
El Sevilla no mereció la victoria pero nos ganó por dos goles de diferencia. Uno por la enorme velocidad de Gameiro, que dejó en evidencia a la defensa, y el otro por el árbitro, que vio un penalti en una caída de Krychowiak, que nos condenó a un 2 – 0 muy difícil de levantar. Si a esto le añades la lesión temprana de Raúl García, y que el penalti que le hicieron a Aduriz no fue considerado como tal, susamos y sumamos y resulta que todo fueron imponderables que llevaron a que pasara lo de siempre a orillas del Guadalquivir. Que perdimos. Ya antes del partido comentamos que el Sevilla está en un momento de forma excepcional, en casa. Siete partidos seguidos ganados, y con el del sábado ocho. Vamos que no nos enfrentábamos a un equipo flojo. Al contrario. Se encontró como pez en el agua dejándonos el balón y jugando al contrataque. Y la velocidad de Gameiro hizo el resto en la única oportunidad que tuvieron en el primer tiempo. Mérito del Athletic que no hubiese más. Nosotros oportunidades de San José, Iñigo Lekue (otra vez muy bien), Raúl, Aduriz, Williams… pero sin gol. Y en el segundo tiempo tampoco fue muy distinto, aunque el Sevilla estuvo mucho más tranquilo y tras el penalti, transformado por Gameiro también, estuvo incluso dominador, durante los diez o quince minutos que tardaron los rojiblancos en asumir el mazazo. El Athletic lo siguió intentando pero sin peligrosidad (salvo el penalti no pitado). Pero sí con acercamientos continuos al área. A lo que voy con todo esto, es que si jugamos así no vamos a perder muchos partidos. La calidad está y faltó un poco de suerte o un poco menos de mala suerte. O si me apuras faltó también un arbitraje neutral. Pero si el equipo sigue así va a ser un equipo muy complicado de batir.
Otro de los desastres es que si el año pasado allí se lesionó de gravedad Muniain, este año le ha tocado a Raúl García. No sabemos hasta qué punto es grave o no, eso sí la pinta fue horrible. Ya han avisado… que si no hay rotura como poco pueden ser entre seis y ocho semanas. Raúl es un baluarte que será muy difícil de sustituir. El otro día en Sevilla, lo hizo Eraso, y quizá por nervios, por falta de ritmo o por lo que sea, estuvo muy impreciso, fallando un montón de pases. Pero eso ha sido un día. De hecho, cuando este año comenzó la temporada jugando, lo hizo francamente bien, encima viendo puerta. Rápido, habilidoso, y con mucha visión de juego. Si tiene minutos seguidos como al principio los pases al hueco volverán y esa capacidad para crear ocasiones de gol también. Sino es así, Valverde tiene ahí a Muniain que donde mejor rinde es en la media punta. Vamos, que opciones sí que hay, aunque tal como estaba Raúl es evidente que le vamos a echar de menos. A ver si en poco tiempo le volvemos a tener en el campo.
Y el miércoles otra vez el Villarreal, otro que mete mucho miedo… El pasado comentario dije que el árbitro para ese encuentro iba a ser Mateu Lahoz y me confundí. Mateu nos lo reservan para el Camp Nou… en fin. El árbitro será Velasco Carballo… no sé si es de Guatemala a guatepeor. Al final el nombre casi da igual porque puede ser como este fin de semana que te pilla Prieto Iglesias y te hace un lío… Yo lo que pido siempre a un colegiado es que sea imparcial y que no se note que esté. ¿Demasiado, verdad? Y para acabar lo que le pido a mi equipo es que juegue como últimamente y así volverán con la clasificación para la siguiente eliminatoria de Copa.
¡Aúpa Athletic y a por el Villarreal!

Feliz día de Reyes en la Catedral

La entrada del año en la Copa contra el Villarreal casi se nos atraganta, como el primer partido de Liga contra la Unión Deportiva Las Palmas. Pero curiosamente, contra el equipo que más calidad tiene, fuimos capaces de dar la vuelta al marcador, algo que no ocurría en Copa desde hace más de cien años (remontar un 0 – 2).

Muy bien Iñigo Lekue (Foto:    Juan Lazkano y Borja Guerrero)
Muy bien Iñigo Lekue (Foto: Juan Lazkano y Borja Guerrero)
Estos dos partidos han sido muy distintos y por supuesto me quedo con el último. Contra Las Palmas, el perfecto toque de balón de los isleños hizo que el Athletic cayese en una especie de letargo que propició los dos empates que consiguieron hasta dejar el marcador en el definitivo 2- 2. Me gustaron mucho. No se despeinaron en todo el partido a pesar de ir siempre por detrás en el marcador, siguieron a lo suyo esperando su oportunidad, tocando y tocando. El Athletic acabó cayendo de maduro ante su buen manejeno de balón, pero no me parecieron muy peligrosos… Curioso… porque nos metieron dos goles… Pero si se les hace regalos como el de De Marcos… lo aprovechan, claro. Empate y para las islas como locos de contentos. Nosotros con cara de tontos porque de nuevo retrasamos el acercarnos a los puestos de Champions.
Por su parte, en la Copa, el submarino amarillo, me pareció un equipo peligrosísimo. De hecho, en el primer tiempo los dos únicas llegadas al área que tuvieron las convirtieron en gol. En ese momento todos pensamos e incluso verbalizamos eso de: Agur Copa. ¡Qué poca fe en nuestros leones! Y efectivamente, fueron más leones que nunca. El resultado del primer tiempo no refleja lo que se vio en el campo. El Athletic tuvo más llegada pero no consiguió transformar las oportunidades. Un Villarreal súper serio no nos dejó hacer más y en dos arrancadas consiguió dos goles. ¡Qué peligrosos y rápidos son! En el segundo tiempo los rojiblancos siguieron a lo suyo, a lo que habían hecho en el primer tiempo pero en este caso el acierto de Williams, sí que consiguió esquivar al portero para que el balón fuese a la red. A partir de ahí, a asediar al rival, entrando también en el campo Aduriz, que consiguió el segundo gol, tras la segunda conexión con Iñaki. El tercero fue obra de Aymeric a pase de Beñat, otro de los destacados del partido (era su segunda asistencia). No me olvido que el Athletic jugó con algún cachorrillo en sus filas. No lo digo por Williams que parece que ya de cachorro no tiene nada. ¡Qué fuerza y garra tiene! Lo digo por Lekue, al que aunque le hemos visto poco, no me canso. Incluso no jugando en su sitio lo hizo muy bien. Se le ve la calidad en cantidad de detalles. Él, al acabar el partido, dijo que no le importa el lugar en el que le coloque Valverde. Yo que no tengo nada que perder, le voy a pedir al entrenador que lo coloque en su sitio, porque siempre rendirá más, que a pierna cambiada. Hace dos semanas le vi con el Bilbao Athletic contra el Lugo, de extreño derecho y me pareció uno de los mejores del partido, incluyendo un gol precioso. Ya se vio contra el Villarreal que no le cuesta tirar a puerta, en este caso, una volea muy difícil que salió por poco. Iñigo está pidiendo minutos a gritos.
El Athletic tuvo una última oportunidad antes de acabar el partido, también de Laporte, pero no pudo ser. Y así acabó la remontada, dejando el marcador en un 3 – 2, que es un resultado más ajustado a lo que vimos y que nos permite ir con esperanzas a Castellón, aunque ya sabemos que va a ser muy difícil, no sólo porque sea un campo que se nos da fatal, sino por el momento de forma de los amarillos. A ver si nuestros chicos están tan puestos como el segundo tiempo de La Catedral y nos dan otro alegrón. El miércoles la respuesta. Por cierto, el árbitro designado es Mateu Lahoz… Miedo me da, porque el defensa Bailly ya repartió estopa a más no poder y sin una sola tarjeta amarilla (fijaos en el gol de Williams cómo dejó a Beñat, por el suelo, después de que el rojiblanco diera su perfecto pase a Iñaki)… Bailly es el típico jugador que siempre «pilla cacho», y con Mateu y su «sigan sigan» no sé lo que puede pasar.
Pero… por medio y antes, tenemos mañana mismo que enfrentarnos al Sevilla, otro equipo en forma, y en el Pizjuán, una plaza que tampoco se nos da nada bien. Muy difícil, pero si queremos seguir en puestos europeos… ¡A por ellos y Aúpa Athletic!

Athletic, imposible acabar mejor el 2015

El Athletic acaba el 2015 consiguiendo tres puntos importantísimos en uno de los campos más complicados esta temporada.

Raúl como el equipo, perfecto (Foto: Miguel Riopa)
Raúl como el equipo, perfecto (Foto: Miguel Riopa)
El Celta demostró ayer porque sólo un equipo ha sido capaz de ganarle en su campo. El Celta me gustó mucho. Casi tanto como el Athletic, super serio desde el minuto uno al noventa y tres. Se veía que un detalle iba a decantar el partido hacia uno u otro lado. En el primer tiempo no hubo muchas oportunidades pero se repartieron entre ambos equipos. La presión hizo que el ritmo fuese intenso pero con pocas llegadas. En el segundo quizá el Athletic dio un paso adelante y aumentó su dominio pero faltó de acierto en los últimos metros donde el último pase volvía a ser defectuoso. Raúl García se descolgó con un tiro soberbio, no tanto por la fuerza como por la colocación. Fue lo que mi padre denominaba un pase a la red. Tiró a colocar, con tan mala suerte que le fue al palo. Raúl los 21 partidos que lleva con el Athletic nos sigue demostrando que no sólo tiene calidad, sino que es muy muy listo. Pena de larguero y ya lleva unos cuantos. El siguiente contrataque por fin acabó con un pase letal, del Zorro, que vio el desmarque perfecto y dejó al excolchonero solo delante del portero. Toque con el exterior, nada fácil, y a la red, tras sortear a Sergio. Perfecto. Y Raúl que ya lleva seis goles. Y no sé cuántas asistencias. Está claro que el tándem que forma con Aduriz es de muchos quilates. Además, funciona en las dos direcciones. Asiste uno y marca el otro o al revés. ¡Vaya fichaje! Y a partir del gol a aguantar. Ellos tuvieron una ocasión que fue al palo y varias aproximaciones pero sin mayor peligro. Nosotros también otro palo, esta vez de Eraso. Pero el Celta dejó claro que era necesario todo el trabajo que desarrollaron nuestros chicos para arrebatarles el triunfo. Buen Celta pero mejor Athletic.
Con este nuevo éxito, los rojiblancos se sitúan en séptima posición empatados a puntos con el Deportivo. pero y lo que es más importante nos ponemos a cuatro puntos de la Champions, que soñar es libre y tal y como está el equipo se debe luchar por ella. No digo se debe conseguir, pero sí ir paso a paso e intentar conseguirla.
Por último, voy a hacer balance de este año 2015, que yo, sin temor a equivocarme voy a decir que ha sido excepcional e inolvidable para todos los athletizales. No puedo pedir más. Se ha conseguido un título después de treinta años sin ellos. Encima ha sido la Supercopa, a doble partido, contra el super poderoso Barcelona y para más inri siendo la vuelta en su casa. Una hazaña al alcance de muy pocos. Un título que se fraguó con el mejor partido de la temporada, ese 4 a 0 en San Mamés de la ida, que ya ha quedado en la memoria de todos grabado a fuego. Un partido perfecto, con un Aduriz colosal, como ya nos tiene acostumbrados, que le endosó tres a los temibles culés. En la vuelta por si había alguna duda, ni siquiera nos consiguieron ganar. Se tuvieron que conformar con el empate. Total 5 a 1 a nuestro favor. Allí en el Nou Camp nos dieron la Copa, bueno se la dieron al gran capitán, Don Carlos Gurpegi, en una entrega de trofeos cutre donde las haya, que dejó de nuevo retratado al Barcelona y a su poca deportividad. Ya me hubiese gustado ver la celebración que tenían preparada si hubiesen ganado ellos. ¡Qué poca clase! En fin, a lo que iba… un año impresionante, que nos permite olvidarnos un poco de la nueva final de Copa que nos arrebataron los catalanes, de nuevo, esta vez, en el colmo del disparate celebrada en el Nou Camp. Final de Copa a la que llegar lo considero un éxito de por sí, ya la ganaremos otro año. Éxito también fue la clasificación para la Europa League o UEFA, con una segunda vuelta de la Liga para enmarcar. Clasificados para una competición en la que todavía estamos, y quién sabe hasta dónde podemos llegar. En Copa seguimos y esta misma semana nos la jugamos contra el Villarreal, otro equipazo, pero seguro que ellos también están asustados. A ver hasta dónde llegamos.
Conclusión: Año perfecto, que nos impulsa a soñar. Tenemos equipo. Tenemos banquillo. Tenemos calidad. Tenemos ganas y un vez empezado, esto es como el rascar… todo es empezar… Queremos más. Iremos poco a poco, pero SÍ SE PUEDE. Se puede soñar y ¿POR QUÉ NO CON OTRO TÍTULO? Si ya hemos conseguido uno, algo que se veía imposible,… ¿por qué no más? Este año ha sido increíble y el próximo ¿por qué no también?

Feliz salida de año a todos, mejor entrada eta URTE BERRI ON!!!!

y por supuesto… ¡AÚPA ATHLETIC!

P. D.: Os recomiendo que veais el precioso vídeo del Athletic, Urte Berri On (https://m.youtube.com/watch?v=_8sNAivdtH0), PORQUE SOMOS UNA CUADRILLA… TODO ES POSIBLE.

Los colchoneros otra vez ganan al Athletic

Desesperante que volviesemos con las manos vacías del Calderón, aún sin merecerlo pero… las cosas son así.

No pudo ser (Foto: Pablo Viñas)
No pudo ser (Foto: Pablo Viñas)
El Athletic jugó el mejor partido en muchos años contra el Atlético de Madrid, una de nuestras bestias negras, desde la final de Bucarest, de infausto recuerdo. El mejor partido. Se compitió desde el minuto uno al noventa y en muchas fases siendo superior a ellos. No sólo tuteándoles sino que incluso jugando mejor. A pesar de ello, por tres matices pequeños, pero que no insignificantes, volvemos otra vez con cara de tontos, aunque orgullosos por cómo se desarrolló el partido.
Empiezo por el primer detalle, el que más me enfada, porque es el de la participación del árbitro, tomándose un protagonimo que no le competía, pero… para eso están los árbitros, en nuestro caso… para… pues eso… Por supuesto, me refiero a que el gol del empate de ellos no debería haber subido al marcador, por lo menos en ese momento porque el primer tiempo ya estaba acabado. El trencilla dio un minuto de prolongación y ya ese minuto se había sobrepasado. El córner se sacó después del minuto 46. Su reloj es igual que el de todos. Si das un minuto más, es sólo un minuto. Sino, prolonga dos. Fue una faena que encima después ni nuestros defensas ni Iraizoz estuviesen inspirados. Al contrario. Estuvieron fatal. Ir al vestuario con cero a uno hubiese sido otra cosa.
Segundo detalle: la lesión de Iturraspe se notó mucho. Estaba haciendo un muy buen partido junto con Beñat, también a gran nivel. La salida de Rico hizo perder control en el centro del campo. Estuvo fallón, y encima no despejó como debía en el borde del área, haciendo un enorme favor a Griezmann, dejándole el típico balón que desean todos los jugadores… para completar el desastre. El francés, todo hay que decirlo, metió un golazo, imparable para Gorka y para cualquiera.
El Atlético de Madrid no hizo más. Bueno sí. Un buen puñado de faltas que como siempre son sancionadas con distinto criterio que las que comenten nuestros jugadores, con respecto a las tarjetas. Supongo que todos estaréis hartos de que nuestras faltas sean tarjetas y las de los contrarios, siendo iguales o mucho peores, casi nunca conlleven cartulina. Misterios, como que Giménez acabe sin cartulina cuando hizo cantidad de faltas por detrás. Faltas o léase patadas. Pero… Así es el Villarato… no hace más que favorecernos… ¡Ah… No…! ¡que es al revés! Bueno algún día ya me lo explicará alguna mente preclara porque yo desde luego no lo entiendo.
Un tercer punto que contribuyó al resultado, fue que Raúl García estuviese tan igualmente fallón y menos intenso que en los otros partidos que había jugado hasta ahora. No hay más que ver la repetición de la jugada en la que rechaza el portero la ocasión clara de Aduriz. El balón llega al borde del área donde están un defensor atlético, no me acuerdo quién es, y Raúl. Y no pasó nada… Una pena, pero… También me parece humano. Son muchos años allí, muchos amigos y no consiguió jugar como lo hace siempre. Yo le hubiese sustituido. Pero repito, que lo que le ocurrió me parece muy humano y lógico.
Para acabar, decir que nos quedaremos con que el equipo compitió, tuteó y en momentos, fue superior a los colchoneros, y así pensaremos que la próxima vez les ganamos seguro. A la vuelta lo comprobaremos.
Ahora de momento, mañana nos llega el Linense en la Copa. ¡A por ellos y aúpa Athletic!