El Athletic pasó a cuartos de la Europa League, eliminando al equipo italiano en San Mamés, en medio de un ambiente espectacular, con una grada entregada desde mucho antes del minuto 1. Y no me refiero solo a la grada de animación, me refiero a la grada completa. Todos y cada uno de los socios. Bueno, socios, abonados, gazte abonos, y los que no eran socios pero compraron la entrada. Unidos somos más. ¡Fue espectacular!

Ambientazo (Foto: Borja Guerrero)
Un 3 a 1 ha sido necesario para conseguir dar vuelta a la eliminatoria que venía, del partido de ida con un peligroso 2 a 1 en contra. Resultado nada deseable, porque encima era contra un equipo italiano, inventores del catenaccio, y guiados por un perro viejo como Claudio Ranieri, todo un señor, por cierto. Pocos entrenadores son capaces de reconocer, que la jugada más importante del partido, que supuso la expulsión de Hummels, en el minuto 11, fue correcta. La Catedral la celebró como si fuese un gol. Jugar 80 minutos en superioridad, parecía que nos abría un poco las esperanzas de pasar. Vete a saber lo que hubiese ocurrido once contra once. Seguro que hubiese sido muchísimo más difícil, o no, vete a saber. Ya, ciencia ficción y, además, nos da igual. El mazazo para ellos fue gordo, y los nuestros tenían que administrar la ventaja, sin tener ansiedades de prisas ni agobios. La Roma se echó hacia atrás, sin miramientos, y el Athletic siguió a lo suyo, con la portería contraria entre ceja y ceja, pero con más tranquilidad porque parecía que las contras de ellos iban a ser más escasas, por su nueva disposición en el campo, casi casi alrededor de su portero. Hubo oportunidades rojiblancas, pero ninguna se materializó: una por impericia de Maroan, que todo hay que decirlo, fue el que provocó la expulsión, pero ahí, intentó una vaselina y no se dirigió a la portería; otra por el palo que escupió un balón enviado por Nico, tras jugadón, ¡Qué pena!; y otra, sacada in extremis por su portero a tiro también de Maroan. Pero en el descuento del primer tiempo, un pase desde la izquierda de Iñaki, tocó nuestro «elefante africano», y le llegó en la derecha, al segundo palo a Nico,que está vez sí, vio puerta ,porque tocó en un contrario y el balón pasó por encima del portero. Donde las dan, las toman. Ellos nos golpearon en el descuento del segundo tiempo en la ida, y nosotros se la devolvimos en el descuento del primer tiempo. Perfecto, porque seguro que les dio muchísima tranquilidad a los nuestros, el pensar que tienes todo el segundo tiempo para meter el gol que necesitas. Y buen golpe para ellos.
El segundo tiempo empezó exactamente igual que el primero, un Athletic empeñado en conseguir el segundo gol, y una Roma decidida a impedirlo. Unai Gómez, que entre otras cosas, en el primer tiempo le puso a Maroan el balón que picó, se quedó en el banquillo y dio paso a Berenguer, que estuvo también muy incisivo. Un contraataque estuvo a punto de culminarlo pero el portero se volvió a lucir. Pero nada pudo hacer frente al remate de cabeza de Yuri, a pase de Álex en un córner. 2 a 0, locura, y alegría inmensa y a contemporizar, pero sin olvidar el atacar, para conseguir el gol de la tranquilidad, que se lo inventó Nico con otra maravilla en el área, sorteando rivales y metiendo la puntita de la bota para esquivar, por último, al cancerbero. Nico se desquitó por todos los partidos flojos que lleva esta temporada. A los jugadores determinantes hay que exigirles que brillen en los momentos claves y ayer el pequeño de los Williams cumplió con creces. ¡Que siga así, porque le necesitamos! 3 a 0, y el público, 50.666, en su mayoría, salvo los italianos, que seguíamos con los bufandeos. Una maravilla. El momento tonto, volvió a llegar en el descuento en forma de penalti, riguroso de Gorosabel, gol de ellos y dos minutos agobiados, para llegar a cuartos. Jejeje… menos mal que solo fueron dos.
Además de Nico, quiero destacar a Maroan, un jugador que acaba de llegar de Primera Federación, y que hace sudar tinta a las defensas contrarias. Ayer fue determinante. Ruiz de Galarreta y Jauregizar, son un lujo doble, que tenemos en la sala de máquinas. Unai Núñez, lidió con el marrón muy bien. Me alegro por él un montón, porque al jugar tan poco, el foco parece que siempre lo tienes encima y lo llevó muy bien. Algún errorcillo, pero lo fundamental solventado. También marrón tuvo Lekue que sustituyó en el segundo tiempo a Paredes, que tuvo una sobrecarga, es decir, jugó de central izquierdo. Estuvo también bien. Me alegro infinito. También voy a destacar a Yuri, del que he dicho varias veces está temporada que defensivamente está sufriendo mucho. Pues al César, lo que es del César. Ayer además del gol, dio la asistencia a Nico tras una muy buena cabalgada (luego ya Nico le puso la fantasía… pero la asistencia no se la quita nadie).

Alegría de gol (Foto: Oskar González)
Y así a cuartos , y encima con el premio doble de que al eliminar a un equipo italiano, parece más cerca la quinta plaza Champions para un equipo español. ¡Ojalá! Aunque estemos luchando por la cuarta, por si acaso,… mejor que el quinto también pueda ir. Ah, y creo que por pasar la eliminatoria, nos caen otros 2 millones y medio. Todo ventajas.
Y el domingo a Sevilla, en Liga. A ver si cambiamos esa inercia de conseguir poco premio tras partido europeo. Sé que por lo jugadores no va a quedar, porque se están dejando los higadillos todos los partidos. Así que… ¡a por ellos! Y…
¡Aúpa Athletic!