Me lo creo porque todo apunta a que, efectivamente, el plan del govern se agotaba el 1 de octubre, como reconoce el portavoz de ERC, Sergi Sarrià. Desde entonces, improvisación hasta las elecciones que esperaban los de Junqueras mientras cedían el desgaste a Puigdemont. Ahora los de ERC están donde querían (salvo los que están injustamente en la cárcel): poniendo condiciones imposibles para repetir lista unitaria y preparándose para tomar el poder con el PDeCat quemado.
Todo es en clave electoral
¿Va a romper Podemos todos sus pactos en España con el PSOE como ha hecho Ada Colau en Barcelona (con la pantalla de la consulta a unas bases que, hasta el momento, en Podemos siempre han votado lo que convenía)? La respuesta es que evidentemente no va a hacerlo, porque la decisión ha sido tomada en clave electoral catalana. Ni mucho menos tiene por qué replanteárselo el PNV, aunque, como era de esperar se lo exija quien siempre ha sido más utilitarista que nacionalista.
También las mentiras
En el PP no se molestan ni en retorcer la verdad para que no parezca que nos la están colando o que, sencillamente, se están riendo de nosotros a la cara. Porque quien dice: “Acudimos a la ley para hacer cumplir la ley” con la fiscalía y la OCU concluyendo que en su partido se repartía lo trincado tiene que tener la cara bastante dura. Pero así es Rajoy, posiblemente el político que mejor maneja los tiempos y las crisis ahora mismo en el mundo, y que ya está de campaña en Catalunya.
Sí, es un trabajo
Las críticas que ha recibido Dulceida, por tuitear: “Me encanta que coger 6 aviones en una semana sin parar de currar de un lado para otro sea no hacer nada” no tienen sentido y si lo tienen es el peor, porque rezuman un machismo asqueroso. Me explico: en el caso de “los” influencers nadie discute que son modelos con presencia en Internet. En el caso de “las” influencers parece que no tienen más trabajo que el selfie y “el trapito”. Y ese es un error básico.
Hoy rescatamos al rescatador
Creo que podría abrir una subsección con los temas que tengo seleccionados y no han cabido estos meses en la columna por las improvisaciones del procés y las injusticias contra sus protagonistas. Una de ellas es que José Andrés, el chef asturiano que triunfa en EE.UU., ha ofrecido 5.000 comidas con su fundación a los afectados por el huracán en Puerto Rico. Más que la Cruz Roja. Y ha abierto un debate: la eficacia de las ONG especializadas contra las “generalistas”.