De toda la actualidad que emana EITB, personalmente, me quedo con la que provocó ayer el tuit el periodista navarro Txarli Pérez: “Egun on! Comenzamos la semana con 4 canales nuevos en TDT, los de ETB, y la mayoría de la ciudadanía de Navarra lo ve con naturalidad”. Así de fácil: romper con la excepcionalidad navarra, por la que podía verse cualquier canal autonómico menos el de la CAV, no ha supuesto ningún trauma. Bueno, para quienes impusieron el veto tal vez sí. Ellos y ellas sabrán por qué.
Rajoy entra en campaña…
Cuanto más sé de comunicación política más me gusta, salvo cuando compruebo que este oficio, mimado por algunos, es utilizado por otros de un modo burdo. No discuto los objetivos, que son siempre el mismo: alcanzar el hito electoral correspondiente. Pero sí las formas. En ‘El Confidencial’ resumieron, también en un tuit, la peor cara de la comunicación política: “Hoy Rajoy comparecerá en Moncloa tras convocar elecciones. Hará balance de legislatura y por la noche estará en TVE”.
…Y sale caminando
Sigo hablando de comunicación política y de Mariano Rajoy aunque parezcan conceptos incompatibles… O precisamente porque son conceptos incompatibles: este mismo fin de semana hemos visto un tuit que nos ha dejado desconcertados, por no decir “descacharrados de la risa”. Un vídeo en Twitter del presidente andando a buen ritmo con Fernando Martínez Maillo y Chema Arribas. ¿Qué aporta? Nada. En ocasiones medio (el clip de vídeo) y fin (comunicar algo) se confunden.
Un vídeo que sí comunica
El fin de semana nos ha dejado, por suerte, otro tipo de vídeos de políticos en redes sociales digitales. En concreto, Andoni Ortuzar subía a Facebook una reflexión en primer persona desde el campo de refugiados más grande de Alemania, en Múnich. La visita a la ciudad bávara con motivo del consejo político del Partido Demócrata Europeo, derivó en esta mirada a cámara, en primera persona, del presidente del EBB después de conocer historias reales de personas que llegan a Europa pidiendo respuestas posibles.
Alberto Garzón insiste en la confluencia
Ando despistado con las noticias sobre la necesidad-querencia-deseo-empeño de Alberto Garzón de confluir con Pablo Iglesias en una lista en la que las marcas de IU y Podemos queden diluidas. Me siento como un periodista de Madrid que habla sobre Euskadi pero con inseguridades. Veo en ‘Estrella Digital’ que el de IU “echa el resto” (‘Estrella Digital’) para lograr el pacto con el iluminado de Iglesias después de haber leído que tiraba la toalla. En cualquier caso, creo que el final de esta historia es el mismo desde el principio.