¡Bienvenido, Herrera!

Pasado el susto de los minutos finales contra el Osasuna del fin de semana y con tres puntos más en el zurrón parece que la vida futbolística se ve mejor. Buena parte de “culpa” de ello la tiene, seguramente, Ander Herrera.

¡Cómo se notó su presencia!

Comentaba la semana pasada que con algunas cosillas más era seguro que el Athletic mejoraba, y vaya sí mejoró. No es que el resultado sea como para tirar cohetes, pero el juego al menos, sí que lo fue. Era más parecido al que se realizaba el año pasado, y que tantas alegrías nos dio.

Para empezar me remontaré al partido del jueves en Praga, donde del resultado prefiero no hablar. Pero sí del momento en el que aparece Herrera en el campo, a partir del cual el juego del equipo mejoró. El desaguisado ya en el resultado era tal que tampoco es que se pudiera mejorar mucho. Pero ese cambio, con respecto a la calidad del juego, ya se ha visto más claro este domingo en San Mamés.

Iturraspe le necesita al lado para dar mayor consistencia a su juego. Distribuye muy bien y así de paso Muniain pasa a la banda y deja el puesto a su dueño natural, mejorando él mismo Muniain, en sus propias prestaciones.  A Iker le ha quedado muy grande realizar el trabajo de Ander. Se liaba él sólo y perdía unos balones peligrosísimos. Ander también perdió algún balón que dio “un poco mucho” de miedo, pero… hace menos de un mes que le han operado, así que se tiene que poner todavía en forma.

Hablando de la operación aprovecho la ocasión para tirarle de las orejas. Quizá el tirón de orejas lo deba compartir con el Club, Junta Directiva. Está claro que para él, así como para Amorebieta tenía que ser una ilusión enorme ir a los Juegos Olímpicos, y con su selección en el caso del central, pero… tal y como estaban físicamente ¿deberían haber ido? La respuesta es clara. NO. No, por el Athletic que es el Club que les paga. Tanto uno como otro se han perdido un montón de partidos que han podido suponer que el Athletic se encuentre donde se encuentra. Muy abajo en Liga y con problemas enla EuropaLeague. Y ya encima la gota que colmó el vaso de la paciencia de cualquiera fue, que a pesar de estar ya España eliminada de los JJ.OO., jugase el tercer e intrascendente partido. Eso ya fue el colmo. Muy mal la Federación, muy mal Ander, y muy mal el Club. Porque ¿quién nos devuelve los puntos perdidos y el dinero perdido (las victorias en Europa también suponen dinero)?

Tras el rapapolvos decir, que el domingo ya pudimos empezar a disfrutar un poquito más del juego del equipo. Se combinó mucho mejor. La presencia del bilbaino fue fundamental en esa creación. Da los apoyos muy bien y eso aumenta o mejora la movilidad de los compañeros. Si en el último pase o en la definición, Markel y De Marcos hubiesen estado inspirados, y no lo hubiese estado Andrés, el guardameta rojillo, el resultado podía haber sido de escándalo. La próxima vez será.

Para acabar decir, que a pesar de la bronca que le he echado: ¡Bienvenido, Ander!

El Athletic no está en crisis ¡Carajo!

Me está superando el tema. Leo la prensa, escucho la radio, veo la tele y todo lo que leo, escucho o veo es apocalíptico. Me parece una exageración y me niego a unirme a esa paranoia.

Que el partido fue infumable es indiscutible, y que el Athletic no jugó nada una evidencia (quizá los primeros 30 minutos fueron salvables… ). Pero de ahí a llevar el tema a donde se está llevando es excesivo.

Hoy por enésima vez he vuelto a leer en “El Correo” la aburrida enumeración de hechos ocurridos desde el verano, para concluir que qué mal vamos. ¡Qué aburrimiento!

Un incidente sin más

De todas formas, por si éramos pocos, parió la abuela, salta el tema de Llorente con Bielsa en el entrenamiento. Un lío que no tendría mayor importancia si hubiésemos ganado 3 partidos seguidos, pero como no es el caso, se utiliza para darle tortas a Llorente, o para darle mamporros a Bielsa (según el gusto del consumidor). Conclusiones variopintas según a quien escuches: Bielsa se quiere ir, Los jugadores le hacen la cama, la directiva está missing y todo es culpa de ella. No. Todo es culpa de los jugadores. No. La culpa es de Bielsa… En fin, para volverse locos.

Y yo, que no quiero líos o estoy aburrida de ellos, lo único que quiero ver es que el equipo, deportivamente hablando, se está acoplando. Es otra evidencia que el equipo no es el mismo del año pasado. Hay jugadores nuevos. Los del año pasado titulares, algunos están desaparecidos. Muniain y De Marcos ni sombra de lo que fueron. Ni recuperan, ni crean, ni nada de nada. Susaeta muy flojo a pesar de ser de lo mejor. Iraola, buf… Iraola, intenta subir, pero… no combina con Susa, ni con De Marcos, ni con nadie, y luego para bajar sufre lo indecible… si es que baja, claro. Iraizoz hasta Anoeta estaba pero no estaba, tiro que iba a puerta tiro que entraba. (Eso sí en Anoeta se salió con paradas de todos los colores, aunque también, con dos de sus salidas a por uvas). La defensa no es la del año pasado. Gurpe y Castillo han salido de lesiones larguísimas. Amorebieta tuvo a bien esperar a la vuelta de las vacaciones para operarse (muy bien, majete). Ander Herrera fue lesionado a los JJ.OO. y se ha operado más tarde todavía que Fernando (muchas gracias a ti también). Llorente, el mejor de la plantilla no juega de inicio y sale para intentar solucionar entuertos… Y podría seguir. Todas éstas que comento son cuestiones deportivas. ¿No nos podemos centrar en esto? Marcelo Bielsa está intentando conseguir lo mismo que el año pasado pero con distintos elementos. Si el año pasado les costó entrar y conseguir el nivel, ¿porque este año no se tiene un poco más de paciencia? Que Bielsa hace cosas raras en la alineación para algunos puede estar claro (misterio Ekiza, misterio Gurpe…), pero quizá mejor si se le deja trabajar con tranquilidad.

La culpa ni es de Bielsa, ni es de Llorente, ni es de los jugadores, ni es de la directiva de forma individual. Quizá han sido un cúmulo de circunstancias y todos tengan un poquito de parte en el desaguisado, incluso los aficionados dando crédito a todos esos mensajes apocalípticos y difundiéndolos a los cuatro vientos.

Vamos a darles tiempo y confianza, a unos y a otros y los resultados van a llegar seguro. Y se conseguirán porque la vuelta de Ander Herrera y Aurtenetxe supongo será en breve, porque Muniain, De Marcos, Iraola,… volverán a ser los del año pasado, porque Ismael López se acoplará al equipo y a Primera División, porque Llorente volverá a jugar con normalidad,… Si se consiguió el año pasado éste también se va a conseguir.

Se va volver a los buenos resultados, y en definitiva, se va a volver a la tranquilidad. ¡Seguro!

La «cenicienta» Hapoel Kiryat Shmona amarga la noche al Athletic

Los israelitas consiguen amargan la noche al Athletic con realmente poco. Dos tiros a puerta, uno en cada tiempo, han sido suficientes para meter un gol y llevarse un valiosísimo empate que ni ellos ni nadie esperaba.

Escudo del Hapoel Ironi Kiryat Shmona

En el primer tiempo los nuestros han sido totalmente inoperantes, dominando el balón pero sin acertar ni con el último pase ni con los remates a puerta, más bien escasos. Susaeta, poco antes de acabar el primer tiempo, continuó con su idilio con el gol en Europa y consiguió el empate. De ahí al final del primer tiempo, toque de arrebato pero de nuevo sin acierto.

En el descanso Bielsa decide introducir a LLorente, sustituyendo a Ismael López, que si bien los primeros partidos estaba muy participativo y acertado, en los últimos está más bien fallón. Si sigue contando con continuidad seguro que recupera el nivel de los primeros encuentros. La entrada de LLorente y el examen ante la afición se ha saldado con más aplausos que silbidos, por lo que supongo que el jugador estará contento. Por si había dudas en el primer balón que toca se vuelven a oír los aplausos intentando borrar algunos nuevos silbidos, que definitivamente se acallan por la buena jugada del delantero, que provoca con su disparo que el portero despeje con apuros. La primera piedra de toque para Fernando ya está salvada. Quizá se dé otra nueva contra el Málaga, pero seguro que a partir de ahí todo vuelve a la normalidad (o eso espero).

El segundo tiempo ha sido un monólogo del Athletic. Desconozco la posesión del equipo pero imagino que habrá sido desproporcionada. En este caso posesión con dominio y con jugadas elaboradas y remate. Ha sido poco menos que un milagro que no se haya metido algún gol. LLorente ha rematado de todas las posiciones pero, el palo, el portero, el muslo del defensa y algunos remates desviados han impedido lo que hubiese sido lógico, algún gol. Quizá si hubiesen estado más tiempo juntos sobre el campo Fernando y Aritz…

Bueno, al final, una pena enorme, porque hubiese dado tranquilidad empezar la liguilla con 3 puntos. Ahora nos obligamos a rascar algo fuera, que siempre es más complicado. De todas formas, de seguir jugando así los triunfos tienen que encadenarse seguro, porque (como dice Bielsa) la producción arriba es muy elevada y lo lógico es que se metan más goles.

Aplaudo la titularidad de Castillo. Hoy ha estado impreciso en sus centros desde la banda pero es normal, es su segundo partido. A ver si tiene suerte este año, las lesiones le respetan y puede aportar tranquilidad a este lateral que no deja de dar quebraderos de cabeza al entrenador, que varía y cambia hombres, buscando dar con la tecla pero sin hallarla, sobre todo porque los jugadores que coloca no son laterales, pero… es lo que hay.

Y por último, espero que De Marcos y Muniain tarden poco en llegar a ser lo que fueron la temporada pasada porque no están nada bien y se nota muchísimo su falta. Una falta  que se traduce en cantidad de pases erróneos  al contrario, pocos desmarques y pocas recuperaciones de balón, que eran algunas de sus virtudes del año pasado.

Ahora en Liga el Málaga. Pena que le encontramos en un buen momento con su subidón de autoestima de esta semana en Europa. Pero así será una buena piedra de toque para ver de lo que somos capaces.  ¡A por ellos!

 

¡Nos vamos también a Bucarest!

Afición

       Ahora mismo es de madrugada, y debería estar en la cama, pero tras un día de tantos nervios y emociones se me hace imposible. Ayer decía que si al acabar el partido estaba llorando esperaba que fuese de alegría, y así ha sido. No podía dejar de llorar. De hecho hasta llegar a casa seguía llorando. Hay gente que dice que el que sea el llegar a la primera final europea vivida es único y que los jóvenes lo viven más intensamente porque otros ya hemos vivido otra, la anterior contra la Juventus. Sí efectivamente yo la viví, estuve en San Mamés, pero esto no hace que mi alegría ahora sea menor, porque a esto no se acostumbra nadie. Todos los triunfos son nuevos, da igual que sea llegar a la primera, a la segunda o a la octava final.

La alegría del vestuario

       Este equipo se lo merece, este entrenador también (¡Bielsa, Karajo!), ni qué decir que también se lo merecen los preparadores físicos, los botilleros, los aficionados, los simpatizantes, los socios, los no socios, los abonados, los socios barria, los forofos, los sufridores de los forofos, todos.

       Es una auténtica gozada poder vivir esto, la fiesta desde la primera hora de la mañana, los nervios y la emoción del inicio del partido con el himno que lo rugen 37.000 gargantas en la Catedral y muchos más miles en todos los rincones. Las mariposas en el estómago y las primeras lágrimas con el gol de Susaeta, ¡se puede!. El mazazo portugués y la respuesta inmediata de los leones rojiblancos (con un enorme Ibai, que otra vez nos mete en el partido). Más nervios y la locura con el gol de Fernando, el Gran LLorente que hoy «sólo»  ha dado dos asistencias y ha metido el definitivo gol, el que nos ha clasificado. Y al final del partido…  la apoteosis. Alegría compartida con todos. Salvo la tristeza de los portugueses, que son recompensados por el público de la de nuevo «Catedral» con gritos de Sporting, Sporting, de todo San Mamés, para reconocer a la hinchada rival su comportamiento, el recuerdo que han tenido para con Iñigo Cabacas (gogoan zaitugu), y que esto es fútbol y que hay que vivirlo disfrutándolo con fiestas, con rivalidad pero con deportividad.

        Otra emoción nueva para contar a nuestros nietos, que se quedará en emoción pequeña comparada con las nuevas alegrías que nos esperan el 9 y el 25 de mayo.

        ¡Athletic, BETI ZUREKIN!

¿A sufrir contra el Sporting en San Mamés?

         La respuesta es que sí, porque ya estamos sufriendo desde ahora pensando con la posibilidad de llegar a la final. El resultado que traemos de allí es buenísimo visto como discurrió el partido. Pero hay que ganar.

Gol importantísimo

         Oído durante esta semana lo que se comentaba sobre los portugueses no esperaba el partido que hicieron, me parecieron rápidos y su presión consiguió que nuestros jugadores no dieran un pase a derechas, y aunque esto último quizá fue por la presión del partido, o el ver la final tan cerca. Quizá los jugadores tampoco esperaban que el Sporting jugase como lo hizo, … no sé. La cuestión es que no estuvieron nada bien. Muniain y Susaeta estuvieron especialmente desafortunados, el primero desaparecido, el segundo por lo menos lo intentó pero… Gorka quizá pudo hacer algo más en el primero (por lo menos tirarse para intentar detenerla). Aurtenetxe… metió el gol y quizá eso nos clasifique, así que no voy a añadir más. Como equipo ha sido su peor partido en Europa con diferencia.

          Y ahora los deberes hay que hacerlos en San Mamés y será una noche, no hace falta imaginarlo, de las de gala. Una noche como la de la semifinal contra el Sevilla. Hay que dar la vuelta al resultado y el premio es demasiado goloso como para que nadie no se meta desde antes del minuto cero en su papel. El del público ya sé cuál es. Animar como locos desde el minuto uno, sea cual sea el resultado, porque ya sabemos lo que puede conseguir el jugador número 12 en situaciones difíciles.

        Los portugueses supongo que ahora sí vendrán como decían los periodistas. A cerrarse atrás a defender su resultado y a salir a la contra. Eso debieron hacer en Manchester contra el City, y por eso están en la semi. Así que los nuestros a no volverse locos, que hay mucho tiempo. Y si juegan como lo han hecho en el resto de partidos europeos en San Mamés, el triunfo no se puede escapar. ¡Aupa Athletic!