Hacer política con mentiras

20170329_mentiras

No es casual, es el modo de hacer las cosas en Twitter del grupo popular de las Juntas Generales de Álava: mentir. Ya hemos expuesto en esta columna algún mensaje falso de su portavoz, y esta semana no han tenido ningún reparo en hacerlo con algo tan grave como los derechos humanos. Erigirse, con un fotomontaje pretendidamente desgarrador, como los únicos defensores de las víctimas del terrorismo es, además de una mentira, señal de “bajeza moral”, como señala Jon Arrizabalaga en Twitter.

No solo los del PP vasco

Lejos de Euskadi y, supongo, lejos del PP, están haciendo campaña en Twitter también con mentiras, en esta ocasión, con una de esas cuentas que juegan a ser verdaderas y, entre tuit de halago y retuit acertado, te cuelan un mensaje capcioso. Le ha sucedido a Susana Díaz con “Triana Con Susana” en Twitter que, es cierto, tiene bastante gracia y, no es menos cierto, a la vez que intenta captar la atención carga de valores negativos a la candidata. ¿Es legal? Posiblemente. ¿Aporta algo a la democracia? No.

Y ahora, en serio

Mucho más seria parece la metodología de purga en Podemos (también veremos la del PSOE, sea quien sea el ganador), donde quienes se hayan declarado errejonistas tienen muchas papeletas para abandonar su puesto de trabajo a cargo del partido. En Vozpópuli hablan de una lista de 120 trabajadores de Podemos que apoyaron a Errejón, de los que 100 han sido o serán despedidos, y unos 20, reasignados a la campaña en Madrid, donde han “arrinconado” al que una vez fue número dos nacional.

El Rey reina pero no gobierna

Juan Carlos I va a ser un innovador, por lo menos en el lenguaje: la expresión “vivir como un rey” la cambiaremos por “vivir como un rey emérito”, y el viejo axioma de que “el rey reina pero no gobierna” lo sustituiremos por “el rey media y que gobiernen los pobres”. Porque a las labores de mediación del rey con dictaduras petroleras tenemos que sumar ahora que habría intercedido por Cebrián ante los grandes empresarios que han invertido en PRISA. ¡Qué majete es Juan Carlos!

El youtuber “tímido”

Se llama Wilson Alfonso, y en su canal de YouTube agredía a mujeres besándolas en la boca sin su consentimiento y engañándolas con la excusa de un truco de magia para el que tenían que cerrar los ojos. Ha sido juzgado y condenado a pagar una multa y una leve indemnización a las tres que le denunciaron. El youtuber salía del juzgado en un coche y con la cara tapada. ¿Por qué? ¿No quería, como todos los youtubers, notoriedad a cualquier precio? ¿O solo cuando el precio lo pagaban las mujeres agredidas?