Athletic, imposible acabar mejor el 2015

El Athletic acaba el 2015 consiguiendo tres puntos importantísimos en uno de los campos más complicados esta temporada.

Raúl como el equipo, perfecto (Foto: Miguel Riopa)
Raúl como el equipo, perfecto (Foto: Miguel Riopa)
El Celta demostró ayer porque sólo un equipo ha sido capaz de ganarle en su campo. El Celta me gustó mucho. Casi tanto como el Athletic, super serio desde el minuto uno al noventa y tres. Se veía que un detalle iba a decantar el partido hacia uno u otro lado. En el primer tiempo no hubo muchas oportunidades pero se repartieron entre ambos equipos. La presión hizo que el ritmo fuese intenso pero con pocas llegadas. En el segundo quizá el Athletic dio un paso adelante y aumentó su dominio pero faltó de acierto en los últimos metros donde el último pase volvía a ser defectuoso. Raúl García se descolgó con un tiro soberbio, no tanto por la fuerza como por la colocación. Fue lo que mi padre denominaba un pase a la red. Tiró a colocar, con tan mala suerte que le fue al palo. Raúl los 21 partidos que lleva con el Athletic nos sigue demostrando que no sólo tiene calidad, sino que es muy muy listo. Pena de larguero y ya lleva unos cuantos. El siguiente contrataque por fin acabó con un pase letal, del Zorro, que vio el desmarque perfecto y dejó al excolchonero solo delante del portero. Toque con el exterior, nada fácil, y a la red, tras sortear a Sergio. Perfecto. Y Raúl que ya lleva seis goles. Y no sé cuántas asistencias. Está claro que el tándem que forma con Aduriz es de muchos quilates. Además, funciona en las dos direcciones. Asiste uno y marca el otro o al revés. ¡Vaya fichaje! Y a partir del gol a aguantar. Ellos tuvieron una ocasión que fue al palo y varias aproximaciones pero sin mayor peligro. Nosotros también otro palo, esta vez de Eraso. Pero el Celta dejó claro que era necesario todo el trabajo que desarrollaron nuestros chicos para arrebatarles el triunfo. Buen Celta pero mejor Athletic.
Con este nuevo éxito, los rojiblancos se sitúan en séptima posición empatados a puntos con el Deportivo. pero y lo que es más importante nos ponemos a cuatro puntos de la Champions, que soñar es libre y tal y como está el equipo se debe luchar por ella. No digo se debe conseguir, pero sí ir paso a paso e intentar conseguirla.
Por último, voy a hacer balance de este año 2015, que yo, sin temor a equivocarme voy a decir que ha sido excepcional e inolvidable para todos los athletizales. No puedo pedir más. Se ha conseguido un título después de treinta años sin ellos. Encima ha sido la Supercopa, a doble partido, contra el super poderoso Barcelona y para más inri siendo la vuelta en su casa. Una hazaña al alcance de muy pocos. Un título que se fraguó con el mejor partido de la temporada, ese 4 a 0 en San Mamés de la ida, que ya ha quedado en la memoria de todos grabado a fuego. Un partido perfecto, con un Aduriz colosal, como ya nos tiene acostumbrados, que le endosó tres a los temibles culés. En la vuelta por si había alguna duda, ni siquiera nos consiguieron ganar. Se tuvieron que conformar con el empate. Total 5 a 1 a nuestro favor. Allí en el Nou Camp nos dieron la Copa, bueno se la dieron al gran capitán, Don Carlos Gurpegi, en una entrega de trofeos cutre donde las haya, que dejó de nuevo retratado al Barcelona y a su poca deportividad. Ya me hubiese gustado ver la celebración que tenían preparada si hubiesen ganado ellos. ¡Qué poca clase! En fin, a lo que iba… un año impresionante, que nos permite olvidarnos un poco de la nueva final de Copa que nos arrebataron los catalanes, de nuevo, esta vez, en el colmo del disparate celebrada en el Nou Camp. Final de Copa a la que llegar lo considero un éxito de por sí, ya la ganaremos otro año. Éxito también fue la clasificación para la Europa League o UEFA, con una segunda vuelta de la Liga para enmarcar. Clasificados para una competición en la que todavía estamos, y quién sabe hasta dónde podemos llegar. En Copa seguimos y esta misma semana nos la jugamos contra el Villarreal, otro equipazo, pero seguro que ellos también están asustados. A ver hasta dónde llegamos.
Conclusión: Año perfecto, que nos impulsa a soñar. Tenemos equipo. Tenemos banquillo. Tenemos calidad. Tenemos ganas y un vez empezado, esto es como el rascar… todo es empezar… Queremos más. Iremos poco a poco, pero SÍ SE PUEDE. Se puede soñar y ¿POR QUÉ NO CON OTRO TÍTULO? Si ya hemos conseguido uno, algo que se veía imposible,… ¿por qué no más? Este año ha sido increíble y el próximo ¿por qué no también?

Feliz salida de año a todos, mejor entrada eta URTE BERRI ON!!!!

y por supuesto… ¡AÚPA ATHLETIC!

P. D.: Os recomiendo que veais el precioso vídeo del Athletic, Urte Berri On (https://m.youtube.com/watch?v=_8sNAivdtH0), PORQUE SOMOS UNA CUADRILLA… TODO ES POSIBLE.

Iker Muniain, reaparición deseada

Además de los tres nuevos puntos que conseguimos contra el Levante la mejor noticia del partido fue la reaparición de nuestro Bart Simpson particular.

¡Bienvenido Iker! (Foto: Navarra.com)
¡Bienvenido Iker! (Foto: Navarra.com)
Ocho meses y medio después de la grave lesión, Iker consiguió volver a los terrenos de juego, el día después de su cumpleaños, y seguro que no recibió mejor regalo que entrar en la convocatoria. Valverde esperó a que el partido estuviese decidido para contar con él. Ni hay que meterle presión ni es necesario arriesgar. Necesita minutos tranquilos, en distintos partidos para ir cogiendo el tono, el ritmo y la confianza suficiente para que empiece a disfrutar otra vez en el verde.
Las expectativas que tenemos puestas en él son muy altas. Quizá demasiado. Espero que ello no le presione mucho. Todos los periodistas hablan del jugador como el gran fichaje de invierno. Los aficionados parecido. Por supuesto, yo también aplaudí enormemente su entrada cuando pisó la Catedral, pero pregunto: ¿qué Muniain esperamos? Las ilusiones son altas pero también hay que tener los pies en el suelo. Iker el año pasado hasta que se lesionó estuvo jugando prácticamente todos los partidos en banda y su rendimiento, salvo contadas excepciones, no fue muy destacado precisamente. Para nuestra desgracia cuando, por fin lo estaba haciendo bien (sus últimos tres o cuatro partidos), fue cuando se lesionó. Y ese juego tan destacado vino precisamente porque Txingurri lo situaba en su sitio, de media punta. Ahí sí que brilló, lo hizo muy bien. Es decir, una de las peores lesiones para un futbolista le pilló justo en su mejor momento. La duda es ahora dónde va a jugar. Parece que en banda. Mas que nada porque Raúl García está a un altísimo nivel y, salvo contra el Atlético de Madrid que no parecía el mismo, el nivel de su juego desde luego no es para dejarlo de suplente de Iker. Así que bendito problema para el entrenador… ¿dónde coloca a Iker? Y si le pone en banda… ¿va a rendir lo mismo que el año pasado o como rindió en el primer año de Bielsa? Ahí queda la pregunta. Todos deseamos que lo haga como con Bielsa. Esperamos, queremos, repito deseamos que su rendimiento sea el mejor. El que se le presupone y el que ha demostrado que tiene, Además queremos que ese nivel sea continuado porque desde su debut ha tenido muchos altibajos. Ha alternado unas épocas muy buenas con otras largas temporadas de… buf… El año tras la salida del club de sus amigos… es para olvidar. A ese Iker no queremos. Queremos al otro. Al sorprendente, al que se va, al que se inventa pases perfectos, al que deja al compañero solo ante el portero con una genialidad. Sabemos que ese Iker está ahí y es el que esperamos. Evidentemente necesita tiempo y Valverde se lo va a dar. Minutos y los va a tener. Para empezar, está convocado con la selección, lo que le viene fenomenal. Supongo que le darán 45 minutos o algo parecido. Perfecto para lo que el necesita. Esta temporada va a ser muy exigente y va a haber minutos como para repartir. Seguimos en tres competiciones, ojalá por mucho tiempo, y vamos a necesitar a todos los jugadores.
Te esperamos, Iker. Lo vas a conseguir y nos vas a dar grandes alegrías. ¡Ánimo y aúpa Athletic!
Y por supuesto…
ZORIONAK ETA EGUBERRI ON GUZTIOI!!!
(Felicitación: Peña Madrileña)
(Felicitación: Peña Madrileña)

Los colchoneros otra vez ganan al Athletic

Desesperante que volviesemos con las manos vacías del Calderón, aún sin merecerlo pero… las cosas son así.

No pudo ser (Foto: Pablo Viñas)
No pudo ser (Foto: Pablo Viñas)
El Athletic jugó el mejor partido en muchos años contra el Atlético de Madrid, una de nuestras bestias negras, desde la final de Bucarest, de infausto recuerdo. El mejor partido. Se compitió desde el minuto uno al noventa y en muchas fases siendo superior a ellos. No sólo tuteándoles sino que incluso jugando mejor. A pesar de ello, por tres matices pequeños, pero que no insignificantes, volvemos otra vez con cara de tontos, aunque orgullosos por cómo se desarrolló el partido.
Empiezo por el primer detalle, el que más me enfada, porque es el de la participación del árbitro, tomándose un protagonimo que no le competía, pero… para eso están los árbitros, en nuestro caso… para… pues eso… Por supuesto, me refiero a que el gol del empate de ellos no debería haber subido al marcador, por lo menos en ese momento porque el primer tiempo ya estaba acabado. El trencilla dio un minuto de prolongación y ya ese minuto se había sobrepasado. El córner se sacó después del minuto 46. Su reloj es igual que el de todos. Si das un minuto más, es sólo un minuto. Sino, prolonga dos. Fue una faena que encima después ni nuestros defensas ni Iraizoz estuviesen inspirados. Al contrario. Estuvieron fatal. Ir al vestuario con cero a uno hubiese sido otra cosa.
Segundo detalle: la lesión de Iturraspe se notó mucho. Estaba haciendo un muy buen partido junto con Beñat, también a gran nivel. La salida de Rico hizo perder control en el centro del campo. Estuvo fallón, y encima no despejó como debía en el borde del área, haciendo un enorme favor a Griezmann, dejándole el típico balón que desean todos los jugadores… para completar el desastre. El francés, todo hay que decirlo, metió un golazo, imparable para Gorka y para cualquiera.
El Atlético de Madrid no hizo más. Bueno sí. Un buen puñado de faltas que como siempre son sancionadas con distinto criterio que las que comenten nuestros jugadores, con respecto a las tarjetas. Supongo que todos estaréis hartos de que nuestras faltas sean tarjetas y las de los contrarios, siendo iguales o mucho peores, casi nunca conlleven cartulina. Misterios, como que Giménez acabe sin cartulina cuando hizo cantidad de faltas por detrás. Faltas o léase patadas. Pero… Así es el Villarato… no hace más que favorecernos… ¡Ah… No…! ¡que es al revés! Bueno algún día ya me lo explicará alguna mente preclara porque yo desde luego no lo entiendo.
Un tercer punto que contribuyó al resultado, fue que Raúl García estuviese tan igualmente fallón y menos intenso que en los otros partidos que había jugado hasta ahora. No hay más que ver la repetición de la jugada en la que rechaza el portero la ocasión clara de Aduriz. El balón llega al borde del área donde están un defensor atlético, no me acuerdo quién es, y Raúl. Y no pasó nada… Una pena, pero… También me parece humano. Son muchos años allí, muchos amigos y no consiguió jugar como lo hace siempre. Yo le hubiese sustituido. Pero repito, que lo que le ocurrió me parece muy humano y lógico.
Para acabar, decir que nos quedaremos con que el equipo compitió, tuteó y en momentos, fue superior a los colchoneros, y así pensaremos que la próxima vez les ganamos seguro. A la vuelta lo comprobaremos.
Ahora de momento, mañana nos llega el Linense en la Copa. ¡A por ellos y aúpa Athletic!

Granada no es para el Athletic

La mezcla de los errores propios y la mala suerte hicieron imposible que el Athletic pudiese sacar algo positivo de Granada.

No fue su día (Foto:  Pablo Viñas)
No fue su día (Foto: Pablo Viñas)
Por supuesto es imposible hablar de este partido sin comentar los muchos errores que cometió Laporte. Todo su partido fue un despropósito. Pero como ayer lunes fue el tema estrella no le voy a dar más leña. Eso sí no me resigno a no comentar la última jugada del partido. Jugada incomprensible donde las haya. Fue un córner a favor de los nuestros jugadores. Se sacó cerrado y cuando iba a entrar a la red incomprensiblemente un jugador de nuestros la sacó fuera. Laporte otra vez. ¿Por qué? Pues porque estaba claro que no era su día. Surrealista. Nunca había visto nada igual.
Sus compañeros tampoco estuvieron para echar cohetes. Raúl Garcia falló muchísimos pases. Aduriz (aún siendo de lo mejor) desperdició un remate que de 100 van 99 dentro. Williams no culminó un mano a mano con el portero tras jugada y pase primoroso de Aritz. Iñaki, quizá acusó los dos partidos internacionales. Susaeta, ¿estuvo? De Marcos… buf…
La sensación que quedó es que podían haber estado jugando tres días pero que no iban a conseguir nada. Los Cármenes no se les da bien. Era el colista. Estaban necesitadísimos de puntos… Andalucía… Si hubiesemos ganado, nos poníamos arriba… Demasiados condicionantes. El Athletic siempre hace algún petardazo de éstos y nos tocó el domingo, justo cuando teníamos a mano los puestos europeos. Parece como si les diese miedo… En fin…
Ahora a olvidarlo. Bueno. Olvidarlo no. Mejor pasar página y pensar sólo en el Augsburgo. Hay que certificar la clasificación. Pero para ello tiene que jugar el otro Athletic. No el de Granada.
¡Aúpa athletic! ¡Y a por el Augsburgo!

Undiano Mallenco, el peor

Siempre se dice que los aficionados tenemos ojeriza a los árbitros y que descargamos todas nuestras fobias contra ellos, hagan lo que hagan. No sé si esta frase es verdad o no. Quizá alguno sí que lo haga, pero en el caso que nos ocupa el tema es precisamente al revés. Este colegiado, me atrevo a decir sin pensar que me confundo ni un poquito, se la tiene jurada al Athletic. No sé el motivo, ni idea, pero sus actuaciones contra nuestro equipo no es que sean malas, es que son horrorosas. Algunos árbitros son malos, y da igual lo que piten, se confunden muchísimo pero indistintamente favoreciendo o perjudicando a cualquiera de los dos equipos, precisamente por el hecho de que son malos. No lo hacen a propósito. Sencillamente, no saben hacerlo mejor y fallan más que una escopeta de feria.

Undiano... ¿peroquete hemos hecho? (Foto: Athletic Club)
Undiano… ¿pero qué te hemos hecho? (Foto: Athletic Club)
Undiano no. No es de ese tipo de árbitros. Sus errores, muchos, son premeditados y pensados. Y esto no lo digo por un simple partido. No me estoy refiriendo a este último que nos ha arbitrado, que no ha sido de los peores. Hago el comentario teniendo en cuenta que cada vez que nos ha pillado por banda nos ha armado alguna gorda.
Para corroborar esto que digo no hay mas que poner las estadísticas que tiene con nosotros. Nos ha arbitrado la friolera de 32 partidos. De ellos solo hemos ganado 6, hemos empatado 10 y hemos perdido 16. Una estadística casi imposible. Y no es casualidad. El domingo en San Mamés el equipo consiguió ganar, pero por el camino, como siempre nos pasa con él, tuvo que soportar sus continuos errores y cambios de criterio según quien sea el que hace algo. El solito se dejó escapar el partido y posibilitó que se diese una tangana, por su incapacidad de cortar el juego sucio, con alguna otra tarjeta más. Estaba claro que el Espanyol venía con la lección aprendida y sabía que el organizador principal de nuestro juego era Beñat. Le pusieron un perro de presa encima y todas las jugadas, acababan con nuestro medio centro en el suelo, siempre, siempre después de haber pasado el balón. Los jugadores periquitos llegaban tarde, y cometían falta de todas todas. A pesar de la reiteración pocas o casi ninguna se saldaron con tarjeta. Eso propició que los jugadores del Athletic acabasen hasta el gorro puesto que veían que había barra libre, según el criterio del de amarillo. Nuestro amigo estaba favoreciendo el juego marrullero de los catalanes que lo único que hacían era cortar y vuelta a cortar el juego. Por supuesto, el público cada vez más enfadado, porque encima vio que las faltas de sus jugadores sí que eran tarjetas. Y no discuto esas tarjetas que nos sacó, porque bien sacadas estuvieron todas… Pero mi queja es … y a ellos… ¿por qué no? Si esto fuese poco, encima, estando cerquísima de la jugada, no pitó un penalti claro a Sabin Merino en el primer tiempo, cuando por detrás le arrollaron, y le mandaron al suelo, cerca de la línea de corner.
Además de esto, otra de sus características es que tiene la capacidad de desquiciar a unos y a otros, porque en un momento determinado se pone súper serio y súper estricto con un jugador, y como el domingo, va corriendo hacia él,… y … le obliga con gestos exagerados…, que en un saque de esquina tire hacia atrás el balón ¡MEDIO MILIMETRO! Jugada fundamental donde las haya… ¡MEDIO MILIMETRO hacia atras el balón! Incluso me atrevería a decir que el balón estaba perfecto, pero… es que le dan estas venadas. Increíble, pero cierto. Supongo que todos los que visteis el partido sabéis a qué jugada me refiero. Respuesta del público: más bronca y más gritos… y eso que al jugador que le mandó tirar hacia atrás el balón era del Espanyol.
Y así uno y otro partido. En nuestro caso nada menos que 32. Y lo peor de todo es que sabemos que nos volverá a arbitrar y volverá a ser igual de desastroso, porque este árbitro no es de los que he mencionado arriba que son malos. El problema de este árbitro es que es malvado. Malo no. Malvado, sí. Malvado, porque lo hace a propósito. Así que a rezar todos para que nos toque lo menos posible.
Y para no acabar con mal sabor de boca, cambio de tema radical y sólo decir que qué maravilla de goles los dos del otro día. El de Raúl García por la dificultad del remate de cabeza cayéndose y entre dos defensores, y haciendo un escorzo complicadísimo; y el de Williams… buf… no tengo ni palabras. ¡Qué preciosidad! Hace muchísimo tiempo que no veía nada igual. Ya no digo en La Catedral, sino en cualquier campo. ¡Qué pasada de gol! De esto último sí es bonito hablar y no de lo anterior, que es una pena, pero que también hay que denunciarlo.
¡Aupa Athletic y a seguir así!