¿Qué más hace falta?

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Para ‘Público’ ha sido una de las fotos del día. Para mí ha sido una de las del año: la de una niña ahogada frente a la costa griega de Lesbos que huía de su país en guerra y sin futuro. No la mató una bomba, a esta niña, como al que se hizo famoso porque todos vimos su cadáver en una orilla hace unas semanas, y como a muchos otros niños cuyos cuerpos no están al alcance de una cámara de fotos, la mató la indiferencia de los gobernantes que no se ponen de acuerdo en cómo atajar un drama que afecta a todos los seres “humanos” del planeta.

La indolencia de Rajoy ya es legendaria

Con Mariano Rajoy ha acabado su propia indolencia. No hizo nada cuando los casos de corrupción surgían en su partido para asombro de propios y extraños, tampoco cuando supimos que llevaban años cobrando y pagando en “B” (empezando por él mismo), supuestamente. Ni ha hecho nada respecto al fin de ETA ni sobre el último arreón del nacionalismo catalán. Y ahora, con su partido deshaciéndose en plena precampaña, se limita a decir que en el PP “estamos animados y contentos”.

Hasta sus ministros se pelean en público

El nivel de escándalo al que estamos sometidos con todo lo que hemos visto durante la legislatura es tal que un episodio realmente bochornoso como el de dos ministros peleándose en público ha pasado casi desapercibido. Tampoco hemos puesto demasiado el acento en el enésimo intento de Aznar de desgastar a Rajoy. Ni en lo que supone lo de Quiroga y Alonso en la lucha de sus superiores, Cospedal y Sáenz de Santamaría. Al PP se le va a hacer largo llegar al 20-D.

Los animalistas abandonan Podemos

Uno de los círculos de Podemos más activos y que más comentarios ha generado es el animalista. Sin embargo, tiran la toalla definitivamente, según ‘El Confidencial Digital’. Después de que el año pasado se desgajara y una parte creara una organización alternativa más templada, los que quedaban han tomado la decisión de disolverse porque sus propuestas resultan “demasiado radicales” para una organización que cada día se parece más a la casta.

¡Vivan los tupper-menús!

No quiero que nadie se me enfade, así que dejo claro desde el principio que en pocas ciudades la oferta del mediodía de lunes a viernes es tan variada y suculenta como en las nuestras. Pero a veces se agradece (por tiempo, por dinero, por frío, por variar), también, comer “de tupper”, y con las recetas de Esmeralda Escobal en su blog de DEIA, hasta apetece. Hoy, domingo, es un momento perfecto para echar un ojo a la bitácora y preparar un tupper para mañana.