En Euskadi, lanzar pintura roja contra una sede del PP es considerado, casi, un ataque terrorista. Si eso pasa en Reus, el portavoz del Partido lo considera una “falta de respeto al partido y a la democracia”. Las palabras las recogen en la beligerante (contra los vascos, claro) ‘Libertad Digital’, sorprendentemente, y muestran esa doble vara de medir tan española. No negaré que no han faltado cabrones que han alimentado el conflicto vasco a golpe de pistola y bombas lapa, pero lo pusilánime del PP de Catalunya llama la atención.
Santiago Abascal, el libro
La vida es corta, el tiempo es preciado y escaso, las interrupciones y los imprevistos son ya cotidianos, y son muchos los libros que me gustaría leer como para dedicar ni medio minuto al que va a escribir Santiago Abascal para explicar los motivos de su salida del PP. Un libro que, seguro, podremos encontrar en todas las librerías y en el que explica “la historia de tres generaciones de Abascales y su lucha contra ETA”, como recogen en ‘El Confidencial Autonómico’. De salvapatrias, en Euskadi, vamos bien servidos.
Que no se nos olvide
Tenemos que agradecer a Javier Pérez de Albéniz que nos recuerde cuál ha sido, para él, la noticia del 2013 en España: “Que estamos siendo gobernados por un partido político corrupto. No se me ocurre nada más importante, más transcendente, más demoledor y descorazonador que un país como el nuestro, acosado por el paro, la miseria social y la pérdida de derechos laborales, se haya instalado en el escándalo político constante. Hemos normalizado la sinvergonzonería y el golferío. España es un país macilento dirigido por mentirosos y descuideros. Y no puede haber noticia más importante que esta, de ninguna manera, porque afecta al resto de aspectos de nuestra sociedad”.
Ahora, la Iglesia
El Papa Francisco tiene un plan para España, y lo va a acometer. Por supuesto, éste pasa por jubilar a Rouco Varela, que ya sobrepasa en dos años los 75 con los que un prelado pasa a la “reserva”, y abrir las ventanas de esa sacristía casposa, añeja y malhostiada (consagrada, por supuesto) que llevan soportando los católicos de bien en España y, por extensión, Euskadi. Pueden leer la pieza en ‘Vozpópuli’, donde no se les escapa que la línea ideológica de la iglesia española no tiene nada que ver con la que está exhibiendo el Papa Francisco en todo el mundo.
Android gasta más datos de nuestra tarifa
Aunque en Twitter he leído alguna crítica al post de Gaizka Manero en su blog de DEIA, sigo creyendo que nuestro bloguero y contertulio de ‘Onda Vasca’ tiene razón. Por lo menos, mi experiencia en primera persona, y la de quienes tengo a mi alrededor (usuarios medios con conocimientos medios, es decir, la mayoría), coinciden con lo que nos explica: los teléfonos Android gastan más cantidad de datos de nuestra tarifa de 3G que otros terminales con otros sistemas operativos. Realmente, no es determinante, pero sí importante porque la mayoría somos eso: usuarios sencillos sin conocimientos de gestión avanzada de Internet… ni tiempo para adquirirlos.