La culpa siempre es de los vascos

No niego que durante décadas un grupo de vascos que decía actuar en nombre de todos llenó nuestra mochila de culpa. Pero hoy, y tratándose de temas que nada tienen que ver con el asesinato selectivo (a quien no daba la razón a ese grupo), echar la culpa a los vascos solo es el recurso fácil del político malo. Así que hizo bien Aitor Esteban en afear al presidente andaluz su queja porque la CAV sí pasaba de fase de confinamiento y Andalucía, solo por partes. Juan Manuel Moreno bastante tiene con ocuparse de lo suyo, que es garantizar camas UCI y bajar el índice de contagio, que también son requisitos para avanzar.

Y por supuesto, del gobierno

Poder echar la culpa al gobierno de lo que no encuentras otro culpable va con el derecho a voto. Pero da la casualidad de que muchos de los que se han quejado por no poder moverse entre municipios de la CAV hace solo tres semanas se quejaban de que se volviera a la actividad económica. Prefiero pensar que muchos de los que ayer volvieron a subir la persiana sintieron cierto alivio, que la economía de un país no es solo industria y funcionariado, y que el alta en autónomos y los IVA trimestrales que abonamos también suma al presupuesto de Osakidetza y a las ayudas sociales que vamos a necesitar.

En esta pandemia nos hemos sacado cuatro carreras

Acierta Ignacio Varela cuando tuitea que “hasta ahora, todos hemos sido epidemiólogos. En un par de meses, todos seremos economistas. Vayamos preparándonos”. En medio, también hemos sido expertos en confinamientos y desescaladas, que es lo que toca ahora. Además de esas cuatro carreras, los que tenemos hijos en edad escolar también hemos podido sacarnos la de maisu o andereño. También la de fotógrafos de multitudes, la de espía del vecino que iba tres veces al día a por el pan, y la de community manager con especialización en mensajes de queja y protesta a todos los grupos de WhatsApp.

No es cuestión de “merecerse nada”

Mi admirada Sugarsagar resolvía la queja por triplicado (Twitter, Facebook y WhatsApp ) de muchos: “Te mereces salir a la calle porque llevas 50 días confinado lo mismo que te mereces comer nueces porque llevas 30 años sin comer nueces por ser alérgico. Que te lo has ganado, joder, esfuerzo, entrega, coño”. En efecto, salir a la calle hoy no es un derecho aunque ahora algunos lo reivindiquen así, ni nadie se lo ha ganado cumpliendo los protocolos del confinamiento… Salvo alguna cosa, como diría Mariano Rajoy. Las autoridades competentes saben más que los cuñados y si salimos será como ellas digan.

Díaz Ayuso, insuperable

La carrera política de Isabel Díaz Ayuso promete momentos hilarantes. Si alguien, después de más de 50 días de confinamiento y miles de muertos, se presta a hacer la sesión de fotos que ejecuta Carlos García Pozo, lo que se hace es un buen autorretrato. Nadie duda de su pena y aflicción, pero sí del acierto de hacerla pública junto a una entrevista sobre las acciones de su gobierno durante la pandemia. Emilio Olabarria me dijo en una ocasión que gobernar es muy fácil, y gobernar bien, tremendamente difícil. Y años después solo puedo darle la razón: Díaz Ayuso gobierno a golpe de mensaje y foto, a lo fácil.

Se llama «estado de las autonomías»

En España están preocupados: el llamado “estado de las autonomías” esta vez va en serio. Ya no es solo un sobrenombre cursi, y consultores y opinadores profesionales como Ignacio Varela no saben cómo gestionarlo: “La investidura depende de que haya una agenda catalana para ERC, una agenda vasca para el PNV, una agenda valenciana para Compromís, una agenda gallega para el BNG, una agenda canaria para CC, una agenda cántabra para el PRC y una agenda turolense para TE. ¡Viva mi pueblo!”. Efectivamente, el café para todos se ha agotado y España está obligada a descentralizarse de verdad.

Ya vale de hacer el tonto

En Twitter sigo a usuarios como el dibujante Juarma que son muy salvajes. Salvajes pero no fachas, ojo, porque ese juego al que ha jugado Vox ya nos lo conocemos. Juarma dice cosas como esta: “Mucho se habla de la ola de puritanismo y poco de la ola de tontos del culo”, y yo solo puedo darle la razón. En esta red social especialmente pero no únicamente hemos asistido a demasiadas reclamaciones puritanas que no había por dónde cogerlas, reclamaciones que interponían mentecatos y mentecatas y que los demás, empezando por mí, dejábamos pasar. Pero muchos nos hemos cansado ya de hacer el tonto de esta manera.

¿Me lo tengo que creer?

Alfonso Alonso ha impuesto su estilo en el PP vasco: sus portavoces tienen una característica común y un superpoder. La característica es la agresividad, y el superpoder el de no sonrojarse cuando mienten. Mejor dicho, cuando encadenan mentiras. Lo he comprobado de primera mano pero todos podemos ver que de arrojo van sobradas y sobrados. Por ejemplo, ahora tienen el morro de decir que se enfrentan a Vox en Euskadi porque los de Abascal quieren retrasar el reloj 40 años. Como si Casasdo no hubiese reprochado esta misma semana a Vox y Ciudadanos no haber conformado una coalición electoral para el 10-N.

Estamos hablando de esto

“PP y Ciudadanos han regado con un millón de euros a asociaciones ultras para que las mujeres no aborten. Una exigencia que siempre ha exigido Vox para seguir sosteniendo el gobierno de derechas de Andalucía” (El Plural). No estamos hablando de algo que puede ser o que se queda en el terreno de las ideas, sino de algo claro y directo: el gobierno andaluz está ejecutando recortes en Sanidad mientras engorda chiringuitos retrógrados de quien sostiene la viabilidad de ese proyecto. Así que Alonso y sus secuaces (porque quien chulea y miente para defenderse es eso) tienen por qué callar.

Por el bien de todos, pinchemos esta burbuja

Una vez más, la burbuja del fútbol muestra síntomas de desgaste, así que igual podemos pincharla ya. Después de haber alcanzado a todo el público potencial mundial (y con peores resultados de lo esperado), la escalada económica futbolística la pagamos cada vez más los aficionados del entorno: precios abusivos por camisetas, entradas y merchandising, y también por ver o emitir los partidos. Porque en los bares no queremos ver un Sampdoria-Unidese, sino al equipo del territorio. Al hostelero le cuesta 300 € al mes ese servicio y, según ADSL Zone, hasta 50.000 prefieren arriesgarse y piratear la señal en España.

El carrusel ideológico de Pablo Iglesias

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Merece la pena leer el repaso de Ignacio Varela a las diferentes ideologías que ha ido abrazando con entusiasmo inusitado Pablo Iglesias: de la izquierda clásica a la izquierda más antigua (fruto de su última reconversión) pasando por la socialdemocracia verdadera y ese discurso de que no hay izquierdas ni derechas. ¿Evolución? En poco más de dos años esta montaña rusa solo muestra que Iglesias, como sus más próximos colaboradores, no tienen otra ideología que su propio sostenimiento al frente de la barraca.

Hay que saber irse

A estas alturas de la película política podemos identificar también el principal problema de Pedro Sánchez: no sabe irse. Por supuesto que soy consciente de que lo ha elegido su militancia, pero los resultados electorales y las tensiones internas que en vez de apaciguar a incrementado, tienen que forzarle a recapacitar y marcharse. Del mismo modo, hay muchas maneras de salir, y elegir la correcta también es síntoma de inteligencia política. Pero Sánchez no se va, de hecho, según El Independiente, prepara su regreso.

Idoia Mendia encuentra su hueco

Los zarandeos sufridos por el PSOE en España y los que han dado los votantes en Euskadi a Idoia Mendia, hicieron que el PSE perdiera el rumbo irremediablemente… O eso creíamos. Pero veo (y celebro) que no lo ha hecho, gracias a un tuit especialmente acertado, en el que muestra que el PSE ha encontrado su hueco político: ser el garante de que la agenda social se impondrá a la soberanista. Personalmente entiendo que ambas van unidas, pero para quien no comparte mi visión, Mendia se reposiciona con moderación y acierto. Por fin.

Sentencias 2.0

Cuando leí que Luis Pineda ha sido condenado por un juez a tuitear durante 30 días que es un difamador, pensé: ¡menuda tontería! Luego le di otra vuelta y me di cuenta de que justo el juez lo que quería era compensar una tontería con otra: el de Ausbanc llamó “imbécil”, “corrupto” y “golfo” a Rubén Sánchez en Twitter, y el portavoz de Facua le denunció por ello encontrando esta sentencia a su favor. Una sentencia 2.0 que busca compensar en un contexto concreto a un agraviado de nacimiento.

El emprendimiento que se devora a sí mismo

Siempre he creído que la burbuja del emprendimiento la hinchan los gobiernos que quieren mejorar a corto plazo los datos de empleo, generación de empresas, etc., como si un puñado de autónomos que se dan de alta y montan empresas arriesgadas contratando a un par de ayudantes, fuera el síntoma de mejora de la economía. El caso de Unai Nieto y sus teléfonos Zetta, que parece que solo son Xiaomi a los que ponía pegatinas encima, tiene que devolvernos a la realidad: necesitamos oportunidades de verdad para poner en marcha empresas de verdad y un crecimiento de verdad.