Más importante que el calendario

He estado conectado a la actualidad estas vacaciones más de lo que me habría gustado, obligado por este curso político sin fin ni tregua. Y he visto noticias y tuits que no quiero que pasen como los días de vacaciones para un niño o una niña. Mensajes como este, acertado, de Paul Ríos el pasado 2 de agosto, cuando se cumplían 55 años del asesinato de Melitón Manzanas, como recordaban sucintamente en el Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo: “Se os olvida el pequeño detalle de que fue un victimario… Esto no es trabajar por la memoria. Es ocultarla y manipularla, por ser suave”.

El mismo rasero

Ir guardando links para cuando volviese a escribir la columna me ha permitido relacionarlos. De esta manera, solo unos días después del tuit de Ríos, leí este de Iñaki García Arrizabalaga: “Ocultar partes relevantes de la verdad es grave. Ekain Ruiz Ibarguren murió al estallarle la bomba con la que quería asesinar a otras personas. No se le puede presentar como simple víctima, ignorando por completo su condición de victimario”. En su caso, apuntalaba el recordatorio de “Euskal Memoria”, que hacía también en Twitter la misma omisión que Sortu sobre el de ETA, significativamente.

Volvemos a la actualidad

El PSOE no va a tenerlo fácil para que Pedro Sánchez vuelva a ser presidente. Algunos partidos buscarán compensaciones para las circunscripciones en las que son elegidos: PNV y Junts han hablado claramente de negociación, condiciones y rendición de cuentas. Pero más difícil lo va a tener el PP con Núñez Feijóo, básicamente, porque no tiene con quien negociar al apostarlo todo al verde de Vox. Visto lo evidente, los socialistas aciertan: “El PSOE quita presión al Rey y deja a Feijóo vía libre para ‘darse otro tropiezo’ con la investidura. Ferraz cree que el PP sigue sin darse cuenta de la realidad” (República).

Qué vergüenza das, Manolo

Solo hay algo peor que el machismo expreso que demostró Luis Rubiales besando a Jenni Hermoso después de que ella y sus compañeras ganarán un Mundial de fútbol sobre el césped: defender al presidente de la RFEF. Porque, además, solo hay una manera de ejercer esa defensa: siendo más machista, baboso y “cuñado” que el propio Rubiales. Y eso está al alcance de unos pocos como Manolo Lama quien, según La Vanguardia, “se tomó a risa” las críticas. “Yo creo que los que se cabrean es porque nunca le han dado un beso a ellas”, llegó a decir el periodista en antena. Lo que yo creo es que el retrato se lo hace solo.

Se juntarán en una cafetería

Pocas cosas más tristes he visto que la disolución de un partido. Algunos prefieren la absorción, disolverse en un mar más grande sin soltar el puestito, algo muy vasco, por cierto: lo hemos visto en el PSE y lo vemos en Bildu. Pero en España son más de irse poco a poco, agónicamente, por el sumidero. Así lo hizo UPyD y así lo hacen en Ciudadanos, partido que “hará primarias tras la marcha de Guasp sin que Bal e Igea puedan presentarse” “salvo que se les levante la suspensión de militancia” (The Objective). Si restamos quienes no pueden ir a quienes quedan, podrán hacer esas primarias en una cafetería a mano alzada.

Más ya ha ganado… a Junqueras

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Según ‘El Confidencial Digital’, Oriol Junqueras podría estar arrepintiéndose de haber aceptado disolver la marca de ERC en la de la plataforma “Junts Pel Sí”, pese a que las encuestas son muy favorables a esta agrupación electoral. Por su parte, Artur Mas sí ha acertado: la omisión de su marca, zarandeada por quienes quieren asociarla con casos de corrupción, y su liderazgo indiscutible dentro de la amalgama formada, son una victoria… parcial, de momento.

Pablo Iglesias se siente extranjero en Catalunya

La campaña catalana está siendo una losa para Podemos. Acostumbrados como estaban a quejarse de PP y PSOE y clamar por la justicia universal, en cuanto se han visto obligados a bajar a tierra y hablar de lo concreto, no han parado de trastabillar. Pablo Iglesias reconoce que no se siente cómodo, que es “como hacer campaña en otro país”, y que los parámetros electorales son diferentes a los españoles, con PSOE y PP como minoritarios y Ciudadanos como un partido asentado (‘El Món’).

Manolo Lama pide que no seamos como él

O eso, o Manolo Lama lo que pide es que le dejemos ser el único que pueda mezclar deporte con política. Es lo que se desprende de su sorprendente tuit, fruto sin duda de la euforia desmedida (su modo de hacer periodismo, curiosamente): “Enhorabuena a Pau Gasol, catalán y español. Viva el deporte. Y por favor dejar de mezclarlo con la política”. Sin entrar en que ese “dejar” tendría que ser “dejad”, la frase es un monumento a la incoherencia.

La boda de Maroto, el día después

Empiezo a pensar que Javier Maroto no es xenófobo y que tampoco quería casarse. Empiezo a creer, de verdad, que el ex alcalde de Gasteiz lo único que quiere es que hablemos de él. Después de lo escrito sobre la presencia de Rajoy en su boda, ahora nos vemos obligados a seguir comentando el evento porque éste se celebró fuera de horario y normativa en el ayuntamiento de Gasteiz. Maroto lo dejó todo atado cuando abandonó el despacho del alcalde y su sucesor, Gorka Urtaran, avisó en ‘Onda Vasca’ de que no habrá más excepciones (‘El Plural’).

Más fraude

Me sorprende que esté pasando desapercibido en los grandes medios españoles el asunto del fraude en las adjudicaciones a las empresas que hacen el recuento de votos, dependiente del ministerio español de Interior: “Al menos uno de los tres funcionarios presuntamente involucrados en la trama habría maniobrado para alterar los pliegos de condiciones de las licitaciones de las europeas y las municipales para favorecer a una empresa, Base 100 SA, en la que trabaja un familiar de primer grado y en la que él mismo podría tener intereses comerciales” (‘El Condifencial’).