Está claro que como futuróloga (¿El final del túnel para el Athletic?) no tengo mucho futuro, pero es que a veces se confunden las ganas con el optimismo sin base. En fin, tendremos que dejar el ver la luz al final del túnel para la siguiente jornada.
Sobre el partido contra el Zaragoza voy a volver a comentar las carencias que tiene este equipo, que el sábado de nuevo tras el partido volvió a comentar Bielsa, cuando dijo que los rivales del Athletic no ganan por méritos propios sino por los errores nuestros que les “habilitan” a llevarse los tres puntos, en este caso, con suma facilidad. El rosario de errores lo comenzó Aurtenetxe con una chiquillada a la altura de la de Amorebieta contra el Eibar. Un balón que no tiene peligro de nada, él se duerme en el área y para solucionar su lentitud hace un penalti claro. Mateu Lahoz encantado de que se lo pongan tan fácil. Penalti que es impensable que pare Gorka Iraizoz, claro. Para saber que Aurtenetxe está mal no hay que fijarse en este penalti, lleva mucho tiempo mal, de hecho la semana pasada yo comentaba que si lo que tiene son problemas de pubis, que se opere y a ver si vuelve a partir de cero porque… está quedando en evidencia en muchos partidos.
El segundo error, otra vez de Iraizoz, que si la semana pasada hizo un partido aseado, súper elogiado por toda la prensa, ha tardado sólo 7 días en volver a hacer una pifia que supone otro gol. Un portero que nunca sale en los corners y se le ocurre despejar de puños a la altura del punto de penalti y casi a ras de suelo. Pero ¿NO PODÍA HABER BLOCADO EL BALÓN? Tras volver el balón al área, en un momento se ve que mira a un compañero como diciendo… a ver si me ayudáis un poco, algo con lo que estoy totalmente de acuerdo, pero… Es lo que hay.
En el centro del campo Herrera lo intentó y lo intentó y fue de lo mejorcito a pesar de perder algunos balones terroríficos. A su lado estaba San José, que francamente no había visto nunca a un centrocampista que diese tantos balones al rival, en balones que no parecían excesivamente complicados, por darle toque de humor me pregunto si será daltónico y no distingue los colores de las camisetas…
Sobre Muniain decir que también lo intenta todo, todo pero sin soltar el balón. Me llegó a desesperar porque parecía que el balón era suyo y desperdició ocasiones de gol por intentarlo él sólo, sin mirar a sus compañeros mejor colocados. ¡Iker con la calidad qué tienes…!
Total, con tanta facilidad es muy difícil que al contrario se le escape el triunfo. A ver si con el año nuevo viene el juego nuevo y vamos hacia arriba.
Feliz Navidad a todos, y que tengamos un estupendo año 2.013, que con que sea la mitad de bueno que el 2012 (futbolísticamente hablando), me conformo.