Carlos Martínez Gorriarán tiene dos tipos de seguidores en Twitter: quienes estamos cansados de su soberbia, sus lecciones y sus insultos, y quienes lo estarán. Es decir, que salvo para los recalcitrantes de UPyD, sus opiniones están más que desautorizadas. Sin embargo, Sosa Wagner ha pedido a Rosa Díez, según ‘Libertad Digital’, que desautorice públicamente a su matón de patio de colegio twittero, por los ataques que ha recibido de su, en principio, compañero de filas. Así se las gastan los “renovadores” de la política.
Información duplicada
El perfil en Twitter @Yusnabi parece lo que dice su nombre: los marines estadounidenses queriendo entrar en Cuba. Es decir: una cuenta falsa para difundir fotos e informaciones que le suministran desde la isla. No seré yo quien defienda a la dictadura castrista, pero lo de Yusnabi Pérez “huele”, aunque muestre las portadas de los dos diarios oficiales en Cuba, el popular ‘Granma’ y el de las nuevas generaciones: ‘Juventud Rebelde’. Solo cambia el color, ya que noticias y diagramación son idénticas. Propaganda denunciada por… propaganda.
No todas las televisiones son iguales
No puedo negarles que me resultaría muy divertido ver a PSOE y, sobre todo, la derechona de PP y UPyD, afirmar que todas las televisiones públicas con iguales, si no fuera porque es acusación en Euskadi solo busca erosionar la imagen de EITB basándose en sus propios errores en España. Pues va a ser que no, que en Euskadi no pagaríamos 656.640 € al entrenador personal de Aznar con el dinero de un fondo de emergencia por un producto televisivo del que se aprovecharían luego Telemadrid y la autonómica balear, como denuncian en ‘Vozpópuli’.
¡Y sin “audiencia social”!
Mezclo los dos temas anteriores (Twitter y televisión) para llamar la atención sobre la noticia que hemos encontrado en ‘Fórmula TV’: el éxito de audiencia de la maratón de ‘Los Simpson’. 522 capítulos en 12 días, en orden cronológico que obtuvieron una media de un millón de espectadores. El éxito de esta serie no tiene nada que ver con Twitter, de hecho, es anterior a esta herramienta, e incluso a Facebook. Y ahí quería llegar: la necesidad de relativizar el fenómeno de la “audiencia social” (las personas que comentan lo que sale en la televisión).
Lo que queda
Los Juegos de Sochi tuvieron mucha audiencia y mucho eco en las redes sociales digitales. Seguramente recuerden las fotos de los deportistas en Twitter mostrando los diferentes errores de construcción pese a que la obra había sido carísima y, supuestamente, el gobierno ruso había echado el resto para mejorar su imagen. Solo seis meses después, el fotógrafo Alexander Belenkiy ha retratado un Sochi vacío, lleno de grandes infraestructuras que no sirven para nada ni a nadie. Las fotos están disponibles, entre otros sitios, en ‘Gizmodo’.