Esto es lo que es

No tardaremos nada en ver a baños de legitimidad a los de los chalecos amarillos en Francia. Lo harán los de la izquierda y los de la derecha, los antisistema, los que denuncian que la RGI es solo para inmigrantes y los que siempre se quejan de que los ricos no pagan impuestos y luego piden a los gremios trabajar sin factura. Pero más allá de las conjeturas tengo clara una cosa: esta ola la surfean Salvini y Le Pen, y la celebran Trump y Steve Banon. Vamos a necesitar tener eso muy, muy claro, para cuando vengan a darnos lecciones los que se dejan manipular fácilmente.

En concreto

¿Qué piden estos chalecos amarillos? Pues empezaron, como ya sabemos, con la retirada de un impuesto a los combustibles que, finalmente, Macron no ejecutó. En todas estas semanas han hecho gala de ausencia de líderes y portavoces, y de ser un movimiento horizontal, pero ellos mismos han acabado concretando una serie de reclamaciones que han repasado en Magnet. Una ensalada de medidas salpimentadas con hasta reclamaciones ecológicas pero en la que la ventresca es la salida de Europa, la bajada de impuestos y el freno a la inmigración. Blanco y en botella.

Los listos de la clase

Guille Errejón, sin embargo, tiene clara la relación entre el 15-M y los chalecos amarillos franceses: “Las élites españolas, francesas, europeas: la tentación de construir países sin sus pueblos. Una y otra vez la gente dice: No”, concluye en su tuit. Pero o no se da cuenta de lo que dice o cree que no nos vamos a dar cuenta de que nos la quiere colar. Solo hay que abrir los ojos, y si el antifaz de justiciero se te tuerce y no te deja ver, o rectificas o te empeñas y acabas dando espadazos al aire o incluso a tus aliados. Que no me vengan con milongas, que ya no cuelan.

¿Cómo se llega a esto?

¿Cómo se llega a la revuelta de los chalecos amarillos y al intento de surfear la ola desde izquierda y derecha? Con mentiras. No es permisible que un medio como Público, que presume de precisión en sus investigaciones, titule dando como ciertos los datos de un estudio que presenta un grupo de europarlamentarios en el que están Bildu, ERC, Compromís, Equo, etc., y que busca un alarmismo evidente. El grupo hace su trabajo, ojo, quien no lo hace es el medio que contribuye a una escalada de indignación incontrolada y que luego los extremos intentarán rentabilizar.

En resumen

Juan de Gorostidi ha resumido en Twitter de maravilla todo lo que les he querido transmitir en los párrafos anteriores: “Hay unos tíos en París destrozando la ciudad mientras piden menos inmigración, prohibir el glifosato y que gobierne una junta militar. Salvini, Steve Bannon y Le Pen diciendo que son de los suyos y, aquí, hay gente diciendo que qué pena que en España no hagamos eso. El fascismo se nos está metiendo en casa cada día más. Y nos estamos dejando estafar. La enfermedad está aquí para quedarse”. Si les dejamos, el populismo nos come. Toca hacerles frente.

«10.000 euros limpios por minuto»

“Solo las tres principales compañías, que copan en torno al 90% del mercado, suman unos beneficios netos de 4.121 millones en el periodo de enero a septiembre, lo que arroja una media de 10.482 euros por minuto o 628.968 por hora”. Esos son los números de Endesa, Iberdrola y Naturgy (antigua Gas Natural Fenosa). Números que invitan a pensar que, efectivamente, la de la energía es la mayor estafa legal que hemos sufrido nunca, más incluso que la de la vivienda durante la crisis. Gracias a que se lo permiten este invierno volveremos a ver cómo sube el recibo.

¿Por qué tanto empeño?

Esa es la pregunta a la que no logramos dar respuesta: por qué Pablo Iglesias se empeña en colocar a Julio Rodríguez en un lugar privilegiado de la política española. Lo intentó hasta dos veces como diputado y en las dos falló, incluso cambiándole de provincia para tener más opciones. Y ahora le dirige hacia la alcaldía de Madrid compitiendo contra Carmena, como hemos visto, y creando un problema tremendo. ¿Qué debe Iglesias al que fuera Jefe del Estado Mayor con Zapatero? ¿Qué prometió el gran jefe en Podemos a este militar que luego se ha declarado pacifista?

La Guardia Civil y Twitter

Primero fue el tuit sobre una noticia de Vox (positiva, por supuesto) al que la cuenta de la Guardia Civil le dio un “me gusta”, y después un comentario fuera de toda lógica: “Los Mossos investigan la aparición de unos muñecos colgados en un puente con los logos de PP, Cs y PSC. Pues si son los Mossos los que investigan vamos a ponernos cómodos…”. No quedó más remedio a la Guardia Civil que rectificar: borraron el tuit, pidieron disculpas y anunciaron que depurarían responsabilidades. Pero al que tienen que echar fue al que copió el estilo de Carlos Fernández Guerra y lo hizo mal.

No hay sueldos para las abuelas suecas

En Escandinavia no atan a los perros con longanizas, aunque a veces miramos al norte con incontrolada envidia (y yo, el primero). Porque allí también los recursos son finitos, es lógico que, como confirman los de Maldito Bulo, no sea cierto que vayan a poner un sueldo a cargo del estado a las abuelas que cuidan de sus nietos. No digo que no se lo merezcan allí y aquí, digo que me extraña que un país, incluida Suecia, llegue a tener sus servicios sociales cubiertos hasta tal punto que aún les queda una partida para un sobresueldo. Por desgracia, el bulo corre más que la verdad.

¿Y tampoco habrá “cash”?

Seguimos con Suecia porque sí parece irreversible la tendencia de la ciudadanía de usar cada vez menos el dinero en metálico. El primer beneficio de la medida es que así sería imposible que existiese el dinero negro (es decir, también allí existe). Pero esta decisión también tiene consecuencias negativas: la ausencia de monedas y billetes excluye a las personas no tan tecnologizadas y a las más pobres, directamente. Y lo peor: es posible privatizar el modo de pago y cobro, que afecta directamente al modo de funcionamiento de un país completamente.

La Iglesia es colaboracionista

Si la iglesia española ha aceptado que en sus centros se celebren misas por Franco estos días podemos asegurar, sin ningún problema, que es colaboracionista, como cualquier persona o ente que no plante batalla de un modo indiscutiblemente claro al fascismo, a la dictadura, a su forma de pensar, a su herencia y a sus consecuencias. Quien permite en su casa, la del Señor, dicen, se reúnan para homenajear a Franco quienes siguen creyendo que quienes no piensan como ellos están mejor muertos y que tanta sangre y dolor estuvieron justificados, forma parte de ellos.

La nueva inquisición

Por lo menos, la Iglesia ha abandonado la inquisición. Pero no los humanos: dos personas han sido quemadas vivas en un pueblo de México al ser señalados como los secuestradores de niños de los que alertaba un bulo (una noticia falsa) de WhatsApp. El linchamiento y asesinato fue alentado y retransmitido por Facebook. ¿Quién se responsabiliza ahora de este “éxito” de la tecnología, la viralidad, el periodismo ciudadano o la justicia colaborativa y alternativa? ¿Nadie? Igual que me tengo que creer que nadie veía venir que esto iba a suceder. Me repito: la tecnología nos atonta.

Felipe González, SA

Sabía desde el principio que el titular de El Confidencial estaba cogido por los pelos: “Felipe González reclama a Indra 7,3 millones por la empresa de su hijo”. Lo que no me esperaba era la revelación del texto de Agustín Marco: el hijo del expresidente fue colocado al frente de una empresa que apenas tuvo actividad con una cláusula de indeminzación bastante jugosa si era despedido. Todo esto, con participación de la SEPI. El final de la historia, el esperado: Pablo González acabó siendo despedido en cuanto la cláusula caducó y el juzgado resolverá sobre la reclamación de un bonus millonario.

Iglesias reduce el poder de Echenique

Sigo hablándoles de miserias políticas. Pablo Iglesias habría decidido quitar poder a Pablo Echenique después de la catastrófica gestión de la crisis de Podemos Madrid. Vayamos por partes: Echenique es posiblemente el político más sobrevalorado en España. La crisis en su partido en la capital de España empieza con el empeño de Iglesias de favorecer, otra vez, a Julio Rodríguez. Y el verdadero problema no es a quién quita poder Iglesias en su partido, sino el modo en el que él sigue concentrándolo. La “nueva política” desde luego es nueva en que no anda con rodeos.

Necesitamos más deportistas así

Pep Guardiola ha visitado a los presos políticos catalanes. Lo ha hecho acompañado por el periodista Xavi Torres y nos hemos enterado por un tuit que han colocado en la cuenta de Jordi Cuixart. Necesitamos más deportistas así: comprometidos con sus ideas (las que sean, pero que las hagan públicas, por favor). Guardiola sigue dando lecciones de vida, no solo de fútbol: es perfectamente compatible ser uno de los mejores del mundo (que se escribe y se lee rápido) con tener ideas políticas, manifestarlas y defenderlas, aunque no gusten a la mayoría de la prensa española.

Esto es la política

Espero que Teresa May sea fiel a su palabra y no dimita. Porque de esto va la política, de tomar decisiones difíciles y asumir las consecuencias. Si no, no te dediques a la política: seguro que hay una tertulia para ti, en la que puedes decir lo que harías sin llevar una pesada mochila y muchas noches sin dormir detrás. Por no hablar del desgaste familiar. Pero May, a la que le ha tocado ejecutar el Brexit, el mayor error político de la historia moderna, está haciendo lo que le toca. No como los ministros que la abandonan por dignidad, dicen. Lo digno es asumir la realidad. El resto, cobardía y tertulia.

Iglesias sigue imponiéndose

Mi amigo Igor Filibi me advirtió de que la gente tiende a ser coherente, y que quien parece un poco idiota en el trabajo seguro que también lo es en el resto de ámbitos de la vida. Siguiendo su sabio consejo (que estos años he tenido la oportunidad de validar varias veces), si Pablo Iglesias se comporta como un dictador en su propio partido lo lógico es pensar que será coherente y se comportará como un dictador en el resto de áreas de su vida. Una que lo conoce bien, Carlina Bescansa, ha puesto el mejor ejemplo: en todos los procesos lanza y acaba imponiendo su opción.

El feminismo circular de Dolera

A Leticia Dolera le ha vuelto su propio feminismo con la misma fuerza con la que ella lo lanza al mundo. Si muchos veíamos que su necesaria labor tal vez necesitaba un punto de mesura, ahora puede que también lo vea ella, cuando ha tenido que justificarse por prescindir de una actriz para un proyecto porque esta se ha quedado embarazada y no le encaja en algunas escenas eróticas. La entiendo perfectamente. Igual que era comprensible esa decisión cuando la tomaban hombres o mujeres a las que acusan de alienadas. Llamar la atención y denunciar es necesario. Ponderar, también.

Solo sabe él

Caen Contee es uno de los máximos responsables de la empresa que ha puesto patinetes en varias ciudades que pueden dejarse en cualquier sitio sin esperar a una regulación o normativa. Adivinen: funciona con una App, como todas las ideas candidatas a la más jeta del siglo. Pero si el modelo de negocio es discutible, las respuestas de Contee en El Confidencial son bastante reprochables. El tipo hace un ejercicio de “cuñadismo” perfecto. Saca un 10 en todas las categorías porque borda el “es que no sabéis”. Y por eso no nos adaptamos. Solo sabe él, que se lo lleva crudo.

La resistencia

Con tanto revolucionario de sofá y tanta revolución de iPhone, uno ya no se toma en serio ninguna llamada a la batalla. Estamos como para que nos invadan los vikingos. Pero todavía quedan algunos a los que tomarse en serio. Dice Fernando Pardo, de Los Coronas, que los que van a las salas de conciertos y escuchan rock’n’roll son la resistencia. Y quienes se empeñan en aprender lenguas como el aragonés o el asturiano, también lo son. Una resistencia de verdad, que supera la dificultad de encontrar un centro y las preguntas estúpidas que cuestionan el mantenimiento de un idioma.

La mentira importa

Mentir te retrata y cualquiera puede cometer un error. Son dos verdades básicas que en COVITE, por lo que parece, no entienden. Si en el Twitter del colectivo de víctimas del terrorismo han lanzado sin querer un bulo sobre Bildu, solo tienen que pedir disculpas y borrarlo. Pero han hecho todo lo contrario: han ayudado a viralizar un falso tuit del partido de izquierdas y no han rectificado, de hecho, han insistido. Lo que invita a preguntar: ¿desconocían la falsedad del tuit que han difundido como real o lo han lanzado a sus 15.000 seguidores sabiéndolo?

El reconocimiento, también

Manuel Murillo, el guardia de seguridad que aseguraba que quería atentar contra Pedro Sánchez en un grupo de WhatsApp con simpatizantes de Vox, fue condecorado por la Asociación de Amigos de la Guardia Civil española por su colaboración durante el dispositivo montado en Catalunya por las fuerzas y seguridad del Estado para el 1 de octubre. Esto parece innegable, como que la medallita se la pusieron en instalaciones del Instituto Armado, aunque horas después de conocer la noticia algunos medios se apresuraron a aclarar que la Guardia Civil no tiene nada que ver con el francotirador.

Y las formas

¡Por supuesto que es importante dejar clara una condena al franquismo en 2018, con el presente que estamos viviendo! Así que el PP puede ir buscándose otra excusa en el Senado para negarse a apoyar la condena al régimen y cualquier exaltación actual de la dictadura, que ha promovido el PSOE en esta cámara. Con Vox al alza y con chavales que no lo vivieron presumiendo de admirar al dictador canijo, el PP tiene dos opciones: o combatirlo o pugnar por el espacio. Y está claro por sus gestos y declaraciones que ha decidido intentar ganarse a esos votantes.

El nuevo periodismo

Los creadores de la nueva política no se cortan un pelo en darnos lecciones también sobre lo que es y lo que nos conviene el nuevo periodismo. Un periodismo que, por supuesto, practican y enseñan ellos… Aunque no sean periodistas: Pablo Iglesias y Juan Carlos Monedero producen, presentan y protagonizan sus propios informativos en Internet. ¿El resultado? Lo apunta Fátima Caballero: “Monedero entrevista a Julio Rodríguez, su primera entrevista tras el lío de Podemos Madrid. Primeras preguntas: sobre su libro, sobre su etapa de general y sobre la persona a la que más admira. Increíble”.

Feliz día de las librerías

Simplemente, las librerías me encantan porque me generan buenas sensaciones. Me gusta cómo huelen, lo que veo, lo que toco y la oportunidad de elegir. Me da igual una más destartalada de barrio que las más impersonales de los centros comerciales (que sí, también están bien). Y por supuesto me gusta lo que ofrecen: libros, historias que, como dice Kirmen Uribe, no importa que sean verdad, mentira o las dos cosas. Hoy los trabajadores y dueños de librerías celebran su día, y les invito a que compartan con ellos un ratito consigo mismo y sus gustos literarios.