No hay premio por tener las botas limpias

Comparto con Antonio Agredano la profesión, la edad y una riada de melancolía por nuestras venas. Pero él lo cuenta muchísimo mejor que yo, así que les invito a que lean su blog de vez en cuando, sobre todo si necesitan lamerse las heridas que hace el paso del tiempo. Dice Agredano que en la vida, como en el fútbol, “no hay premio por mantener las botas limpias” y que “ser de un equipo de fútbol es un compromiso moral con la derrota”, como lo es vivir. “Tirar un penalti tiene la bendición de poder fallarlo”, concluye como si nada a mitad del texto. Y permítanme que me quede con este mensaje positivo.

El puto amo

En este domingo lluvioso en el que acabará dando vueltas al periódico, antes o después leerá esta columna y se enterará (si no lo ha hecho antes) de mi admiración por Agredano y por Pep Guardiola. Estoy seguro de que si no fuera ex futbolista y entrenador también hoy estaría escribiendo sobre el catalán porque alguien con sus extraordinarias sensibilidad e inteligencia solo puede brillar. De Guardiola habla sin cortarse su amigo David Trueba para Líbero. Pero su relato vale tanto para el fútbol como para la vida: pasión, clarividencia, imaginación, escritura, conversación y, sobre todo, personas.

No estoy para mitades

En la otra gran revista de fútbol, Panenka, nos hablan de un delantero serbio de veinte años que lo remata todo y está ha llamado a ser uno de los grandes arietes del fututo, y reflexionan al mismo tiempo sobre la figura del “falso nueve” que tan de moda está y, por cierto, podemos atribuir a Guardiola. Si me lo permiten, me quedo con el primero porque no estoy ahora para medias tintas: denme un delantero letal, denme un tipo que va de frente, denme uno que venga a partirse la cara contra dos defensas desde el primer minuto hasta el último, denme la oportunidad de convertirme en eso.

El libro que nunca escribiré

La vida es ese penalti que tiras deseando que, al menos, vaya entre los tres palos. La vida es encontrarse con personas como Guardiola porque uno ya admite que nunca será Guardiola. La vida es conformarse con leer que un chaval que tiene la mitad de tus años está llamado a todo. La vida es darte cuenta de que nunca escribirás un libro y que no te importe. No porque no eres capaz, sino porque no eres famoso. Alberto Olmos vuelca en El Confidencial todo su resquemor, necesario para su catarsis y la mía: “Se han encontrado ya fórmulas para ser escritor sin abrir un libro ni poner una palabra”.

El hijo de Khashoggi

El hijo de Khashoggi que tuvo que estrechar la mano de Salman bin Abdelaziz y Mohamed bin Salman, rey y príncipe de Arabia Saudí, padre e hijo, tiene nombre: se llama Salah, y desde este fin de semana ya no reside en el país árabe. Ha decidido huir de la dictadura que ha asesinado salvajemente a su padre y le ha obligado a recibir las condolencias de quien quería verle muerto. El hijo de Khashoggi podría ser, perfectamente, título y materia para una columna de su propio padre, pero ya nunca lo será porque hay mucho hijo de puta suelto en este mundo, y eso es peor que la melancolía.

Ya está montada

Confío en que la población de Altsasu estará a la altura y ante la provocación evidente de Albert Rivera, Santiago Abascal y todos los suyos, serán capaces de mantenerse indiferentes. ¿Choca esto con la necesidad permanente de hacer frente en todo momento y todo lugar a la extrema derecha? Sí, pero es que es justo lo que buscan los Abascal, los Rivera y los correspondientes secuaces, que se fundirán sin que se note mucha diferencia entre unos y otros. Esta vez para hacer frente a la derecha solo será necesario que ésta se retrate como generadora de enfrentamiento.

El problema es la denuncia

Por muy mal que me caiga Albert Rivera, me sorprendería que hubiese actuado de una manera distinta a la que recoge el comunicado de Ciudadanos, fuente única y suficiente para El Español. Para empezar, porque no le hace falta: a Rivera le basta con hacer lo que le digan los agentes de la Policía Nacional que le escoltan para librarse de controles o lo que sea necesario. Peor mensaje me parece el del cuerpo policial que ha denunciado a los trabajadores que quisieron hacer un control rutinario en un aeropuerto a un político que solo es un ciudadano más.

Arabia Saudí, Podemos y las elecciones

Es fácil estar en contra de una dictadura como la saudí. Y más si eres antimonárquico y tienes un ordenador a mano para buscar en Google fotos de las reuniones de Juan Carlos I o Felipe VI con los representantes del régimen árabe, sobre todo después de la cruel tortura hasta la muerte que ha sufrido Jamal Khashoggi en la embajada saudí en Turquía. Lo difícil viene luego, como sugiere Miquel Roig, con los conflictos de intereses: en Cádiz gobierna Podemos y la construcción de goletas militares de una cuestión delicada que afecta a 6.000 personas. Mucha contradicción para cabalgarla en un tuit.

El PP catalán, con más problemas

Nunca sabremos si le tantearon, si directamente se lo pidieron o si solo fue una idea feliz que oyó un periodista, pero qué mal momento para el PP catalán para verse relacionado con Josef Arjam. El televisivo consultor financiero ha abandonado su cartera de gestión, dejando a los inversores con importantes pérdidas tras su cadena de equivocadas decisiones, justo en el mismo momento en que hemos conocido que el PP catalán que abandona Albiol le pretendía como reclamo. Arjam se define como un ultraliberal y en el PP catalán, ya con todo perdido, parece que no lo veían mal.

El futuro que viene de Japón

Supongo que la noticia les sorprenderá tanto como a mí pero, si se paran a pensarlo, ¿cuánto tiempo hace falta para que la veamos cambiando “Japón” por “Euskadi” o “España”? Me refiero a este titular de Ecoinventos: “Las gasolineras desaparecen en Japón a un ritmo de 1.000 al año”. Es el futuro, todos lo sabemos: los surtidores de electricidad y las baterías de carga superrápida irán apartando al petróleo. ¿O lo hará el hidrógeno? Personalmente hay una pregunta que me inquieta: ¿de dónde va a salir tanta energía eléctrica si no es del uranio enriquecido?