Si parece que hay un plan…

Si parece que detrás de todo hay un plan lo más probable es que haya un plan. Parece un axioma sencillo pero de vez en cuando hay que recordarlo. Anoten estas líneas de El Confidencial Digital: “Altos cargos de la Generalitat serán acusados de sedición y prevaricación días antes del 1-O. La Guardia Civil está reuniendo pruebas contra representantes del Govern, funcionarios y alcaldes que serán entregadas al juez justo antes del referéndum independentista”.

Y el enemigo, en casa

Mientras el gobierno catalán intenta poner en marcha un proceso de independencia con todas las trabas posibles desde un estado que ve que pierde una parte muy importante de su potencia económica, quienes abanderan el apoyo a este “procés” no dejan de poner palos en las ruedas: la campaña cavernícola contra el turismo de Arran y Ernai que permite a quien quiera hacerlo asociar independentismo con xenofobia no ayuda a ningún nacionalista. Al contrario.

Los apoyos tienen que sumar

Hay formas de hacer política que no entiendo. No entiendo, por ejemplo, que la lista unitaria de Junts pel Sí haya acabado echándose en manos de la CUP. Y mucho menos entiendo la manera de hacer política de esta formación. Su última “aportación” al “procés” es un cartel que imita a uno leninista (y otro franquista) en el que una mujer barre (una mujer barre, sí) a quienes sobran en su modelo de Catalunya. ¿De verdad creen que así van a sumar a una causa que lo necesita?

En resumen…

“Me dicen en los 90 que íbamos a estar discutiendo en 2017 sobre las vacunas o si las vacaciones deben ser voluntarias y me río en sus caras”. Este tuit guarda una gran verdad y, al mismo tiempo, ignora una realidad todavía mayor: esas discusiones ocupan mucho tiempo y mucho espacio en Twitter pero fuera de esta red social no son tan comunes. ¿Tienen más sentido común los no-tuiteros? Por lo visto yo creo que es al revés: hay demasiados tontos con Twitter.

El gran Bielsa

A Bielsa no le gusta que los periodistas le alabemos y a mí no me gusta lo que opina de nosotros. Pero hasta ahí lo que me separa de este genio. Lo que me une al “loco” es mucho más, es una pasión por el fútbol que, en la versión en castellano del New York Times, Ezequiel Fernández ha descrito deliciosamente. Su visión de este deporte y de la vida me parecen fascinantes: “Ética, ataque y belleza” y “no me quieras porque gané, necesito que me quieras para ganar”.

Poniendo orden en la chirigota

Voy a intentar tomarme unas vacaciones del tema, en plan turista, cansado ya de que nos traten cada día como si fuéramos tontos. Me despido del asunto por unos días con otro tuit de Otegi en el que, lejos de intentar reconducir la actitud de Ernai, quiere que nos resulte divertido el acoso y la coacción de sus juventudes, a cara tapada, a los usuarios de un tren turístico en Donostia. El problema lo tiene quien es incapaz de ver la gravedad del ataque, pero lo sufrimos todos.

Garzón, el motivador

Gaspar Llamazares me caía bien, y la aversión que le tiene la IU que se ha echado en manos de Podemos hacía que aumentara mi simpatía hacia él. Ahora empiezo a dar la razón a quienes nos advertían sobre el nuevo compañero de Baltasar Garzón, el juez estrella que cerraba periódicos mientras hablaba con la IA, el que vino a socorrer a López para asegurar las ilegalizaciones que le hicieron lehendakari, el que ahora se atribuye capacidad de movilización.

Y así, todo

No podemos dejar pasar este pantallazo: Unidos Podemos en el Congreso de los Diputados ha mandado una queja formal al ministro de Energía porque en la comisión de expertos sobre escenarios de transición energética no hay ninguna mujer. ¿Y Podemos a quién mando? Efectivamente, a un hombre (también lo hizo, por cierto, CC.OO.), y vez de cambiar su propuesta prefieren sacarse ahora la foto de la igualdad reclamando más presencia femenina.

El que pierde es el Athletic

El relato de Galder Segurola en su blog (uno de los primeros en Euskadi) es para tenerlo muy en cuenta. Narra la mala experiencia que vivió con una entrada VIP en el partido entre el Athletic y el Dínamo de Bucarest: el precio rebajado del pase no mantenía las condiciones normales de catering, con lo que la supuesta oferta era un cambio de condiciones en toda regla, lo que indignó a Segurola y al resto de clientes, varios visitantes, que se llevaron una mala imagen del club.

El Athletic responde pero no repara

Galder Segurola también ha publicado la respuesta que le ha dado el Club: en una carta sin firmar básicamente le dicen que el problema es suyo por creer que las condiciones se mantenían y que, no obstante, aprenderán de la queja (que Segurola ha dirigido igualmente a Consumo). ¿Y la reparación a los clientes? El afectado es además socio y podía haber entrado al campo sin pagar otros 70 euros. Últimamente parece que el Athletic está perdiendo el respeto a sus verdaderos propietarios.

Sí, parecemos tontos

Tengo la sensación de que cuando intento explicar a alguien que no tiene Twitter la actualidad de esta red social me miran como si fuésemos tontos. ¿De verdad que dedicamos tiempo a debates tan irrelevantes? Me alivia pensar que dentro de Twitter, usuarios como El Cojo de Lepanto (27.300 seguidores) también aprecian el bajo nivel que estamos alcanzando: esta semana la foto de una socorrista atractiva en Gijón se ha convertido en la mayor muestra de machismo.

Mala política

Ni vieja ni nueva: airear los trapos sucios de un partido y, sobre todo, que estos consistan en rencillas personales elevadas a categoría de lucha de bandos, grupos o familias, todo ello forma parte de la mala política. Y la practica Pablo Echenique, el más sobrevalorado de los representantes públicos actuales: en Twitter le han caído críticas por intentar arrinconar a Fernando Barredo, que en Vistalegre dejó en evidencia delante de todo el mundo su gestión como cargo interno.

Otro tuit que sobra

Gorka Knörr me respondía en Twitter, precisamente, que la gravedad de la frase de Andrea Levy era que el PP había despreciado repetidamente a Lorca. Y no le falta razón, pero creo sinceramente que Levy, que asegura que La Casa de Bernarda Alba le convirtió en revolucionaria, vive de espaldas al pasado hasta para despreciarlo, como toda esa generación de jóvenes “populares”. Y si Levy lee a Lorca es un avance, ¡igual hasta lo valora!, por lo que tuits como el de IU, riéndose de ella, sobran.

Kempes afea a Maradona

Lo grande que fue Maradona como futbolista (yo solo lo he visto en imágenes grabadas) y como icono (eso es indiscutible) se ha diluido: como entrenador ha sido un fracaso y como prescriptor político, peor. Defensor del régimen cubano se ha ofrecido a Maduro ahora como soldado de Venezuela. Mario Kempes le ha respondido en Twitter lamentando la posición de “el pelusa”, que no se ha puesto del lado de los 124 muertos durante las manifestaciones contra el chavismo.

Trump ni se molesta

Con casi 700.000 seguidores, la parodia española del dictador de Corea del Norte es una de las estrellas de Twitter en castellano. Y lo ha conseguido gracias a respuestas satíricas como la que dirigió a Donald Trump: “Te voy a dejar Washington que va a parecer Desembarco del Rey, payaso”, sobre la guerra que está dispuesto a iniciar el estadounidense contra una dictadura de chiste que ha sido obviada por todos sus antecesores hasta Nixon. Pero Trump necesita su guerra y no se molesta en crear un enemigo.

La «true left»

El periodista Miquel Roig cogió carrerilla en Twitter y denunció varios casos previos en los que integrantes de esa “true left” o “verdadera izquierda” como Espinar o Monedero han apelado al fin de sus ganancias para excusarlas. Esta vez el desencadenante era la excusa de Joan Ribet, al que han pillado con un piso turístico. El exconcejal de la CUP dice que con lo que saca paga la hipoteca. Como si todos menos ellos fuéramos especuladores y su piso turístico una ONG.

Nacidos para amasar

Otro que nos toma por tontos es Pablo Iglesias, que defiende los 12 millones de beneficio de Podemos asegurando que es porque gestionan mejor. No, no lo hacen: Podemos gestiona de una manera diferente, gestiona para amasar. Y si malos son los políticos millonarios, no son mejores los partidos ricos. Los microcréditos, las mordidas a los representantes y el beneficio por voto materializado dispara a Podemos, que en el último CIS gana solo entre los votantes de clases altas.

Patadas policiales

Desconozco qué método tenían que haber seguido los agentes que se vieron desbordados en Ceuta por el paso masivo de inmigrantes ilegales, pero el vídeo de los policías a porrazos y patadas contra esas personas no me parece defendible. En algunos medios incluso el agente con la tibia y el peroné fracturados parece una víctima, pero en las imágenes se le ve soltando patadas a los inmigrantes hasta que en una de ellas se rompe la pierna. Por lo menos, esta vez no les han disparado.

Miguel Bosé se equivoca

Miguel Bosé se equivoca cuando compara los currículum de Nicolás Maduro y Lepoldo López: que el actual presidente de Venezuela condujera un autobús y el líder de la oposición tenga un título por Harvard no es significativo. De hecho, me hace recelar más la biografía de López que la de Maduro. El chavismo y su líder hoy son suficientemente déspotas como para limitarnos a contar la verdad que seamos capaces de extraer de las montañas de mierda informativa que nos llegan.

¿Más que un club?

Evidentemente, no soy objetivo: el FC Barcelona ha sido el rival más importante del Athletic en los últimos diez años. Pero soy capaz de empatizar con parte de esa afición que siente que uno de sus mejores jugadores se ha marchado traicionándoles: en Bilbao también nos pasó. Lo que no me parece excusable es que el lunes cantaran “Neymar, muérete” en una parte de las gradas, y menos cuando el rival era el Chapecoense brasileño, que enterró a 19 jugadores en noviembre.

Otra vez

Sobran por completo en este país (ponga aquí el que quiera) quienes coaccionan, quienes no han entendido que la época del amedrentamiento ha pasado, quienes no son capaces de darse cuenta de que no funciona, de que somos más los que hacemos frente a los del spray, la cara tapada y la nocturnidad. Se acabó. Y si para algunos no ha terminado que los que les han enseñado a meter miedo se lo expliquen porque este país, Euskadi, necesita descansar.

Qué pena, Venezuela

Los debates sobre Venezuela a este lado del charco son una tontería. El drama está allí, con un presidente indolente dispuesto a todo para perpetuarse en el poder y dirigentes haciéndose ricos. A la derecha, la oligarquía con un apoyo internacional que genera recelo. Y en medio, el pueblo empobrecido y en una espiral de violencia que dura ya décadas. Mientras tanto, en el lado tranquilo del mundo, discutimos en Twitter y justificamos lo injustificable en ambos bandos. Qué pena.

La broma pesada del “salario ético”

Empezamos por el principio: el tesorero de Podemos reconoció que los eurodiputados, diputados y senadores de Podemos que cumplen la norma de los tres SMI para calcular el sueldo son los menos. Y en los ayuntamientos, como el de Barcelona reconocen que fue una medida de campaña y equivocada. La idea, personalmente, siempre me pareció un error: se trata de que en política estén los mejores y sin tentaciones (se les supone, pero mejor asegurarnos).

Ganas de tener razón

Este gobierno de Rajoy ya ha dado alguna muestra de no estar suficientemente pegado a la innovación tecnológica, pero creo que en el caso del agujero de seguridad de Lexnet hay cierta exageración por parte del sector. Es cierto que hay una llamada de atención en la comunicación de la Guardia Civil al informante del “gap” pero, ¿qué esperaban, una recompensa de un millón de euros y una medalla? Es necesario ser crítico pero también realista.

La foto de Gatlin y Bolt

Supongo que no es casualidad que estemos asistiendo a la aparición y confirmación de estrellas del deporte en un montón de disciplinas: fútbol, fútbol americano, tenis o atletismo. Usain Bolt, como Roger Federer, Tom Brady o Leo Messi son el fruto de la ciencia aplicada al deporte, pero son mitos de nuestro tiempo en cualquier caso: Justin Gatlin supo ganar al más rápido el día de su despedida y reconocer a la figura deportiva a la que había batido. Deporte del bueno, del que emociona.