Pues se te han muerto a puñados, Isabel

Twitter lo soporta todo. Por ejemplo, puede salir Isabel Díaz Ayuso con esto: “Los cierres y confinamientos no han servido para evitar muertes, pero han causado daños económicos y sociales. Conclusión de un grupo de investigadores de la Johns Hopkins. Teníamos razón. Madrid Abierto es lo mejor para hacer frente a la pandemia”, y lograr un montón de aplausos. Pero como bien le corrige Javier Padilla, la de Madrid es la comunidad en la que más aumentó la mortalidad durante la pandemia con diferencia. Un incremento en la variación que es el reflejo de una política irresponsable pero más retuiteable que la vasca.

Iker cierra el círculo pero sin misterio

Iker Jiménez empezó con un programa bastante friki y con cierto atractivo para quienes se sentían fascinados por lo paranormal. Ya con Internet, fue más lejos y usó su popularidad para enmarcar debates como le gusta a la extrema derecha. De ahí al negacionismo y las mierdas sobre el coronavirus solo había un pequeño paso. Y lo último son “los NFT de Metamilenio”. ¿Que qué es eso? Otro invento con forma de pirámide pero no de las que pueden haber construido los marcianos, sino de las que generan beneficio económico gracias a incautos y con propagandistas como colaboradores necesarios.

A Casado se le chafa el plan

Sigo hablando de la derecha y la extrema derecha españolas: a Casado se le ha torcido el plan antes de completar la primera fase. Como muchos anticipamos, su escalada de procesos electorales antes de las Generales solo va a ligarle aún más a Vox, y esa carta de presentación para postularse como alternativa de Sánchez es tirando a muy mala. Pues bien, acaba de empezar la campaña en Castilla y León, y los sondeos ya apuntan a que el PP dependerá de la extrema derecha. Algo que estaba cantado salvo en Génova 13 y la cabeza de un Casado que empieza a oler a quemado, además de a rancio, como siempre.

La jueza para la que el euskera es difícil

Ana María Martínez Navas es la jueza que ha decidido que el derecho de una funcionaria debe prevalecer sobre el de las personas que puedan necesitar el servicio y que, por cierto, pagan el sueldo y las ayudas a las que la trabajadora haya podido acogerse para estudiar un idioma que se le ha hecho difícil. Y como es difícil, que lo dicen en Internet, según la jueza, y la funcionaria tiene más de 45 años, no tiene por qué aprenderlo. ¿Y los derechos lingüísticos de quienes en Laudio quieran dirigirse a la administración en euskera porque es el idioma que mejor manejan? Pues como son superdotados, en opinión de la jueza, tendrán que arreglarse.

Hoy es un gran día en Bilbao

El de hoy es un gran día en Bilbao, un día de expectación, de nervios, de bufandas que asoman entre los abrigos y las americanas, y en los maletines de trabajo, y de calentar motores (es posible hacerlo con respeto a las medidas anticovid, sí). Esta noche, San Mamés será una caldera: no notaremos el frío y quienes vayamos intentaremos que tampoco se note el aforo limitado… Ni a quienes están subastando on-line su asiento, que puede ser ocupado por algún aficionado al Real Madrid. Tengo mis dudas sobre lo que reclaman los del Gazte Abonoa, pero no tengo ninguna sobre lo mal que me parece ese mercadeo de algunos socios.

Otra compañera

Si hay una profesión poco valorada incluso por quien la paga es la de periodista. Por desgracia, de vez en cuando recibimos mazazos que nos recuerdan que algunas compañeras y algunos compañeros siguen haciendo una labor importante y muy incómoda para quien ejerce el poder, legal o ilegalmente: “Matan a tiros a una periodista mexicana en Tijuana, la tercera asesinada en lo que va de año” (Público). La realidad de aquellas compañeras y compañeros es muy dura, y como en Tijuana, en muchas partes del mundo. Hasta hace poco, en Euskadi, ETA también atentaba contra los periodistas. Ojalá no perdamos nunca de vista esto.

¡Claro que no lo somos!

En El Blog Salmón han dado un buen repaso al plan del gobierno más progresista de la historia para que las y los trabajadores autónomos paguemos la fiesta que otros colectivos mejor organizados sindicalmente montan. El problema, según el ministerio, es que “el 85% de los autónomos cotiza por la base mínima” pero es que “esta supone más que lo que pagan nuestros vecinos europeos” y “con menos protección social”. Porque el de los autónomos es un colectivo de menor derecho: sin vacaciones, sin facilidad alguna para una baja por enfermedad o sin indemnizaciones. Y la subida no recoge una mejora en nada de esto.

Son nazis porque hacen cosas de nazis

Esta semana que Santiago Abascal ha hecho de anfitrión de los principales partidos de extrema derecha de toda Europa es una de las mejores para compartir el titular en Eldiario.es: “El Supremo recuerda a Vox que compararles con los nazis no es un delito de odio”. Así que llamarles por su nombre ya pasa a ser una obligación. No hay excusa para que ningún periodista, contertulio o político sea taimado con los más xenófobos, machistas y clasistas del panorama. A menos, claro está, que quien sea templado con la ultraderecha lo haga porque forma parte de ella o por colaboracionismo. Y ante eso, tomaremos nota.

Nunca se ha ido

Pablo Iglesias no se ha ido, no se ha retirado de la política: sigue haciéndola. Ahora, desde los púlpitos de los medios de comunicación que le ceden un micrófono y tiempo, en vez de desde la tribuna del Congreso o un atril de su partido. Sigue ahí, marcando la agenda y los enfoques de Podemos, eclipsando a Ione Belarra y Yolanda Díaz. Y por supuesto, preparado para regresar a la arena del circo: “Podemos otea la vuelta de Iglesias a la política si la plataforma de Díaz fracasa. El sentir de algunas fuentes moradas de peso y de gran parte de la militancia es que el exlíder ‘se ha ido, pero no’” (Vozpópuli).

Brakamendi, eup!

Cuando el Athletic está en una mala posición liguera su filosofía salta al debate público. Cuando el Athletic se convierte en una piedra en el camino (el de la Federación para mandar a Arabia Saudí al Real Madrid, en este caso), su filosofía se convierte en herramienta de desestabilización. Esta semana hemos sido otra vez un club en el que los niños del mundo no pueden aspirar a jugar. En esta situación, el boliviano Iñaki Brakamendi ha dejado claro lo que sí somos: “Una de la razones por la que amo este club es su filosofía. ¡Somos únicos en este fútbol moderno y trucho! ¡Y ojo! Cuando mi hijo nazca en Euskadi jugará en el Athletic”.

¿Sin Pla no hay paz?

Como periodista en Euskadi tengo una responsabilidad: que los que blanquean el relato de ETA no nos cuelen sus mierdas. Por ejemplo: “Otegi afirma que sin figuras como David Plá, último jefe de ETA, ‘la paz no hubiera sido posible’”, titula Mikel Segovia en El Independiente. Partimos de la base de que el líder de Bildu se tiene a sí mismo como el Mandela vasco. Con esos cimientos y con las manos del exjefe de ETA tienen que construir el edificio que guardará el relato de la izquierda abertzale. Una cosa es que traguemos y aceptemos que ETA sigue teniendo mando en Sortu, otra que nos guste y otra que nos tomen por tontos.

El gobierno más progresista de la historia

Pues es el gobierno más progresista de la historia el que quieren desangrar a las y los trabajadores autónomos para seguir contentando a los sindicatos del funcionariado, y el que “se apoyará en los expertos para justificar subidas del diésel y billetes de avión” (Vozpópuli). O lo que es lo mismo: transportistas y personas que aprovecharon las ofertas para comprar un vehículo van a ver cómo el gobierno les ha elegido para pagar una parte mayor de la fiesta. Y por supuesto, lo de viajar en avión se ha acabado: volverá a ser una opción exclusiva de quien pueda permitírselo. Los demás, hasta donde lleguemos en bici eléctrica.

Pues ya estamos en campaña

Ya estamos en campaña: Castilla y León elige su parlamento autonómico porque Pablo Casado ha decidido generar un ciclo ganador del PP que le atará a Vox mucho antes de que tenga la oportunidad de llegar a Moncloa. ¿Y cómo hemos entrado? Pues con un tuit de Pablo Iglesias en el que presumía de manejar información privilegiada del CIS. Unos números, por cierto, con una clara intencionalidad: mostrar un empate entre PSOE y PP que no refleja ninguna otra encuesta para activar el voto socialista. Es decir: ¿un organismo público está para hacer palanca y anticipa información a un ciudadano (lo que es hoy Iglesias)?

La guerra global (que pagamos los de siempre)

“La amenaza de guerra entre Rusia y Ucrania ya ha hecho subir el precio del gas el 18%: el riesgo que supone para la economía una posible contienda”. Así de claros son en El Blog Salmón. En esta época en la que todo se globaliza, también las guerras, lo que seguro que nos toca es pagar una parte de la factura a los de siempre. Lo que me gustaría saber es qué piensan del tema quienes no quieren que exploremos los recursos gasísticos que hay bajo nuestros pies y prefieren mantener gasoductos, estar en manos de Rusia o Araba Saudí y que las exploraciones se hagan el “backyard” de otros. Todo muy solidario.

¿No es un poco pronto?

Como hooligan del Atlhetic que soy me preocupa bastante el goteo de tuits que he visto esta semana, con cortes de entrevistas que han ido concediendo el entrenador y varios jugadores de la primera plantilla, todos ellos con un tono autocomplaciente que no parece recomendable a mitad de temporada, precisamente. Además, estamos despreciando un pasado reciente muy importante. Pero más importante es el partido de este jueves, porque es futuro, porque estamos llegando con más celebración que tensión y porque eso solo beneficia al Real Madrid, equipo de la cuidad donde, por cierto, más entrevistas han pedido y el Club ha concedido.

Sí, lo normal es perder

Soy del Athletic, eso quiere decir que he disfrutado de diez finales desde 2009. Eso es un privilegio para cualquiera y la mayoría de personas aficionadas al fútbol de todo el mundo se pondrían en nuestra piel, digan lo que digan. Así que, no, no me considero seguidor de un equipo perdedor. Al contrario. Pero el deporte ayuda a explicar (y yo lo hago con mi hija y mi hijo) esto que dice Iñaki Williams y recogen en Sphera Sports: “Le he dicho a los jóvenes que en la vida se pierde más que se gana. Hay que seguir peleando, esto es el Athletic”. Y no es solo una lección deportiva, se trata de una lección de vida.

Una generación afortunada

Precisamente para las y los más pequeños de la casa el Athletic es un equipo que, de vez en cuando, les da una alegría en forma de final. Para el resto se parece más a esto que tuiteaba el guionista vasco Raúl Díaz: “Me pasé 24 años sin ver una final del Athletic y hoy mis hijos van a ver la cuarta en un año. Me dices esto a finales de los noventa y lo flipo”. No soy conformista, de hecho, la derrota contra la Real en la Copa rompió algo en mi relación con el Club. Pese a las decepciones me empeño en poner en valor lo que estamos viviendo: estamos, ganamos, llegamos y disfrutamos siendo un caso único en el mundo. Mejórame eso.

Ojalá volvamos

No estoy de acuerdo con que el Athletic no puede volver a Arabia Saudí: ojalá lo haga porque eso significa que ha sido finalista en la Copa, otra vez, o ha acabado entre los dos primeros de la Liga. El problema que ha generado la RFEF no es extensible al club: tanto Copa como Supercopa han sido diseñadas para beneficiar económica y deportivamente a Real Madrid y FC Barcelona. A Rubiales no le ha importado blanquear un régimen y menos le preocupa el desequilibrio: allí quieren ver a los dos grandes y les animan, aunque sea con camisetas con las cruces de los escudos eliminadas, como muestra Aitor Lagunas en Twitter.

Otra noticia “deportiva”

La agresión a un jugador del Sevilla en el campo del Betis, donde se coló un seguidor con una barra o un bastón y pudo lanzarlo al campo, es la otra noticia que ha dado el fútbol el fin de semana sin ser deportiva, más bien, todo lo contrario. Como no ha sido deportivo el gesto de Jordan, exagerando el impacto, ni el de Lopetegi, instándole a hacerlo. Sí, es posible que todo lo sucedido te parezca mal, pero es evidente que lo más grave es el fallo de seguridad y el idiota que se animó al lanzamiento de jabalina. Endika Río lo expresaba así en Twitter: “Marca un gol tu equipo y te dedicas a lanzar objetos al rival. Hay que ser muy tonto. Pero mucho, eh”.

Bye-bye, Novak

“La gran noticia del día es que a Djokovic lo han tratado igual que a ti o a mí”, tuiteaba Stéphane M. Grueso después de conocer que el gobierno australiano negaba al tenista serbio el permiso para estar en el país. Es decir, ni para jugar al tenis ni para jugar a la brisca después de comer en una terraza. Y el gobierno francés ha ido detrás: tampoco podrá jugar en París. Unas decisiones que merecen un aplauso: ser peligroso e insolidario en plena pandemia mundial no es solo un asunto personal (lo estúpido que puede llegar a ser alguien), también lo es de comportamiento colectivo y de modelo de sociedad. De esto va.

El Athletic de siempre

La imagen de lo que es el Athletic, de lo que es jugar con los de casa, es la de la foto en Twitter de la madre de Iñaki y Nico Williams celebrando con sus hijos el pase a la final y el protagonismo del pequeño de estos dos hermanos que ya han hecho historia. Y que esa imagen sea la de una familia inmigrante, acogida en Bilbao como tantas otras e integrada en la sociedad vasca como una más, además de un motivo de orgullo, es un sopapo a quienes han acusado al Athletic de un clasismo que ellos mismos adolecen. Los Williams reparten goles, emoción y ejemplo de lo que podemos y debemos ser.

Hacemos historia

Pase lo que pase hoy seguiremos haciendo historia: somos un equipo único en el mundo que, además, pasa por un momento muy ilusionante: las estrellas del presente y el futuro son made in Lezama. Empezando por los hermanos Williams y el capitán, Iker Muniain, y siguiendo por Yeray, Villalibre, Vencedor, Simón, Vivian, Zarraga, Serrano… Y los que descubriremos en los próximos años. Este equipo, formado por apellidos que podrían ser los de nuestros compañeros de colegio, compite contra los mejores de la liga española y contra el mundo entero, empeñado en buscar atajos para globalizar el mercado y el negocio.

Y somos los campeones

Hoy el Athletic sale a defender el título de la Supercopa contra el Real Madrid. No se ha clasificado ganando solo un partido: lo ha hecho llegando a la final de Copa, la segunda consecutiva, además. Así que Aduriz hizo bien en rectificar el tuit de Movistar, que tiene la responsabilidad de emitir los partidos, después de la semifinal, y en recordar que “el vigente campeón vuelve a plantarse en la final. Así mejor”. Es lo que somos: un equipo campeón. Lo hemos demostrado durante más de 120 años, el año pasado ganando al Barcelona con todo merecimiento, el miércoles remontando al Atlético, y lo volveremos a hacer.

No todo es dinero

El fútbol es un deporte precioso, un fenómeno social único, una caja de resonancia de sentimientos y un negocio del que se ha apropiado una banda de canallas que solo piensa en generar cantidades infames de dinero para quedarse con una parte del pastel. Esta Supercopa que se celebra en Riad es indignante y debería de ser intolerable: alguien debería de controlar a quienes mueven los millones. Pero lo peor, sin duda, es el recochineo de Rubiales y la Federación que hablaba de celebrar con “los tuyos” la clasificación para la final. Como bien les recordaban desde la revista Líbero: “Los suyos están a 7.000 km.”.

Al servicio de los ricos

Todo está mal en esta Supercopa, empezando por lo importante, la operación de blanqueo que ha comprado el régimen de Arabia Saudí, y siguiendo por el hecho incontestable de que la RFEF ha diseñado una copa y una supercopa a la medida de Real Madrid, Atlético y Barcelona. A la medida deportiva y económica: por el morro, porque sí, por el nombre y no los méritos, estas entidades se llevarán más dinero que el pobre invitado a la mesa, que es lo que parece el actual campeón. Es obligación de la familia rojiblanca, desde Nico Williams al socio más reciente, como la resistencia que somos, fastidiarles el plan. Aupa, Athletic!