Por lo menos, tienen para comer

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Ayer les hablábamos de cómo los abogados de la infanta Cristina están dispuestos a arrojar toda la carga de la culpa sobre Iñaki Urdangarín, al que acusan de engañar a la hermana del Rey, que no leía lo que firmaba. Hoy les contamos que el matrimonio, al parecer felizmente avenido, y sus cuatro hijos, han cenado recientemente en un restaurante con una estrella Michelín, en La Toscana. Según ‘Vanitatis’, el local tiene fama de caro, pero eso no fue problema para que Urdangarín, que se declara “insolvente” delante del juez, pagara la cuenta.

Rosa Díez, cada vez más sola

Todos podíamos pensar que en UPyD no irían bien las cosas después de que se constatara el rechazo de los votantes en Andalucía, pero pocos pensábamos que el partido estallara en tantos pedazos tan pronto. La fuga de Toni Cantó, además, podría ser una detonación tardía que se lleve por delante lo poco que quede del partido de Rosa Díez. En ‘Vozpópuli’ adelantan el paso del actor a Ciudadanos y, con él, cuadros, afiliados y votantes.

Alberto Garzón no se pasa por Bilbao

El líder de IU, cuyo liderato, por otro lado, está siendo fuertemente cuestionado desde dentro, según varios digitales, intenta mostrar fortaleza: él manda y él no va a dejar que el partido desaparezca fagocitado por Podemos. Pero Garzón parece que hace tiempo que no se pasa por Bilbao, donde Ezker Anitza ya ha anunciado que concurrirá con Podemos a la alcaldía, dejando sin elección a quienes, como Garzón, no consideran la de Iglesias su opción.

Y el juez Garzón, con sus causas

Otro Garzón, en este caso el juez, es noticia en ‘Libremercado’ por su relación con Diego Salazar. Sobre este empresario venezolano planea la sombra del enriquecimiento ilícito (y millonario) con la nacionalización y posteriores negocios de Petróleos de Venezuela, empresa que dirigió un primo suyo, Rafael Ramírez Carreño, hoy embajador de Venezuela ante la ONU. El nombre de Garzón ha salido a la luz porque fue contratado para intentar desbloquear las cuentas de Salazar en Andorra, donde estaba siendo investigado.

El Internet de “las cosas”

Me ha gustado mucho el enfoque de mi compañero de tertulia en ‘Onda Vasca’, Gaizka Manero, sobre uno de los últimos inventos de ese sector que llaman “el Internet de las cosas”. O lo que es lo mismo: objetos conectados a Internet que realizan acciones automáticamente. Manero pone el foco sobre unos imanes de nevera que, conectados con la tienda de Amazon, permitirán avisar al fabricante de que se nos están acabando: “El consumismo con forma de botón”, así lo define en su blog.