Irán quiere ejecutar a manifestantes

No podemos mirar para otro lado pero, ¿debemos hacer algo? ¿Qué? ¿Intervenir? ¿Quién? ¿En nombre de qué, en nombre de quién? Como sea, pero no podemos permitir que un gobierno imponga su terror a la ciudadanía: lo hace Irán, cuyo parlamento, si es que se le puede llamar así, propone aplicar la pena de muerte a las y los manifestantes que han sido detenidos durante las protestas después del asesinato de Mahsa Amini. Tenemos que ayudar a esas personas cuya vida depende ahora de la voluntad de su gobierno de escarmentar a quien quiera hacerle frente. Si no lo hacemos nuestra civilización no tendrá sentido.

La que ha liado Musk

Cobrar ocho dólares al mes por una verificación casi idéntica a la que antes de la compra de Musk otorgaba Twitter a organizaciones o personalidades puede salirle caro a la plataforma si prosperan las demandas de empresas que quieren cargar contra la red social las pérdidas en bolsa por anuncios falsos desde cuentas que han contado con esa verificación de pago. Hablamos de tecnológicas y farmacéuticas que han sufrido suplantaciones burdas que han colado porque en Twitter, no nos engañemos, puedes y podías colar cualquier mierda también antes de Musk. Solo que ahora, además, puedes hacerlo con un “tic” de pago.

Todos menos él tenemos la culpa

Una cosa muy de niñato es echar la culpa a los demás de todo lo que suceda. Es lo que hace Elon Musk cuando un senador estadounidense se queja, precisamente, de una suplantación. Es el dueño de Twitter, en persona, el que le responde justificando que se hayan podido hacer pasar por él porque la cuenta de Ed Markey suena a parodia, según el propio Musk. Ni una pequeña muestra de autocrítica, ni pensar en una disculpa: él no ha hecho nada malo aunque su primera idea recaudatoria haya sido, evidentemente, un fracaso notable que le puede salir caro en lo económico y en lo político. Y eso son negocios. Los negocios de Musk.

No es casualidad

El hombre más rico del mundo ha hecho públicas varias veces, la última, recientemente, su preferencia por el partido republicano en EE.UU., lo que no extraña mucho, precisamente, en un hombre rico y blanco. Y Ed Markey, el senador al que Musk respondía con suficiencia, es demócrata. No es una casualidad, como no lo es que muestre tanta mala leche cuando parece que se confirma que los de Markey y Biden retendrán el control del senado por la mínima: 50 senadores serán azules (demócratas) y 49, rojos (republicanos). El mundo será un poco mejor cuando se confirme esa noticia y, con ella, un grave tropiezo de Trump. Y de Musk.

“El agente”

Según la exclusiva de El Mundo que recogen en República, Kosmos, la empresa de Gerard Piqué podría facturar hasta 24 millones de euros por la venta a Arabi Saudí de la Supercopa de España. 30 al año (y son seis años) se lleva la RFEF, pero hay una “tarifa de éxito” a un “agente” (que podría ser Kosmos, según el diario y el digital) que se lleva cuatro con cada edición. Un negocio redondo basado en la venta de un torneo a unos señores muy, muy ricos, que desean ver eventos deportivos en directo sin que les molesten sus mujeres. Y cuya comercialización pudo aventurar muy bien Piqué porque el mundo y el fútbol son para los ricos.

¿Pagar por Twitter?

Elon Musk ya ha avisado de que Twitter puede caer en la bancarrota, de que van a hacer todo tipo de pruebas con la herramienta hasta que den con lo que funcione, que las y los trabajadores van a tener que darlo todo (ya era latiguero en Tesla) porque sigue sobrando gente, y que las y los usuarios vamos a tener que pasar por caja. Ese día saldré de Twitter. El guionista portugalujo Raúl Díaz, como es habitual, lo ha escrito mejor que yo: “Sobre pagar por Twitter Blue solo puedo decir que ya me parece mal estar aquí escribiendo gratis”. De momento, el plan para que Musk haga que su mayor inversión pierda todo su valor funciona.

¿Qué puede salir mal?

Por lo que hemos leído en la cuenta en Twitter de Elon Musk desde que compró la red social podemos suponer que nadie se atreve a sugerirle que se equivoca, que las cosas no son como él cree y le falta información, ni a avisarle de que está haciendo el ridículo. Así que el hombre más rico del mundo (ahora ya sabemos que no lo ha conseguido con sus grandes ideas) sigue a lo suyo. ¿Y qué es “lo suyo”? Ícaro Moyano destaca: “Esto es lo que más me interesa de todo lo de Musk por ahora: amenaza a los anunciantes y desprecia a los periodistas”. No parece la mejor receta para recuperar su inversión, pero esta es solo una buena noticia.

No podemos seguir así

El planeta crece a un ritmo extraordinario: ya somos 8.000 millones de personas con sus propias necesidades (alimentarse, beber agua potable, respirar, abrigarse, etc.). Y la Tierra no da más de sí, lo sabemos porque nos lo han dicho y porque lo estamos sufriendo, con una pandemia mundial y un calentamiento global innegables y peligrosísimos. El planeta se defiende de nosotros, lo tengo claro. Como civilización, si queremos dejar algo a nuestras hijas e hijos, tenemos que hacer un cambio en nuestros modelos de consumo y de negocio, en nuestras prioridades personales y colectivas, en nuestra propia supervivencia.

Claro que sí, guapis

“Piqué i Clara Chía valoren residir a Andorra per fugir de la pressió mediática”, leemos en el Ara. Si llegan a esperar pueden poner la excusa de no tener que sentir el contacto de los 8.000 millones de personas. Porque todos menos ellos somos idiotas y nos creemos todo. Ahora que el exjugador de fútbol se pasa a ser empresario, casualidad, nota la presión mediática (esa de la que se queja tanto porque es mejor que le haga las preguntas su empleado Ibai en Twitch). De la presión fiscal para sus business no dice nada, claro, porque hablar de dinero queda feo. Cada día que pasa tengo más claro que Piqué es el Elon Musk del fútbol.

Vocaliza

Soy un viejo cascarrabias (en realidad, siempre lo he sido, por eso me invitaron a escribir esta columna) y por eso no entiendo el empeño de algunas y algunos cantantes en parecer idiotas. No solo cuando cantan, también cuando hablan e incluso cuando escriben en sus redes sociales (o escriben en su nombre como si fueran gilipollas). No lo entiendo, de verdad. Que beban si quieren, como los viejos rockeros, pero que escriban bien. Así que cuando escuché en Twitter la canción “Vocaliza, coño, vocaliza” de Muchapepper casi me levanto a aplaudir. Como dice la canción, hablar como si tuvieras una patata en la boca no es tener “flow”.

Evidente

Solo necesitábamos ojos en la cara, pero está bien que la ciencia haya ratificado lo que ya intuíamos: “Un estudio en Reino Unido refleja que la ‘élite contaminante’ alimenta la crisis climática” (Nius). Dicho de otro modo: “Una persona con bajos ingresos necesita 26 años para producir el mismo dióxido de carbono que el que produce una persona rica en un solo año. Volar, conducir coches de lujo, tener varias casas o comprar artículos importados, son razones por las que los más ricos generan huellas de carbono más altas”. Por cierto, el estudio considera “rica” a una persona que gana 190.000 € o más al año.

Injustificable

Somos unas y unos afortunados y, aún así, vamos a pasarlo mal con la incertidumbre laboral y la innegable carestía de la vida. Es esa certeza la que hace que estemos dispuestos a indignarnos con noticias como esta: “Iberdrola recompensará a sus directivos con 200 millones de euros por lograr beneficios récord” (La Última Hora). Si eso no es suficiente para que nos encendamos, hay más: “Ignacio Sánchez Galán será también premiado con 1,9 millones de acciones, que, a precio de mercado, suman 19,3 millones de euros”. Esto es injustificable, se mire por donde se mire. Y señalarlo es una obligación moral.

Yo veo un imbécil

“La gente pobre ve una multa, yo un parking VIP”. Esto lo dice Luke Desmaris, “el millonario al que le da igual pagar 8.000 euros por aparcar su BMW donde quiere” en Londres. Desmaris asegura que gana 100.000 euros al mes haciendo inversiones. Y farda de ello en sus redes sociales. Su actuación ha reabierto un bonito debate: ¿deben ser las multas proporcionales a la renta, como en Suiza o Finlandia? Creo que la respuesta es evidente. En Motorpasión también rescatan la multa de circulación más cara: “El directivo de Nokia, Anssi Vanjoki, fue sancionado con una multa de 116.000 euros por circular a 75 km/h por una zona delimitada a 50”.

También lloran

Elon Musk ha despedido a la mitad de la plantilla de Twitter pero, lejos de lo que pudiera parecer, los ajustes de personal se han vuelto habituales en las grandes empresas tecnológicas. El motivo es que incluso las que tenían un modelo de negocio exitoso están viendo sus números pasar a rojo (aunque con tesorerías milmillonarias): solo en lo que va de año Microsoft ha perdido en bolsa 780.000 millones de dólares; Amazon, 720.000 millones; Alphabet (Google), 680.000 millones; Meta (Facebook, Instagram y WhastApp), 640.000 millones; Tesla, 580.000 millones; Apple, 480.000 millones; y Netflix, 130.000 millones.

China se hace más grande

Con dinero público a chorro todo es más fácil. Esa es la política de China, básicamente, aplaudida por comunistas trasnochados y neoliberales que trasnochan: “Las ‘islas artificiales’ de China son una pieza clave para su estrategia expansionista” (Magnet). “Surgieron de la nada en los últimos seis años” y las construyeron “para levantar centros industriales, financieros y lo que es más preocupante, bases militares”. En Port City “el objetivo es hacer de este pedazo de tierra una especie de mini Dubái moderno en Sri Lanka”. En “las islas Spratly, entre Filipinas y Vietnam, reúne aeronaves pesadas y misiles a la espera de una contienda”.

Sin rumbo

Junts tiene todo el derecho a estar en desacuerdo con EAJ-PNV. Tiene todo el derecho a reclamar la oficialidad de todas las selecciones catalanas inmediatamente. Tiene todo el derecho tomar sus decisiones o a enviarlas a Waterloo. Y a decidir que su vehículo, sin rumbo ni conductor, aguantará sobre la carretera lo que tarden en llegar las primeras curvas peligrosas antes de despeñarse. Pero no tiene derecho a señalar un avance como un retroceso ni a exponer a quien quiera al escarnio que a las y los de Junts les dé la gana. Dicen que cuesta mucho tiempo ganar la confianza y muy poco perderla. Es cierto.

Está claro

Está claro de qué bando no son los muertos de Núñez Feijóo cuando afirma que “la política debe centrarse en solucionar los problemas de los vivos y dejar a los muertos en paz”. Lordo va más allá en su comentario al titular en Twitter: “Imagina decir esto de las víctimas de ETA”. El líder del PP sigue enredado en la red que le ha echado encima la extrema derecha, empezando por la de su propio partido, y después de echarse atrás en la renovación del CGPJ sigue cometiendo errores: posicionarse con quienes defienden que un golpista sanguinario como Gonzalo Queipo de Llano merece un lugar de privilegio en una basílica lo es. Sin duda.

El hombre más rico del mundo vende así

El hombre más rico del mundo ha comprado Twitter, ha entrado en la sede con un lavabo en la mano (sigo sin entender el chiste) y ha tomado dos decisiones: despedir a la mitad de la plantilla y cobrar por un servicio “premium” que no parece aportar mucho. Ocho dólares al mes no parece una gran cantidad pero cambia la naturaleza de la herramienta. Lo que me sorprende es el tipo de venta que el propio Musk está haciendo de su idea, con memes, comparando su tarifa con lo que cuesta un café, y todo personalmente, desde su cuenta en Twitter. Sí, el hombre más rico del mundo vende así y el pobre soy yo.

Habla, Corinna, habla

Me está sorprendiendo que en la televisión española, especialmente, entre un rey emérito español que ha delinquido (se acogió a una regularización y el fiscal retiró sus acusaciones porque habían prescrito pero señalando con claridad indicios de delitos) y una ciudadana británica que ha anunciado que va a contar su relación personal y laboral con él, ya hayan tomado partido y haya sido a favor de Juan Carlos I. El velo parece que se ha rasgado pero sigue entero, son solo arañazos de gato pequeño. ¡Y eso que todavía no hemos oído nada de los podcast de Corinna Larsen, que parecen muy jugosos!

Piqué lo deja

Piqué deja el fútbol. Del buen central con un palmarés envidiable hace tiempo que nos despedimos porque hace tiempo que en el césped no lo es. Piqué lo deja cuando entra en vigor una ley del Deporte que no permite que un jugador haga negocios con las altas instancias del fútbol. Piqué lo deja después de humillar a su propio equipo (con el vídeo sobre Griezmann rechazando al Barça) y demostrar su soberbia, poco deportiva, en varios campos. Y no solo de juego. Piqué lo deja y yo solo puedo agradecerle el momento en el que se empeñó a agarrarse al pantalón de Iñaki Williams mientras este le arrastraba por la banda de San Mamés.

Vamos por el buen camino

Nuestra civilización solo tiene una oportunidad para salvarse: acabar con los ultrarricos que son, a la vez, quienes más contaminan. Por eso creo que es importante que entre todas y todos consigamos que Twitter pierda su valor, que cada dólar que ha gastado Elon Musk sea tirado por el desagüe. Ya encontraremos otro entretenimiento on-line y sus desarrolladores, por lo tanto, ya tendrán otras oportunidades laborales. En eso están, aunque crean justo lo contrario, los de la extrema derecha que celebran el posible retorno de Trump y los anuncios de un retrógrado disfrazado de Mesías como es el propio Musk.

Y en Europa, mejor

Espero y confío en que Europa, además, sea tan rígida con Twitter como lo ha sido con otras grandes tecnológicas, y obligue a la empresa a seguir pasando por su aro. El comisario de la Unión, Thierry Breton, advirtió al propio Twitter de que el pájaro volaría “libre” (como el nuevo dueño anunció en su cuenta) pero con las normas europeas dentro del continente. Sé que hemos explicado muy mal de qué va Europa todos estos años, por eso existe esta desafección, pero esta es una oportunidad estupenda para recordar que la UE nos dota de un marco y de unas garantías ciudadanas mayor que en cualquier otro lugar del mundo.

¿Hace falta recordarlo?

Me lo pregunto y me respondo: sí, hace falta recordar esto que tuiteaba Marcelino Madrigal: “A ver. A Elon Musk no le importa tu ideología, le importa tu dinero, OK? Pues eso”. Así que ya pueden ponerse tan contentos como quieran los reaccionarios (que salvo Trump y dos más han campado por Twitter libres, como su Cid), que si alguien va a ganar algo es el propio Musk manteniendo su atención, incrementando su actividad y colocándoles publicidad cuando no cuentas de pago para seguir a sus líderes. Y aún así creo que este modelo de negocio solo empobrecerá y radicalizará la red social, devaluándola como pasa con Facebook.

No se lo creen ni ellos

Voy a permitirme la comparación, pero creo que un acto en un Batzoki de pueblo en el 40 aniversario de su fundación al que lleven una ikurriña histórica y en el que cuenten con Aitor Esteban para dar una charla a la afiliación, tiene más repercusión, genera más entretenimiento y hasta favorece más emociones que el conjunto de actos del PSOE por el 40 aniversario del primer gobierno socialista en España, el de Felipe González. Sánchez ha volado tantos puentes con su partido que todo ha sido deslavazado y la sociedad no se ha contagiado nada de un evento histórico al que, aunque solo fuera como público, asistió.

El fantasma de las navidades pasadas

Me abruma el poder que adquirió José Manuel Villarejo. Tanto que era capaz de cobrar, supuestamente, siete millones por evitar una extradición a la vez que un abogado, que colaboraba en la maniobra, podía haberse llevado otros cinco. ¿Quién les pagaba doce millones de euros? ¿Por qué a ellos? ¿Qué trabajos habían hecho antes? ¿Para quién? ¿Quién les recomendaba? ¿Para qué? La pieza en El Periódico de España es muy interesante porque plantea las muchas preguntas a las que busca respuesta el tribunal, y ninguna de ellas coincide con las mías, por lo que aún queda mucha historia que contar. Sorprendentemente.