¿Cómo creían que iba a acabar?

Todavía no ha acabado: la legislatura en la que PP y Ciudadanos decidieron echarse a los brazos de Vox se les puede hacer muy larga a los dos primeros partidos si, como parece, los de extrema derecha les aprietan las tuercas cada día un poco más. “Si el PP vota contra la moción de censura, Vox pedirá entrar en los Gobiernos de Madrid y de Andalucía”, leemos en República.com. ¿Acaso se pensaban Casado y, entonces, Rivera, que los de Abascal iban a ser mansos? ¿No son los fascistas auténticos antisistema a los que no les importa que salten todos los resortes de estabilidad? ¿No han aprendido nada?

No, Sánchez, tú tampoco podrás domarlo

Para mi desgracia, esta semana tendré que leer y escribir sobre la moción de censura promovida por Vox. La fascistada siempre va a lo suyo, a desestabilizar. El gobierno español no parece nervioso: nadie cree que pueda salir, ni siquiera quienes la proponen (lo que muestra qué tipo de políticos son). De hecho, Sánchez parece satisfecho ante la que le ha montado Vox: sabe que enfrentarse a la extrema derecha aprieta sus filas y debilita a Casado, al que se le vuelve a esfumar intención de voto por la derecha. Pero que no se confunda el presidente español: él tampoco podrá domar a la bestia fascista.

Todos muertos salvo Díaz Ayuso

José María Lorenzo es asesor en la consejería de Educación del gobierno de Madrid, y para felicitar a Isabel Díaz Ayuso por su cumpleaños vía Twitter no se le ocurrió una idea mejor que pegar la cara de la presidenta en una pintura en la que únicamente Agustina de Aragón quedaba en pie, rodeada de cadáveres. Por si no fuera poco, al montaje ha añadido como un pegote la bandera de la comunidad de Madrid. Una “ideaza” que, como responde algún tuitero, en la cabeza de Lorenzo sería espectacular, pero que no pasa de ocurrencia, error mayúsculo y lamida de pies vergonzante.

¿Bulos… en una ficción?

Una de las derivadas lógicas de “la nueva política” son “los nuevos sindicatos”. Como los de la Policía, que se sitúan entre la derecha y la pared, y ya han dado muestra de su atrevimiento y, por extensión, su conocimiento de la vida. Sirva como ejemplo uno de sus últimos tuits de Jupol, en el que critican la serie ‘Antidisturbios’ porque, según ellos, está llena de “bulos”. No sé si alguien les ha dicho que se trata de una ficción y que, como tal, los autores pueden tomarse licencias… O reflejar la realidad con más libertad, que igual es lo que temen los del sindicato policial y por eso han lanzado su campaña.

Y el escudo del Athletic

Después de una victoria del Athletic la semana se encara mejor, aunque sea semana de moción de censura en Madrid. Y hasta podemos permitirnos rescatar un tuit del fin de semana que, no podía ser de otra manera, llamó poderosamente nuestra atención: en una serie coreana, Mr. Heart, para público juvenil (el título es bastante elocuente), andaban cortos de creatividad (o presupuesto, que suele ser lo mismo) y encasquetaron el escudo del Athletic a los chándales del instituto o universidad de turno. Lo difundió Crossing Viper en Twitter y, por supuesto, fue una noticia muy comentada… Con el alivio de la victoria.

Amanecer Dorado, primer aviso

¿Con qué amenaza Vox cuando responde al ministro José Luis Ábalos, que protesta en Twitter por un ataque a la escultura que recuerda a Largo Caballero, con este mensaje: “Derogad la Ley de Memoria Histórica. Primer aviso”? ¿Dónde está la fiscalía para actuar de oficio contra quien amenaza a un ministro y ataca a una norma básica como es la memoria de las víctimas del golpe de estado y la dictadura franquista? El primer aviso del que Vox tiene que tomar nota debería de ser el que ha dado la justicia griega con Amanecer Dorado, al que ha considerado organización criminal. Lo que son los fascistas.

Fascistas haciendo cosas nazis

Y si la fiscalía no actuó con el primer aviso porque en España ya se sabe que para las cosas de los herederos de Franco todos se ponen remolones, debería de haberlo hecho con el segundo aviso, que lo dio el diputado Juan José Aizcorbe (de Vox, por supuesto) nada menos que en el Congreso ayer: “Reitero la presentación de una proposición de derogación de la liberticida Ley de Memoria Histórica. Segundo aviso, señorías” (El Plural). Segundo aviso, ¿de qué? ¿Van a salir a quemar libros o a marcar puertas de casas con pintura? ¿Van a tomar las cortes con un golpe de estado y una guerra civil apoyados por Hungría y Polonia?

¿No les están regalando la oportunidad?

La reforma que proponen PSOE y Podemos para elegir a la cúpula de la judicatura, rebajando la mayoría cualificada hasta la absoluta, abre la puerta a que, en cuanto cambien las tornas, nos comamos unos jueces ultraconservadores. Más incluso de lo que son ahora, aunque algunos vayan de progres. ¿O qué creen que van a hacer PP y Vox en cuanto sumen mayoría absoluta, dejar a otros que metan la cuchara? Por otro lado, esta rebaja sí permite a otros partidos entrar en la jugada (como ahora) que, hasta ahora, tienen monopolizada PSOE y PP, y supeditada a que se pongan de acuerdo.

La estrategia de Ayuso

El PP y Vox comparten muchos vasos comunicantes: la base de votantes, las necesidades de unos y otros, y el trumpismo. Y aunque en general los de Abascal tarareen la música trumpista más a menudo, nadie la interpreta como Isabel Díaz Ayuso: la manera más efectiva de mejorar las cifras de la afección del coronavirus es dejar de hacer pruebas. Sobre todo, pruebas que sabes que pueden dar positivo, como la de las personas próximas a un contagiado. En eso se basa la mejora de datos que presenta Madrid para enfrentarse al gobierno español, lo que es, en esencia, una barbaridad y una irresponsabilidad.

El problema es medirlo

Algo está haciendo mal alguien si el resultado de unas medidas sanitarias se ofrece en votos y escaños. No parece muy lógico, desde luego, ni muy recomendable porque de esta manera solo se consigue hacer el juego al populista. ¿De verdad que del enfrentamiento entre Díaz Ayuso y Sánchez la primera va a rascar 15 escaños más en el congreso madrileño? ¿De verdad que es momento de que La Razón haga esta encuesta? ¿De verdad se puede mezclar una pandemia con unas encuestas electorales con esta sencillez, como si no fuera ampliar la irresponsabilidad con la que ejercen y envilecen la política?

Felipe VI, el Cuñado

Publican en Ctxt que “los españoles piensan que Felipe VI es de derechas”. Eso es como decir que los españoles piensan que el agua moja. No solo parece de derechas: sin la corona ni el coche blindado oficial, Felipe tiene pinta de “Cayetano”, como se dice ahora, o de pijo de derechas y estirado (como hemos dicho siempre) que heredó un negocio familiar multimillonario y tiene el talento justo para dejarlo peor de lo que estaba pero funcionando. También parece que es del PP de toda la vida pero votó un par de veces a Ciudadanos y en las últimas, aunque no lo reconoce, a Vox. El pack del cuñado de Pozuelo.

La CIA, ¿a por Madrid?

No lo digo yo, lo sugiere Isabel Díaz Ayuso, según Eldiario.es: “Ayuso defiende que Madrid está siendo ‘asediada’ por las mismas fuerzas ‘que han destruido’ Latinoamérica”. ¿A qué se refiere? ¿A la CIA? ¿A los distintos cárteles? También puede referirse al chavismo que, basado en el antiguo castrismo, mantienen vivo Nicolás Maduro o el defenestrado Evo Morales. En Cuba, como siempre, hacen lo que pueden con sus contradicciones. Lo que está claro es que la presidenta de Madrid quiere seguir “trumpizando” su discurso presentándose como objetivo de la izquierda española mientras desvía la atención.

Y más “trumpismo”

El PP ha convertido la Comunidad Madrid en su laboratorio de una España neoliberal. Y a la vista están los resultados. Pero en vez de rectificar, el PP apuesta por huir hacia delante y donde antes había liberalismo salvaje ahora hay, directamente, trumpismo copiado a lo bruto. Isabel Díaz Ayuso es la mejor imitadora de Trump en España (por desgracia para Abascal): ¿cómo se mejoran los datos del coronavirus? Dejando de hacer tests. Así de sencillo. Alberto Sicilia muestra en Twitter la curva del número de pruebas en Madrid, que desciende irresponsable y peligrosamente al tiempo que mejoran los resultados.

Las medidas son para los pobres

En Madrid han dejado claro que el confinamiento y las porras de la Policía Nacional son para los pobres: los pijos de derechas pueden seguir saliendo a manifestarse sin multas ni golpes. Y si quieren irse de fiesta, por supuesto, también pueden hacerlo porque Madrid, que nadie lo olvide, es la comunidad liberal… Para quien pueda permitirse la libertad. Y si alguien puede, son los Borbones: “Victoria Federica, cazada de fiesta junto a su novio sin respetar las medidas de seguridad”, leemos en El Plural. Porque un virus no le jode la fiesta ni el “story” en Instagram a una Borbón. Eso es de pobres de espíritu y cartera.

Correcto

Twitter ha suspendido la cuenta del médico Jesús Candel, más conocido como “Spiriman”, después de que este dijera que para curarte del cáncer lo que hay que hacer es desearlo, como él hace. Es decir, los que se mueren de cáncer lo hacen porque quieren, los que no lo superan son débiles y lastimeros, no como él. El altavoz de quien dice algo así tiene que estar bloqueado… Y así está. Pero antes tendría que haberlo hecho Twitter y, sobre todo, los que dan voz a un personaje que llegó a presentarse como del entorno de Podemos pero que siempre ha sido un populista irresponsable.

El Trump de Aliexpress

Vox es la versión de Donald Trump que te venden en Aliexpress: insultan, son agresivos y hacen populismo, sí, pero son de plástico malo y en dos zarandeos los desmontas. Solo hay que ver a su líder, Santiago Abascal, el pusilánime con pistola que necesitaba la extrema derecha al frente del chiringuito (para él solo sería uno más) mientras armaba el resto de la fachada. Una estructura en la que el que más alto eructa y provoca risas ostentosas entre la jauría de brutos es el que gana. Así lo hizo Macarena Olona metiéndose con Aitor Esteban en Twitter y llamando a sus huestes ultras al linchamiento.

Y el de verdad

Lo vimos hace solo unos días: Melania Trump se acercó sin mascarilla a Donald después del debate con Joe Biden. Fríos, como son ellos, y retando al mundo, como suelen hacer: las recomendaciones sanitarias son para los más débiles, ellos están hechos de hierro gracias a la diera americana y a su propio convencimiento. Pero ni las hamburguesas con kétchup ni su poder de autoconvicción les han blindado contra el coronavirus: ambos están afectados y en cuarentena, igual que antes lo estuvieron otros mandatarios como Bolsonaro o Johnson. ¿Y ahora qué dirán a sus seguidores negacionistas?

Trumpistas de Madrid

Una alumna aventajada en esto del trumpismo es Isabel Díaz Ayuso. Como el estadounidense, llegó a la conclusión de que si no hay pruebas no hay positivos. E igual que el de allí la de aquí se dedica a hacer política de bajo nivel basada en señalar al contrario, por peregrina que sea la acusación. Esto que ella misma respondió al parlamentario de Más Madrid la define mejor que lo que yo lo haré: “Chernóbil nos demuestra como un sistema corrupto en manos del comunismo llevó la muerte y la destrucción por la ocultación. Chernóbil no sucedió en la Comunidad de Madrid, sucedió gobernada por ustedes”.

Neoliberales. Y punto

¿“Economía colaborativa”? ¿Todavía le cuelan esta mierda a alguien? ¿En serio? Con lo contundente que es el post en El Blog Salmón sobre la sentencia a Glovo, es una pena que no entre a meterse con los del rollo en el que se basaron estas empresas que se han pasado las normas por el forro. La “economía colaborativa” de Glovo, Deliveroo o Amazon, pero también la de Airbnb o Uber, no existe: se basa en saltarse la regulación en la mensajería, la hostelería o el sector del taxi. Como bien explican en el blog: su petición de que la ley se adapte a ellos es posible que caiga en saco roto. Será lo correcto…. Y lo más caro.

Ultraliberales

Lo indignante de la absolución a Rodrigo Rato y sus secuaces de Bankia es que en vez de entrar al fondo del asunto usa la cadena de responsabilidad para sustentar la decisión. Es decir, la absolución se basa en que todos los mecanismos de control dieron luz verde a una operación ruinosa. Y el juez lo da por bueno en vez de investigar por qué y quién avaló lo que después tuvimos que rescatar entre todos. Como bien explican en Público: “Una de las mayores estafas”, en palabras de la Fiscalía, ha adquirido rango de legal por vía judicial. Y a los demás solo nos queda apoquinar nuestra parte.

La frase de Biden

El atropello a Quim Torra y los excesos de Isabel Díaz Ayuso o Pablo Casado van arrinconando al resto de temas, incluso las noticias sobre la afección de la pandemia más allá de Madrid y de la crisis global. También temas importantes como, por ejemplo, las elecciones en EE.UU., donde Donald Trump puede ser reelegido o bloquear la sucesión, que sería gravísimo. Las crónicas del primer debate electoral son coincidentes: un espectáculo lamentable en el que Biden tuvo un momento para la posteridad mandando callar al presidente. La frase: “Will you shut up, man” ya está estampada en camisetas contestatarias.

Más sobre Madrid

Es profundamente injusto que la Comunidad de Madrid quiera imponer a otras ciudades las medidas que necesitan para frenar la expansión del coronavirus. Lo es porque, por ejemplo, en los territorios vascos del sur las cifras de positivos se basan en muchas más pruebas. Sin embargo, “Madrid deja de hacer test a contactos estrechos de personas positivas si no son convivientes, sector vulnerable o tienen síntomas” (Eldiario.es). Así se escaparán los asintomáticos pero, ¿qué más da? Lo importante es bajar la curva y si para eso hay que dejar de hacer pruebas, se deja de hacer y punto. Trumpismo puro a la madrileña.

También es nuestra responsabilidad

Isabel Díaz Ayuso lo está haciendo mal. De eso no hay duda. No hay ni un indicio (y los datos que ofrecen resultan dudosos) que indique lo contrario. Pero salir de esta también es cosa nuestra, no podemos señalar constantemente a los gobiernos y, mientras actúan, esperar o, lo que es peor, ser descuidados e inconscientes. Este tuit de El Mundo es descorazonador: “Sólo uno de cada tres vecinos citados de Vallecas ha acudido a hacerse el test”. Sí, habrá muchos casos justificables, pero son dos tercios los que no han acudido, y ese porcentaje también es reprochable a la responsabilidad individual.

Un dato importante

A Isabel Díaz Ayuso le ha estallado Madrid entre las manos. Exactamente igual que a todas y todos los presidentes sus gobiernos. El problema es que Madrid viene siendo el laboratorio de políticas liberales del PP, basado, sobre todo, en la capitalidad. Gracias a ella ha atraído recursos humano y de los otros, desbaratando posibilidades de desarrollo en otras regiones. Cuando Díaz Ayuso decía que Madrid era España igual se refería a que ha absorbido riquezas del resto de España. Este titular es de esta semana en El Periódico de Aragón: “Madrid aglutina el 44% de la fuga de empresas de Aragón desde el 2015”.

Y otro trágico

El principal problema de Madrid es la inacción: el gobierno autonómico no ha hecho ni lo más básico. Ni poner gel hidroalcohólico en las estaciones del metro o cerrar el hipódromo, donde se juntaban jóvenes a beber y a apostar en plena pandemia. Así se explica el gráfico que Alberto Sicilia ha mostrado en Twitter, junto a esta descripción: “La segunda ola llegó antes a Cataluña, pero en agosto se pusieron las pilas y consiguieron estabilizarla. En Madrid no se tomaron medidas y se escapó de control”. Y este es el resultado: café amargo para todos para que Madrid entre en razón porque no ha querido hacerlo antes.