El terror no lo conseguirá

Quienes quieren que vivamos con miedo no pueden lograrlo. A la mayoría nos resulta difícil entenderlo pero, sí, hay personas en el mundo que no quieren que salgamos de casa, que no quieren que disfrutemos de lo bueno que nos ofrece la vida y este planeta, que pretenden que vivamos horrorizados y recluidos, como obligan a vivir a sus propios conciudadanos. Pero insisto: no pueden vencernos, como no lo hizo en casa ETA. Sabemos mirar al futuro con esperanza.

Y ahora, las derivadas

A veces, para encontrar a un buen tuitero solo hay que levantar la vista de la pantalla: mi compañero en DEIA y amigo, Aner Gondra, lanzó ayer en Twitter una interesante reflexión. Básicamente pedía que nos dejaran a los periodistas hacer nuestro trabajo, y publicar fotos desgarradoras lo es. Yo añado que el perjudicial mito del periodismo ciudadano es el que invita a sacar el móvil y grabar. Nada que ver con el cámara que graba y edita antes de difundir imágenes duras.

Menos caretas

Es triste, pero ante tragedias como la de Barcelona a algunos se les caen las caretas y otros se sorprenden de conocer realmente al tuitero que han estado siguiendo y hasta alabando. Uno que se hace llamar Aragorn de Mordor, que va de salvapatrias contra los nacionalistas, tuiteó: “¿No queríais menos turismo? Deseo concedido”, y se retrató. Después, borró el tuit cobardemente y quiso sacar la pata asegurando que los catalanistas habían retorcido su sentido.

Más inteligencia

¿Qué le lleva a una persona a grabar el horror con su móvil? ¿Qué le lleva a una persona a aprovechar el horror para alimentar sus obsesiones? ¿Qué le lleva a una persona a difundir las imágenes del primero y los tuits del segundo? En Twitter parece que escasea el sentido común que @elbicharraco (81.700 seguidores) sí tiene: “Es sencillo. No difundas vídeos ni fotos. No hagas chistes. No cambies de tema. Aporta información útil. Y después cierra Twitter”.

No somos todos iguales

Continúo: a veces Twitter es imprescindible para identificar a los idiotas. Por suerte, hay más usuarios conscientes de la realidad y empeñados en difundirla: “Entre los idiotas de la culpa es de occidente y los de la culpa es de los inmigrantes estamos una mayoría callada, estupefacta y conmovida”, tuiteaba Lordo. “Sí, sabemos que esto ocurre cada día en otros países. Sí, nos impresiona más cuando pasa aquí. Meteos la superioridad moral donde os quepa”, pedía Suki.

Irremediables

“La cárcel acoge a tantos acusados por delitos económicos (Sandro Rosell, Jordi Pujol Jr., Ignacio González, Gerardo Díaz Ferrán…) que están comenzando a juntarse para montar nuevos negocios”, leemos en El Confidencial con asombro. El tiempo libre que pasan juntos estos urdidores de tramas les habría llevado, casi sin querer, a montar un último business entre rejas. Todo lo que necesitan lo tienen dentro: oportunidad, dinero y abogados que van y vienen.

Imperdonables

No digo que los anteriores no lo sean, digo que estos también lo son. Y visto lo visto es recomendable recordar de vez en cuando que las estrellas del fútbol cuando defraudan merecen todo nuestro desprecio. También las de nuestro equipo. También a las que admiramos. Valoro a Messi como futbolista, respeto a Cristiano y, vaya, Mourinho me caía hasta bien. Pero perderá todo mi respeto si se confirma que defraudó más de 3 millones de euros.

Intolerable

Ya les he hablado del usuario de Twitter llamado Eterno Primavera. Bajo su anonimato logra reunir a más de 50.000 seguidores que reciben mensajes con la realidad retorcida. Jorge Matías no duda en llamarle “hijo de la gran puta” después de que Eterno sugiriera en un tuit que las víctimas del incendio de Portugal son de segunda porque no son yihadistas (según él, el terrorismo es algo parecido a un montaje). Otro usuario, Lordo, le recordaba que habían sido portada de todos los periódicos.

Incomprensible

También en Twitter algunos han recordado la masacre de ETA en Hipercor poniendo en duda la versión oficial. El rapero Pablo Hasel aseguraba que el atentado reforzaba la necesidad de la guerra sucia y que había indicios para pensar que las autoridades dejaron que sucediera. Más cerca de casa podíamos leer también: “Nadie nos quitará nunca la sospecha de que Felipe González impidió el desalojo de Hipercor para dar justificación moral a la guerra sucia”. No, no todas las dudas son razonables.

Impropio

Alberto Ortega tuiteaba esta frase que atribuía a José Ramón de la Morena: “A lo mejor el casting lo hace Pipi Estrada”, cuando se refería “entre risas” al equipo femenino del Real Madrid. Un comentario impropio de un hombre de fútbol, de un periodista que ha hecho de este deporte su modo de vida (y por lo que dicen, una vida muy buena). ¿O no se trata de fútbol sino de machos jugando, machos ganando, machos comentando y machos mandando?