No solo es el cielo, también es el mar

No me escondo: sí, hablo de emergencia climática. Sí, creo que es indemorable la intervención en los sectores productivos. Sí, es imprescindible que un organismo internacional empiece a recaudar dinero de quienes se han hecho ricos destruyendo nuestro planeta y generándonos necesidades, para crear puestos de trabajo encaminados a encontrar, esta vez, soluciones. Y sí, no solo debemos mirar al cielo porque no llueve: “Algunos expertos en clima abogan por un objetivo diferente: en su lugar, quieren establecer límites para la subida del nivel del mar”, explican en National Geographic. En EE.UU. el nivel del mar ha subido ya 30 cm.

Eskerrik asko, Lehendakari

Empezando por EGI, terminando por personas anónimas, evidentemente simpatizantes de EAJ-PNV, y pasando por supuesto por quienes han colaborado con él desde 2012, no son pocas ni pocos quienes han publicado en sus redes sociales su agradecimiento al lehendakari Iñigo Urkullu por su labor al frente del Gobierno Vasco. 12 años que empezaron en medio de una crisis y que, tras una fase de recuperación, han terminado enlazando una pandemia mundial y la invasión de Rusia sobre Ucrania. Un período intenso de la historia global que él ha liderado desde este rinconcito llamado Euskadi que, objetivamente, está hoy mejor que entonces.

El eterno retorno

Esta semana Sumar y Podemos han confirmado que su confluencia en Euskadi es imposible. Es decir: han decidido presentarse como caballos perdedores. ¿Quién quiere subir a uno de ellos? Aunque nadie negará que han corrido mucho, tanto que todo nos parece ya un retorno constante, eterno, como el del filósofo. Hasta esta noticia en The Objective, que va más allá de las elecciones vascas, suena a sobada: “Podemos prevé una lista europea de Sumar repleta de ‘traidores’ del partido morado”. ¿Y quién no lo prevé? Pero que en Podemos se lo hagan mirar: ¿cuánto capital humano dilapidaron o despreciaron?

Hablando de campañas…

Vamos a tener mucho tiempo para analizar las identidades digitales de las candidatas y los candidatos a lehendakari, y para averiguar si se han lanzado a TikTok o no. De momento, y mirando procesos más lejanos, sí sabemos que Joe Biden ha abrazado esa red social después de haber señalado sus peligros incluso a nivel institucional. Con un presidente y candidato de 81 años, el partido demócrata quiere acercarse a la juventud que, por lo que cuentan en El Independiente, rechazan en mayor medida a Trump. Así que buscarán la movilización de ese segmento a golpe de meme y refrito. ¿Esto es lo que funciona?

Nadie paga voluntariamente

Sigo pensando que el internet comercial es lo peor que nos ha pasado como especie: un agujero negro de recursos y tiempo disfrazado de entretenimiento y acceso universal a la información. Una mierda voraz que hay que alimentar, por ejemplo, con imágenes. La mayoría son robadas vilmente para cuestiones irrelevantes. Pocas y pocos pagan por ellas pero menos hacen donaciones: en Photolari cuentan el experimento de Alexandre Rotenberg, que decidió hacer accesible temporalmente su archivo a cambio de donaciones voluntarias, en vez de cobrar una tarifa por imagen, como solía hacer. Para sorpresa de nadie recaudó cero euros.

Hablemos de esto

Me parece bien, de hecho, me parece muy bien, esto de El Independiente: “Díaz pone la lupa en los salarios de los directivos: ganan 200.000 euros más en dos años”. No se trata de envidia, se trata de hacer una sociedad más justa o no. Según la CNMV, las consejeras ejecutivas y “los consejeros ejecutivos percibieron de media 1,7 millones de euros”. Esto es: 54 veces el sueldo media de sus empleadas y empleados. “Los consejeros delegados o presidentes se sitúan en mejor posición, con unos ingresos de casi cinco millones por persona”. Y “los de Inditex, el Banco Santander e Iberdrola ganaron más de 12 millones de euros”.

¿Y si el problema no es la masificación?

Pocas dudas tengo de que serán las y los consejeros ejecutivos, delegados y presidentes, quienes puedan hacer turismo en un futuro próximo: viajar se convertirá en un artículo de lujo para sostener la industria y, al mismo tiempo, el planeta. Así que reflexiones como esta en EPE dan entre risa y pena: “El turismo se enfrenta a su miedo a morir de éxito por la masificación”. La masificación actual no es sostenible, nuestra huella de carbono y los proveedores lejanísimos para llevarnos recuerdos locales no es sostenible, la contradicción de quienes se preocupan por el medioambiente y luego viajan como si no costara no es sostenible.

Los dueños del mundo

Algunas series de ciencia ficción amable como Upload juegan con el modo en el que dependeremos de las grandes empresas tecnológicas para cuestiones tan básicas como nuestra alimentación. Pero lo peor del chiste es que es cierto (por eso funciona y se convierte en recurrente): “No contentos con dominar sectores enteros de la economía ahora Google, Meta y Apple quieren ser algo más: tus caseros” (Xataka). Todo empezó con Facebook, que compró viviendas en Silicon Valley para que atraer talento no le saliese un ojo de la cara, el resto de grandes empresas le copiaron y poco a poco han ido expandiendo el negocio.

Y si no, lo será ella

Si Amazon, Google, Meta, Apple o Elon Musk no acaban comprándose el planeta, lo hará ella: Fayza Lamari, la madre del jugador de fútbol, Kylian Mbappé. Según Vozpópuli, ella es el principal escollo al que se enfrentan el Real Madrid o el Liverpool para fichar a su hijo. Es una dura negociadora no solo del sueldo del futbolista, también de su comisión por mediadora. Tanto es así que, según el digital, el verano pasado el PSG estuvo dispuesto a traspasar a Mbappé pero no encontró comprador que pudiera satisfacer Lamari. Mientras tanto, Mbappé ha seguido siendo el jugador mejor pagado del mundo en París.

El fin de la réflex

Hace tiempo que tengo aparcada mi vieja réflex digital. La tecnología me permite ir con una pequeña cámara compacta y obtener mejores resultados (el precio de los carretes por el triunfo de la moda entre las y los niños pijos me impide ir con mis cámaras analógicas). Y este avance parece imparable: “El fin de las Nikon F: todos los productos de su sistema réflex ya han dejado de producirse”, leo con resignación en Photolari, porque el famoso “clic” que generaba el espejo al levantarse va a ser ya solo un sonido predeterminado y grabado para los nostálgicos. Pero me rindo a la evidencia de la calidad y la ligereza… Como todas y todos.

No uses Glovo

Si no quieres que la economía se uberice, no uses Uber. Ni Glovo. Ni Airbnb. No uses esas plataformas que basan su modelo de negocio en la esclavitud, en los vacíos legales, en las y los falsos autónomos, en que el riesgo lo corran otras y otros con sus propiedades. Empresas y empresarios que sistemáticamente se ríen de un sistema al que pretenden burlar y que exigen, hay que tener la cara dura, que la legislación se adapte a sus prácticas. Prácticas como esta que Riders x Derechos denuncia: “Glovo dejará de pagar el tiempo de espera a los repartidores que esperamos un pedido delante del restaurante”. No uses Glovo.

Esto va de derechos

Las y los trabajadores de Glovo tienen derechos que la justicia les va reconociendo. De la misma manera, las y los fotógrafos también los tienen y la justicia, de nuevo, se los reconoce: Vox ha sido condenado por la difusión de una foto manipulada de Ignacio Pereira, que capturó la Gran Vía de Madrid vacía durante el confinamiento, y el partido de extrema derecha usó con un montaje de la calle llena de féretros. Las y los de Abascal tendrán que indemnizar al fotógrafo y publicar la sentencia en las mismas redes, según Photolari, donde recuerdan que Podemos también fue condenado por usar una foto en un vídeo sin permiso del autor.

Y de respeto

En Euskadi, la coalición que va de feminista tiene en la mayoría de sus partidos a hombres al frente, las esferas más altas de la coalición también las ocupan hombres y el candidato es otro hombre, de nombre, Pello. En España, el partido que va de feminista ningunea a su secretaria general a la vista de todas y todos: Pablo Iglesias es el que ha anunciado, no sabemos si también lo ha decidido aunque no le extrañaría a nadie, que Podemos no irá con Sumar en las próximas elecciones europeas. Para mi sorpresa, Ione Belarra sigue aguantando su vela pese a que, una y otra vez, su liderazgo es apartado por un manotazo de Iglesias.

Si él lo dice…

En su huida hacia delante, Luis Rubiales se ha sincerado con Alvise Pérez, el agitador de masas de la extrema derecha que engordó a la teta de Ciudadanos. El expresidente de la RFEF “sostiene ahora que su caso ha sido una cortina de humo para cubrir la amnistía” (El Nacional). Ante todo, él es una víctima: contó a Alvise que el beso fue consentido y que todas las jugadoras, incluida Jennifer Hermoso, mienten por venganza, porque no destituyó a Vilda. Él dirá lo que quiera y yo creeré lo que me le dé la gana, lo que me pregunto es quién le sostuvo durante tanto tiempo y por qué interés político, muy lejos de Alvise Pérez.

El fútbol es político

Claro que el fútbol, como fenómeno social que es, es político. Claro que un gobierno progresista puede intentar tener en la Federación un contrapoder a una Liga ultraconservadora. Lo que no es defendible es que sea un tipo como Luis Rubiales. También es político que una marca alemana, Puma, vista a la selección de Israel, y por supuesto lo es que deje de hacerlo, como leemos en Palco 23. La marca asegura que no tiene que ver con la masacre que el gobierno ultra de ese país está cometiendo en la franja de Gaza, aunque en el mismo digital mencionan varias veces un boicot a la marca por su vinculación con Israel.

¿El nuevo Twitter?

Cuando Elon Musk apareció en la sede de Twitter con un inodoro, después de haber pagado 44.000 millones de dólares, supuse que Mark Zuckerberg estaría frotándose las manos. Lo mejor que le podía pasar a Meta es un mono con dos pistolas al frente de la red social que le había ganado la mano en “la conversación global”. Tardó, pero el gigante de Facebook, Instagram y WhatsApp lanzó Threads, pero no en Europa, donde la regulación no le permitía operar como pretendía. Su llegada al viejo continente, no obstante, es cuestión de (poco) tiempo y lo hará superando en descargas a una app ya instalada pero con mucho agotamiento.

Y los “nuevos” negocios

El mundo de la fotografía está patas arriba: uno se pasea por Photolari y junto a los artículos que puedes esperar sobre fotógrafos, objetivos y concursos de imágenes mundiales, hay estas tres noticias: una empresa ha diseñado un flash de estilo retro que costará unos 100 €, Kodak ha lanzado un nuevo Super 8 (sí, el de las cintas) y una nueva marca de carretes espera hacer la competencia a la misma Kodak (y por un precio “razonable” de 12 euros el rollo). Yo volví a disparar en película cuando los carretes costaban 4 euros, ahora, que se venden a 24, me niego a participar en un pasatiempo de pijas y pijos, por lo que parece, muy rentable.

Uno más

Esto de Xataka no está publicado el 28 de diciembre, pero lo parece: “Una revista llevaba meses publicando artículos escritos por IA usando redactores falsos. Han sido descubiertos, claro. No había ni rastro de los redactores en Internet y sus fotos de perfil habían sido compradas en un portal de venta de imágenes generadas por IA”. La revista en cuestión es Sports Illustrated, pero de aquel clasicazo solo queda la marca, que explota ahora la empresa Arena Group, responsable de esos contenidos y esas falsas autorías que ha destapado otra publicación: Futurism, especializada en tecnología.

Total, nos va a sustituir una IA…

Tengo claro que el lujo del futuro va a ser el contenido creado exclusivamente por humanos. Las personas normales leeremos o veremos noticias u obras generadas por inteligencias artificiales más o menos depuradas, y las más ricas podrán pagarse modos de creación artística o para pasar el tiempo que generen otras mentes y manos humanas. Casi todas y todos vamos a ser sustituidos, así que, aprovechemos el momento. Algunos ya lo hacen, según Business Insider: “El gran secreto de Silicon Valley: el sorprendente auge de los malabaristas del trabajo que tienen en secreto varios empleos para ganar más sin echar más horas”.

Los objetivos

Ya sé que no tengo ni idea de inversiones ni economía, pero sí sé de cuestiones básicas: si hay dinero en caja y volumen de trabajo, puedes seguir adelante. Sin embargo, Spotify ha dado esta noticia: “1.500 nuevos trabajadores van fuera en la tercera ola de despidos del año” (Genbeta). Mientras la leía abrí una nueva ventana en el navegador, busqué los beneficios obtenidos por la empresa y encontré este titular en Europa Press: “Spotify registra un beneficio de 65 millones en el tercer trimestre frente a pérdidas de un año antes”. ¿Por qué lo hacen? Por los objetivos, las finanzas y el accionariado, claro.

Tenemos la culpa

La actualidad política manda, pero hay temas y discusiones que solo son posibles en este momento y en la parte occidentalizada del mundo, y que son apasionantes: hay una agencia de modelos que ha creado dos chicas con ayuda de la inteligencia artificial, Aitana y Maia, con las que están haciendo campañas para marcas en redes sociales. Hemos retocado tanto las fotos y hemos exagerado tanto las poses que las imágenes son perfectamente plausibles. Nada diferencia una foto generada por una máquina de otra que ha pasado por un uso exagerado por el Photoshop, ese que está tan de moda últimamente.

Más lejos

A quien lo de las modelos virtuales le resulte sorprendente, que se agarre: hay personas que están “de luto por la ‘muerte’ de sus amantes de la Inteligencia Artificial después de que una app de chatbots cerrara repentinamente” (Business Insider). Muchas y muchos lo vimos en “Her”, aquella estupenda película en la que Joaquin Phoenix se enamora de la voz de Scarlett Johansson. Y ahora, simplemente, es real: la empresa Soulmate cierra su aplicación, que no ha conseguido ser rentable ni recibiendo a las y los nostálgicos de Replika, otra app similar pero con un añadido erótico (sí, sexo con chatbots), que también cerró.

No todo lo erótico es rentable

Replika, que era un chatbot con componente erótico, cerró. Soulmate, que lo es “solo” para hacer compañía, cierra. Y también lo va a hacer Omegle, una plataforma que nació en 2009 con el fin de poner en contacto de manera aleatoria a personas adultas que querían mantener relaciones on-line del tipo que fueran. Dice su propietario que la plataforma “no es sostenible, ni financiera ni psicológicamente” (Xataka). Al parecer, Leif K-Brooks tiene que hacer frente a un montón de denuncias, algunas bastante truculentas: “Encontrar perfiles con intenciones de abuso sexual no era infrecuente”.

Space X sí lo será

Mientras Virgin ya ha anunciado despidos y un posible cierre, Space X va camino de ser muy rentable. La empresa de cohetes de Elon Musk, proveedor habitual de la NASA (y estoy seguro que acabará comercializando huidas del planeta Tierra a ultrarricos como él) va razonablemente bien: la línea de negocio de Starlink funciona, “ahora mismo ni ganan ni pierden dinero” (Microsiervos), y avanza en su modelo de negocio, que son los cohetes reutilizables. En su último lanzamiento ha usado una parte del fuselaje que volaba por decimoctava vez. Además, ha sido recuperada y volará, por lo menos, en otra ocasión.

La fotografía más vista de la historia

Sí, casi todas y casi todos hemos visto la que hasta hoy puede ser la fotografía más vista de la historia: el fondo de escritorio de Windows, esa ladera verde brillante bajo un cielo azul claro pero intenso. Es una imagen de Charles O’Rear cuyo éxito arrollador, como bien aventuran en Photolari, puede tener fecha de caducidad, ya que los múltiples dispositivos con los que accedemos a Internet pueden afectar al consumo que hagamos de los PC. Aunque yo soy de los que piensa que el ordenador tiene presente y futuro. Otra cosa es que Windows decida cambiar los escritorios y elija otra fotografía que se convertirá en privilegiada.