Soy un malpensado, pero si leo que el PP toma ahora medidas para que no se repita lo de Luis Bárcenas, como no pagar tanto a su nueva tesorera y atarla en corto por medio de reuniones con Cospedal, no puedo evitar preguntarme, ¿por qué no lo hicieron después de que se destapara el “caso Naseiro”, que no siguió adelante por un oportuno defecto de forma? La pieza al respecto la hemos encontrado en ‘El Confidencial Digital’, y va bien sembradita de recados a Bárcenas y de exculpaciones al PP, cuyo pecado fue confiar en Bárcenas.
La foto y las consecuencias
Esta crisis ya lo es hasta de imaginación. Y no solo porque se haya muerto Gabriel García Márquez. Los medios su suman al populismo y tergiversan la labor de los representantes políticos para acercarse a la ciudadanía, deseosa de cargar contra los políticos. Y los políticos se rinden al populismo y se ponen a regalar recursos, como si se tratara del infumable ‘Entre Todos’ de las mediodías de TVE1. Solo así se explica cómo ha acabado de mal el pulso entre IU, PSOE y PP en Sevilla sobre los pisos entregados a residentes en la corrala “Utopía” a los que el ayuntamiento no había concedido una vivienda porque otros la necesitaban más, como relatan en ‘El Semanal Digital’.
¿Y si aplican las leyes?
Emilio Olabarria ha afirmado en su artículo periódico en ‘Sesión de Control’ que su grupo en el Congreso se sumará a todas las iniciativas para frenar la corrupción en España. Pero también aporta su propia receta: “Contra la corrupción se lucha cesando de inmediato a aquellos políticos sobre los que recaen sospechas de prácticas irregulares; contra la corrupción se lucha obligando a entregar el carnet del partido inmediatamente a aquellos sobre los que se están practicando diligencias de investigación en sede judicial por prácticas de corrupción. Yo comprendo que estas medidas, que son las que el partido que represento adopta siempre”. Y yo aporto una más: ¿y si en vez de una nueva legislación empiezan por aplicar a rajatabla la existente?
El Google de lo prohibido
No hay una sola Internet, igual que no hay una sola televisión. Para algunos, el electrodoméstico que rige nuestro salón es un medio de información, para otros, de entretenimiento, y para los más modernos, el aparato en el que ver las series que se descargan, pasando de las parrillas. Del mismo modo, hay una parte de Internet que la mayoría desconocemos y que en ‘TICbeat’ nos han acercado… para preocuparnos un poco. La creación de Grams, una especie de Google para lo prohibido, simplifica las búsquedas de productos ilegales que se venden en la red.
Lógica de mercado
Otra certeza de Internet, además de que simplifica el acceso a los mercados más oscuros, es que es una gran tienda. Y como tal, responde a la lógica del mercado: si se compra, se vende. Si se vende, da beneficios. Si da beneficios, se gana dinero. Si no se gana dinero, se cierra. Y esto es lo que puede pasarles a Twitter y Linkedin. Estas famosísimas redes sociales no son viables, y los inversores podrían estar notando el nerviosismo y el cansancio ante dos herramientas muy usadas, sí, pero nada rentables. Y la fuente que lo cuenta es ‘El Blog Salmón’, aunque somos muchos los que vemos la palpable realidad.