La mayor antinacionalista

20170512_antinacionalista

¿Por qué nos parece verosímil lo que han relatado [Enlace roto.] mejor que en ningún sitio sobre la mujer de Jordi Pujol? “La parodia más patética que se ha escrito sobre Marta Ferrusola la ha escrito ella misma (…) Los valores cristianos que abanderó aparecen ahora como una máscara engañosa. Madre superiora. La hipocresía, cuando es descubierta, es implacable”, escribe Antonio Puigverd entre otras crudezas. El nacionalismo empieza por los impuestos.

¿Esta es la nueva política?

Susana Díaz no es una política que me guste, no le compraría un coche de segunda mano. Pero la respeto, y mucho más a sus votantes en Andalucía y a los que lo hagan en las primarias socialistas. Pero menos me gustan actos como el que ha protagonizado Carles Mulet, de Compromís, que ha roto una fotografía de la socialista a la que ha calificado como “asco de señora” antes de llamarle “gusana” en Twitter. Vistas las formas, seguramente sus argumentos carezcan de fondo.

¿Y si gana Pedro?

Sinceramente, creo que después de las primarias en el PSOE volverá la calma. Doy por hecho que ganará Susana Díaz pero si me equivoco (soy muy malo haciendo predicciones políticas y muy bueno perdiendo apuestas) tampoco creo que se levante una gran tormenta en sede parlamentaria. Otra cosa será lo que pase dentro del PSOE, que huele a purga gane quien gane. Y eso es lo que pone nerviosos a los socialistas, realmente. El puestito, “su” puestito.

Es un paso, pero no es vinculante

Celebro la opinión (no es vinculante, pero sí una base para futuros juicios) del abogado general de la UE sobre Uber: Maciej Szpunar considera que esta empresa (no es una App, no es una web, no es un proyecto colaborativo) es un negocio de transporte y, como tal, está sujeto a licencias y, por supuesto, contratos e impuestos. Un paso adelante, en mi opinión, para una regulación necesaria. ¿Es necesario liberalizar el sector del taxi? No lo sé, pero que sea con todas las empresas y autónomos con las mismas obligaciones.

Mi primer gran amor futbolístico

Soy de Portugalete y del Athletic, y nací en 1980, así que, para mí, Julen Guerrero es un ídolo incontestable. Pero mi primer amor futbolístico fue Dennis Bergkamp que hace un par de días cumplió 48 años y por eso Panenka publicó una breve pero interesante biografía futbolística. Aquel delantero con miedo a volar pero con una técnica asombrosa que fracasó en el Inter (pocos se acuerdan) y triunfó en el Arsenal. Aquel Arsenal de los 90 que tanto nos gustaba. Zorionak!

La moción de «la gente», ya, claro…

20170511_mocion

La moción de censura de Podemos, el “invendible” del momento, se dibuja cada vez más como una herramienta de desgaste al PSOE. Vamos, como lo que es. Ahora, pasando de la opinión de las bases, pasando del objetivo, pasando de todo, Podemos se ofrece a retirarla para pactarla con el PSOE… Si gana Pedro Sánchez, intentando intervenir clara y directamente en las primarias socialistas. El mismo Pedro Sánchez al que no quisieron investir, pero eso nunca lo dicen.

La constituyente de «la patria»

Pero el realismo mágico en la política no se ejerce en ningún sitio como en Latinoamérica donde la última de Nicolás Maduro es charlar con unas vacas. Como lo leen. El mismo que aseguró que Chávez se le apareció mientras dormía en forma de un pájaro y le habló, conversa ahora con bovinos ya que con su pueblo solo entabla diálogo de besugos. Lo denuncia Felipe Calderón en Twitter con el asombro necesario ante tanta necedad. Y peor son las justificaciones.

Salvadores del mundo, uníos

Por eso Nicolás Maduro no da la talla que sí tienen Owen Jones o Julian Assange. Pablo Iglesias se esfuerza, pero le falta ese toque cool de la izquierda anglosajona. No obstante, Assange pisa suelo más resbaladizo hoy que nunca: Wikileaks habría sido el colaborador necesario de un intento ruso de favorecer a Le Pen en Francia, supuestamente, pero patina más cuando él mismo, imputado por violación, asegura que es el heteropatriacado el que niega la presidencia a Hillary Clinton y Marine Le Pen, poniéndolas al mismo nivel.

Los Gabilondos

La condena a Manuel Herrera, que le prohíbe entrar en Sevilla y le obliga a personarse cada quince días en los juzgados de Bilbao, realmente, es una condena para la ciudadanía de la capital de Bizkaia. Estos días hemos leído justificaciones absolutamente lamentables del nazi que intentó agredir a un bilbaíno, y que el periodista Gontzal Hormaetxea resumía en Twitter: “¿Quién no se ha cruzado alguna vez por Bilbo con ese grupo de punkies llamados ‘los Gabilondos’ que van con fotos de ETA y muchos pitbulls?”.

Publicar en Instagram desde el ordenador es posible

Instagram permite ahora que, sin tener descargada la aplicación, podamos subir una foto a nuestra galería desde cualquier navegador para móviles. Eso hace posible, a su vez y según el blog Cnet.com, que lo hagamos desde el ordenador: tenemos que ir al navegador y elegir la opción de “móvil”. Bueno, es algo más complejo pero en la bitácora lo explican bien para que los muchos fans de la herramienta (como yo) puedan subir imágenes editadas directamente.

Al pueblo se le escucha

20170510_escucha

Puro despotismo no ilustrado: en el vídeo de su ekintza (¿a qué recuerdan?) contra el PNV, Ernai asegura que el pueblo responderá cada vez que el pueblo sea atacado. Pero, ¿escuchan al pueblo que quitó voto a voto a Bildu de las instituciones para que los de Eneko Goia y Markel Olano gobernaran? Esto de hablar en nombre de un pueblo que no ha pedido que le salven, por cierto, ya lo hicieron otros. “Dime con quién andas” decían las juventudes de Sortu. Y sabemos con quién han andado ellos siempre.

Más del modelo irlandés

Ernai contra el PNV ha pasado en apenas una semana de tirar huevos con pintura roja y amarilla con nocturnidad, a atacar a plenos día con basura y pintadas una sede, pasando por un escrache. De aquí a final de año no sé dónde les llevará su camino. Un camino que algunos siguen haciendo en círculos en Irlanda del Norte, donde esta misma semana un hombre ha resultado herido en el cuello durante un ataque con disparos a una vivienda. Cada uno elige sus modelos.

Ni un día sin su tonto en Twitter

Lo siento pero, sí, he tenido que recurrir al “tonto” porque no hay otro calificativo para algunos en Twitter. En estos últimos días el usuario anónimo Eterno Primavera se lleva todos los “reconocimientos” con tuits como: “Los recortes en la sanidad pública que provocan la muerte de millones de ciudadanos europeos es tan exterminio planificado como Auschwitz”. A este paso, eclipsa al resto de tontos. Pero, ojo, son 50.000 los que siguen esos mensajes y cientos los que los relanzan.

Pelea de “tuitstars”

Hasta Ramón Cotarelo, otro tuitstar de estos que sientan cátedra progresista desde sus despachos universitarios por medio de una red social, ha afeado la conducta de quienes llevan semanas diciendo eso, tonterías, sobre la amenaza fascista en Europa: “Quienes insinúan que el fascismo de Le Pen y el socioliberalismo de Macron son parecidos no saben lo que es el fascismo. Ignorancia culpable”. Ignorancia… Y gustito por el tuit, el reuit, estar en el machito y tener miles de seguidores.

Habla el politólogo de España

Juan Carlos Monedero, el siniestro, desbarraba en Twitter: “Francia es un sistema presidencialista. El Parlamento debe rendir cuentas al Presidente. Como en Venezuela. ¿O allí no vale?”. Primero: Francia es semipresidencialista (hay jefe de Estado y de Gobierno). Segundo: incluso en la presidencialista Venezuela es el presidente el que rinde cuentas al Parlamento. Pero el politólogo es él, en Podemos siempre dicen la verdad y todos menos Monedero somos tontos.

Ahora, (a por) Macron

20170509_macron

Una vez certificada la derrota de Marine Le Pen y, con ella, la del fascismo con piel de cordero, ha llagado el momento de hablar de Emmanuel Macron. Y lo haremos como de cualquier otro Jefe de Estado elegido democráticamente. Este, además, con un ideario liberal y pasado de gran bancario que, para el que escribe, restan. Tampoco me gustan los personajes políticos, como él, emergidos desde otros partidos con proyectos puramente personalistas. A partir de ahora, veremos y escribiremos.

Silencio: opinan las estrellas del Twitter

Algunos mantienen el anonimato en Twitter porque a cara descubierta tanta soberbia les sonrojaría hasta a ellos mismos. Le pasa a Eterno Primavera, que embauca a casi 50.000 seguidores con tuits como: “A los que ven a Macron como salvación recordarles que en Europa está matando mil veces más el liberalismo y la austeridad que el fascismo”. Uno que sí da la cara es Javier Gallego Crudo: “Francia camina por la fina línea entre el fascismo ideológico y el fascismo económico”. Pero luego borró el tuit.

Los “frikis” también son fascistas

Es fácil: se es antifascista o no se es. No es antifascista Jorge Verstrynge, que tuvo el cuajo de decir en LaSexta desde la sede del Frente Nacional, donde siguió la noche electoral: “Si el Frente Nacional es fascista, lo sabré yo que lo he sido, y te digo que no lo es”. Tampoco lo es Enrique de Diego, “Presidente de Plataforma de las Clases Medias”, un habitual de los desbarros que no dudaba en insultar a Macron por “estéril”. Ni Lagarder Danciu, que criticaba calibradamente por igual a un candidato fascista y a otro que no lo era.

“La cofradía del ‘pero’”

Verstrynge fue fascista, de Alianza Popular y, ahora, es de Podemos. Muy próximo a Pablo Iglesias, además. En este partido han tenido clara su equidistancia (de lo suyo gastan) hasta el último minuto: Íñigo Errejón, Hugo Martínez Abarca, Juan López de Uralde y Jon Mena, entre otros, tuitearon del mismo modo: vale, no ha ganado Le Pen, pero… No hay peros a la derrota del fascismo, y eso es lo que les ha afeado con fina ironía el usuario @rguezcheca, que evidentemente no ha sido el único.

Algunos datos

Además de mensajes poco recomendables, sobre las elecciones francesas en Twitter tuvimos la noche del domingo y todo el día de ayer buenos titulares y lecturas. Por ejemplo, que Iparralde es antifascista (en las legislativas veremos si, además, es de Macron), que los más mayores tuvieron mayoritariamente claro su no al fascismo (más que los jóvenes), y que hasta las clases más bajas dieron la espalda a Le Pen, pese a que algunos equidistantes apelaban a que les habían empujado a la extrema derecha.

Semana uno, después del acuerdo

20170508_semana

Ya ha pasado la celebración y las críticas (ataques a batzokis y escrache a Sabin Etxea incluidos, que muestran más desesperación que otra cosa). Han pasado las respectivas resacas. Y ahora toca empezar a aplicar el acuerdo que el PNV ha arrancado al Gobierno español. En La Información, José Luis Roig lo tiene claro: es mérito del primero, un partido “que lo controla todo y domina las apuestas de futuro”, y cree que los políticos catalanes (los que primero despreciaron cualquier nexo con “lo vasco”) se han quedado atrás.

Compra ya su libro

Eduardo Garzón, hermano de Aberto Garzón, asesor en el ayuntamiento de Madrid (¿esto no es “trama”?), doctorando en Economía, ha fijado en su cuenta en Twitter un enlace para que podamos comprar su libro en el que desmonta, cómo no, lo mitos económicos de la derecha. Los de la izquierda pasan, claro, por no criticar nunca el negocio editorial, muy suculento para los de Unidos Podemos, que siempre se cobra aparte y que nunca falla. Por eso van siempre todos a las presentaciones de los libros de los suyos.

Pero siempre hace falta leer más

Pero no es cuestión de libros, se trata de leer. Hábito que, lo confieso, entre las obligaciones familiares e Internet, he perdido parcialmente. Tampoco lo tiene, al parecer, Ramón Espinar, defensor a ultranza de lo que diga el jefe y, por lo tanto, de la moción de censura ahora mismo. La periodista Luz Sanchís, sin embargo, le afea en Twitter: “‘Yo no me he leído el manual sobre mociones de censura’, es toda la respuesta de Ramón Espinar a cómo lo van a hacer. Pues vale”.

También tenemos nuestra culpa

Les he dicho antes que Internet tiene que ver con que haya perdido parcialmente el hábito de leer. Añado ahora que los medios no ayudamos: el “clickbait” o la lucha por el “clic”, por que el lector de redes sociales siga nuestro enlace, nos está empobreciendo. Recientemente, la cuenta de la CNN en español tuiteaba: “En este país ya no puedes consultar Wikipedia”, obligando al lector a seguir el enlace para ver qué país era (Turquía). El usuario @Armuño en Twitter se quejaba: “En este país ya no puedes leer un titular normal”.

Sí, WhatsApp se cayó

Me sorprende que, a estas alturas, todavía estemos leyendo comentarios sobre aquella noche de la semana pasada en la que se cayó WhatsApp. Algunos no dudaron en hacer chistes moralizantes sobre la oportunidad de que hablemos con el que está a nuestro lado, ¡como si la mayoría de conversaciones en WhastApp no fueran con los más cercanos! Lo que tiene que servirnos este error en el servicio es para recordar que solo se trata de una empresa que no, no controlamos nosotros.