Hoy, sí

Arnaldo Otegi empieza su post en Facebook así: “Gaur, Gasteizen”. Me pareció muy significativo. Hoy (por el lunes), sí, estuvo en Gasteiz, sacándose fotos con los lehendakaris Garaikoetxea e Ibarretxe. Yo, lo siento porque soy consciente de que es impopular, no puedo evitar preguntarme: ¿y dónde estaba Otegi cuando esos mismos lehendakaris ejercían? ¿Qué decía? ¿Qué hacía? Ya sé que soy un tipo raro en esta Euskadi que premia con generosidad a la izquierda abertzale cuando se presenta con cara de no haber roto nunca un plato, pero se me siguen revolviendo las tripas ante estos ejercicios de transformismo.

Ni idea

He leído con interés el editorial de Diario Red, el digital de Pablo Iglesias, sobre “¿a quién le interesan unas elecciones ahora?” y he llegado rápidamente a una conclusión: no tienen ni idea y no les importa. O eso, o mienten. Bueno, no mienten, retuercen la realidad para que encaje en su visión: aseguran que el PSOE sí las quiere. ¿Seguro? También me llama la atención que afirmen que a Podemos no le interesan cuando es el partido que hoy más las busca junto a Vox. Y me sorprende que en el editorial no mencionen a Bildu, que junto a Podemos, BNG, PP y Vox, son los partidos a los que una convocatoria electoral ahora les beneficiaría.

Carta de San Pedro a la afiliación

Lo que más me ha llamado la atención de la última carta de Pedro Sánchez, inmaculado, como siempre se presenta a su afiliación, es que, para ser el suyo un partido “profundamente feminista”, el lenguaje inclusivo se la trae al pairo. Sí, eso es lo que más me ha llamado la atención, porque el resto está condicionado. Si no sale nada más que lo que conocemos, que es lo que Sánchez da por hecho en todo el texto, la carta valdrá algo. Si sale algo más, si no es solo un asunto de tres sinvergüenzas que se repartían el dinero y las chicas, esta carta en la que quien personaliza el PSOE intenta pulir las máculas, tendrá un valor todavía mayor.

Mientras tanto

El nuevo frente que Netanyahu ha abierto en Irán le resulta muy útil para desviar la atención y continuar la masacre en Gaza. Lo avisa, cómo no, Javier Espinosa en Bluesky: “Decenas de muertos en una enésima masacre israelí en Gaza esta mañana. Irán como cobertura para continuar con el genocidio”. Debemos estar muy atentas y atentos a esta y otras noticias que el periodista comenta: “Nueva masacre israelí al ametrallar a la gente que atrae a la trampa de los puestos de ayuda humanitaria”, “Israel continúa con el genocidio de Gaza. Más de medio centenar de palestinos asesinados en las últimas horas”.

Haciendo amigos

Nico Williams puede ir al FC Barcelona cuando y como quiera. Para quienes somos socias y socios del Athletic, mejor si no lo hace. Y si lo hace, mejor si deja dinero. También puede quedarse, atajar los rumores, dejar claro que jugar Champions en San Mamés como local es un reto que le motiva. Pero si se va, debería saber esto: “Lamine Yamal empieza a no caer bien en el vestuario del Barça”. “Voces importantes del vestuario han empezado a cuestionar el poder informal que está adquiriendo. Recuerdan cómo en su día se generaron tensiones similares cuando Leo Messi comenzó a influir en fichajes y alineaciones” (El Nacional).

La obsesión del PP… con el PNV

No hay medio próximo al PP, en papel, en radio, en televisión o digital, en el que no escriban o hablen del PNV. Primero, la moción de censura de Rajoy, después, la investidura que Feijóo acordó con Abascal y en la que, por motivos obvios, Ortuzar y Esteban no entraron, son dos momentos que en el PP y su entorno guardan con rencor. Pero realmente nadie puede apelar al “doble rasero” (El Debate) porque las situaciones son diferentes: Rajoy se enfrentaba a sentencias (el PNV aguantó todas las investigaciones previas). Pero sobre todo, por supuesto, por los acuerdos del PNV en Euskadi con el PSE. No es el PNV al que hay que exigir acciones.

¿Y qué hace Bildu?

Del mismo modo que no es al PNV al que hay que exigirle acción y decisiones cuando el PSOE está enfrentándose a informaciones vergonzantes y, sobre todo, muy graves, nadie puede exigir nada a Bildu aunque forme parte del bloque de investidura, aunque las principales negociaciones con el PSOE hayan sido secretas (la operación Asirón y la gestión de las y los presos de ETA), ni aunque haya sido, con diferencia, el partido que más fácil se lo ha puesto a Sánchez en el Congreso. Pero si leo que “ERC y BNG piden la comparecencia de Sánchez para que dé explicaciones” (El Imparcial), es lógico que me pregunte: ¿por qué no se suma Bildu?

Lo que hace el PP

Es el PP el que debe llevar la iniciativa en este momento, lo tiene que hacer porque el sábado pasado convocó una manifestación con mitin en Madrid para asegurar que era urgente que Pedro Sánchez saliese del gobierno. Con todo, creo que Núñez Feijóo está haciendo algo inteligente por primera vez: dejar que el PSOE se cueza en su propio caldo. Y justo cuando acaba de acertar, va el líder del PP y nos recuerda lo evidente: “Feijóo rechaza ‘cordones sanitarios’ a Vox” (Vozpópuli). Es decir: vía moción de censura, vía elecciones, su opción es aislarse con la extrema derecha. Si esa es su decisión que sea coherente con ella.

Y lo que hace Israel

Mientras miramos a Irán con preocupación, “la guerra de Israel contra Irán no detiene su genocidio en Gaza. Otros 44 palestinos asesinados en las últimas 24 horas”. Lo escribe Javier Espinosa en Bluesky. Y hace bien en recordarnos que el ejército de Netanyahu, por lo menos de momento, tiene capacidad para golpear a Alí Jamenei, mantener una presión intolerable en Cisjordania y seguir machacando a la población de Gaza. Lo que estamos viendo, lo que están permitiendo los líderes del mundo, empezando por Trump, es insostenible y vergonzosa. Por lo menos tenemos que asegurarnos de que la historia les condene.

¡Cómo no vamos a pitar!

Me sorprendió la pitada al Barça en el último partido en San Mamés, lo confieso. Así de cándido soy. Me limité a levantarme sin aplaudir, que era mi plan desde el principio. Ahora creo que pitaría: Enric Masip intentando chulearnos, Mundo Deportivo asegurando que Nico Williams, Luis Díaz, Marcus Rashford e Ivan Perisic, están “locos por el Barça”, y Sport contando que el pequeño de los Williams “está dispuesto a rebajarse el sueldo” (Fichajes.com). Si no saben dejarnos en paz tendremos que aprender a defendernos. También Nico debería atajar todos estos rumores para mantener el afecto a la familia que tenemos en Bilbao.

Ni una brizna de responsabilidad

No hablo del pataleo en el Congreso. No hablo (lo hago más adelante) del ataque al euskera en el Senado. No hablo de Isabel Díaz Ayuso despreciando todo lo que no conoce (y es mucho). Todo eso es grave, sin duda. Pero esto, también: el vídeo de “La banda del Peugeot”, hecho con inteligencia artificial, con el que intentan denunciar las supuestas connivencias de altos cargos del PSOE (los más altos, ahí está lo grave) con lo que toda la vida han llamado “conseguidores” en el propio partido socialista, es una muestra clarísima de irresponsabilidad. El uso de esta tecnología, altamente contaminante, deja claro lo que le importa al PP todo.

Lo grave

Lo que está pasando en el PSOE (no esquivo el charco) es grave. Lo es porque estamos hablando, otra vez, del secretario de organización: de Ábalos a Cerdán. Malo. Igual que cuando hablábamos de los tesoreros del PP, que todos acabaron imputados, uno detrás de otro. Malo, también. Malo porque hablamos de altísimos cargos, de puestos de confianza máxima, de personas que no actúan sin que los principales líderes de sus partidos lo sepan, lo toleren y den la bendición a los supuestos delitos. Malo, sobre todo, porque extiende la mancha de la corrupción a toda la política, al sistema democrático de modo global.

El ataque

Por supuesto, si Alfonso Serrano no se sonroja con su propio discurso, no voy a tener yo reparos para señalar sus barbaridades. El senador del PP se aferró a la literalidad: ¡claro que los presidentes autonómicos podían comunicarse en castellano en su reunión igual que en el consejo de gobierno en Gasteiz pueden hacerlo! Entender que también es posible hablar en euskera, catalán y gallego (que Alfonso Rueda lo haga no incomoda a nadie en el PP) es una cuestión de voluntad, de reconocimiento al otro, de generosidad, incluso. Serrano, como Díaz Ayuso, como Núñez Feijóo (quiera o no), han optado por no entenderlo. Por la barbaridad.

No son ellos, somos todos

No son ellas y ellos, las políticas y los políticos, somos nosotras y nosotros: las ciudadanas y los ciudadanos los que creamos sociedades cada vez peores. Hemos empoderado a ambiciosos, dejamos pasar a populistas de base fascista, algunos defienden a sus corruptos porque los otros son peores, tomamos como modelo a Musk, Milei o Trump. Pero también a otros que son, incluso, más peligrosos: “El 64% de los israelíes consultados en este sondeo abogan por el exterminio de toda la población de Gaza. ‘No hay inocentes’. El problema no es Netanyahu”, denuncia Javier Espinosa en Bluesky citando una información de Haaretz.

Te matan y, además, lo haces mal

Hace muchos años, tuve la enorme suerte de vivir una temporada en el norte de México. Allí estuve con periodistas de Chihuahua. Compañeras y compañeros amenazados pero valientes que informaban sobre el narcotráfico y la corrupción. Cuando regresé a Euskadi, mantuve el contacto y pude recibir noticias: les asesinaban, el narco les baleaba. Ahora llega a México Pablo Iglesias para explicarles cómo tienen que hacer su trabajo: “La Base América Latina despega desde México con una radiografía crítica de los medios hegemónicos” (Diario Red). Ojalá tuviese yo una décima parte de la autoestima de Pablo Iglesias.

«Otro lunes cualquiera en Gaza»

Porque resulta incómodo, porque resulta doloroso, porque nos da rabia, porque no lo entendemos, por todo eso tenemos que mirar de frente cada día el sufrimiento que el gobierno y el ejército israelíes están generando en la población palestina: “Otro lunes cualquiera en Gaza: Las fuerzas israelíes asesinaron al menos a 60 palestinos en Gaza, incluidas al menos 14 personas cerca del supuesto centro de ayuda (en realidad una trampa mortal) de Rafah, regentado por mercenarios apoyados por Tel Aviv y Washington”, escribía en Bluesky el periodista experto en conflictos en Oriente Próximo, Javier Espinosa.

Ahora, vamos con las nimiedades

Sí, comparado con cómo están matando a la población de Gaza, todo lo demás son nimiedades, y las cuitas internas de la izquierda española, más. Cacahuetes. Galgos y podencos. El frente judaico popular y el frente popular de Judea. “Compromís permanece de momento en Sumar pero exige ‘autonomía’ y ‘relaciones horizontales’”, leo y me encojo de hombros. Pero no dejo pasar esta noticia en Público porque creo que es mi obligación señalar que ante el momento, en el mundo y en España, su España, donde gobiernan, la ensalada de nombres se ha pasado de vinagre. Al final, Yolanda Díaz solo se ha liderado a sí misma.

¡Que las transferencias no son regalos, que es la ley!

Uno de mis memes favoritos es el de Novak Djokovic gritando, supongo que es porque mi momento vital va por ahí y porque estoy un poco cansado de oír gilipolleces. Por ejemplo: leo esto en Vozpópuli: “Sánchez sí da grano al PNV: 22 traspasos pendientes a cambio de tragar con los escándalos del PSOE”, y me pongo como el tenista gritando a la pantalla: ¡que las transferencias no son regalos, que es la ley, y que son PSOE y PP los partidos que mercadean con ellas, no el PNV que las exige y se ve obligado a negociarlas todas las legislaturas! El “raca-raca” siempre fue el de la trinchera española.

El verdadero problema estadounidense

EE.UU. tiene muchos problemas, empezando por que si se repitiesen las elecciones hoy, nadie apostaría a que Donald Trump no fuese a ganar. Siguiendo por que lo más probable es que nadie tenga que volver a votar en aquel país. Los planes de Trump son claros: detonar la democracia desde dentro porque choca con su ambición. Pero el verdadero problema de EE.UU. es este: “Preocupa el aumento de los niños que viven con al menos un padre adicto a las drogas o al alcohol”. Hablamos de “aproximadamente 18.9 millones de niños” y niñas. Y lo admiten en Voz.us, el diario más trumpista en castellano.

Y más

Hay más problemas, en EE.UU. y que EE.UU. ha exportado al mundo: “El exjugador de baloncesto Pau Gasol ha desvelado haber recibido ‘presiones de la industria alimentaria’ durante la presentación de su documental ‘Obesidad infantil. La pandemia ignorada’” (El Plural). Yo lo tengo claro: la industria de los procesados tan dañinos para nuestro cuerpo y la peor dieta del mundo son inventos estadounidenses. Inventos que son muy rentables y por eso han tenido muchísimo éxito. Éxito empresarial, claro, porque zampando más sales y azúcares de los que necesitamos perdemos nuestra salud.

Lo que a Sortu no le gusta

La final de la Europa League en San Mamés solo tuvo un lunar: que no la jugó el Athletic, que estuvo solo a un paso de lograrlo. Todo salió bien (salvo eso y que el partido no tuvo mucho fútbol, según las crónicas), eso no lo duda nadie. Bueno, alguien, sí: Sortu Bilbo se quejó porque los ingleses tomaron Bilbao… exactamente igual que las y los bizkainos hemos tomado Sevilla en varias ocasiones. Exactamente igual o peor, que nadie venga ahora de superdigno y supercivilizado, que algún pis vasco en la Giralda ya habrá caído. ¿O esto es como lo del turismo, que solo molestan cuando vienen porque en Sortu nadie es turista?

Son fachas

Solo era cuestión de tiempo: “Vox y Aliança pactan por primera vez en el Parlament” (La Vanguardia). Los fachas españoles y los fachas catalanes “acuerdan enmiendas en una moción del partido de Sílvia Orriols contra el uso del velo islámico en espacios públicos, que ha sido rechazada por la Cámara”. Lo que les une puede más que lo que les separa: el rechazo al diferente. Y ojo, no voy a poner paños calientes a que hayamos normalizado prácticas machistas que habíamos superado, por lo menos, en parte, y han sido importadas de nuevo. Pero a mí sí me importa quién lo denuncie y qué ha hecho y dicho antes.

Este, también

Donald Trump va de patriota pero no lo es (tampoco lo es Sílvia Orriols, y tampoco lo son muchos de Bildu que anteponen la izquierda al país). La decisión de su gobierno, que “bloqueó la inscripción de estudiantes internacionales en la Universidad de Harvard” va en su contra. Renunciar a capital humano de primer nivel intelectual y económico (becados o no, los cursos cuestan más de 50.000 euros, según varias fuentes) es un error evidente. Ahora tienen que moverse rápido las universidades europeas para atraer ese talento y para presentarse como oportunidades abiertas y estables a esas personas con mayor potencial que la media.

¡Ay, el colaboracionismo!

Quien colabora con el fascismo, con cualquier expresión del fascismo (y en Euskadi conocemos bien a las y los que lo han ejercido), es un colaboracionista. “Normalizar la brutalidad tiene un precio. Muy alto para las víctimas pero también para los victimarios. Cuando ocurrió en la Alemania nazi acabaron pagando hasta los aliados de Hitler como Ernst Röhm. Pensar que eso no ocurrirá en Israel es ignorar la historia”. Esto que escribió Javier Espinosa en Bluesky debemos llevarlo a la práctica lo más literalmente que podamos, en el caso del gobierno y ejército israelíes, y también en el caso vasco.

Un “eskerrik asko” empañado

Cualquier niña o cualquier niño que ha querido sacarse una foto con Óscar de Marcos ha podido hacerlo. Sin embargo, ayer, muy pocas niñas y muy pocos niños pudieron despedir al capitán del Athletic. La hora que impuso La Liga lo impidió. Un horario que también generó complicaciones a las y los adultos que quisieron quedarse a aplaudirle antes de volver a casa. Pero esta denuncia no debe empañar la trayectoria deportiva y el valor humano extraordinarios que ha demostrado cada temporada Óscar de Marcos. Una persona que encarna como pocas ese: “Herritik sortu zinalako maite zaitu Herriak”.