El dinero es una movida

El dinero es una movida. Nos desfondamos para ganarlo y tenemos la sensación de que lo gastamos con demasiada facilidad cuando podemos. De pronto, viene una época como la actual en la que todo se encarece, por la guerra o por el morro, en la que la inflación hace que valga menos lo que tienes, y en la que alguien indeterminado de alguna institución demasiado alejada de todo decide que te ha tocado y vas a pagar más, mucho más, por tu hipoteca al mes. Qué movidote. Eso, sí, como denuncia Nacho Chaparro, lo que nosotros tenemos en el banco no se revaloriza, no vaya a ser que las entidades den menos beneficios. ¿A quién?

Y la economía, un desastre

No creo que sea cosa de la caverna mediática, que tiene lo suyo (para empezar, tiene poca credibilidad), ni de las manos negras de Bruselas (ha llegado Podemos al poder y ya nadie habla de “los hombres de negro”), creo que es una evidencia esto que resumen bien en República: “La economía española, en caída libre: se disparan el Euríbor, la inflación y el precio de los alimentos”. “El encarecimiento de las hipotecas, la cesta de la compra y la energía ahogan a los hogares”. No hace falta ser un contertulio de Jiménez Losantos ni un columnista del Abc para leerlo y preguntarse: ¿y qué hace el gobierno español?

El engaño era una estafa

Mientras los más irresponsables siguen soltando nombres en Telegram y Twitter de diputados socialistas que fueron a cenas (inocentes de otras acusaciones hasta que se demuestre lo contrario), las y los periodistas siguen dando a conocer detalles de lo que sucedía en las entrañas del “caso Mediador”. Básicamente, la liebre ha saltado porque los empresarios que pagaron para conseguir contratos o evitar sanciones se sintieron engañados. Los pagos, de 6.000 € para arriba, según vemos en Nius, no traían los beneficios esperados, y ahí acabó todo. Tampoco me dan pena los estafados que buscaban salir favorecidos.

Escribir bien es la diferencia

Hace tiempo leí un acicate parecido a esto: es necesario esforzarse en escribir bien porque hacerlo era lo que diferenciaba a las buenas personas de las malas. Palabras más, palabras menos. Según avanzaban los teclados predictivos pensé que, además, era lo que diferenciaba a las personas de las máquinas. Pero con ChatGPT esto también ha cambiado. Galder Reguera, que de escribir bien sabe un rato, alertaba en Twitter sobre un nuevo valor de esta inteligencia artificial: “Entre otras cosas, redacta mejor que la gran mayoría de las personas que conozco”. Solo espero que los humanos sigamos encontrando mejores historias.

El Metaverso es una cosa

Además de que yo soy, de natural, un tipo simple, estoy titulando los párrafos anteriores así solo para llegar a este, sobre el vídeo en el que Jon Aramaka, conocido en Internet como Lord Draugr, asegura con retranca que “el Metaverso es una cosa”. El clip me ha servido para conocer al creador y para pasar 20 minutos como si nada enterándome de unas cuantas cosas. El youtuber no cuenta mucho nuevo pero sí lo cuenta muy bien, y resulta muy interesante para ver hacia dónde caminan las empresas tecnológicas con sus piernas virtuales. Un sendero que la mayoría no queremos comenzar. Entonces, ¿por qué se empeñan?

La política chusca

Lo que estamos viendo sobre el “caso Mediador” es propio de la política más chusca. Ningún partido ni ningún país están libres de que aparezca un “Tito Berni” al que, supuestamente, le guste lo estimulante, y que para pagárselo recurra a empresarios y contacte con autoridades para sostenerlo. Todo ello desde un escaño de diputado en el Congreso, desde el que se relacionaba con gente que pedía “tener sexo con un ‘churumbel’”, en referencia a un travesti, o que iba “tan borracho que al enviar por WhatsApp la cuenta a la que debían pagarle las comisiones, le faltaban números y no las pudo cobrar” (la SER).

Mamarrachos SL

Por muy chusco que sea lo que está pasando en el PSOE, que lo es, no podemos olvidarnos de las presunciones de inocencia, la mesura y la moderación. Todo lo que ha olvidado Alvise Pérez, ese agitador de la extrema derecha al que alimentó Ciudadanos: “En 24 horas ya tiene la lista completa de los 16 puteros drogadictos socialistas. Va a sacar uno cada día en su canal de Telegram. El resto de periodistas pueden pasarse por Moncloa para recoger su nuevo par de rodilleras, y una bolsa de cacahuetes de regalo”, tuitea otro mamarracho ultra, dando por hecho lo que la prensa, por responsabilidad y sensatez, no puede.

¿De la infanta Cristina?

Cuentan en Vozpópuli que “Iñaki Urdangarín recibirá 25.000 euros al mes de la infanta Cristina”. Cuentan también que la hermana de Felipe VI gana “unos 33.300 euros al mes” como directora de proyectos de cooperación en la Fundación Aga Khan (¿qué méritos ha presentado? ¿Qué hace para estar tan bien remunerada?). Cuentan también en el digital que, para pagar lo estipulado a Urdangarín “claro” que “tendría ayuda de su padre, el rey Juan Carlos I”. Y que, además de ese dineral, su exmarido pide dos millones de indemnización (lo que le habrían ofrecido por sus memorias), el chalet en Bidart y poder usar la casa en Baqueira.

Y ya sabemos cómo lo logrará

Cuando el Banco Santander “confía en que su negocio en España destacará en los próximos tres años” (El Independiente) ya sabemos a qué se refiere porque el modelo de negocio es de sobra conocido. También por sus accionistas. “Plan de automatización”, “eficiencia del negocio”, “bajar un 10% el coste por cliente”, “en España se centrarán en la rentabilidad”, “unidades de negocio globales”, “la presidenta se mostró optimista” y “el mercado valoró positivamente el plan” son frases sueltas que, en su conjunto, dibujan al banco pérfido en su más exacta y perfecta expresión.

Pagamos todas y todos

Creo que el de las y los letrados de la Administración de Justicia en España es un buen ejemplo para poder observar la lucha sindical actual: los sindicatos, con intenciones políticas evidentes, exprimen a un cuerpo funcionarial homogéneo cuyo paro tiene perjuicios directos sobre la ciudadanía, y hacen exigencias que pagamos entre todas y todos que, si salen adelante, serán en beneficio de un grupo y del propio sindicato. Una lucha que desde la media distancia se ve muy bien y que no difiere en casi nada a la colección de manifestaciones que a diario bloquean nuestras ciudades con cada vez menos efecto pero con un objetivo diáfano.

Yo, también

Leo en Público que “políticos, asociaciones y ONG denuncian la situación de Pablo González cuando cumple un año de prisión en Polonia”, y solo puedo sumarme. La situación del periodista es improrrogable e insostenible. Incluso aunque las sospechas se conviertan en acusaciones y estas queden probadas (cosa que dudo), el año en prisión que González se ha comido no tiene ninguna explicación, y que la diplomacia española se haya mostrado tan timorata y lenta no tiene ninguna justificación. Pero ya no es una cuestión de los estados: Europa es la que no puede permitir ni permitirse una retención como la que estamos viendo.

La táctica del mediocre

La del ventilador de mierda es la táctica del mediocre, de quien no tiene nada que aportar y desvía la atención arrojando guano sobre las aspas a toda leche para que salpique y huela mal. Es lo que hace Díaz Ayuso (es lo que hacen especialmente las y los de Bildu en la CAV) cuando sugiere que es Sánchez el que tiene que probar que no tiene nada que ver con el escándalo de los diputados socialistas que lideraba “Tito Berni”. La presidenta de Madrid se permite el lujo de lanzar una acusación al aire, metiéndose cual Revilla en ámbitos más allá de su comunidad, y recibiendo el aplauso de una caverna en la que se ceban los monstruos.

Y ahora, que lo expliquen

Isabel Díaz Ayuso no puede señalar a Sánchez gratuitamente. Pero el PSOE no puede hacer mutis por el foro: lo que estamos sabiendo de los diputados que lideraba Juan Bernardo Fuentes, al que la presidenta madrileña se refería como “Tito Berni”, tiene que empujar a alguien a dar la cara. No sé si a Sánchez, pero sí a alguien que tenga mando en plaza en el grupo socialista en el Congreso, por lo menos. Si la del ventilador es la táctica del mediocre la del avestruz lo es del cobarde. Y si no sales y hablas otros lo harán por ti. En el PSOE sabrán a qué esperan y por qué. Es posible dar la luz sin encender nada más.

El contador de la vergüenza

Se le achica el espacio a la izquierda en España: un escándalo de sus diputados no facilita la salida electoral al PSOE. Y el goteo de la vergüenza (600 rebajas de pena, según República) provocado por una interpretación rancia de la conocida como ley del “solo sí es sí” asfixia a Podemos, que está siendo percibido como un partido demasiado orgulloso para ser eficaz. Lo que no resta importancia, y no dejaré de insistir en ello, en lo cavernarios que son algunas y algunos jueces en España, que están prestándose a hacer una interpretación contra la igualdad y la seguridad por perjudicar a un partido y un gobierno.

Para tomar nota

Si Canadá impide “a partir de este martes el acceso a TikTok desde móviles oficiales” por algo será. Ni pongo el ventilador, como Díaz Ayuso, ni soy un cavernícola, como algunas y algunos jueces: es que la propia China limita el acceso a la herramienta a toda su población y EE.UU. tampoco quiere que en los móviles de sus representantes (congresistas y senadores) esté la aplicación. Es evidente que no nos fiamos de la herramienta por la cantidad de tiempo que nos hace perder, porque difunde contenido incluso peligroso y porque no está claro quién ni para qué recibe la información que los usuarios generan con su actividad.

Los hermanos del norte

Ha sido el parlamento francés el que ha frenado, en última instancia, la subida hasta los 64 años de la edad de jubilación que pretendía sacar adelante Emmanuel Macron. La última vez que yo hice el cálculo de la mía, al sur del estado francés, me salía el resultado de 67 años porque el sistema penaliza a quienes nos hemos formado durante más tiempo. Pero no importa mi caso, sino cómo en el norte las condiciones laborales son mejores y las defienden en el legislativo. En el sur, en Congreso y Senado, Escrivá está saliéndose con la suya en todas sus imposiciones regresivas firmadas por el gobierno más progresista de la historia de España.

Qué ambientazo

Será que no sé de la nueva política, o que no alcanzo a entender cómo se ejerce en Madrid, pero este titular en 20 Minutos me parece escandaloso: “El PSOE ha votado en contra de 10 de las últimas 11 iniciativas parlamentarias de Unidas Podemos”. Un gobierno de coalición no puede llegar al Congreso de esta manera, no puede hacer visible a los ojos de las y los representantes de la ciudadanía, a los ojos de la prensa y los fotógrafos, a los ojos de quienes vemos parte de los debates por streaming, que está partido por la mitad. ¿Quién va a confiar en la reedición de una coalición que naufraga porque la han dinamitado las dos partes?

Quienes se ponen en evidencia

Una circunstancia juega a favor del actual gobierno de coalición: que la alternativa es otro gobierno de coalición liderado por el PP junto a Vox, o un gobierno en solitario de los de Núñez Feijóo en manos de Vox. Todo puede ser peor. José Ramón Hernández recupera el corte de María de la Cabeza, diputada ultra, en el que asegura que “existe un alarmante aumento de casos de homosexualidad y transexualidad debido al adoctrinamiento del Gobierno”. Hernández recuerda cómo antes la homosexualidad y la transexualidad estaban pero en el armario. Avanzar en la visibilización de estos colectivos es avanzar. Salvo para Vox.

No será el proceso a emular

Al final, el catalán no será el proceso a emular: “La división independentista ya es total”, titulan en El Plural, no sin cierto alborozo porque todos los medios españoles, incluso este, tan pegado a lo tradicionalmente progresista en España, ponen la unidad del Estado por delante de cualquier otra cuestión. Lo que queda del procés es la rotación de ERC hacia un autonomismo pragmático y una línea dura del independentismo en una deriva difícil de explicar y defender, sobre todo, por los personajes que la protagonizan. ¿Dónde están quienes se empeñaban en ponérnoslo de ejemplo? Pues rotando, como ERC, o a la deriva.

Más trampas que el Barça

El viernes pasado las empresas tecnológicas tuvieron que remitir a la Unión Europea el número de sus usuarias y usuarios activos cada mes en Europa. YouTube arrasa con más de 400 millones. Varios servicios de Google (el buscador, los mapas y la tienda de apps) pasan o se acercan a los 300. Facebook e Insta andan en 250 millones cada una. TikTok, 125. Y me sorprendieron los datos de Linkedin (122 millones) y Twitter (100), pero, claro, es que hay trampa: en el caso de Twitter, “unos 59,8 millones son usuarios registrados” (Xataka). El resto ha entrado solo a ver un tuit. En el caso de Linkedin, estaban registrados 41,8 millones.

El PSOE haciendo del PSOE

No es nuevo que el partido al que pertenezca el presidente del gobierno español se comprometa a algo con un partido político vasco después de una negociación y, luego, no cumpla. Así es la política en el Congreso de los Diputados, por lo menos, desde que yo la sigo y tengo algo de uso de razón. Pensar que todo va a cambiar de un plumazo solo porque un nuevo actor entra en juego es tan cándido que parece irreal. Pero es lo que ha pasado: el PSOE votó en contra de la derogación de la reforma laboral después de forzar una repetición de la votación, dejando a Bildu con un palmo de narices.

Y Bildu haciendo… ¿De qué?

Lo que ha hecho el PSOE encaja perfectamente en la tradición política española. Nada nuevo bajo el sol. Estas son las cartas: PSOE y PP las reparten, inician el juego y, cuando les da la gana, cogen más del mazo o, directamente, se las quitan de la mano al otro jugador. Pero, ¿qué está haciendo Bildu? ¿De verdad se pensaban que los pactos con ellos iban a ser diferentes porque sí? ¿De verdad no se lo esperaban? ¿De verdad tienen el cuajo de mantener los tuits con los que celebran el primer resultado favorable después de que el PSOE mandara repetir la votación para evitar que prosperase?

Así se trata a Vox

Vox ha estado en Ermua y nadie se ha enterado. ¿Por qué? Porque no tienen representación en la CAV y, por lo tanto, no tienen hueco en las televisiones, porque su discurso no aporta nada, porque su puesta en espera es muy triste (un señor lanzando vivas a España) y, lo más importante, porque nadie se enfrentó a ellos, así que nadie sacó la foto ni hubo actos vandálicos de los que se llaman “antifascistas”. Así es como se trata a los de Vox: haciéndoles el vacío, negándoles la notoriedad que otros les han regalado y se han regalado para que sus viejos líderes puedan tuitear contra la Ertzaintza.

Un boicot… Para la galería

Anunciantes importantes han accedido a dejar de invertir en Facebook sumándose así a un boicot contra la red social, que no se libra de las acusaciones de racismo e incentivar un discurso del odio. ¡Claro que en esta red social y en todas, y en YouTube, y en TikTok, y en toda Internet, hay muestras de xenofobia u homofobia! Pero el problema no son las redes, sino las personas. En cualquier caso, en El Confidencial explican que el agujero económico por el boicot no será tan grande: esas marcas siguen comprando espacios a Facebook en otros soportes, y las empresas medianas siguen en la red social.

“Sorpresas” del Brexit

El colmo del Brexit es el matrimonio británico que vive en el Sur de Francia, que no quiso pedir la doble nacionalidad, vota a favor de que su país abandone la UE y, cuando esta salida se consuma, llaman al hijo para que les soluciones su situación. Por eso en Magnet lo llaman la parábola “del hijo idiota”, que “considera su nacionalidad un mero instrumento para conseguir lo que siempre desee por derecho histórico”, echa la culpa a Bruselas e intenta que el alcalde de la localidad medie para que sus padres puedan seguir haciendo su vida al Sur de Francia, ¡y hasta pide una compensación económica!