Ante el temor a que nos vuelvan a restringir la movilidad, del 16 al 21 de agosto realicé una escapada a Cervera de Pisuerga, punto de partida ideal para realizar rutas por la montaña palentina. Se encuentra a 218 km de Leioa y casi todo el viaje, hasta Aguilar de Campoo, se realiza por autovía. Es una zona que conozco bastante bien, pues he estado en diferentes ocasiones, disfrutando siempre de mucha tranquilidad. Además la previsión del tiempo era muy buena, con tiempo soleado y temperaturas mínimas de 9 a 13 grados y máximas de 21 a 26. Vamos, ideal para caminar. Si embargo no di una, pues el tiempo cambió y tres días llovió, en ocasiones con fuerza. Y de tranquilidad nada, pues este año se ha puesto de moda el senderismo y las rutas en bici, por lo que había bastante gente en casi todos los lugares. Pero al mal tiempo buena cara y pensando siempre en positivo, así que pudimos hacer casi todo lo que habíamos pensado y pasado muchas horas sin la molesta pero necesaria mascarilla, por el Parque Natural de Fuentes Carrionas y Fuente Cobre.
Por el tema de seguridad, de nuevo hemos optado por un Parador para pasar las cinco noches de esta escapada, en este caso el de Cervera de Pisuerga ***, uno de los más baratos de la red, pero que hemos tenido que pagar a precio de oro, 207 € la noche, alojamiento y desayuno. Es la tercera vez que nos alojamos aquí, pero nunca lo había visto tan lleno. Eso si, desde la habitación teníamos unas magníficas vistas del pantano de Ruesga, a nuestros pies y, como telón de fondo, la montaña palentina, desde Espigüete hasta Curavacas, montañas que frecuenté en mis años mozos. El restaurante es excelente, quedándome sobre todo con el pulpo y la media tabla de quesos. La perfección no existe, así que hay que añadir unos peros. Las habitaciones necesitan reforma, el aparcamiento se queda pequeño por la alta ocupación y la gente que acude de los alrededores y, para acceder al bar hay que hacer cola, por el tema de higiene y la falta de personal. Eso lo solucionamos con rapidez, comprando un par de botellas de vino en “Sierra del Oso”, en Cervera, tomado el pote previo a la cena en nuestra terraza, sin tener que ponernos la mascarilla. No hay mal que por bien no venga.
16 de agosto. Una vez instalados en el Parador, nos desplazamos 16 km hasta San Cebrián de Mudá, donde se encuentra Bison Bonasus, reserva del bisonte europeo, con animales traídos del Parque Nacional de Białowieża, situado en la frontera entre Polonia y Bielorrusia, donde estuvimos hace 5 años. A las 5 de la tarde teníamos cita para la visita a pie (7 €), que comienza con una charla y un vídeo en el centro de visitantes, con mucha gente sin mantener las distancias de seguridad. Luego hay que caminar 2 km por una pista, sufriendo el polvo que dejan los vehículos de la visita en todo terreno (10 €). Desde una pasarela abarrotada de gente, pudimos ver y casi tocar a los bisontes, a los que daban de comer en la mano, nada que ver con lo que anuncian en la web de que esto no es un zoo y que puede que no llegues a ver a los animales.
La Diputación de Palencia cuenta con una excelente red de senderos, muy bien señalizados, para conocer la montaña palentina. Como la previsión del tiempo no era buena, el 17 de agosto optamos por uno cercano y corto, la Senda del Gigante del Valle Estrecho, magnífico mirador sobre las montañas de la zona. Por un cómodo camino, primero se accede al mirador de Peña Albilla, situado junto a la Peña del Águila (1438), para luego descender y más tarde subir al segundo mirador, el de Caldacio, por el tramo más interesante, ya que es un sendero rocoso que discurre por un robledal. Vemos buitres y algún txantxangorri. De regreso al punto de partida ascendemos a la cercana cumbre de Peña Negra (1455). Por la tarde no paró de llover.
- Punto de salida: Santibáñez de Resoba (aparcamiento km 15,5).
- Longitud: 4,5 km.
- Desnivel: 115 m.
- Tiempo estimado: 1 h 30 min.
El 18 de agosto amaneció muy cubierto con nubes muy bajas, así que optamos por desplazarnos hasta Velilla del río Carrión (44 km), por si el tiempo mejoraba, pero fue peor, pues caía un constante sirimiri. Provistos de paraguas y caminando a veces entre la niebla, realizamos la Senda del pinar natural de Velilla, que discurre por el pinar silvestre que antes poblaba buena parte de esta zona. Esta cómoda pero más pendiente ruta, cuenta con dos miradores, Pinar y Compuerto, aunque desde este último no vimos nada por la intensa niebla.
- Salida: Aparcamiento junto a la Ciudad de Brezo (Velilla del río Carrión).
- Longitud: 3,5 km.
- Desnivel: 150 m.
- Tiempo estimado: 2 horas.
19 de agosto. Por fin sale un día espectacular, así que optamos por la ruta más larga y dura de la zona, la Senda de la Tejeda de Tosande. Lo malo es que está de moda y muy masificada (más de un centenar de coches pasaron por el aparcamiento). Pese a ello, dado que la gente se reparte mucho, no necesitamos utilizar la mascarilla. Lo malo fue un grupo muy alborotador (mayores y niños), del que huíamos como de la peste, teniendo que realizar constantes paradas para alejarnos. Cuando les llamamos la atención, nos dijeron que en el monte se puede hacer de todo. Desde aquí les recuerdo la norma del Parque que aparece al comienzo del sendero: “Procura no hacer ruido para evitar molestias a las personas o a la fauna silvestre”. Pese a todo y a la buena cuesta que hay al final del trayecto de subida y al empinado descenso, es el sendero que más nos ha gustado, pues discurre por bosques de robles y hayas, praderas y, su principal atractivo, los 743 tejos inventariados, algunos muy viejos, casi milenarios. Lo peor, la cuesta sin sombra para regresar al coche.
- Salida: Aparcamiento cerca de Dehesa de Montejo.
- Longitud: 10,2 km.
- Desnivel: 418 m.
- Tiempo estimado: 3 h 30 min.
20 de agosto. Para hoy tenemos previstas dos rutas cortas, pero el día no promete. Comenzamos por la primera, la Senda del Roblón, que tiene como meta llegar, tras una empinada subida, al “Abuelo”, el roble de mayores dimensiones y más longevo de la montaña palentina, ya que el Roblón de Estalaya tiene 17 metros de alto, un perímetro en su base de 10,6 m y más de 500 años de edad. La ruta de descenso es más suave y larga pues se regresa al punto de partida bordeando el embalse de La Requejada.
- Salida: Aparcamiento a la entrada de Estalaya.
- Longitud: 4,6 km.
- Desnivel: 125 m.
- Tiempo estimado: 1 hora 30 minutos.
Nada más terminar la Senda del Roblón comienza a llover, cosa que hará durante el resto de la jornada, así que renunciamos a realizar la siguiente y cercana ruta, la Senda del bosque fósil. Como me parece muy interesante y como la anterior, la he realizado en dos ocasiones precedentes, os comento que el objetivo es contemplar la pared rocosa en la que se conservan las marcas de los bosques que poblaron la zona hace 300 millones de años. El sendero, casi circular, continúa hasta el mirador de la Pernía, donde iniciamos el descenso al punto de partida.
- Salida: Aparcamiento de Verdeña.
- Distancia: 3,2 km
- Desnivel: 120 m.
- Tiempo estimado: 1 h 10 min.
No todo va a ser caminar. El día que fuimos a Velilla del río Carrión, a nuestro regreso aprovechamos para recorrer la carretera P-210, durante 54 km, por la llamada “Ruta de los pantanos”, que enlaza la citada población con Cervera de Pisuerga, pasando por Otero de Guardo, Camporredondo de Alba, Cardaño de Abajo, Alba de los Cardaños, donde se encuentra el mirador con la mejor vista, Triollo, La Lastra, Santibáñez de Resoba, Ventanilla y Ruesga. En la ruta contemplamos de cerca el Espigüete y bordeamos los pantanos de Compuerto, Camporredondo y Ruesga. Aunque situado fuera de la ruta, incluyo las imágenes del embalse de La Requejada, tomadas en tres fechas diferentes.
Para completar el menú, un poco de románico. En esta ocasión nos hemos acercado a tres iglesias, aunque en las dos primeras ya habíamos estado dos veces. Desde la Senda del Roblón nos desplazamos hasta la colegiata de San Salvador de Cantamuda, que data de 1185. Desde la Tejeda de Tosande fuimos a Pisón de Castrejón, donde se encuentra la iglesia de Ntra Sra de la Asunción (siglo XIII). Junto a ella hay un área de picnic en la que comimos el bocata. Finalmente, aprovechamos la tarde del único día de buen tiempo para desplazarnos 27 km hasta Moarves de Ojeda, para visitar la iglesia de San Juan Bautista, de finales del siglo XII, en la que destaca el Pantócrator. Lástima que no coincidimos con el horario de apertura para acceder a su interior.
21 de agosto. Aunque estuvimos todos los días comiendo o tomando algo en Cervera de Pisuerga, aprovechamos la mañana del día de regreso a casa para recorrer la calle Mayor, desde la plaza del mismo nombre hasta el Ayuntamiento. Cuenta la calle con soportales, algunas casas blasonadas y un notable edificio, la Casa de los Leones. Sobre la localidad se alza Santa María del Castillo, templo gótico del siglo XVI. Dos días antes nos acercamos a un lugar que me gustó en un viaje anterior, el eremitorio rupestre de San Vicente, pero me dio pena volverlo a ver debido al estado de suciedad que presentaba.
Como comenzó, en Cervera de Pisuerga concluyó esta escapada por la montaña palentina.
Muy buen reportaje, muy real, muchisimos turistas en toda la Montaña Palentina. Que pena que no hayas podido disfrutar de la tranquilidad que normalmente tenemos. Un saludo desde Arbejal.
http://WWW.CASALASVACAS.COM
Eso lo que pasa con la pandemia, que los sitios de interior se han revalorizado. He estado muchas veces en la zona y siempre he disfrutado de su tranquilidad. Se me olvidaba que debido a la lluvia no pude realizar la Senda del Oso. Pensaba salir de tu pueblo. Un saludo
Bonito artículo de la zona de donde procede mi familia…..una pena que con este tipo de artículos lo único que se consiga es masificar una zona y siparque natural, que el gran atractivo que tiene es la tranquilidad y la no masificación.
Me sorprendió que an algunos lugares hubiera tante gente, pues siempre me ha parecido una zona tranquila.
El norte de Palecia y su montaña siempre ha merecido su visita . Bella zona, pequeñas iglesias cargadas de románico e historia, bonitos parajes, buena gastronomía.
Un lugar con mucho encanto
Enhorabuena Antonio por la descripción tan detallada de las rutas y por la eficiencia del aprovechamiento de los días y los desplazamientos tan acertados que hiciste en tan pocos días que dedicaste a tus excursiones
Soy hijo de descendientes del Valle Estrecho , un pueblo entre Ventanilla y Santibáñez llamado San Martín de los Herreros desde el cual se puede acceder a la Peña Redonda, ( atalaya desde la cual se otea toda Palencia )
Ojalá en tu siguiente estancia puedas coronarla a pie ya que es poco compleja y nada masificada.
Confirmo tu decepción del penoso y vergonzante estado del Eremitorio Rupestre de Cervera. Una vergüenza al pasado de una tierra milenaria y un descrédito del que el Ayuntamiento es el único responsable de su decrepitud.
Este año no pude ir, pero si mis hijos adolescentes con mi madre y mi hermano, y te confirmo la masificación de la Ruta de Tosande. ¡Está de moda !
Reitero mi enhorabuena por tu generosidad en hablar con tanta loa a la Montaña Palentina
Te seguiré para gozar de tu pasión montañera y viajera
Muchas gracias, Miguel Ángel. es una zona que me encanta.
Gracias pues esto permite que se conozca un lugar mágico que la Diputación de Palencia lleva años sin saber vender y eso que uno que fue alcalde de Cervera se aprovecha de ello y no sabe defender la Montaña Palentina.
Hija mia No vuelvas por Odin
Lo tienes q haber pasado muy mal
Desde la reserva bisonbonasus nos da mucha pena de lo q tienes q haber pasado con tanta critica q miedo.
Nosotros ….. en nuestra reserva de momento ningún contagio, bueno salvo tu critica despiadada. Agurrrrrrrr
Me parece fenomenal que no haya habido ningún contagio. No lo pasé mal ni mucho menos, pero creo que las normas sanitarias son para cumplirlas e indicar bien las cosas en la publicidad. Esto no quita para que sea una gozada ver los bisontes tan de cerca.
Da gusto leer a uno de Lejona una discreción tan buena de la montaña palentina, yo soy de Astrabudua y llevo muchos años disfrutando de estos parajes. Oso ona eskerrik asno.
Soy Mario Rojo de Rebanal de las llantas. De la Montaña Palentina Me parece unas vacaciones muy especiales pues es mi tierra en la que me he criado hasta los 13 años y no hay nada más bonito
Encantada de leer tu comentario sobre esta tierra nuestra a la que tanto quiero. Lástima del tiempo. A pesar de todo lo aprovechasteis muy bien. También estupendo el reportaje, lindas fotos
Casualmente, esos días, del 17 al 21, hemos Estado mi esposa y yo en Cervera (ella es cerverana, conocemos muy bien la preciosa montaña palentina de muchos veranos), aunque vivimos en Madrid y en verano en la sierra madrileña. Previamente contacto con el Parador, y en vista de su alta ocupación y más altos precios, nos alojamos en el Hotel Peñalara, en el mismo Cervera saliendo hacia Potes, la experiencia ha sido excelente, está muy renovado, habitaciones agradables con vistas excelentes a la Iglesia de Santa María del Castillo y al pico Almonga, todas las medidas de seguridad, trato magnífico, desayunos, comidas y cenas espléndidas, y muy buen precio, en resumen, un alojamiento ideal para visitar Cervera y su comarca. Un par de días de buen tiempo y otros dos de nubes y algo de lluvia, pero temperatura muy agradable, hicimos excursiones al Santuario de la Virgen del Brezo, a 27 km hacia Guardo, precioso lugar metido en la montaña, al roblón milenario, camino de Pobres, a unos 15 km de Cervera, que tiene un camino nuevo y amplio para llegar y luego volver por el pantano de Vañes, acabando en Herreruela de Castillería, pequeño y bonito pueblo en la montaña camino de Barruelo y Brañosera. Han sido 4 días de estancia muy agradable, con bastante gente en la villa cerverana, a pesar de no poder celebrar este año las estupendas fiestas de la Virgen del Castillo y San Roque. Lugar y alojamiento ideal es para descansar y relajarse con un naturaleza excelente
A mi me despistó que San Roque lo pasaron al lunes y estaba casi todo cerrado. Mi bar en Cervera fue La Parada, pues me encantó el trato recibido el primer día, así que pasé por él todos los días.
El hotel se llama Peñalabra, por error he puesto Peñalara también estaba prácticamente lleno pero no se notaba, muy bien organizado todo, dimos paseos por un magnífico camino que va de Arbejal hasta la salida de Cervera hacia Aguilar de Campoó a orillas del río Pisuerga, con paisajes maravillosos
Te podías haber acercado a Barruelo de Santullán 11kms de cervera y visitar el museo minero
En la zona de Barruelo estuve alojado cuando se celebró en Aguilar Las Edades del Hombre.
Yo veraneo en Fontecha De la Peña y quiero decir,que me encanta,todo lo que rodea nuestra montaña palentina, y suelo utilizar una frase que siempre digo, es un privilegio que solo unos pocos podemos disfrutar.
Ya lo creo, Rober.
Hola mi mujer y yo estuvimos del 13 al 17 de agosto en Cervera en una casa rural molino . Una gozada de alojamiento . Tiempo maravilloso todos los días. Hemos hecho todas las rutas que se comentan y tengo que decir que de masificación nada. Es más a veces echaba de menos ver a alguien más en el monte pero muy bien . Para repetir
Mario, tú de Rebanal, yo de Santibañez. Lo bonito es recordar cuando íbamos por allí con las vacas, por la Matona y Piedras Negras… o con las ovejas al Alto la Varga…
Gracias por tus explicaciones, se nota que son reales y siempre va bien saber lo bueno y lo malo de cada lugar, aunque este Año con la pandemia está siendo complicado en muchos lugares. Tengo un amiga que es de la zona de Bárcena de Campos y de Cervera de Pisuerga y veranea en ellas y cuenta maravillas.
Comentario desafortunado el del coordinador de la reserva de Bisontes.
Cada visitante vive y explica su experiencia según le va, pues a lo mejor en una próxima visita lo vive diferente.
Voy a ser un poco egoísta, los que llevamos tantos años yendo a Cervera de Pisuerga, queremos seguir teniendo esa tranquilidad que nos gusta, a ver si va a pasar como en San Juan de Gaztelugatxe en Bermeo o La Playa de las Catedrales en Ribadeo, al final todo se masifica y nadie disfruta como es debido de esas bellezas
Hola, Bela. Eso pensamos todos de lo que tenemos cerca, máxime cuando he estado en los sitios que citas unas cuantas veces y desde que se pusieron de moda no he vuelto a ir. Menos mal que la montaña palentina es muy grande y salvo lugares concretos, uno puede perderse por lugares muy tranquilos. Un saludo.
La verdad… llevo tiempo por ir a esta zona y siempre termino en otra. Un detallado viaje que incita a no cambiar de destino. Un abrazo.
Hola soy de Málaga. Me enamoré de la montaña palentina la primera vez que estuve hace unos años…tanto que compré una casa en ruinas y la estoy arreglando…en Cervera..voy en invierno y en verano..es un sitio estupendo para los que nos gusta el campo y la tranquilidad.
Es un lugar precioso y, salvo este verano, muy tranquilo. Un saludo.