ESTAMBUL (1): La Mezquita Azul y el Palacio de Topkapi

Como en estas fechas no suelo viajar, os voy a hablar de algunos lugares visitados hace años, de los que todavía no había escrito. Soy consciente de que habrán cambiado bastante, pero sus monumentos perviven. Eso si, he actualizado los precios. Comienzo por una de las ciudades más fascinantes del planeta, que he visitado en dos ocasiones, iniciando la última el 15 de octubre de 2011, con una sorpresa: llovía y hacía bastante frío. De hecho tuve que comprar un gorro para superarlo. Ahora resulta mucho más fácil llegar a la mayor ciudad turca, pues Turkish Airlines tiene vuelo directo desde Bilbao. Para alojarnos elegimos el Hotel Avicenna, que ocupa una antigua casa otomana a unos pasos de la Mezquita Azul y Santa Sofía, junto a las que pasamos todos los días. Cuando salimos a la calle nos sorprendió ver el final del espectáculo aéreo Breitling.

Las zonas históricas de Estambul fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 1985, así que al día siguiente a nuestra llegada, 16 de octubre, en primer lugar nos dirigimos a visitar uno de los edificios más emblemáticos, la Mezquita Azul (Sultan Ahmet Camii en turco), construida por el Sultán Ahmed I entre 1609 y 1616. Es una de las pocas mezquitas que cuentan con seis minaretes. La cúpula central tiene 23 metros de diámetro y 43 metros de altura. Se encuentra en la plaza Sultanahmet (Tranvía: Sultanahmet, línea T1). Abre todos los días de 9 a 19 horas, aunque no se puede entrar en las horas de oración. No hay que pagar entrada.

Tras la visita a la Mezquita Azul, nos disponemos a “patear” la ciudad, teniendo muy cerca los siguientes objetivos, comenzando con el Obelisco egipcio de Teodosio. En el mismo antiguo Hipódromo de Constantinopla tenemos la Columna de las Serpientes (Yilanli Sütun en turco) y, a unos pasos la Fuente Alemana regalo del emperador alemán Guillermo II al sultán Abdülhamid II. Fotografío a unas simpáticas jovencitas y compramos unas castañas para calentar las manos. Estamos muy cerca de la parada de Sultanahmet del tranvía, así que nos podemos desplazar con comodidad hasta las tumbas de Fuat Paşa y de Mahmut II y la Columna de Constantino, que data del año 330.

Los días son cortos y la tarde avanza con rapidez, así que concluimos la jornada en un curioso lugar, la Cisterna Basílica, también conocida como «Palacio Sumergido», que es una de las múltiples cisternas que hay en Estambul. Ésta fue construida en tiempos de Justiniano I (siglo VI) y cuenta con 336 columnas de 9 metros de altura. Dos de ellas tienen como base una cabeza de Medusa. Se encuentra en Yerebatan cd, 2 a 350 metros de la mezquita Azul. Abre todos los días de 9 a 23:50 horas, variando el precio según la hora: 800 TL (22 €), de 9:00 a 18:30 y 1.300 TL (35,80 €), de 19:30 a 23:50 h.

Iniciamos la jornada del 17 de octubre visitando uno de los lugares más concurridos de Estambul, que también tenemos cerca del hotel y conviene visitar temprano. Se trata del Palacio Topkapi, el mejor reflejo del poder que alcanzó Constantinopla como sede del Imperio Otomano, desde el que los sultanes gobernaron su imperio hasta mediados del siglo XIX. Fue inaugurado en el año 1465, aunque fue sucesivamente ampliado. En sus 700.000 metros cuadrados, cuenta con cuatro patios y numerosos edificios.

El espacio más interesante es el Harén, el lugar en el que vivía el sultán rodeado de lujos y entre 500 y 800 mujeres de alto nivel cultural, siendo la máxima responsable la reina madre. Otro lugar importante es el Tesoro, que cuenta con algunos de los objetos más valiosos del mundo. El Palacio Topkapi se encuentra en Eminönü, 34122 Cankurtaran, subiendo por detrás de Santa Sofía. Tranvía: Sultanahmet (línea T1).. Abre de miércoles a lunes de 10:00 a 17:30 horas, siendo la entrada un poco cara: 1.700 TL (46,30 €). Cierra los martes.

Como ya he comentado, tenemos la parada a unos pasos, así que en este moderno medio de transporte nos acercamos hasta la Universidad de Estambul (İstanbul Üniversitesi), que fue fundada en 1846. Nuestro primer destino es la Mezquita Beyazit, situada junto a la parada del tranvía en el animado barrio del mismo nombre. El aspecto actual de la mezquita data del siglo XVI. Lo más interesante son sus minaretes, la elegante cúpula central y el hermoso patio interior, rodeado por un pórtico con 20 columnas y la tradicional fuente en el centro.

Aunque se puede ir en el tranvía, caminamos 850 metros para acercarnos a nuestro siguiente destino, la Mezquita Sehzade (Şehzade Camii en turco), cuya construcción se concluyó el año 1548. Situada en el barrio de Fatih, cuenta con dos airosos minaretes de 55 metros de altura y un elegante interior. El acceso a las mezquitas es gratuito, debiendo evitarse las horas de rezos. Me entretengo también fotografiando algo muy característico de Estambul, los vendedores ambulantes.

Queda mucho que ver todavía en Estambul, pero de ello espero hablar dentro de dos semanas.

FELIZ 2025. URTE BERRI ON.

DOHA (Qatar): Museo de Arte Islámico

Hace poco más de un año, el 19 de diciembre de 2023, nuestro crucero, el Norwegian Dawn, amarró en el puerto de Doha, la capital de Qatar. Desde él pudimos contemplar una hermosa vista del skyline iluminado. Al día siguiente, 20 de diciembre, desde nuestra habitación contemplamos algunos barcos tradicionales, antes de abandonar la hermosa Terminal de cruceros, que cuenta con un acuario gigante. Un taxi nos trasladó al Hotel Hampton by Hilton Doha Old Town, donde dejamos los equipajes y nos dispusimos a caminar durante kilómetro y medio por la Corniche hasta llegar al destino elegido.

Una fuente que recuerda la historia de la ciudad nos dio la bienvenida al pequeño parque que bordea el Museo de Arte Islámico. Desde ese lugar tuvimos una espectacular vista, la mejor posible, del skyline. También contemplamos numerosos dhow, una embarcación clásica utilizada antaño por mercaderes y buscadores de perlas, ahora renovados con comodidades modernas. La palabra “dhow” proviene del swahili y se refiere a una variedad de barcos de madera que florecieron a lo largo de la costa de África Oriental.

Nuestro amigo Ricardo nos recomendó visitar inexcusablemente el Museo de Arte Islámico, diseñado por el arquitecto Ieoh Ming Pei, ganador del Premio Pritzker y nacido en Cantón, muy conocido por el diseño de la pirámide de cristal en la explanada del Louvre en París. El edificio, ubicado en una isla artificial que linda con el paseo marítimo Corniche, está inspirado en la Sabil, la fuente de abluciones de la mezquita de Ahmad Ibn Tulun de El Cairo, en Egipto.

En las cuatro primeras plantas del museo están las exposiciones permanentes y temporales, una tienda de regalos y una cafetería. En la quinta planta se ubica el restaurante de alta cocina IDAM, del reconocido chef Alain Ducasse. También alberga una biblioteca con una colección de 21.000 libros, incluidas 2.000 ediciones únicas tanto en árabe como en inglés. El museo abre domingos, lunes, martes y sábados de 9 a 19 h, jueves de 9 a 21 h y viernes de 13:30 a 19 h, cerrando los miércoles. La entrada cuesta 50 QAR, unos 13 euros. Info: https://mia.org.qa/en/.

Las dieciocho galerías están organizadas por temas históricos y culturales, períodos y geografía, explorando las grandes tradiciones de la artesanía islámica. Nos embarcamos en un viaje por el mundo islámico, visitando las salas dedicadas a la Siria ayubí, el Egipto mameluco y al arte de Turquía y las provincias otomanas, donde destaca la habitación de Damasco, sala de recepción del siglo XIX. También contemplamos un cubo de vidrio esmaltado fabricado en Egipto o Siria a mediados del siglo XIV.

La galería 13 está dedicada a armas y armaduras. El arte de la guerra ha tenido un papel especial en el mundo islámico, modernizándose con la expansión del Islam. Llama especialmente nuestra atención la armadura para caballo y jinete (turca, de finales del siglo XV-principios del siglo XVI). En la galería 14, dedicada a las artes imperiales de Irán y Asia Central, destaca un pergamino pictórico que representa la procesión de coronación de Mohammad Shah Qajar, fechado en 1835

Visitamos a continuación la sala 8, dedicada a las artes cortesanas de Al-Andalus, donde contemplamos la cierva de Doha, en primer plano, un capitel de piedra Madinat al-Zahra y vigas de madera pintadas de Córdoba. La galería 9 recoge el legado islámico en Al-Andalus, la 10 está dedicada al Mediterráneo y la 15 a manuscritos, pintura y caligrafía, contemplando un manuscrito persa del siglo XVI, dos garzas con patos (Irán, siglo XIV) y un halcón con joyas (India, siglo XVII).

Continuamos la visita en la galería 3, dedicada a la vida religiosa en el mundo islámico, donde se encuentra la Sitara de la Cava, alfombra que adornó el monumento más sagrado del mundo islámico. En la galería 4 vemos el arco de madera del Marruecos Said, concluyendo la visita, en la galería 7, que trata del mundo oriental, Irán y Asia Central, donde llaman nuestra atención una cabeza y el gran panel de estuco selyúcida, la figura de un mono (Irán, 1200) y varios jarrones persas.

Accedemos a continuación a la exposición temporal “Creando un imperio. Textiles de Irán”, que estuvo abierta hasta el 20 de abril. Allí vimos las obras mujeres armenias en la Persia de los siglos XIX y XX, Haydar Mirza Safavid, Terciopelo brocado (Irán siglo XVII), Caballero con un bastón (Isfahan, siglo XVII) y sedas islámicas Actualmente se encuentra la exposición temporal “Esplendores del Atlas: un viaje por el patrimonio de Marruecos”, que permanecerá abierta hasta el 8 de marzo de 2025.

Antes de abandonar el Museo de Arte Islámico subimos a la terraza del edificio, desde donde tuvimos una espectacular vista del skyline de Doha. Al salir cogimos un UBER, baratísimo por cierto, para trasladarnos al mercado tradicional de la ciudad, el zoco Souq Waqif, en el que llamó nuestra atención el The Golden Thumb Statue, la estatua gigante del pulgar dorado, obra del francés César Baldaccini y, situado a unos pasos, Al Fanar Masjid, la mezquita espiral. Aprovechamos para comer en una de las terrazas del zoco y nos dirigimos al hotel, para descansar un poco. Por la tarde visitamos otro lugar emblemático situado a tan solo 450 metros del hotel, el Museo Nacional de Qatar, que fue diseñado por el arquitecto Jean Nouvel, ganador del Premio Pritzker, quien recreó en él las formaciones de cristal naturales conocidas como “rosas del desierto”, pero eso es otra historia.

FELICES FIESTAS.

Louvre Abu Dhabi

Hace casi un año por estas fechas y más en concreto los días 15 y 16 de diciembre, estuvimos en Abu Dhabi, emirato en el que ya visitamos a comienzos del año 2015. Además de volver a recorrer el paseo de la Corniche y visitar la espectacular mezquita Sheikh Zayed, dedicamos la mañana del segundo día a visitar un lugar que no conocíamos y que teníamos a tan solo 7,8 km de la terminal de cruceros, el Louvre Abu Dhabi. Inaugurado en 2017, se trata del mayor proyecto cultural de Francia en el extranjero. Ubicado en el Distrito Cultural de la isla de Saadiyat, es obra del arquitecto francés Jean Nouvel, galardonado con el Premio Pritzker. Como los taxis funcionan muy bien en Abu Dhabi y son muy baratos, este fue el medio empleado para el desplazamiento.

El museo cuenta con una excelente colección, formada por cerca de 700 piezas representativas de todos los periodos, desde las Prehistoria hasta la actualidad. A esto se suma unas 300 obras prestadas por el resto de entidades participantes en el proyecto, más las 100 que presta cada año el Louvre parisino. A continuación os muestro una máscara funeraria Nasca y, en la parte inferior, un hervidor árabe y las estatuas Ain Ghazal (7000 aC), Fertilidad (siglo III aC), Princesa de Bactriane (2300-1700 aC), Diorita de Gudea (siglo II aC), príncipe de Lagash (2120 aC) y Ramsés II (siglo XIII aC).

Dentro de la colección permanente hay piezas maestras de los más variados períodos históricos y los más diversos rincones del planeta. Seguimos contemplando obras como una ánfora griega Heracles luchando contra un león (520 aC), el Dragon Stoclet, el Jinete de Castroulla en Chipre (siglo VIII aC), cerámica maya de Guatemala, obras de la antigua Roma, el Arquero de Mesopotamia (510-486 aC), Athena y una esfinge (600-500 aC)

No hay período o estilo artístico que no esté representado en los 6.400 metros cuadrados que abarcan las galerías del Louvre Abu Dhabi, que seguimos visitando, deteniéndonos ante figuritas asiáticas, unos capiteles corintios y diferentes figuras como el pakistaní Bodhisattva del imperio Kushan, (años 100-300), Shiva, un Buda chino del siglo VI, una vasija iraní y varias figuras funerarias chinas de la dinastía Thang.

Seguimos visitando de forma pausada el Louvre Abu Dhabi, contemplando un montón de obras, como el hombre joven de la cultura azteca, cerámica de Perú y de Centroamérica, una colección de platos antiguos, el grupo escultórico de Asia, América, Europa y África, un antepasado de Papúa Nueva Guinea, la máscara Mukuyi (arte africano), un samurai y la armadura otomana de jinete y caballo (finales del siglo XV – principios del XVI).

El Louvre Abu Dhabi cuenta con numerosas obras pictóricas. De arriba abajo y de izquierda a derecha os muestro el Príncipe de la Envidia y el Rapto de la Concordia (Países Bajos, 1530), las Matemáticas de Frans Floris, pintor manierista holandés del siglo XVI, Torre de Babel de Abel Grimmer, San Juan Bautista de Leonardo da Vinci, las Geometrías de Jacob de Backer (siglo XVI), María Antonieta, El buen samaritano, Ali Ben-Hamet, califa de Constantina del artista francés Teodoro Chassériau (1845), Retrato de William Earle Welby su primera esposa, El emperador navegando (China), San José de José de Ribera y la Virgen con el Niño (1480-85) de Giovanni Bellin.

La visita continúa pues existen también obras modernistas de Wassily Kandinsky, Claude Monet, Vincent Van Gogh y Jackson Pollock. A continuación os presento Mujer pájaro de Joan Miró, Amarillo, rojo y azul de Kandinski (1925), Los corredores de Robert Delaunay, Untitled XIII de Willem de Kooning, un cuadro de Picaso, Untitled I-IX de Cy Twombly y Compression Ricard de César Baldaccin (1962).

Aprovechamos también para visitar la exposición temporal “Cartier, inspiración islámica y diseño moderno”, que estuvo abierta del 16 de noviembre de 2023 hasta el 24 de marzo de 2024. Contó con más de 400 obras, entre joyas y objetos preciosos, obras maestras del arte islámico, dibujos, textiles y fotografías. La exposición muestra las influencias de las artes islámicas en los diseños de Cartier, desde principios del siglo XX hasta la actualidad.

Antes de abandonar el museo subimos al piso superior para contemplar la majestuosa cúpula de 180 metros de diámetro y 7.500 toneladas de acero, que cubre el complejo. Está perforada por 8.000 estrellas de formas irregulares, que dejan entrar el sol creando reflejos caprichosos. El Louvre Abu Dhabi abre a diario, excepto los lunes, de 10 a 18:30 h, cerrando de viernes a domingo dos horas más tarde. La entrada cuesta 63 AED (unos 16 €). Info: https://www.louvre.fr/es/el-louvre-en-francia-y-en-el-mundo/el-louvre-abu-dabi.

Tras abandonar el museo nos dirigimos a tomar un zumo de naranja al Aptitude Café, desde donde se tiene la más hermosa vista del Louvre Abu Dhabi, construido sobre el agua. Casi al lado tenemos las obras de construcción de otros dos enormes museos cuya apertura está prevista para el año 2025, Zayed National Museum, diseñado por Norman Foester, que tiene un convenio con el British Museum y cuenta con cinco torres solares térmicas que actuarán como chimeneas para atraer aire fresco a través del edificio. Las torres tienen forma de alas de halcón para conmemorar el amor de Zayed por la cetrería. El otro es el Guggenheim Abu Dhabi, cuya construcción me recordó al de Bilbao, pues su arquitecto es el mismo, el canadiense Frank O. Gehry

Tendremos que volver a Abu Dhabi cuando abran los nuevos museos que completarán la oferta cultural de la isla de Saadiyat.