¿Quién nos iba a decir a los aficionados rojiblancos que un jugador como Raúl García, se iba a convertir casi en uno de los más admirados del equipo?
Antes de venir al Athletic, muchos eran los que no lo querían traer ni locos, o los que le tenían un paquete considerable. Yo misma me tengo que incluir en el segundo grupo. Pero… tardó en conquistarme, francamente, muy poco. A mí y a la mayoría. De hecho de su primer partido en San Mamés salió ovacionado, que es como ha salido la mayor parte de las veces que le han sustituido. Tiene un gen competitivo que ya me gustaría a mí que lo tuviesen todos los jugadores del Athletic. Nunca se da por vencido. Lucha hasta el último momento y no se deja guardada dentro una gota de sudor.
Es un auténtico profesional, del que nunca voy a dudar. Empezó dubitativo la temporada, pero no tardó en entonarse y en estos últimos partidos, es con mucha diferencia, el que más y mejor nos está sacando las castañas del fuego. De hecho, los 4 últimos goles del equipo los ha metido él. Vamos, que le debemos todos los últimos puntos que hemos sacado, nada menos que 7.
Además es un jugador que tiene visión de juego y da asistencias y pases medidos a los espacios, al pie, a la cabeza…
La presión que ejerce hace perder muchos balones al equipo rival. Se coloca muy bien y también se desmarca muy bien. Ve el juego y la jugada antes de que se produzcan, lo que le permite anticiparse muchas veces.
Además su actitud es contagiosa y empuja a los compañeros a luchar como él. Por lo que no sólo es bueno como jugador sino como integrante de un equipo.
A pesar de todas estas virtudes que estoy escribiendo, y que seguro que me olvido de alguna, el próximo sábado contra el Atlético de Madrid en San Mamés, no le sacaba de titular. Puede parecer contradictorio… pero… a las pruebas me remito. Con mucha diferencia contra su ex equipo ha hecho los peores partidos con nuestra camiseta. Ya he dicho, y lo repito por si acaso, que no dudo para nada de su profesionalidad. Pero… algo le pasa contra el equipo de Simeone. No sé qué, pero… le ha pasado en todos los partidos jugados hasta ahora… así que… si yo fuese Garitano, no le ponía de titular. Repito, me parece uno de los mejores del equipo, quizá el segundo mejor, después de Aduriz, pero frente al Atlético… cambia. Eso sí, si al final juega ojalá me deje fatal y haga el partido de su vida. ¡Ojalá!
Y acabo diciendo… ¡Raúl García, siempre en mi equipo!
¡A por el Atlético! Y…
¡Aúpa Athletic!