La política de los tuits

Si Pablo Iglesias no ha destituido a Pablo Echenique para que ruede la cabeza de su “número tres” (adivinen la madre de los hijos de quién es la “número dos”) y no la del propio Iglesias, sino que su plan es promoverlo a otro espacio, que lo explique, y que se deje de tuits con imágenes de Heidi tirando por el barranco a Clara mientras Echenique responde con un GIF y el Secretario de Comunicación de Podemos, Juanma del Olmo, con la rana Gustavo. Todo esto sucedía el día que Coalición Canaria anunciaba que no apoyará un gobierno del PSOE con Podemos, pero para ellos lo importante es el tuit y el “meme”.

Y la política de Abascal

Cuando leí que Santiago Abascal había advertido a Albert Rivera de que: “Entre la espada y la pared, cojo la espada, da igual las consecuencias”, lo primero que pensé es que el de Vox se piensa que vive en una cena de temática medieval y que todo se resuelve con duelos y una dosis de violencia diaria. Pero estuvo más afinado el dibujante de El Jueves, Ivanper, que intentaban explicarle: “Santi, que el dicho no quiere decir que te den a elegir entre las dos, es que… Mira, déjalo”. Hace bien este tuitero en no esforzarse, porque Abascal no está por la labor de entender… Ni de hacer política.

Solo ellos se creen la independencia

Por cierto, no sé quién llevará la cuenta en Twitter de El Jueves pero a veces tiene un tecleo muy afilado: “Son más indepes los de la Fiscalía que los políticos del procés” (sic) tuitean sobre la noticia de que la fiscalía concluye que el 27 de octubre se proclamó la independencia de Catalunya. Una independencia que a estas alturas solo defienden Puigdemont y sus más aguerridos. ¡Si ni siquiera bajaron la bandera española! Por supuesto, defiendo que no lo hicieran y que esa declaración fuera simbólica, igual que defiendo que los presos políticos catalanes vuelvan a sus casas pese a un fiscal que parece el malvado de un cómic.

El PP neoliberal practica con el ejemplo

El PP siempre ha sido un partido de derechas y tradicional. Fraga, Aznar y Rajoy se movían bien en esas aguas con olor a rancio. Pero el PP de Pablo Casado es otra cosa: ha batallado por ser tan tardofranquista como Vox y tan neoliberal como Ciudadanos, y ahí se ha quedado atascado. Hasta el punto de que está despidiendo a trabajadores de toda la vida como si fueran eventuales para ahorrarse, como explica Javier Ruiz en Twitter, el 96% de la indemnización, en esta época de apreturas que le está tocando vivir después de haber perdido muchísimo poder por culpa, precisamente, de los errores de Casado.

No, no estamos preparados

Yo por lo menos reconozco que no estoy preparado para vivir una vida conectada plenamente a Internet, con todo domotizado y centralizado en el teléfono, y eso que estoy pendiente de las novedades e incluso tengo amigos que trabajan en el sector. O igual precisamente por eso creo que es peligroso que todos lo fiemos todo a la nube y a nuestro dispositivo. El último ejemplo de lo que puede salir mal es que ha habido viviendas conectadas a los sistemas de seguridad y domótica de Google que, durante la caída de los servidores de esta empresa, no podían abrirse o conectar la calefacción, según Xataka.

Ella era Pecas

Parece que el community management se ha institucionalizado por fin: ya hay profesionales de la comunicación especializados en el manejo de las herramientas y los códigos que se usan en redes sociales. En el camino hemos visto (y algunas las he presenciado en primera persona) situaciones muy curiosas, como la que hemos conocido estos días: Isabel Díaz Ayuso, que puede ser presidenta de la Comunidad de Madrid con los votos de Vox y Ciudadanos, llevó la identidad digital de Pecas, el perro de Esperanza Aguirre, cuando esta era presidenta de Madrid. ¿Algo de lo que avergonzarse? Haber tenido una idea tan horrorosa.

Cuestión de pureza

Manuel Valls es un viejo diablo político. Lo ha demostrado ofreciendo a Ada Colau la alcaldía de Barcelona si se alía con el PSC y con él, y si “rompe” con el independentismo catalán. El francés le ha pasado con cara amable el balón… Y toda la presión. Ahora Colau tiene que decidir si sigue siendo un ser de luz y justicia autoatribuidas o si acepta los votos y las condiciones de quien se alía con Ciudadanos y a la vez exige a los de Rivera que no pacten con Vox. Valls sigue con las manos libres mientras va poniendo lazos sobre las de los demás. Solo falta que veamos si sus nudos aprietan o nadie se siente atado.

Podemos y el sentido de la responsabilidad

Ícaro Moyano tuiteaba esto hace un par de días: “Acabo de leer que Podemos no descarta forzar un adelanto electoral si no hacen ministro a Pablo. Si sacaron un 14% en abril y un 10% en mayo no podemos descartar que para unos nuevos comicios los de Echenique y Monedero quepan todos en un bar pequeño”. El periodista madrileño se fija en cómo los de Podemos hayan apostado por avanzar con paso firma hacia la irrelevancia, pero lo verdaderamente grave es cómo demuestran que no tienen reparos en perjudicar a la ciudadanía provocando otra vez una repetición de elecciones.

La sátira sigue estando permitida

No es lo mismo que un periódico como este informe a cinco columnas de que hay agentes de la Policía Nacional que se drogan sin aportar ni una sola prueba de dicha afirmación, que El Jueves haga un chiste evidentemente satírico sobre que se disparó el consumo de drogas en Catalunya los días previos al 1-O. Parece evidente… Pero ha tenido que sentenciarlo un juez. El abogado Jacobo Dopico se pregunta en Twitter: “¿Algún graduado en Derecho podía esperar otro final para esta causa? Y si era obvio que no podía haber condena, ¿por qué se admite a trámite y se imputa a estos ciudadanos?”.

A ver si, de una vez, somos

Dani Álvarez lo describió muy bien en Twitter: “Futbola: Panama 0 – 0 Izenik gabeko herria”. Evidentemente, se refería a la selección de Euskadi (yo nunca he dejado de llamarla por su nombre) y se refería, evidentemente, al resultado del desastre que generaron los que quisieron apropiarse de la selección vasca como han intentado apropiarse de otros espacios culturales o deportivos. Simplemente, la tontería se tiene que acabar: desde que alguien maniobró para sacrificar el nombre histórico de una selección que compitió representando a un país, no solo a una Autonomía, el apoyo no ha dejado de bajar.

Las imágenes de la vergüenza

Mientras los miembros de la Guardia Civil testifican sobre las caras de ira de los voluntarios que han renunciado a la violencia durante todo el Procés, todos podemos ver cómo los cuerpos policiales cargaban contra las personas que solo pretendían votar y facilitar que otros lo hiciesen. Por desgracia, esas imágenes no pueden ser usadas en el juicio porque los Magistrados del Supremo así lo han decidido, pero no pueden ser más expresivas: expresan una violencia, la del Estado, contra la población. Y hacen también gráfica una vergüenza que cualquier español con sensibilidad debería sentir.

¿Por qué tiene pistola Abascal?

Lo grave no es que Santiago Abascal proponga que los españoles de bien puedan ir armados por la calle (esperamos que el propio Abascal describa qué es un español de bien con derecho a usar su arma), lo grave es que el propio Abascal siga llevando la Smith & Wesson de la que presume en las pocas entrevistas que concede. Como bien le responde el Capitán Apio en Twitter, carece de motivo para llevarla (no existe hoy la amenaza de ETA sobre su padre) por lo que, según la ley, no deberían de renovarle esa licencia. Insisto: lo grave es la suma de privilegios de los que siempre ha gozado el hoy líder de una extrema derecha desatada.

El auge del fascismo es preocupante

Sería un error que pensáramos que solo es una moda o que no será para tanto esta extrema derecha de Abascal, Salvini, Le Pen, Orban, Bolsonaro, Trump… No es que no sean tan peligrosos como parece: son más peligrosos de lo que parece. Fíjense en lo que denuncia en Twitter la periodista Ane Irazabal: “La ministra de justicia de Israel, Ayelet Shaked, realiza una campaña política en la que utiliza un perfume llamado ‘Fascismo’ y dice ‘me huele a democracia’. (…) Su partido, Hogar Judío (nacionalista religioso), quiere subordinar el sistema judicial al parlamento. Las elecciones en Israel se celebrarán el 9 de abril”.

Militares en política

Hemos hablado esta semana de los militares que Vox está reclutando para sus listas. Lo preocupante no es que sean militares, sino que parecen estar relacionados con la extrema derecha. Lo que implica que el ejército, como suponíamos, ha sido un refugio y que Vox es una liberación para ellos. Pero no han sido los que han abierto esta vía: “El general de Podemos” es una marca que han acuñado en Podemos, donde se ha exhibido a Julio Rodríguez vestido de General a la búsqueda de un escaño que, de momento, no ha conseguido. Y ahora parece que se ha borrado de la de la Comunidad de Madrid.

¡Cuantísimos!

Con este panorama que acabo de describirles la portada de El Jueves pocas veces ha parecido tan acertada: “¡Pero cuantísimos hijos de puta!”. Así se llama el especial de la revista satírica que lleva en su primera caricaturas de Casado, Rivera, Abascal, Aznar, Felipe VI, Trump, Inda, Marhuenda, Villarejo, Arcadi Espada, Felipe González, Salvini, Franco, Mark Zuckerberg, un cura, un jeque y un neonazi. Esta es la España de hoy: carne de sátira porque esta no sería posible sin talento… Y sin una materia prima que abunda, la de las personas con cierta responsabilidad por sus cargos que actúan con una irresponsabilidad que asusta.

Gol de Maduro

Una de las tristes consecuencias del partido de la selección de Euskadi es el tuit de Nicolás Maduro en el que agradece el “respaldo” del pueblo vasco a su revolución. Ya le gustaría. Cuando los venezolanos afincados en Euskadi votan lo hacen contra él, y ellos mismos nos han explicado sus razones. Pero en Euskadi hay algunos que quieren instrumentalizar la selección de Euskadi como se han apropiado de otras reivindicaciones sin que les pertenezcan (nos pertenecen a todos), las hayan creado o hayan hecho nada por ellas hasta que han visto que pueden sacar votos.

Un país ciego

Durante el pasado fin de semana también hemos asistido a una triste discusión sobre las posibles manipulaciones de las fotografías que publican los periódicos y que creen detectar ignorantes absolutos en la materia con cuenta en Twitter. Así, en La Vanguardia han tenido que explicar que una foto publicada, enviada por fotógrafos destacados de las principales agencias, es real aunque en ella apareciesen un montón de banderas españolas y aunque estuviera sacada con un teleobjetivo que, con cierta inclinación siempre da la sensación de acumular objetos.

Pablo Casado, protagonista

Instrumentalizaciones tristes y discusiones inútiles aparte, el verdadero protagonista del fin de semana ha sido Pablo Casado y el discurso en el que ha volcado parte de su argumentario de la manera más burda posible. Empezamos por el españolismo. El creador del “viva el Rey” como respuesta para todo se atrevió a lanzar esta pregunta, henchido de orgullo español: “¿Qué otro país puede decir que un nuevo mundo fue descubierto por ellos?”. Habrá que recordarle que los indígenas americanos ya se habían descubierto solos, lo que hizo España fue someterlos.

Patria e idioma

El punto número uno del argumentario de Pablo Casado es su patria indivisible. El número dos, la pobreza lingüística que quieren imponer en ella él y todo el PP. Y si para sostener ese argumento tan pobre hay que mentir, Pablo Casado miente, como sugiere el escritor y comentarista Pepe Colubi, que responde con ironía a su mantra de que en Catalunya te pones en riesgo si hablas castellano en la calle, donde te amenazan: “Llevo once años hablando español en Cataluña y nada, ni una mala mirada, ni un leve acoso, ni un minúsculo desprecio… ¡Joder, no soy nadie!”.

Tenemos que ser precisos

Pablo Casado ya se retrata cuando hace preguntas tan ridículas y afirmaciones que le rebaten con pasmosa facilidad. No es necesario que inventemos, publiquemos o difundamos ninguna mentira y, por suerte, contamos con periodistas como los que forman Maldito Bulo que nos ayudan a ser precisos: el líder del PP no ha dicho en ningún sitio que hará lo posible para evitar que el SMI suba a 900 euros. Aunque lo piense, aunque lo intente, si no lo ha dicho y lo publicamos estaremos mintiendo y estaremos neutralizando justo lo que nos diferencia de cualquier tuitero.

ETA ha perdido. Pero no solo ETA

En esa parte del conflicto que ETA se empeñó en protagonizar y en alargar, personas concretas han perdido hijos e hijas, padres y madres, hermanos y hermanas, compañeros y compañeras, amigos y amigas… Han perdido piernas, movilidad, visión, capacidades mentales… Han perdido proyecto de vida y alegría por compartir momentos. Finalmente, ETA ha perdido, según un Rajoy comedido, ante la democracia y el estado de derecho. Cerramos un capítulo pero el libro sigue abierto.

Les hemos ganado

La viñeta de Eneko Las Heras para El Jueves que el propio autor ha compartido en Twitter es la imagen, para mí, de este fin de semana: la sociedad vasca, también la de txapela, ha vencido con su fuerza a los de las pistolas. No, no caeré en ese discurso bonista de “sin vencedores ni vencidos” porque los que nos han subyugado sin bondad no se lo merecen. Les hemos ganado hasta tal punto que ETA se ha rendido y ha reconocido el daño causado, eso sí, con sus habituales matices.

¡Por supuesto que hay que alegrarse!

No pretendo sembrar rencor del mismo modo que no colaboraré jamás con el olvido del horror de ETA. Por supuesto, a mí también me ha alegrado ver cómo dejaba la violencia irremediablemente, leer su comunicado (novedoso, sin duda), y esperar su disolución. Y si eso es apología del terrorismo en este estado represivo (y a los hechos más recientes me remito), me temo que cometo el delito, como muchos otros. Una vida sin ETA es mejor que una vida con ETA.

Que no nos ganen ahora los fachas

Ni alegrarse del fin de ETA es connivencia con el terrorismo ni recordar lo que ETA ha hecho es “de fachas”. Por eso creo que es importante que ni unos ni otros nos ganen el relato. Especialmente los segundos, porque ante los intentos de enredarnos con palabras de los de las pistolas estamos acostumbrados. Reclamar justicia para las víctimas (para todas) y esclarecimiento de todos los hechos (también de las torturas) no debe patrimonializarlo Vox y compañía.

Punto de inflexión

Me ha gustado mucho el tuit de Eneko Andueza: “ETA da el paso necesario de reconocer el daño causado. Un punto de inflexión importante que merecían las víctimas y que contribuye a la construcción de una convivencia basada en la memoria de dichas víctimas. Un futuro para todos y todas”, porque habla de futuro, de convivencia, de construcción… De todo lo contrario a lo que ha sido ETA, y porque señala un punto de inflexión. Es decir: nos toca seguir caminando, pero sin mochila.