La ciudadanía no es tonta

Quien dedique su tiempo a la política, profesionalmente o no, y siga expresando después de las elecciones que no entiende lo que ha pasado bien haría en cambiar de hobbie… O de profesión: no, Madrid no es facha. Es el mismo Madrid en el que ganó Gabilondo, gobernó Carmena, nació Podemos, surgió el 15-M y tiene (o tenía) un “cinturón rojo”. Carlos Canino acertaba cuando tuiteaba que sugerir que “los votantes son tontos y han votado ‘irse de cañas’ dice más de vuestra inteligencia que de la de los votantes”. Aún así, ayer todavía veíamos decenas de tuits que atufaban a superioridad moral pese a la derrota.

Es una victoria de Ayuso

Isabel Díaz Ayuso y su equipo han ganado ampliamente estas elecciones. Lo han hecho porque convocaron las elecciones pillando a contrapié a casi toda la oposición: Ciudadanos, destrozado; Gabilondo, de salida; y Podemos dispuesto a regalarle la polarización. Solo resistió Vox porque siguió a lo suyo, y solo ganó Mas Madrid porque supo aprovechar el hueco en el centro y la curva ascendente. El PP ganó además como quería: sin necesitar a Vox para gobernar. Y lo porque supo encontrar la palabra (“libertad”) y elaborar su significado (aunque sea una barbaridad): pasar de las tensiones, pandemia, incluida.

La participación solo legitima

Llevo unos cuantos años ya en esto de la política y sigo sin saber de qué chistera sacan algunos sus números mágicos: “Si la participación alcanza el 75% el vuelco será posible”. ¿Sí? ¿Por qué? Soy de los que cree que cuando crece la participación esos votos añadidos se reparten entre todos los partidos. Puede haber un pico que beneficie a alguno, pero nunca será determinante. Ícaro Moyano era tajante: “En Usera, Vallecas y Carabanchel ha barrido el PP. Los vecinos del sur hicieron caso a Iglesias y han ido en masa a votar. ¿O acaso alguien esperaba otra cosa?”. Ahora, esa alta participación refuerza la legitimidad de Ayuso.

Muy mal

Creo que las dimisiones en política están sobrevaloradas. Decir “me piro” y dejar el marrón a los que se quedan y a quien venga es lo fácil, lo difícil es intentar reconducir una política fallida, una gestión desastrosa o apechugar con las acusaciones. Hay veces en que, como en el fútbol, el entrenador se tiene que ir para que otro traiga nuevas ideas, pero no es el caso de Iglesias, que ha creado una guardia pretoriana a la que abandona y, a la vez, descabeza. Julio Díaz advertía un factor añadido a la renuncia: “El estratega Pablo Iglesias ha regalado la mayor victoria política posible a Ayuso: acabar con ‘el coletas’”.

La política es acordar, no aniquilar

Después de Iglesias, Ángel Gabilondo también abandonará el PSOE. Es de esperar que lo haga y lo haga mejor que el de Podemos, con la nueva estructura asomando ya. El 4-M también ha acabado con Ciudadanos, y esta suma de acontecimientos genera una sensación sobre la que alertaba Naiara Pinedo en Twitter: “La política basada en la aniquilación del contrario no será una buena forma de afrontar la gestión de lo de todos. Nunca. Del debate, las propuestas, las críticas e incluso los acuerdos”. La política no es Juego de Tronos ni Búscate la Vida, es el oficio del acuerdo. No olvidemos nunca eso.

Hasta las gallinejas

Empieza a ser agotador lo que Miguel Aizpuru define en Twitter como “Madridcentrismo en prime-time”. Ya sé que entre todos alimentamos al monstruo centralistas, y que yo mismo he contado cosas de la campaña madrileña, ¡cómo no hacerlo si tenemos la campaña más populista a tan pocos kilómetros! Pero hacernos partícipes a todas y todos, con debates en la televisión nacional, es o un exceso o una paletada. Así de claro. Por si fuera poco, Florentino Pérez insiste en aparecer y explicar su idea exclusivista que, pese al desastre, algunos se la siguen comprando haciéndose un autorretrato de los de guardar.

Fascismo o todo lo demás

Vamos por partes. Vi el debate entre las candidatas y candidatos a presidente de la Comunidad de Madrid en LaSexta unos 10 minutos. En la primera ronda completa que pude observar aprecié que nada iba a sorprenderme y ese formato, en Madrid y en Euskadi, es muy poco atractivo para cualquier espectador. Además, opino como Ícaro Moyano: “Monasterio ha sacado el cartel de los menores no acompañados con orgullo desafiante. Con la altanería ofensiva de los fascistas. Estos son los socios del PP. Con estos va a gobernar Ayuso. Y ya está, todo lo demás es humo”. Sí, a veces la política es así de fácil.

Para que quede claro

El cartel al que hace referencia Ícaro Moyano, que evita difundirlo acertadamente, busca señalar a los menores que llegan a Madrid (o a Euskadi) solos, huyendo de la ruina, y quieren integrarse en esta sociedad. Jordi Nieva-Fenoll recuperó en Twitter el mismo miércoles, en medio de la refriega, un cartel de la propaganda nazi que “explicaba que con los 5,50 marcos que costaba diariamente al Estado una persona con una enfermedad hereditaria, podía vivir una familia sana durante un día”. Por si le quedaba alguna duda a alguien de contra quién batallamos políticamente o, peor, está dispuesta a pactar.

Superliga. Escena 5. Toma 2

Hemos asistido al anuncio de la Superliga, a su justificación, a su tambaleo, a su destrucción y, ahora, estamos asistiendo a la quinta escena: su defensa pese a las evidencias. En directo estuvo de nuevo Florentino Pérez, esta vez en un programa de radio que no se llama “El Chiringuito”, para no dar tantas pistas, justificando otra vez lo injustificable: el acceso al olimpo deportivo vía gasto y no vía esfuerzo. “No puede ser lo de la Liga española, que los de equipos arriba perdamos dinero y los demás ganen dinero”, dijo el empresario a Manu Carreño. Lo que no puede ser es que quienes despilfarran señalen a quien ahorra.

El Atlético, como la Infanta Cristina

El Atlético de Madrid ha tenido que elegir y ha optado por la vía que inauguró la infanta Cristina: entre ser responsable y no enterarse de nada, optan por lo segundo. Rubén Uría ha desgranado en Twitter la carta que ha enviado a su afición el club “colchonero” y es una de las mejores colecciones de excusas que he visto esta semana. Solo ha faltado la de que el perro se comió el contrato: les engañaron con los clubes implicados, les engañaron con que se iba a negociar con la UEFA, y ahora los gestores piden perdón y aseguran que no volverá a suceder. Solo les falta posar con unas muletas.

Sí, la hostelería es un factor

La hostelería no tiene la culpa, aunque son pocos los que mantienen la guardia alta ante el virus: la culpa es de las y los usuarios, que nos relajamos con una cerveza. Y con tres, ni te cuento. Pero es evidente que la hostelería es un factor relevante para la expansión del virus. Y si no fuera suficiente leer una curva u observar lo que salta a la vista, en El Confidencial recogen el resultado de varias investigaciones que concluyen: “El cierre de locales de hostelería es una de las medidas más eficaces para frenar la incidencia y mortalidad por covid-19” (EE.UU. y España), y que este cierre afecta a la actividad económica (Escocia).

¿La libertad es un bar? ¿En serio?

Los bares de Madrid molan. Claro que sí. Son espacios que disfruto cada vez que voy a la capital española y hasta preparo una lista de los que quiero visitar. Pero la libertad es mucho más que un bar o que todos ellos. Así que el spot de Isabel Díaz Ayuso que titula “Madrid es libertad” y solo se ve a cocineros y camareros, es otra pantomima más de la presidenta de la Comunidad. Otro ejemplo de populismo de brocha gorda y pintura a chorretones: su empeño en mantener abierta la hostelería y obviar lo evidente, que facilita la transmisión del virus entre la clientela, solo es avalado por su capacidad para ocultar datos terribles.

Pues me parece bien. O casi

Ícaro Moyano tiene un blog estupendo sobre hostelería madrileña, y además tuitea muy bien: “El matrimonio Iglesias Montero ha amasado en 7 años algo más de 1.5 millones de euros. Oficialmente ganaban 3 salarios mínimos. Podemos va camino de ser una parodia, o una fábrica de millonarios a costa de la clase obrera que confió en ellos.”. Que el líder de un partido, europarlamentario, diputado, vicepresidente y ministro, y una diputada y ministra que, además, es su pareja, ganen dinero me parece muy bien. Pero que renegaran de hacerlo e incluso hayan mentido con las cifras cambia mucho la cuestión.

Es un logro de todas y todos

Así que, sí, me parece bien que Pablo Iglesias, Irene Montero y el resto de los representantes de Podemos ganen mucho dinero. Y me parece mal que con sus sueldos hayan hecho populismo hasta el punto de mentir (es evidente que no ganaban tres veces el SMI). Claudi Pérez lo explica en Twitter: “Sobre la polémica del patrimonio de los ministros, me parece populismo populachero. La política debería estar estupendamente pagada, algo que no sucede en España. Que nos vaya bien como país depende en parte de que haya incentivos para dedicarse a ese oficio”. Y que no haya que ser rico para ser político es un logro de todos.

De dónde venimos y a dónde vamos

Las noticias sobre el último estudio sobre la singularidad genética de la ciudadanía vasca me generaron cierto recelo. Y me alivió ver en Twitter que no era al único: Juan Ignacio Pérez también lo comentó. Su tuit fue criticado y el director de la Cátedra de Cultura Científica de la UPV/EHU decidió explicarse en su blog en DEIA: “Cuando se habla de vascos no se habla, en realidad, de quienes vivimos en Vasconia hoy, sino de un subgrupo de los que vivieron hace unos sesenta años o antes. Y en el caso que nos ocupa hoy, a personas que hablan euskera”. Además, critica el habitual uso político de los resultados.

¿Y qué ganaron ellos?

Si “Vox anuncia que recurrirá la Ley de Memoria” porque quienes la impulsan “quieren ganar lo que perdieron en el campo de batalla” (República.com), lo lógico es que nos preguntemos qué ganaron quienes se sienten agraviados por esa ley. Empezando por Vox, que se sitúa voluntariamente en el lado de los golpistas. La propia Macarena Olona lo deja clarísimo: “Pretenden rescribir la historia que mis antepasados cerraron con heridas sangrantes con mucha dignidad y sacrificio”. Y con paredones, con propiedades robadas, con persecución, con prohibiciones y con cunetas. ¡A la mierda los fachas!

El mejor resumen de actualidad política

Ícaro Moyano es de esos periodistas que nunca dejarán de serlo, por mucho que llevan años dedicados a otras cosas. Se nota, por ejemplo, en cómo ven y son capaces de resumir la actualidad en un simple tuit. Esta vez, el cofundador de Tuenti supo retratar en unas pocas líneas la situación de la oposición política en España: “El problema más gordo que tiene Casado cuando se presenta como alternativa frente al PSOE es que su modelo de gestión es el lodazal de Díaz Ayuso que sufrimos en Madrid. En el mismo barreño de mierda se está ahogando Ciudadanos. Así que ahora mismo no tenemos alternativa”.

No estamos para discursos huecos

Nunca me han gustado y cuanto más mayor me hago los soporto peor, pero en este punto, con una crisis sanitaria y económica absolutamente excepcional, no puedo con los discursos huecos, como este de Nacho Cardero en un foro sobre turismo: “Esto es una oportunidad para reinventarse y para buscar nuevas oportunidades” (Cotizalia). Pero, ¿qué oportunidad? ¿Para quién? La mayor parte solo pretendemos resistir, y esos mensajes de: “Los momentos de crisis lo son de oportunidad”, “si haces siempre lo mismo no esperes otros resultados” o “si eres pobre, ¡reinvéntate!”, son propios de quienes no están a pie de calle.

Es la mano de obra, amigo

Las economías china y europea no son comparables. Algo más lo son la china y la estadounidense. ¿Por qué? Porque la oriental se basa en una mano de obra barata y muy organizada pero solo para trabajar, sin reivindicaciones. La estadounidense, tan liberalizada, tiene algo de eso. Y la europea, por suerte, es la que más se aleja de ese modelo productivo. Pero Europa no puede caer en la hipocresía de mantener aquí condiciones que ralentizan curvas económicas (pero mantienen altas las sociales, y así tiene que ser) y comprar después todo a China. Nos queda rehacer el tejido local. Exijámoslo.

El año que vivimos junto a Jon Rahm

2020 está siendo un año desastroso para la mayoría de vascos, pero para Jon Rahm está siendo realmente bueno. Tan bueno que 3 de sus golpes están entre los 10 mejores de la temporada para los organizadores del PGA. Por su puesto, su putt espectacular, que dio la vuelta al mundo del deporte, es el primero del ranking. Solo espero que este sea el primero de muchos años espectaculares y que nos acostumbremos a sus éxitos. Todavía queda mucha crisis sanitaria y económica, y necesitamos buenas noticias, aunque vengan de un deporte minoritario y equivocadamente percibido como elitista. Aurrera, Jon!

O es tonto o está de campaña

Mezclar el GAL con Juan Mari Atutxa y, por extensión, el PNV, solo tiene dos explicaciones: el que pinta el cartel no sabe lo que dice porque se lo han explicado mal (y cada uno decide cuánto miente), o sabe lo que dice, sabe que miente y sabe que intoxica, porque está de campaña y cree que todo vale. En ambos casos hay por lo menos uno que tiene mala intención y que responde a esa necesidad de la izquierda abertzale de apelotonarse en Bildu contra un enemigo común. Hace bien Itxaso Atutxa en responder y en recordar que la mayoría en Euskadi tenemos memoria y, añado yo, no necesitamos intoxicar.

La víctima del 24 de junio era del PNV

Por mucho que intenten estirarla y manipularla, la realidad es como un bloque de hormigón: el 23 de junio de 1981 ETA mató a Inaki Ibargutxi, afiliado a EAJ-PNV, como recordaba Aitor Esteban en Twitter. La mala fe y la idiocia es tal entre los fascistas (los de aquí, que pintan carteles, señalan a quien intentó matar ETA y mezclan lo que haga falta para apretar sus filas, y los de allí), que Ignacio Garriga, de Vox, intentó echar en cara a Aitor Esteban esta muerte. Unos, mezclan al GAL con el PNV. Otros, a ETA con el PNV. Unos y otros tienen en común que defienden hoy lo indefendible siempre.

El acoso está mal. Siempre

El acoso que están sufriendo Pablo Iglesias e Irene Montero a la puerta de su casa es injustificable. Que entre los acosadores más activos esté una concejala de Vox en Galapagar es bastante elocuente. La ministra Montero ha denunciado a esta edil, Cristina Gómez Carvajal, porque no protesta: se limita a insultar cada día al matrimonio, que vive con sus tres hijos en el municipio. Este tipo de acoso a políticos, ya sea por parte de concejalas desatadas o sindicalistas profesionales, como hemos visto también mucho más cerca, no aporta nada salvo el propio enfrentamiento. Entre todos hay que deslegitimarlo en todo momento.

Influencer por vocación

Después de muchas puestas en escena irreales, Isabel Díaz Ayuso es, seguramente, la primera política con una identidad digital desarrollada de modo genuino: Ayuso ya era instagramer y tuitera antes que política. No utilizó estas redes cuando accedió a la candidatura: aceptó la propuesta cuando ya estaba en redes. Y no de cualquier manera: después de ser la community manager del perro de Esperanza Aguirre (una acción de marketing del PP madrileño de éxito un tanto dudoso), el uso de sus redes tiene ciertas reminiscencias… A una influencer. Ayuso no parece que será una de esas políticas sin profesión a la que regresar.

Trump se carga a otro… De su equipo

No es nuevo que Trump vaya quemando a su propia gente, pero sí es significativo que se trate del que señalan como responsable de la campaña on-line. Ícaro Moyano resume estupendamente en un tuit: “Facebook lo encumbró, TikTok se lo cepilla”. Se refiere al boicot digital en la red social de los adolescentes que sufrió Trump. Un hecho que, desde mi punto de vista, solo sirve para llamar a más acciones on-line que tienen un impacto relativo, sobre todo, cuando uno tiene una gestión que ofrecer. Debería de ser ese el caso de Trump, pero su dependencia de la volatilidad en las redes es muy llamativa.