Todo lo que hemos visto y oído en nombre de la renovación de la política española es papel mojado, cartón-piedra, “mentirijillas” en nombre de mantener el estatus quo que más beneficia a la derecha española. Ayer, último día de campaña, Rivera dejaba claro lo que era fácil intuir: que él facilitará la investidura de Mariano Rajoy (‘InfoLibre’). Al final, los viejos se funden con los nuevos, que además son más radicales y más recentralizadores. Hemos vivido una campaña que ha sido puro teatro. Una broma carísima.
Y nos toman por tontos
Eso es lo que ha hecho Iñaki Oyarzábal: tomar por tonta a la ciudadanía vasca. El del PP debe de creerse que somos de memoria frágil y de que con un par de tuits podemos entrar en una fase de amnesia que siempre le beneficiaría. Que en su Twitter criticara, a colación del debate electoral en ETB2, los presupuestos y la deuda de Patxi López que el propio Oyarzábal en el Parlamento vasco apoyó cuando el socialista era lehendakari, es una tomadura de pelo en toda regla.
Ellos ganan mucho dinero con esto
Mañana cuando vote voy a tener muy en cuenta este párrafo que hemos leído en ‘Vozpópuli’: “La consultora Scardovi SL, cuyo administrador único es el diputado popular Pedro Gómez de la Serna, facturó 1,2 millones de euros en los dos últimos ejercicios cerrados, según consta en el Registro Mercantil consultado por Vozpópuli. Esta empresa, junto a Karistia SL, vinculada al ex embajador en La India, Gustavo de Arístegui, habrían ejercido bajo la marca Voltar Lassen como conseguidoras de contratos públicos”.
Así nacen los arribistas
Entre tanto dinero, tanto colegueo, tanto pacto, tanto interés en que se olvide todo y hacer borrón y cuenta nueva… Aparecen los arribistas, dispuestos a hacer esas tablas rasas, a promover intereses, a negociar y pastelear, a cambio de dinero. Arribistas como “el pequeño Nicolás”, que “sigue disfrutando de ciertos privilegios y relaciones que le sirven para pasearse por los salones más restringidos de Madrid. Vuelve a recuperar viejas costumbres para abrirse camino como intermediario”.
Y lo nuestro, ¿quién lo defiende?
¿El PP de De la Serna, Arístegui, Oyarzábal y el pequeño Nicolás? ¿Ciudadanos, el del PP? ¿Podemos, que es capaz de defender una cosa y su contraria si suenan bien? ¿O el PSOE de Almunia que estuvo a punto de acabar injustamente con el sector naval vasco? Ahora resulta que el “tax lease” nunca fue ilegal, aunque la decisión de la Comisión Europea presidida por Almunia por poco se lleva por delante a nuestros astilleros. Arantxa Tapia anunció ayer en Twitter que reclamarán compensaciones. Y hace muy bien.