¡Athletic, así sí, pero a domicilio también!

Otros 3 puntos más que saben a gloria, sobre todo porque han sido obtenidos contra un equipo, el Villarreal, que está en la cuarta posición, cosa a la que no nos tienen acostumbrados nuestros chicos.

Alegría de Aduriz aún no siendo su gol
Alegría de Aduriz aún no siendo su gol

 

Cuando se gana un partido siempre te queda la duda de si el equipo contrario lo ha hecho bien o no, o si el mérito ha sido tuyo por jugar mejor. En este caso creo que es lo segundo. De hecho el Villarreal comenzó el partido diciendo aquí estoy yo y dominando el juego. Me recordaron un poco al Barça porque parecía que sin despeinarse controlaban y llegaban. Esto duró entre 10 y 15 minutos. A partir de ahí fue el Athletic el que adquirió el control, y todo gracias a uno de los planes B del entrenador, que parece que es el que puede carburar, tras las enésimas combinaciones que ha hecho Valverde en el centro del campo para ver si daba con la tecla. Y digo plan B, porque contra el Valencia fue el equipo que sacó adelante el puntito conseguido en última instancia, partiendo desde el banquillo y con un cambio de posiciones en los hombres. Contra el Valencia se quitó a Beñat y a Herrera, y se colocaron Iturraspe, Rico y De Marcos. Plan B, que surtió efecto y que visto lo visto parece que el entrenador los ha convertido en plan A. Y sí. De nuevo en San Mamés le han dado resultado. Itu organizando la salida de balón desde la defensa, muchas veces incrustado en ella como un central más, yéndose Laporte al lateral y Balenciaga hacia arriba por banda. Rico, por delante de Ander barriendo en el centro todo lo que se cruzaba en su camino, que era mucho por la capacidad de trabajo que tiene, y De Marcos más arriba, dando posibilidades a los ataques, haciendo desmarques, y también trabajando sin parar. Rico tiene que pulir esa pérdida de balones tan peligrosa y repetida pero… lo demás no le puedo poner ni un pero. Y encima, vaya golazo que metió, porque sí, el pase está bien, pero lo convierte él en bueno tirándose en plancha y haciendo lo que hace, cambiar con el giro de cabeza la trayectoria del balón y llevarlo al palo contrario. ¡TOMA! Remate de delantero centro puro. ¡Qué gozada! A destacar en la foto superior la celebración de Aduriz, que parece que el gol lo ha metido él.

Conclusión a lo comentado, este centro del campo funciona. Ahora sólo hace falta, la prueba de fuego, que también lo haga fuera de casa. El escenario es complicado y encima por historia no nos viene nada bien. El Coliseum Alfonso Pérez no es precisamente sencillo y menos ahora. LLeva el Geta 4 partidos seguidos ganados y está empatado a puntos con nosotros. A ver si definitivamente ha dado Txingurri con la tecla y éste es nuestro centro del campo. Y de paso, así algunos jugadores, léase Herrera, ven las orejas al lobo e igual empiezan a jugar algo porque… ¡qué mal está! Que no se puede vivir sólo de nombre y lleva mucho tiempo haciéndolo. Menos hablar y convencernos en las ruedas de prensa (a mí ni me convenció ni le creí) y más jugar a algo. Sobre todo ahora que por fin sabemos el pastizal que pagamos por él. Ese regalo de pocos millones de la estupenda gestión del señor García Macua y su amigo Arrinda, tan alabada por algún periódico… y que se han convertido, por arte de (incentivos) magia  en 11 y medio. Ahí es nada. 

Y para que nadie se sepa titular, se duerma y se apoltrone en su alineación segura, tampoco estaría mal que sentaran algún partido a Susaeta (la cantidad de posibles ataques buenos que estropea con su último pase, o su último no pase, muchas veces por no levantar la cabeza). Eso sí, falla pero trabaja muchísimo, e igual por ello sigue de titular. Pero… a mejorar tú también Markel. Y si lo haces en Getafe mejor que mejor, y si ya os traéis algo positivo…. buf… el éxtasis.

¿Tan difícil es pasar el balón al compañero?

El título que he elegido creo que resume la sensación que me quedó del partido del lunes. Pero releyendo mi comentario de la semana pasada veo que los despropósitos que ahí comentaba se han repetido incluyendo a más protagonistas en el desastre. En Sevilla el primer tiempo de nuestro centro del campo fue para cortarse las venas. Tanto San José como Ander Herrera siguieron como contra el Granada, pero quizá multiplicado por 10. Balón que tocaban balón que daban al contrario. Y no estoy hablando de pases de 30 ó 40 metros de distancia, sino de incluso sencillos pases a dos metros y sin oposición que acababan indefectiblemente en los pies de los jugadores contrarios. En el segundo tiempo, San José no pudo seguir con su «concierto» pero le tocó el turno a Iturraspe, que tampoco estuvo muy fino en esta faceta. Herrera mejoró un poco en el segundo tiempo pero sus entregas increíbles continuaron.  Siendo de éstos de los que hablé el partido pasado, ahora también voy a añadir a De Marcos y a Muniain, que no sé si contagiados o por mimetismo, participaron del mismo desaguisado. Y voy al título ¿tan difícil es pasar el balón al compañero?, y no sé si escribirlo con interrogaciones o con exclamaciones. El último pasa para acercarse al área era siempre HORROROSO. Tampoco me puedo olvidar de Iraola, que sus últimos pases fueron…

Así nos quedamos todos

En esta situación, con un centro del campo que no crea nada, es muy difícil que surjan ocasiones de gol. Además alguien les podría decir que no es necesario hacer diez paredes para meterse en el área, ni es necesario el pase increíble al hueco y de tacón,  ni la rabona, ni la «espaldiña». Que quizá las cosas se pueden hacer más sencillas, y sobre todo mejor.

¡Qué pena que Laporte estropeara su partido con esas dos entradas a destiempo, sobre todo la primera, que le mandaron a la caseta! Cosa que seguramente nos costó por lo menos ese puntito que teníamos, y que incluso se podía haber convertido en 3 por las ganas que le pusieron. Porque eso sí que no me lo puede negar nadie (aunque siempre hay alguno que lo niega). Nuestros chicos están haciéndolo mal de verdad, pero ganas ponen y correr, corren un rato. Algo demostrado que no es suficiente, pero por lo menos trabajar trabajan.

Y ahora voy a sacudirle un poquito al «árbitroquedejajugaryespocotarjetero». En la tele comentaban que despista a los jugadores, que luego se van calentando y hacen más y más entradas hasta que el partido se le va de las manos. A mí el partido de ayer no me pareció ni violento ni tosco ni de entradas duras, Menos mal, porque sacó 13 ó 14 tarjetas y se quedó tan ancho. Eso hace que contra el Real Madrid estemos en cuadro… Donde puso el ojo puso la tarjeta. Jugador apercibido jugador que recibió su quinta tarjeta. Un artista. Las de Laporte no son discutibles pero la de Aduriz y la de Gurpegi ya me crean más dudas, sobre todo porque hubo otras similares en el otro bando y no se sacaron. Por cierto, del penalti que le hicieron a Llorente casi ni hablamos… Yo empiezo a pensar que quizá los árbitros esta Liga tengan una consigna de no pitar penaltis a favor del Athletic, porque hacernos nos hacen un montón.

Conclusión: que no lo estamos haciendo nada bien, que es difícil pasar tan mal el balón, que muchos, muchos jugadores tienen que espabilar, y tampoco estaría nada mal que se fuesen al banquillo y, así, quizá como Iraizoz, le veían las orejas al lobo y empezaban a jugar algo.

 

 

La sangría que no cesa (capítulo 23)

No hace falta que repita lo que opino de las actuaciones de Gorka Iraizoz porque ya empieza a resultar aburrido, pesado y de dura digestión. Lo que sí quiero comentar es mi incomprensión ante la no búsqueda de soluciones a lo que supone un problema grave para nuestro equipo. Nadie, absolutamente nadie me puede negar que este equipo lo sufre en la portería desde principios de temporada. Y no lo digo por la friolera de goles que hemos recibido, sino por el modo en el que han llegado. En un tanto por ciento altísimo Iraizoz podría haber hecho algo más. Lo que me parece increíble es que no se ponga remedio. Encima las comparaciones siempre son odiosas, y todos los porteros a los que nos hemos enfrentado lo han hecho mejor que el nuestro. Todos, absolutamente todos han hecho paradas de mérito. Ayer Casilla, por lo menos 4 importantes. ¿Qué paró Gorka? El penalti. Pena que el rechace fue al centro, justo a donde estaba el que había realizado el tiro. ¿Vamos a seguir así hasta el final de Liga?

Y van...

El Español en el primer tiempo remató dos veces y en el segundo creo que fueron cuatro, con un resultado de 4 goles en total. ¿Hasta cuando? No voy a analizar los goles de ayer uno a uno. Aunque sí quiero dejar claro que la culpa ya sé que no sólo fue de Gorka. En el primero y en el tercero le comen la tostada a Aurtenetxe, en el cuarto San José está blandísimo con Sergio García, para luego llegar Laporte a lo loco a cometer el penalti. Vamos, que la defensa tampoco está bien, pero con otro portero no tendríamos esa cantidad de goles, ni de lejos. Hay que hacer algo ya.

Algo que desde luego no es pitarle desde la grada. Los pitos no sólo no ayudan sino que incordian. Sé que la paciencia tiene un límite pero… luego no quiero oír eso de que la afición del Athletic es especial, porque hemos dejado de serlo hace tiempo. Desde que nos vamos del campo cuando no nos gusta lo que vemos, desde que nos dedicamos a pitar a nuestros propios jugadores… Por cierto, sobre esto último es gracioso leer a alguno al que le parece estupendo que se le pite a otro jugador, pero horrible que se haga con el portero, porque es algo que no se debe hacer. En fin, a eso le llamo yo coherencia.

Para acabar decir, que el partido no me pareció malo. Tuvimos oportunidades a porrillo. Y esa es otra, porque yo le pido responsabilidades a Gorka, pero igualmente se las pido a Susaeta, que falla lo que no está escrito. Ayer cuatro tuvo. Y siendo generosa diré que sólo dos de ellas fueron clarísimas. Pero… no se meten. De Marcos tampoco metió la suya. Tenía dos opciones, tirar entre los 3 palos (por lo menos haz que se luzca el portero) o pasar hacia atrás donde tenía dos compañeros totalmente solos. La opción elegida fue la que no comento, la de tirar al cielo. Así es muy difícil.  

De todas formas me sigo agarrando al montón de oportunidades que se crearon y jugando bien. Incluso después de los 3 goles en contra vinieron las oportunidades de Toquero y Aurtenetxe de cabeza, las de Igor Martínez y de Aduriz con el pie, que fueron perfectamente despejadas por Casilla. El equipo juega, crea y puede. Hay que apuntalar la portería y afinar la puntería.

¡Qué sencillo!, ¿verdad? Pero… sí se puede.

¿El Athletic gana un punto o pierde dos?

Si nos agarramos a la media inglesa de empatar fuera y ganar en casa, deberíamos estar contentos, pero te queda la duda, por lo menos a mí, de si no hemos perdido dos puntos. Para empezar es una pena que el árbitro antes de comenzar el partido no tenga que asegurarse que los jugadores están despiertos, porque… vaya manera de saltar al césped. Dormidos, no, lo siguiente. En el primer gol en el pase atrás de Rukavina se ve claramente que los defensas dejan totalmente libres a los atacantes. El gol lo mete Javi Guerra pero había otro compañero suyo también absolutamente solo en el centro del área. ¿Cómo es posible? Y el segundo gol… el enésimo rechace de Gorka que va a Larsson, con todo a favor centra hacia atrás y… otro gol a la cazuela, en este caso de Bueno. Sin hacer absolutamente nada, el Valladolid en el minuto 15, ya tenía una renta de 2 goles. Y eso que supuestamente ellos, por estadística, necesitaban de siete remates para meter gol.  Para hacérselo mirar. Yo incluso por pensar mal ya creía que estaba influyendo la rueda de prensa del presidente del miércoles.

Aritz esta vez no ha podido

Menos mal que a partir de ahí se da otro partido, el Athletic despierta y empieza a darse un intercambio de golpes en el que han tenido más oportunidades nuestros jugadores, pero sin recibir ningún regalo por parte de los pucelanos (normal, los regalos sólo los hacemos nosotros). Es increíble la cantidad de veces que tenemos que rematar a puerta para meter un gol, en este caso no sé el número exacto. Casi mejor, no saberlo porque no me quiero deprimir. Y en este carrusel de oportunidades en el segundo tiempo ha habido un montón, y algunas muy claras, incluso manos a mano con el portero pero… es que para empezar los otros porteros sí que paran algunas. Y el del Valladolid, Dani Hernández, le ha sacado dos a De Marcos, una a Susaeta y otra a Ibai. También hay otra oportunidad que Susaeta no ha pillado de un globo que venía rechazado, pero que parecía clara. Un balón que recibe Aritz en ventaja pero que se resbala y agur ventaja. Aurtenetxe a la cepa del poste de cabeza. Conclusión, que así no hay manera. Vamos a tener que volver a contratar al Mago Oliver pero, en este caso,  para que actúe en el césped enderezando la puntería de nuestros chicos.

Encima no estamos teniendo suerte con el tema de los penaltis. En el primer tiempo le han abrazado a Aduriz en el borde del área. Y en el segundo un regate de Iraola que lo dejaba solo frente al portero es detenido por la mano de un defensor.

Pero teniendo en cuenta que podía haber expulsado a Aduriz, casi no me voy a quejar. Aritz no salta para hacer daño pero va con los brazos abiertos y el codo impacta de lleno en el pómulo de Marc Valiente y, encima, quizá se le ha roto. Si hubiese sido al revés, es probable que estuviera pidiendo la cabeza del defensor.

Para acabar decir que he echado de menos a Ekiza (A Amorebieta, no), y que espero que para el domingo ya esté recuperado de su esguince y herida en el tobillo. Así mismo he echado de menos a Muniain… Y su cambio lo considero acertado.Iker, monte las pilas.

Y la próxima jornada, que Susaeta y De Marcos sigan metiendo goles (¡qué faltan les hace!), que ganemos al Español y así que hagamos buena la media inglesa (4 puntos en dos partidos). ¡Ojalá!

 

 

¡Por fin, Athletic!

Da gusto escribir tras una victoria como ésta (3 – 0) y encima frente al Atlético de Madrid. Ya era hora.  Las dos jornadas anteriores se habían dado unos pequeños pasitos que nos hacían ser optimistas, pero que no eran como para echar cohetes, porque encima no habían venido acompañados de puntos, y la alegría definitiva, está claro, que te la dan los puntos. Y si encima de conseguirlos se ve buen partido, miel sobre hojuelas.

A pesar de... no pudieron pararles

Como llevo una temporada larga criticando a Gorka no puedo hacer otra cosa que empezar diciendo que hizo un buen partido, con dos paradas importantes, tanto por los momentos en los que se dieron, como por su calidad. Sacar el tiro de Raúl García a la base del poste era muy muy difícil. En este caso, como en el del Athletic, también he de decir, que ya era hora que hiciese un buen partido. Fenómeno y que siga así.

En segundo lugar quiero resaltar la victoria porque el Atlético estuvo muy bien. El 3-0 no refleja el hecho de que también nuestros chicos pasaron sus apurillos para conseguirlo. Viendo el resultado (sin ver el partido) puedes pensar que fue fácil, y nada más lejos de la realidad. A los de la capital les sobra calidad, y quizá sólo detalles fueron los que influyeron en el resultado final. Por ejemplo, que Iraizoz respondiera en esos dos momentos como lo hizo, fue crucial. Si no llega a ser así quizá ahora estaríamos hablando de otro resultado.

Un recuerdo especial para el árbitro, que como siempre, tiene que aportar su granito de arena particular y si es Muñiz, el granito se suele convertir en paladas y paladas. Para empezar yo vi tres penaltis. El primero el que hicieron a Aduriz nada más empezar, que seguido remató De Marcos al cielo. ¿Dejó ley de la ventaja?  Me extraña mucho. El segundo las manos de Juanfran, también ante Aduriz (más difícil de ver). Y el tercero, por supuesto, también a Aritz, al que el Cata Díaz le intentó arrancar la cabeza, no me acuerdo si en un corner o en una falta lateral. Imposible de no ver. Por supuesto no pitó ninguno. Tampoco vio violencia en la entrada del “Cebolla” Rodríguez a Ekiza. Vaya salvajada. Ni cómo Juanfran le agarró de la camiseta a Muniain. Ni a Godín haciendo de todo, ni a Raúl García dando patada por detrás,… vamos que no vio casi casi ni el partido. Este árbitro desde luego es un amigo para el Athletic.

Para acabar, como ya comenté la semana pasada, al Athletic, a nuestros jugadores no se les ha olvidado jugar al fútbol, al revés, lo siguen haciendo muy bien y vistoso, porque vaya maravilla de dos contraataques, culminados en gol, que nos brindaron. Así da gusto empezar la semana. Que sigan haciendo lo mismo, en Valladolid, este viernes. Se lo agradeceremos.