A nada que me hayáis leído sabréis de mi debilidad por Raúl.
Ayer, en su primera titularidad de esta temporada, vino a confirmar lo que ya había demostrado en los pocos anteriores minutos jugados, aunque, fuese en todos los partidos. La lucha y la brega para él son innegociables. Están siempre. En el primer tiempo, sobre todo en los primeros 30 o 35 minutos, cuando el Villarreal nos tenía dominados, gracias a la gran técnica que tienen muchos de sus jugadores, que se dedicaron a hacernos un rondito, mientras nuestros jugadores corrían y corrían pero sin pillar un balón, sin llegar ni a oler el esférico. A pesar de ello, lo intentaban y lo intentaban. El pequeño cambio introducido por Ernesto en la presión, propició que los jugadores tuvieran más éxito a la hora de hacer recuperaciones, tarea en la que muchas veces se basa nuestro éxito. Ahogar al contrario.
El segundo tiempo fue de acoso y derribo rojiblanco, que agobió tanto a los del Villarreal que no hacían más que cometer errores por la intensidad de la presión, en la que Raúl participó a manera de crack. Ya había recuperado así un balón al final de primer tiempo, que si no se llega a inventar el árbitro una falta, él y otro de los nuestros se quedaban solos para iniciar el contraataque.
En el segundo tiempo, recuperó otros dos que remató a puerta: uno lo paró Rulli y el otro salió fuera por mucho. Encima le hizo un pase magistral a Iñaki, al que dejó solo, para que de nuevo el mayor de los Williams definiera perfecto, y así marcase el único gol del partido, que nos daba merecidamente los 3 puntos. Gracias Raúl por tu enorme esfuerzo, trabajo y calidad. Esto parece que le dijo la afición cuando se retiró del campo, en medio de una atronadora ovación. ¡Grande Rulo!
Como grande es Yeray.
Está a un nivel impresionante. Es el capo de la defensa, habiéndole quitado el puesto a Íñigo, que aunque bien, sigue sin estar a su nivel. Yeray está inmenso en anticipación, corte, velocidad, intuición de saber por dónde van a venir los tiros,… Increíble que no vaya a la selección. Inexplicable. En esa primera media hora de dominio castellonense, no dejó ni un resquicio a que ellos consiguiesen algo. Y el resto del partido igual, añadiéndole la salida de balón, con calidad, e incluso una incursión muy adelantado, propiciando peligro, tras una de sus anticipaciones. Perfecto Yeray.
De este modo hemos conseguido los tres puntos contra un equipo, con el que estábamos igualados en la clasificación y que tiene una demostrada calidad. Tres puntos que dan moral y acaban con el terrible mes de octubre, en el que llevábamos sin ganar 4 partidos. 2 puntos de 12 posibles. Parecía, este mes, que no éramos ni carne ni pescado y tras el soberbio segundo tiempo de ayer, volvemos a ser solomillo. O si no gusta la comparación culinaria vuelvo a la música y afirmó que la marcha de Gatibu del descanso del partido (buena iniciativa), dio la sensación que se les metió en vena a los jugadores, que pasaron a jugar a ritmo de rock and roll. Precioso segundo tiempo que deja un gran sabor de boca, aunque nos dé pena que no acabase con más goles en el marcador, por la falta de puntería. Pero fue una gozaba ver, que a pesar de los fallos, seguían empeñados en buscar nuevas oportunidades para poder meter el segundo gol y así respirar más tranquilos. No sé logró, pero como sí se consiguieron los 3 puntos, a disfrutar de ello y saborear el seguir arriba en la clasificación.
¡A por el Girona! Y…
¡Aúpa Athletic!
P.D.: Por no alargarme más no he mencionado a más jugadores pero tengo que hacerlo aunque sea en la posdata. Oihan Sancet, Mikel Vesga e Íñigo Lekue (salió mediado el primer tiempo por indisposición de Óscar), estuvieron a un nivel muy alto. Todos en general.
¡Aúpa Athletic!