La tecnología nos desnaturaliza

Yo creo que cuanto más digamos y tengamos en cuenta que la tecnología nos está desnaturalizando, aunque parezca una exageración, más nos esforzaremos en seguir siendo humanos. La muerte de un niño durante una cacería y, sobre todo, las reacciones de los usuarios de Facebook cuando el PACMA compartió la noticia nos muestra en qué nos estamos convirtiendo: bromas y chanzas (que también llegan a Menéame) sobre el menor fallecido y el dolor de la familia, por medio de un teclado y una pantalla. PACMA se desentiende pero, ¿qué esperaba cuando compartió la noticia?

El cascabel al gato

Juan Ignacio Pérez ha escrito un artículo valiente en Vozpópuli, poniendo de manifiesto lo que por todos los implicados es sabido: en la producción científica actual es más importante la cantidad que la calidad, por culpa de un sistema de méritos que, en mi opinión, es otra trampa que la Academia se ha tendido a sí misma (como la de los másteres). “El sistema de publicaciones ha perdido así su función original y ha pasado a satisfacer los requerimientos de una comunidad necesitada de acreditar logros (…) Ha confundido el fin con el medio para alcanzarlo, pervirtiendo así su razón de ser”, concluye.

Caímos en la trampa

No voy a decir que lo veíamos venir porque no es cierto: simplemente, nos fiamos de Facebook cuando nos aseguró que los datos de consumo de mensajes por medio de vídeos eran los que nos daba. Al final, se trataba de una plataforma agigantada que, antes de la entrada del audiovisual, ya nos daba buenas cifras con links o fotonoticias. Hoy la realidad es otra: Facebook cae y no hace falta que nadie escriba sesudos análisis porque lo vemos en nuestro entorno. Casi nadie confía en Facebook y casi nadie se entretiene ya en esta red social que, además, nos ha mentido.

Pobre Rey

Juan Carlos I no ha sabido dejar todo atado y bien atado, como sí hizo su predecesor: Felipe VI y la institución a la que representa se resquebraja. Un tipo tan alto como bajo en carisma no ha encajado en “un pueblo” (como les gusta decir a los que escriben de estos temas) cambiante. Si todas las instituciones pasan por una crisis, empezando por el periodismo, la real no iba a ser menos cuando, además, seguramente sea de las más ilógicas en un mundo que reclama y clama un cambio. La jefatura de estado sufre y echan la culpa a los nacionalistas, pero el problema lo tienen en su casa.

Lo dice Elrubius

Con sus casi 40.000 seguidores y acostumbrado a que cada cosa que tuitee tenga, por lo menos, varios cientos de retuits, a un tipo tan inteligente como Rubén Doblas no se le ha podido pasar que este tuit solo lo hayamos encontrado interesante once personas: “El ascensor hacia el éxito no está disponible. Tienes que usar las escaleras, una a una”. Eso romperá los planes de muchos de sus seguidores e imitadores que pretenden dinero y fama rápidamente a cambio de hacer el ganso en YouTube. Elrubius es uno de los mejores comunicando hoy y se lo curra mucho.

Sí, nos toca

Si me hiciese pasar por un activista de izquierdas les estaría engañando y me estaría mintiendo. Sé cómo funciona la política y he intentado comprender y explicar las exigencias de Europa y los gobiernos más cercanos. Pero también creo que para seguir siendo justo hay que dar ya un golpe sobre la mesa. Y las subidas de las pensiones y el SMI han sido dos que tienen que suponer un punto de inflexión para que la clase media (que la formamos casi todos) deje de verse ahogada por impuestos y recortes, y se recupere. Ya vale de rescatar a los de siempre. Nos toca.

La verdad

Me esfuerzo en conocer el suelo que piso, y sé que, en política, en lo implícito puede ir lo más importante de los mensajes (entendiendo algunas decisiones también como mensajes). Este fin de semana el extraordinario Miquel Roig, sin embargo, decidió ser explícito en dos tuits que ponen muchas cartas europeas boca arriba: “Si me permiten la paráfrasis, España hace como que cumple y la Comisión como que vigila… Lo que cambia este año con el nacionalpopulismo italiano es que Italia no hace ni amago de querer cumplir y, claro, eso es un desafío político”. Sigamos haciendo como que.

No, no lo necesitamos

La periodista de TVE, Ana Ruiz Echaurre también clavaba en un tuit una acertada reflexión, de esas que abren debates: “No necesitamos que un reportero se meta en el agua hasta las rodillas para contarnos que llueve y es peligroso. Es peligroso para él y un mal ejemplo para prevenir accidentes. Ya está bien de espectáculos absurdos en vez de información”. Y estoy de acuerdo: ciertas modas, sobre todo en los directos, siguen resultándome incomprensibles y, como casi todas las modas, prescindibles. Son muchos años ya de tele como para saber qué aporta y qué no.

El otro gran tabú del fútbol

Son dos los grandes tabúes del fútbol actual: el de la homosexualidad de los futbolistas y el de la imposibilidad de ser madre (por contrato, incluso) de las futbolistas. Por eso es estupendo que en el Twitter de Panenka hayan recuperado su artículo sobre lo silenciada que esta esa práctica. No la de la maternidad, sino la de la imposibilidad de ejercer tu derecho a planificar tu vida por contrato. Unos contratos que, además, por la histórica situación del fútbol femenino, en nada son comparables a los de los profesionales del masculino. Aunque se han tomado medidas será importante levantar el tabú.

Uber, el liberalismo perfecto

Ya pocos se atreven a decir lo que dijeron: que Uber era un espacio colaborativo que había proporcionado la tecnología, un ejemplo a seguir para transformar la economía y hacer posible una utopía socialista o casi comunista. Hoy Uber es ya el mejor ejemplo de lo que es el liberalismo salvaje, y Esteban Hernández lo describe muy bien en El Confidencial: el trabajador paga los impuestos y la herramienta de trabajo, y la empresa optimiza la inversión en recursos (lo que cuesta la web, los abogados y la publicidad). Además, el trabajador se controla por la puntuación constante del cliente.

Una provocación

A Albert Rivera le da igual Altsasu, le da igual Navarra y le damos igual los vascos. A Albert Rivera solo le importan dos cosas: él y España, por ese orden. O eso o es un inepto. Solo por estos dos motivos se puede explicar que elija Altsasu para celebrar un acto de precampaña con el lema “A la Guardia Civil se le respeta”. Dicen en Ciudadanos que el municipio de Javier Ollo se ha convertido en “un símbolo”, pero creo que están equivocados en lo que simboliza: la exageración, la desmesura y la justicia vengativa son motivos tristes y no de reivindicación. Allá quien los celebre.

Qué error del PP

En un partido en el que el jefe de todo y principal portavoz es Pablo Casado la comunicación puede ser un disparate en cualquier momento y en cualquier lugar. Por ejemplo, en el Twitter del PP de Madrid, donde han cometido el inmenso error de intentar ridiculizar a Pablo Iglesias porque él e Irene Montero tendrán seguridad las 24 horas. Para contextualizar la noticia, es preciso recordar a Jiménez Losantos hablando de escopetas cuando se refería a los de Podemos. Que un político viva tranquilo ante cualquier amenazan no es un capricho, es imprescindible. Siempre lo ha sido.

Y el ritmo no para

Mientras en Madrid el PP, el partido que más ha sufrido la amenaza y la violencia directa terrorista, intentaba ridiculizar a quien pide protección, en Andalucía decidían tirar abajo su propio tejado a pedradas afirmando que en el Sur hay un retraso infantil. En el PSOE y Ciudadanos andaluces ayer seguro que se tomaron unas cañas a la salud de Isabel García Tejerina, vicesecretaria de acción social de los del PP, para mayor gravedad de los hechos. Es evidente que la exministra quería criticar al gobierno andaluz, tanto como que se equivocó al hacerlo.

Todo por la foto

Lagarder Danciu ha dado ya varias muestras de que no sabe distinguir un huevo de una castaña, pero sigue gustando a un tipo de público en Twitter al que le va cualquier respuesta hacia cualquier institución porque los gobiernos son lo peor mientras hablan de derechos a la RGI, la vivienda, educación y sanidad pública… Una clac de lo menos recomendable que, seguro, también aplaudió la foto de este “activista” profesional delante de un contenedor ardiendo durante los disturbios de Gràcia. Y mañana abordará otro conflicto para sacarse otra foto para Twitter.

Hablemos de Wismichu

Si no hablo de la última movida del youtuber que toca tengo la sensación de que no me gano el sueldo aunque, como en este caso, lo que pasa me parece de tan poca importancia que he remoloneado durante casi una semana. Pero ahí siguen discutiendo algunos en Twitter sobre si Wismichu es un creador al que hay que tener en cuenta o solo un creador con ínfulas porque ha participado en una película experimental. Me he tragado unas cuantas horas de canales de YouTube y, en mi opinión, Ismael Prego (su nombre real) tiene más ínfulas que creatividad pero, ¿y a mí y a usted, qué?

Casado no sabe dónde vive

Está claro que Casado no conoce España. Si conociese el suelo que pisa dudo mucho que hubiera lanzado la colección de afirmaciones sobre “la California de Europa” en la que quiere convertir el país en el que aspira a gobernar. A golpe de fabricación de drones, coches autónomos o robots, con la bandera del 4.0 (¿por qué no se lanza ya al 5.0 o, qué se yo, al 12.0?) y asegurando que países sin recursos hoy pueden ser potencias tecnológicas, generó material para un decálogo de vídeomensajes que ejemplifican perfectamente eso de que la ignorancia es la madre del atrevimiento.

El día que el rey viajó en metro

Mirado con frialdad, que el jefe de estado de un país sea elegido por el folleteo de su padre con su madre y una constitución que prohíbe a las mujeres heredar, ya debería de ser motivo suficiente de cabreo colectivo y ganas de cambiar las cosas. Sin embargo, en España (como en el Reino Unido o Dinamarca) no lo es. Pero hay algo todavía más indignante: el trato de vasallos hacia emperador que algunos dispensan a Felipe VI (como hicieron con Juan Carlos I) esta misma semana, por ejemplo, con el viaje en metro del monarca. Como en los años 50 con su predecesor.

No es el estudio, es la materia

El Congreso ha aprobado que Filosofía vuelva a ser una asignatura obligatoria. Vale. Pero es el tuit de Alberto Elías al respecto el que pone el punto adecuado a la noticia: “Esto estará guay si consiguen que la asignatura no consista en aprenderte de memoria la vida y obra de cinco o seis señores para soltarla cual robot del tirón en la PAU”. Porque la filosofía, no nos engañemos, podía despertar cierta curiosidad cuando tocaba Nietzsche, pero por lo demás era solo una sucesión de bloques a la espera de que cayese el fácil en Selectividad. La idea es buena, ahora que la ejecuten bien.

Uno que piensa por sí mismo

Andreu Buenafuente cuenta con un colaborador que piensa por sí mismo y, oigan, esto es toda una excepción: Bob Pop (que en realidad se llama Roberto Enríquez y es el subdirector del programa Late Motiv) se preguntaba, después de la hinchada polémica sobre si una canción de Mecano era homófoba o no, si no estaríamos eligiendo mal los representantes de nuestros caballos de batalla. Al final de su breve discurso (que merece enormemente la pena) sugería: “A lo mejor el problema es que hay demasiados influencers y muy pocos referentes”. Para levantarse y aplaudir.

La Eskarabillera de Basauri

Las fiestas de Basauri son tremendamente conocidas por cerrar el calendario de peregrinación a las txosnas que todo joven vasco guarda de noviembre a junio. Sin embargo hasta ayer no conocía la historia de la Eskarabillera, símbolo de las fiestas patronales cuya cabeza se ata a un montón de globos el último día a la espera de que alguien la encuentre. Quien lo hace está invitado a la siguiente edición de las jaias. Así, gente de Francia, Bélgica o la República Checa han conocido y disfrutado de Basauri en fiestas. La historia la ha contado Nabi, que ha logrado miles de retuits con su relato.

Ya la tuviste, Pablo

En política hay que tener tres cosas: coherencia, vergüenza y memoria. Y Pablo Iglesias, al que no negaré unas acciones recientes valorables, parece que a veces pierde las tres. Por ejemplo, cuando dice que buscará una alternativa de gobierno estable con PSOE, PNV, ERC, PDeCat y, por supuesto, Podemos, y no explica que ya la tuvo pero él mismo la desperdició provocando una repetición electoral en la que pensaba comerse el mundo integrando a IU. Pero nada fue como él creía. Al contrario: sufrimos a Rajoy por su culpa y por aquella rueda de prensa con sus “ministros”.

Cloro contra el autismo

Solo es uno de los muchos disparates que en apenas diez minutos se pueden encontrar en el blog de Josep Pàmies y otras noticias relacionadas con este agricultor que, sin conocimientos de medicina, no se corta en ofrecer tratamientos con medicamentos cuya venta es ilegal, por ejemplo, combinados con hierbas suyas y colgantes de topacios. Pero no se trata solo de lo que vende, sino de lo que diagnostica: que el autismo es una enfermedad que tiene que ver con el intestino. Diagnósticos y remedios son compartidos por un grupo que se retroalimenta y que son carne de juzgado de guardia.

Debates eternos e innecesarios

Serralvo lo definía con su habitual desparpajo: “Lo del tema ‘millenials’ vs. ‘pollaviejas’ es la puta historia generacional de siempre, tampoco os flipéis”, para sacarse de encima una discusión tan innecesaria como pretérita. En Twitter también se enfrentan los chavales que piensan que son el intenso futuro y nosotros el aburrido pasado, con los viejos que hemos oído mejor música, hemos leído mejores libros y hemos visto mejor cine. Como siempre, ni una cosa ni otra: habrá jóvenes que ya son más aburridos que sus padres y otros que nos mejoren culturalmente.

A ver si así, sí

Después del estudio que afirmaba que el cambio climático va a encarecer el precio del chocolate porque las áreas productoras de cacao sufrirán las consecuencias del calentamiento, nos llega otro que, prácticamente, no modifica el aviso pero sí cambia el producto: la cerveza. Con más o menos gracia muchos se han llevado on-line las manos a la cabeza ante la posibilidad de que una caña sea más cara o, en el peor de los casos, algo difícil de encontrar. Yo lo veo como una oportunidad para que la alerta sobre las consecuencias del cambio climático sea de una vez efectiva.

Una historia vía Twitter

El hilo de Oriol Querol sobre Richard Matheson, un hombre que ha decidido vivir solo en Canadá rodeado de osos, es una muestra más de que no importa el soporte: importan la historia, las ganas de contarla y la capacidad para hacerlo. Querol, productor audiovisual, se casca un relato estupendo sobre el modo de vida de Matheson y Felix Rome, un fotógrafo que se ha instalado con él, que al mismo tiempo es un alegato a favor de la vida salvaje y en contra de las ganas de intervenir en todo que tenemos los seres humanos. Incluso hay un giro final en el hilo que sorprende.