Rivera, explícaselo a Verhofstadt y Macron, anda

Con los ayuntamientos ya en marcha desde ayer, las elecciones del 26 de mayo nos siguen dejando deberes pendientes, como la constitución del Parlamento Europeo, donde más de uno va a tener que dar explicaciones, porque en Bruselas la connivencia con la extrema derecha es una cuestión que no se discute o, por lo menos, no se discutía hasta ahora: Rivera puede marcar un hito si convence a Verhofstadt y a Macron de que su pacto con Vox es compatible con mantenerse en un grupo en el que estas ideas y estos pactos no tienen cabida. De momento, la prensa internacional machaca a PP y Ciudadanos.

Sí, es de agradecer

El hilo de Hodor en Twitter empieza explicando lo que supone para Ciudadanos su pacto con PP y Vox (sin la derivada europea, que tiene su tela, también), y acaba concluyendo que la nueva política no va, precisamente, de hacer las cosas mejor: nadie dijo que esa “novedad” no radicara en elevar las miserias particulares a cuestiones colectivas. “Así que agradeced a Ciudadanos su último servicio: os ha ayudado a terminar de perder la inocencia con la que nació la ola de ‘nuevos partidos’. Ya no esperéis ‘regeneración’. Son sólo unos contendientes más en la lucha por el poder: sólo han aclarado en qué bando juegan”.

Más “nueva política”

Los sindicalistas son paladines de la democracia: está mal meterse con ellos porque, claro, representan a los trabajadores, luchan por lo de todos y les debemos muchos avances. No niego todo esto, como tampoco deberían de negarnos que es difícil explicar que Mercedes Pérez Merino, delegada sindical en Coca-Cola durante 35 años y fichada por Podemos para el Congreso, gane cerca de 90.000 € al año en la multinacional y declare un plan de pensiones de con 177.000 eurazos, casi 100.000 más en su cuenta, y una casa en El Escorial por la que pidió una hipoteca de 400.000. Por el mismo precio te dice si eres “clase obrera”.

Moragas, quién te ha visto

Jorge Moragas es uno de esos personajes que es una pena que sean reales porque como protagonistas de una novela son perfectos: un hombre que resistió con Rajoy, le ayudó a llegar a lo más alto, a zafarse de la prensa y de los enemigos de fuera y los de dentro, y que lo dejó todo para irse de embajador en New York… Pero al que la moción de censura de Sánchez envía a Filipinas como diplomático, donde termina participando como jurado para elegir a la Miss de ese país, según leemos en El Confidencial, vestido con un esmoquin blanco y una pajarita negra, junto a cantantes, actrices y un jugador de baloncesto.

Ahora, ¡pónganse a trabajar!

“Ya se ha finiquitado del todo el Fondo de Reserva” de la Seguridad Social. Esa frase, colocada casi como una más en un ilustrativo post de Magnet, es la que debería de hacer saltar todas las alarmas y mover a los políticos españoles a encerrarse en torno a mesas de trabajo hasta que den con la solución al atolladero al que PSOE y PP, a relevos, nos han llevado. Pero después de que nos robaran el mes de abril a punta de campaña, Pedro Sánchez parece no tener prisa: primero, los ayuntamientos y las autonomías. Mientras tanto, los problemas siguen agravándose y la ciudadanía, ¿indolente?

Vox sí ha acertado

En Euskadi nos hemos librado de Vox y Ciudadanos y casi del PP de Casado. No nos hemos librado del fascismo, aunque ahora los que lo ejercieron hablen de Euskaltel en una entrevista de radio de máxima audiencia como si les importara. Pero algo es algo. En España, desde hoy, lo tienen más peliagudo porque donde la extrema derecha tenga influencia la ejercerá como hace en Andalucía a cada paso, con PP y Ciudadanos de rehenes por voluntad propia. Euskadi tiene sus propios fantasmas y fantoches, pero España no se queda atrás en cuanto a momias embalsamadas y que firman pactos.

Lo que está en juego

Dani Álvarez resumía lo que está en juego con el nuevo rumbo al pasado de las derechas españolas: “El programa Skolae trabaja la igualdad de niñas y niños en Navarra. La Unesco lo nomina a un Premio Internacional, pero la asociación de Juan José Cortés lo ha denunciado por ‘adoctrinamiento en la ideología de género’. 10 profesionales a los tribunales”. Lo que está en juego con cada pacto de PP, Ciudadanos y Vox es la igualdad entre personas y los consensos más básicos en materias cuyo avance ha costado mucho como el aborto o la violencia machista. Al fascismo de aquí y de allí hay que plantarle cara siempre.

Si no nos toman por tontos, mejor

De quien pacta con la extrema derecha no espero honestidad, igual que no la espero de quien justificó y sigue amparando a ETA aquí. Pero si no nos toman por tontos los de allá y los de acá, podremos vivir un poco más tranquilos: Iñaki Oyarzábal ha mostrado su malestar en Twitter porque, según él, los organizadores del desfile del Orgullo LGTBQ actúan de un modo sectario al no permitir la participación del PP y Ciudadanos. Flaco favor hace Oyarzábal al colectivo mostrándose como bastión útil de quienes pactan con los que señalan a sus integrantes, cuando no les persiguen para darles una paliza.

No falta nadie

Rosa Díez, Andrés Herzog, Carlos Martínez Gorriarán y unos cuantos usuarios que encuentran en Gorka Maneiro a un progresista que va de frente, han ido sumándose en Twitter a los aplausos a Vox. Colaboracionismo del bueno con el que se les han caído las caretas a los de UPyD, porque quien defiende a Vox como opción útil de voto o pacto, defiende que se puede compartir proyecto con quienes han venido a generar más desigualdad entre personas y a desenterrar a Franco en el sentido más peligroso. Allá a quien se la cuelen, pero hoy las firmas de pactos ponen y quitan alcaldes, y a cada uno en su lugar.

Tebas, cuéntanos más

Uno de los que dio la bienvenida a la política a Vox fue Javier Tebas, el máximo responsable, por otro lado, de la sanción a La Liga porque esta utilizó su App para espiar desde los móviles en los que estaba instalado lo que oían y veían sus usuarios. ¿Les resulta tranquilizador o todo lo contrario que alguien así tenga ese poder, esas filias y la tecnología para llevar a cabo esa captación? La Liga explicó en el juicio que lo que querían era comprobar por medio de esas grabaciones y la geolocalización qué bares emitían los partidos de un modo ilegal. La sentencia obliga a pagar 250.000 €, que me parece poquísimo.

La gran vergüenza mundial

El asesinato de Murtaja Qureiris, programado por Arabia Saudí por el método de la crucifixión por participar en manifestaciones siendo un niño (los delitos que se le imputan los cometió con 10 y 13 años) debe caer en nuestras conciencias. En las de todos. En las de las potencias mundiales y, en general, todos los gobiernos, por no intentar parar esta pena capital cruel porque el país que la ejecutará es Arabia Saudí. Y en la de la ciudadanía del planeta por no levantarnos ante una injusticia tan flagrante. No se trata de una cuestión “interna”, se trata de Derechos Humanos, dictaduras y, por supuesto, mucho petróleo.

¡Qué oportunidad perdida!

La selección española de fútbol, la absoluta, perdió el miércoles su partido contra Alemania durante el mundial de Francia. Ayer, las portadas de la prensa deportiva española abrían con el fichaje de Jovic, y la catalana, con el futuro de Griezmann (que ya me parece el jugador más pesado del mundo). ¿Por la derrota? No, porque son chicas. Con el resultado de “La Roja” solo encontrábamos llamadas en portada, generalmente ridículas y excepcionalmente un poco más grandes. ¡Qué oportunidad estamos perdiendo como periodistas (me incluyo, sí) de demostrar que nos tomamos en serio la Igualdad!

Con hacerlo una vez…

No entiendo la estrategia catalana: con una declaración de independencia que se toman más en serio los que acusan a los presos políticos que los que la hicieron, en los compases finales de un juicio precedido por una prisión preventiva y unas decisiones parlamentarias injustas, los que tienen que poner mesura imponen más enfrentamiento. Estamos hablando de políticos y líderes sociales acusados de delitos que conllevan penas muy graves, estamos hablando de familias destrozadas porque algunos quieren golpistas vía sentencia y otros, abrir un ciclo de venganzas que les lleve… ¿A dónde? Necesitamos agua, no gasolina.

Ciudadanos compite… Con Vox

Vox ha irrumpido como un terremoto en la política española, pero solo en la de derechas. Ha descolocado a PP y Ciudadanos, que ya no saben ni quiénes son cuando la diestra extrema les pone un espejo delante. Tan despistados andan que quienes abrazan ideologías cavernícolas hacen lo que quieren con ellos en Andalucía y les bailan en Madrid, hasta el punto de que Ciudadanos, en vez de competir con el PP por ver quién es más útil en política, acaba compitiendo con Vox por ver quién propone la mayor tontería: Villacís quiere turnarse con Almeida en la alcaldía de Madrid. Y olé.

Más pruebas

En 2018 avisé a un responsable de campañas de que en 2019 iba a gastarse más dinero que nunca en Internet con menos certezas que nunca, ante el asentamiento de los medios digitales y la situación de zozobra de Facebook, Twitter e Instagram. Por si fuera poco, los cambios en Google remataron el desastre. Hoy podemos observar que ni la segmentación ni las grandes inversiones ofrecieron nada a los partidos: Ramón Salaverría tuiteba esta semana el dato de que Podemos fue el partido del continente que más gastó en Facebook para las elecciones Europeas… Y obtuvo 6 escaños.

Sí, se trata de Igualdad

Me gusta el fútbol entre otros motivos porque sirve para explicarnos como sociedad. No estoy siendo banal: la situación de algunos estadios o la formación de algunos clubes son muy ilustrativas. Hoy el fútbol, y en especial el Mundial Femenino, también nos pone delante de lo que somos con noticias como la que Dori Toribio enlaza en Twitter desde el Washington Post: “La selección femenina de EEUU demandó a la federación de fútbol por discriminación. ‘Pese a tener un éxito mucho mayor que la selección masculina, las mujeres han tenido que ir a juicio para intentar conseguir igualdad salarial’”.

También ante la Ley

No creo que en Vox haya grandes estrategas: la conexión que logran con una parte importante de la sociedad española es porque existe esa tipología de votante. Es decir, su éxito se basa en hacer lo que les sale porque hay muchos, demasiados (tratándose de lo que se trata), que estaban esperando que alguien hiciera eso mismo. Por ejemplo, cambiar un cuadro en el que se puede leer que “todos somos iguales ante la ley” por uno con el retrato de Felipe VI, que puede representar todo lo contrario. Es lo que ha hecho José Ignacio Arias, de Vox y vicepresidente tercero de la Asamblea de Madrid gracias al PP y Ciudadanos.

Albert Rivera enseña el Hola como respuesta a todo

No me lo creo: no puede ser una casualidad que la semana que Ciudadanos empieza a reunirse y pactar con Vox, justo sean portada del Hola las fotos de Albert Rivera y Malú, y que además estas hayan sido casi regaladas para que no haya lucro por parte de nadie. Igual soy muy mal pensado, pero me parece que el de Ciudadanos quiere dárnosla con queso y que hablemos de su relación de pareja y no de sus relaciones con la derecha más a la derecha en España. Una pena que a periodistas tan experimentadas como Ana Rosa Quintana se la hayan colado, si las cosas son como creo. Porque, se la han colado, ¿no?

“Un error que les acompañará”

Estoy seguro de que uno vive más tranquilo cuando puede echar la culpa de todo lo malo siempre a los demás. Estoy seguro, también, de que en la izquierda de Madrid, pese al desastre electoral, están todos muy tranquilos precisamente porque echan la culpa de todo lo malo a los demás para vivir mejor. Solo hay que leer las declaraciones de Carmena o los tuits de Pablo Iglesias e Iñigo Errejón: “Han cometido un error que les acompañará” decía el ex de Podemos, ¿sobre la izquierda de Madrid? No, sobre la derecha y la extrema derecha, que se han unido. Recuerden: la culpa siempre es de otros.

No es una broma aunque lo parezca

César Calderón se hace eco en Twitter, no con poca retranca, de la última de Donald Trump que, aunque lo parezca, no es ninguna broma o una parodia: el presidente de EE.UU. mantuvo entre sus manos durante 40 minutos de intervención un documento que se supone que contenía un acuerdo secreto entre su país y México. Un documento que iba girando y que iba siendo fotografiado y filmado por los periodistas para intentar captar algo en los contraluces. Así, a la ligera, se toma Trump la vida y la presidencia y, pese a ello, ha llegado a tener una torre con su nombre y vivir en la Casa Blanca.

Bildu, al Grupo Mixto

Cuando Javier Ruiz publicó el dibujo del próximo Congreso me sorprendió el bloque central: Unidos Podemos, ERC y el PNV, juntos pero no revueltos, evidentemente. Después, me puse a contar los asientos de los catalanes: 15. Los mismos que escaños había logrado en Catalunya. Es decir: ni rastro del grupo con Bildu. Así que lo que avisamos durante la campaña, al final, se ha cumplido: ERC no contemplaba el pacto que Otegi vendió insistentemente. ¿Quién lo ha roto? ¿O simplemente nunca existió ese pacto que se vendió fraudulentamente para captar votos? Y la pregunta que importa: ¿nadie va a dar una explicación?

Igual la culpa es solo de Podemos

Panik se describe en Twitter “cansado de medios de información manipulados y derechas camufladas”, y tuitea cosas como esta: “¿Qué esconderá la gran cloaca española para que el principal objetivo de PP, PSOE, VOX y Ciudadanos sea que Unidas Podemos jamás entre en el gobierno? Siente terror sólo de pensar que entre gente de la calle y levanten todas las alfombras”. Para empezar, ese “jamás” es relativo porque Podemos solo tiene cinco años y poca experiencia de gobierno. Para seguir, igual no hay ninguna conspiración y el problema es que la idea de Iglesias como ministro solo les gusta a ellos.

¡Claro que tienen algo que esconder!

Si no me fío de Pablo Iglesias ni como director de un departamento universitario, menos me fío de algunos partidos españoles que mencionan en titulares como el que hemos encontrado en Público: “El presidente del PP en Castilla y León, acusado de falsificar 5.000 firmas e ingresar 500.000 euros en B para ganar las primarias”. ¿Cómo lo hicieron? Alfonso Fernández Mañueco y Fernando Martínez Maíllo pagaron las cuotas de afiliados y falsificaron sus firmas para obtener más votos en esas primarias que se adjudicaron. Según el digital, que cita a Diario16, la denuncia ha sido admitida a trámite. ¡Y en unas primarias!

Esto sí que me parecen cloacas

Tampoco dudo de que en el estado español del GAL y, más recientemente, del Comisario Villarejo, existan esas “cloacas” recurrentes en los discursos de izquierda. Pero si en algún sector me parece que tiene que haber subterfugios, acuerdos oscuros y una permisibilidad excesiva, es en el eléctrico. Gracias a una iniciativa popular, un juez va a investigar la sustitución de 28 millones de contadores por los eléctricos que, para empezar, consumen vatios. Pero lo más grave es que esa sustitución no ha traído transparencia ni sencillez para el consumidor, por lo que nada evidente sostiene ese supercambio.

El tuit

No tengo nada contra Eduardo Casanova. Lo que tengo es todo a favor de quien ha escrito este tuit desde la redacción de El País: “A Eduardo Casanova lo conocimos en ‘Aída’ como un niño sabiondo que se ganó la simpatía. Ahora es un artista que prepara su segundo filme: ‘Siento una pulsión disidente, antisistema’, sentencia durante la presentación de la nueva campaña de Mahou”. No ha sido necesario caer en el “clickbait” para que todos estemos pendientes del medio y la noticia: solo ha hecho falta una redacción en un estilo periodístico puro (información explícita e implícita) para llamar nuestra atención.