«España, el país de la patraña»

El verso no es mío, ni de Aitor Esteban, cuyo tuit ilustra este párrafo. El verso es de una canción de Ska-P, de 1996: “Ñapa es”. Ni sé las veces que la habré canturreado mientras leo noticias sobre España como la que comentaba el portavoz del PNV en el Congreso: su partido preguntará al gobierno español si va a iniciar algún tipo de investigación sobre el grupo de WhatsApp de antiguos altos mandos del ejército, y puede que alguno en activo, en el que se hablaba de un golpe militar, se alaba el franquismo y se fantaseaba con 26 millones de fusilamientos. No es el ejército, es el Estado el que está señalado.

Un gravísimo problema de fondo

La existencia de ese grupo y que haya salido a la luz, o piezas como la de Diario16 en la que entrevistan a soldados que hablan de mandos claramente golpistas, franquistas y que abrazan a la extrema derecha, son solo la confirmación de lo que todos sabíamos. Del mismo modo que sabemos que si han estado callados y quietos hasta ahora es porque todos ellos han vivido muy bien en sus puestos y con sus capitales. Hoy, el crecimiento de Vox, las posibilidades de conectarse en un chat y lo mucho tiempo que llevan acomodados, han despertado el problema que es grave, es de fondo y es de España. Les toca resolverlo.

Acción-reacción

El parlamento europeo está lleno de personas resentidas que han consagrado su vida a la política continental dejando atrás sus propias familias y amistades… Personas que no van a tener ninguna piedad en destruir la reputación, con comentarios y lo que les dejen, de József Szájer, el eurodiputado y cofundador del Fidesz, la formación de extrema derecha que gobierna Hungría. Que Szájer sea homosexual o acuda a orgías no interesa a nadie, pero importa porque él mismo “trabaja activamente contra las personas LGTB” (El Confidencial) y porque ha participado en una fiesta del roce… En pleno confinamiento.

No. El gol lo mete Europa

Boris Johnson está pagando bandazos en su gestión de la pandemia: la negó hasta que pasó la enfermedad, entonces puso condiciones extremas a la ciudadanía, y ahora adelanta la vacunación… Solo por poder decir que lo hará antes que Europa y gracias al Brexit. Así va el populismo en tiempos del COVID. Pero creo que el gol se lo está metiendo el continente e la Gran Bretaña: las vacunaciones previas en otros países van a generar más certidumbre a la ciudadanía europea, lo que va a facilitar que haya un mayor número de vacunados y una respuesta grupal. No se trata de llegar antes, sino de llegar.

Eskerrik asko!

Pongo el pantallazo al tuit de la Adurizpedia por la reacción que ha generado su anuncio de que recibía el reconocimiento de DEIA a una de las mejores iniciativas digitales de Bizkaia, pero Roger Álvarez se merece el galardón igual que el resto de premiados y premiada (Aran Goyoaga, José Antonio Pérez y Gonzalo Bartolomé). Y el resto de los participantes en el evento del miércoles que tuve la suerte de conducir (Oihane Agirregoitia, Inge Sáez, Sabino San Vicente, Esti Manzaneque, Kerman Munitxa y María Jabat) merecen nuestro agradecimiento. A veces, en esta columna parece que olvidamos lo local, pero no, no lo hacemos.

Bildu, al Grupo Mixto

Cuando Javier Ruiz publicó el dibujo del próximo Congreso me sorprendió el bloque central: Unidos Podemos, ERC y el PNV, juntos pero no revueltos, evidentemente. Después, me puse a contar los asientos de los catalanes: 15. Los mismos que escaños había logrado en Catalunya. Es decir: ni rastro del grupo con Bildu. Así que lo que avisamos durante la campaña, al final, se ha cumplido: ERC no contemplaba el pacto que Otegi vendió insistentemente. ¿Quién lo ha roto? ¿O simplemente nunca existió ese pacto que se vendió fraudulentamente para captar votos? Y la pregunta que importa: ¿nadie va a dar una explicación?

Igual la culpa es solo de Podemos

Panik se describe en Twitter “cansado de medios de información manipulados y derechas camufladas”, y tuitea cosas como esta: “¿Qué esconderá la gran cloaca española para que el principal objetivo de PP, PSOE, VOX y Ciudadanos sea que Unidas Podemos jamás entre en el gobierno? Siente terror sólo de pensar que entre gente de la calle y levanten todas las alfombras”. Para empezar, ese “jamás” es relativo porque Podemos solo tiene cinco años y poca experiencia de gobierno. Para seguir, igual no hay ninguna conspiración y el problema es que la idea de Iglesias como ministro solo les gusta a ellos.

¡Claro que tienen algo que esconder!

Si no me fío de Pablo Iglesias ni como director de un departamento universitario, menos me fío de algunos partidos españoles que mencionan en titulares como el que hemos encontrado en Público: “El presidente del PP en Castilla y León, acusado de falsificar 5.000 firmas e ingresar 500.000 euros en B para ganar las primarias”. ¿Cómo lo hicieron? Alfonso Fernández Mañueco y Fernando Martínez Maíllo pagaron las cuotas de afiliados y falsificaron sus firmas para obtener más votos en esas primarias que se adjudicaron. Según el digital, que cita a Diario16, la denuncia ha sido admitida a trámite. ¡Y en unas primarias!

Esto sí que me parecen cloacas

Tampoco dudo de que en el estado español del GAL y, más recientemente, del Comisario Villarejo, existan esas “cloacas” recurrentes en los discursos de izquierda. Pero si en algún sector me parece que tiene que haber subterfugios, acuerdos oscuros y una permisibilidad excesiva, es en el eléctrico. Gracias a una iniciativa popular, un juez va a investigar la sustitución de 28 millones de contadores por los eléctricos que, para empezar, consumen vatios. Pero lo más grave es que esa sustitución no ha traído transparencia ni sencillez para el consumidor, por lo que nada evidente sostiene ese supercambio.

El tuit

No tengo nada contra Eduardo Casanova. Lo que tengo es todo a favor de quien ha escrito este tuit desde la redacción de El País: “A Eduardo Casanova lo conocimos en ‘Aída’ como un niño sabiondo que se ganó la simpatía. Ahora es un artista que prepara su segundo filme: ‘Siento una pulsión disidente, antisistema’, sentencia durante la presentación de la nueva campaña de Mahou”. No ha sido necesario caer en el “clickbait” para que todos estemos pendientes del medio y la noticia: solo ha hecho falta una redacción en un estilo periodístico puro (información explícita e implícita) para llamar nuestra atención.

Qué gran error

Entiendo que el PSE quiera marcar perfil propio pese a compartir gobiernos con el PNV, y entiendo que a sindicatos o asociaciones de su órbita la confirmación de que, sí, se ha torturado, no les viene bien. Puedo entender muchas cosas, pero no alcanzo a comprender la negación de un conflicto que, a todas luces, existió. Si no, no habría leyes ad hoc para los miembros de ETA. Si no, hablemos claro, no habría habido un GAL que nació durante un gobierno socialista en España.

Uno menos

Sin duda es una buena noticia que a solo unos días de las elecciones catalanas parezca resuelto el caso de las tarjetas censales falsas. Las denuncias que aparecieron en Twitter y que no pocos se apresuraron a compartir, al final, han tenido explicación e incluso los tuits han sido retirados, según Maldito Bulo. La campaña catalana ha nacido, que nadie lo olvide, con los líderes nacionalistas presos o en el extranjero (para no ser detenidos), pero el recuento lo sigue haciendo la ciudadanía.

“Talegòn”

Beatriz Talegón fue una de las que amplificaron esa denuncia de fraude electoral, y aseguró que estaba realizando una investigación que sonrojaría a más de uno. Parece que los de Maldito Bulo se le han adelantado… O le han reventado el tema. Pero a la Talegón ya le da igual todo porque ha sido elevada a los altares políticos: ha catalanizado su apellido (se lo juro) y ha recabado apoyos internacionales por las presiones que recibe de una banda de chalados (algunos peligrosos) en Twitter.

Otro bulo que nos coloca Girauta

En el otro rincón, el de las estrellas consagradas del anticatalanismo, Juan Carlos Girauta insiste con las obsesiones de su partido en la recta final de la campaña: las escuelas catalanas, según Rivera, Arrimadas y el propio Girauta, han sido fábricas de adoctrinamiento, hasta el punto de que esta semana unos niños han dibujado un lazo amarillo con sus cuerpos. Y adjunta foto. Pero le han pillado: la imagen es vieja, es de Zaragoza, y la reclamación era una mayor cobertura oncopediátrica.

Wyoming, ser valiente es otra cosa

El autor del poema que ha salido publicado en una revista de jueces y del que hablaron en El Intermedio debería cumplir condena, sí, pero por pésimo gusto. Sin embargo en el programa de La Sexta decidieron comprar la versión de Irene Montero: que era machista y ella, claro, la víctima. Lo que es machista sin ninguna duda es que el mismo jefe que aseguraba que eres la mejor cuando era tu pareja te relegue a la última fila cuando tiene novia nueva. Esa también es la denuncia valiente.

Una lectura imprescindible

20161230_lectura

Diario16, aquella publicación tan relevante en los ochenta y noventa, tiene una vida digital en la segunda década del siglo XXI nada despreciable, con textos como el que hemos encontrado sobre la actividad de Aznar como lobista, que ejercerá con más libertad cuanto más lejos esté del PP o FAES. Un cruzado del neoliberalismo y un “conseguidor” en toda regla, pero no para el PP: Trump es uno de sus clientes, pero también lo es Abengoa, por la que medió con su “amigo” Gadafi.

¿Tiene recorrido Sánchez?

Yo creo que no, que su trayectoria como líder del PSOE está en una vía muerta, por no hacer demasiada sangre. Él parece un líder errante, un “cadáver político”, como solemos decir, y sus fieles cada vez le son menos, con deserciones como la de Luena y actitudes como la de Patxi López, que se deja querer por quien quiera hacerlo. Lo que más me sorprende es que Sánchez, que fue secretario general del PSOE, está mostrando que no conoce su partido, que siempre apuesta a caballo ganador.

Una fábrica de amor

El mayor enemigo de Podemos es el propio Podemos. El partido caerá bajo el mismo dedo señalador que no señala nada fuera de Podemos que no exista dentro de Podemos. La “fábrica de amor” a la que se refiere Irene Montero, jefa de gabinete de Pablo Iglesias (¿pero estas cosas, estos cargos, no eran los de la casta?), resulta cada día menos creíble. Y es incompatible, desde la base, con la agresividad que necesita el asalto a los cielos. Por fin, la incoherencia pasa su factura.

Vera Rubin también nos ha dejado

Su nombre es mucho menos conocido que el de Carrie Fisher o George Michael, pero en la misma semana que la cultura “pop” se ponía de luto, también lo hacía la astronomía. No voy a “posturear”: no conocía a Rubin ni su influencia, y solo tras su fallecimiento he leído y les escribo sobre su trabajo, tan merecedor del Nobel como el de otros (no es genérico, es masculino). Otra tarea pendiente para 2017: dar visibilidad en vida a quien lo merece.

Larga vida al “Boxing Day”

Las jornadas de la Premier en plena Navidad tienen un encanto especial, es innegable. El fútbol inglés, incluso cuando la liga española o la italiana parecían por encima en calidad, competitividad y atención, siempre ha tenido cierto magnetismo, sabor propio, tradiciones arraigadas en campos blandos porque se mojan. En Twitter, la cuenta @EstoEsPremier nos traslada rápidamente a ese fútbol que huele a pescado con patatas y hierba bajo la lluvia, también en Navidad.

PP: Lo Peor de lo Peor

20160711_peor

El relato en la versión web de Diario16 es espeluznante: “Ni Las Vegas ni Tarantino: el PP en Baleares. Cocaína, palizas a prostitutas, sobornos, sesiones en clubes de putas solo para políticos y agentes de policía… El sumario del juez Penalva no tiene desperdicio, y lo del Partido Popular con las putas ya huele a infección. No hay trama de corrupción que salpique al PP donde no aparezcan cuerpos de mujer usados a cambio de unos euros. A veces ni euros. Fue un tal Alejandro Halffter, siendo viceconsejero de Presidencia de la Comunidad de Madrid, de la panda de Esperanza Aguirre y Francisco Granados –qué gran pareja perdió el género chico cuando lo encerraron–, quien soltó aquello de: ‘Hay que celebrarlo con un volquete de putas’”.

Y aún hay más

Después de saber que los diputados del PP, Gustavo de Arístegui y Pedro Gómez de la Serna usaban sus influencias para cobrar por trabajos ficticios y, después, movían el dinero para no pagar a Hacienda, parece un pecado menor que el propio De Arístegui, diputado y ex embajador en India con el PP, cobrara con normalidad sus trabajos de “asesor” por medio de una cuenta en Marruecos. El “figura” ya había tenido problemas con Hacienda, así que, en vez de regularizar la situación, emigró la entrada del dinero (El Español).

La telebasura funciona… por nuestra culpa

No se lleve las manos a la cabeza: es así de simple. Si la telebasura es una mina de oro es porque tiene espectadores y atrae a publicistas. Tampoco vale señalar a España: en Euskadi este tipo de programación triunfa. Woody Allen ya decía que en Hollywood no sacaban la basura a la calle, que le emitían por la tele, y aquella ironía sigue estando vigente. Uno de los mejores en este “arte” es Paolo Vasile, al que en La Voz de Galicia dedican una columna deliciosa: puede parecer que le defenestran, pero no, reconocen su mérito de hacer una telebasura cada vez mejor.

No hay mito, solo trabajo

Observo que las cifras de altas de autónomos no dejan de crecer: cada vez son más los que quieren creerse que hay una recuperación económica y que el modo más ágil de intentar aprovecharla es como trabajador autónomo. Así que celebro el post en el blog Pymes y Autónomos que, precisamente, desmonta el mito del trabajador superior. Al contrario: derechos laborales rebajados sin que (añado yo) los sindicatos hagan algo realmente útil por nosotros.

Una declaración muy bonita

Bonita… Y poco más. No sirve de absolutamente nada que “The International Consumer Protection and Enforcement Network” (pueden pronunciarlo exagerando el acento inglés para que tenga algo de gracia) haya publicado una normativa que “impide” que los que nos colocan publicidad encubierta desde las redes sociales sigan haciéndolo. El texto es muy bonito, y pide, claro, que se especifique que estamos viendo publicidad. Pero no hay sanciones ni forma de obligar a que dejen de intentar engañarnos. Así que, como declaración, preciosa. Pero inútil.