«Más de cien productos»

La escasez de piezas en muchos sectores, el precio de la electricidad y que cada vez es más caro el transporte de mercancías, solo podía acabar en un titular como este de Vozpópuli: “Más de 100 productos de la cesta de la compra rebasan ya la inflación prevista”. Y esa inflación arrastra a subidas de sueldos púbicos en su mayoría, empezando por las pensiones. Un esfuerzo que gestionarán los gobiernos pero que haremos todas y todos, que además ya pagamos más por bienes esenciales. Insisto: no solo la luz, no solo algunos productos que necesitan componentes: todo está disparándose y parece que no fuera a tener repercusiones.

En esta situación

Los precios se disparan cuando mucha gente tiene bastante incertidumbre sobre su futuro laboral. Y quien tiene un sueldo fijo lo más probable es que sea más bajo que el de hace veinte años, como muestra en Twitter Julen Bollaín: “Los salarios actuales en España son inferiores a los de hace 20 años, cuando se entró en el euro. Salario medio: 2000, 26.836€ al año. 2020, 26.537€ al año”. Esa es la realidad laboral mientras naturalizamos teléfonos móviles de mil euros y una especulación bárbara vía bitcoin o fondos de inversión. Estamos sobre un gran volcán y ya estamos viendo en La Palma cómo podemos acabar.

Pie en pared

Los más listos siguen jugando con criptomonedas e invitando a quien quiera sumarse a un sistema especulativo que tiene mucho que ver con una estafa piramidal, mientras la mayoría pensamos en cómo moderar nuestros gastos para afrontar la que se nos viene… Y va un tío con su hámster y nos da una lección que tenemos que aprender. Alguien está comprando criptomonedas en función de si su mascota se sube a la rueda o se acerca a alguna pieza de su jaula… ¡Y está ganando dinero! Así que, o bien nadie sabe nada sobre estas inversiones, o su evolución responde a un patrón que seguro que beneficia a la banca virtual.

Todos se conocen

Pablo Casado sigue sin responder a la gran pregunta: ¿con Vox y contra el resto o sin Vox y por el camino largo? Lo que no le puede valer es mirar para otro lado y hacer como que no conoce a la extrema derecha: la manifestación de Chueca no ha puesto en peligro el gobierno de coalición de España 2000, el PP y Vox en un municipio de Madrid. En Málaga, su alcalde acudió a un homenaje al bando nacional organizado por franquistas. Y en Ciudadanos no pueden escandalizarse ahora porque un concejal de Vox en Madrid usara una foto de Villacís con su hijo para tuitear en contra del aborto.

La sorpresa que no lo era

No me sorprende la noticia en La Vanguardia, lo que me deja atónito es que haya sido necesaria una investigación académica para dar visibilidad a lo obvio: “Investigadoras de Comunicación y Psicología Social denuncian la publicidad de alimentos ultraprocesados para menores que hacen algunos de los más seguidos en forma de retos, sorteos o pasatiempos”. Un trabajo necesario el de Araceli Castelló-Martínez y Victoria Tur-Viñes que no puede ser invisible para el ministerio de Consumo ni para las y los espectadores: en YouTube no hay regulador publicitario ni de programas, el filtro somos nosotras y nosotros.

Lo mataron, Arnaldo, lo mataron

Otegi se pasó con su comparación el pasado lunes: “Tal día como hoy de 1964, Martin Luther King recibió el Premio Nobel de la Paz por ejercer la desobediencia activa y pacífica. En el Estado español sería acusado de rebelión y sedición”. Tal vez el líder de Bildu olvidó de que a Martin Luther lo mataron por pensar diferente y por ser precisamente un hombre de paz, como ETA asesinó (y secuestró) a muchos en Euskadi que decidieron optar por vías democráticas y pacíficas y por pensar diferente que sus asesinos. Por un lado va la inhabilitación política y por otro, la inhabilitación moral, que suele ser para siempre.

Rodríguez toma por tontos a sus votantes

Otegi intenta colarnos sus ocurrencias vía Twitter y, por lo general, le sale mal porque solo sus convencidos o los muy necesitados se las creen. Peor me parece, porque es pecado capital, lo que hace Arkaitz Rodríguez, que trata a los suyos como si no tuvieran capacidad crítica o de informarse, y por eso, porque cree que tiene una masa de seguidores infantil, intenta colar que el lehendakari ha hablado de ETA a cuenta de la sentencia del procés cuando en el mismo Teleberri han visto sus votantes, como hemos visto todos, que ha hablado del Procés y de ETA, de ambas cosas. Como dicen Ortuzar y Mendia, Bildu va marcha atrás.

Guardiola, siempre en mi equipo

En las antípodas ideológicas y morales de Arnaldo Otegi y, sobre todo, de Arkaitz Rodríguez, se sitúa Pep Guardiola. Uno de los mejores entrenadores de fútbol del mundo se ha prestado a meterse en un lío para encabezar ese “tsunami democrático” que no solo va de los catalanes, va de la democracia más básica y de los derechos fundamentales de la ciudadanía. Él, que ha amasado millones y buena reputación, sigue luciendo el lazo amarillo y explicando a quien tenga que hacerlo cuál es su causa. Guardiola es más peligroso para España que todos los que se dicen amigos de los catalanes y les usan para lavar su imagen.

¿Y una capea?

La familia Franco quiere que la exhumación de quien les hizo millonarios sea lo más pomposa posible, con la bandera española (parece que no especifican si la quieren con aguilucho o sin él), banda de música y salvas militares. Con todos los honores, vaya. A mí me falta que convoquen una capea al finalizar la exhumación y un concurso de pesca en el pantano más próximo. Así la de la salida del dictador de su mausoleo se convertiría una jornada temática y friki, que es lo que sugieren sus herederos aunque todavía no lo saben. Lo grave es que se atrevan a pedirlo, en este caso, con ataduras. Las que dejó el caudillo.

Villacís te lo cuenta

Begoña Villacís ha escrito una porquería de excusa en su cuenta en Twitter después de haberse atrevido a pasar una pregunta por escrito al periodista que le entrevistaba. Todos hemos podido verlo porque la conversación, además de por la radio, se emitía por streaming, y las imágenes son clarísimas: la de Ciudadanos coge el bolígrafo de Javier Casal y escribe en un papel “Valdemingómez”, un tema sobre el que quería posicionarse. Casal lo denuncia en directo pero cede (no lo entiendo) y Villacís responde lo que tenía preparado. O se es amable con el entrevistado o no, pero no puedes quedarte a medias.

La gran vergüenza mundial

El asesinato de Murtaja Qureiris, programado por Arabia Saudí por el método de la crucifixión por participar en manifestaciones siendo un niño (los delitos que se le imputan los cometió con 10 y 13 años) debe caer en nuestras conciencias. En las de todos. En las de las potencias mundiales y, en general, todos los gobiernos, por no intentar parar esta pena capital cruel porque el país que la ejecutará es Arabia Saudí. Y en la de la ciudadanía del planeta por no levantarnos ante una injusticia tan flagrante. No se trata de una cuestión “interna”, se trata de Derechos Humanos, dictaduras y, por supuesto, mucho petróleo.

¡Qué oportunidad perdida!

La selección española de fútbol, la absoluta, perdió el miércoles su partido contra Alemania durante el mundial de Francia. Ayer, las portadas de la prensa deportiva española abrían con el fichaje de Jovic, y la catalana, con el futuro de Griezmann (que ya me parece el jugador más pesado del mundo). ¿Por la derrota? No, porque son chicas. Con el resultado de “La Roja” solo encontrábamos llamadas en portada, generalmente ridículas y excepcionalmente un poco más grandes. ¡Qué oportunidad estamos perdiendo como periodistas (me incluyo, sí) de demostrar que nos tomamos en serio la Igualdad!

Con hacerlo una vez…

No entiendo la estrategia catalana: con una declaración de independencia que se toman más en serio los que acusan a los presos políticos que los que la hicieron, en los compases finales de un juicio precedido por una prisión preventiva y unas decisiones parlamentarias injustas, los que tienen que poner mesura imponen más enfrentamiento. Estamos hablando de políticos y líderes sociales acusados de delitos que conllevan penas muy graves, estamos hablando de familias destrozadas porque algunos quieren golpistas vía sentencia y otros, abrir un ciclo de venganzas que les lleve… ¿A dónde? Necesitamos agua, no gasolina.

Ciudadanos compite… Con Vox

Vox ha irrumpido como un terremoto en la política española, pero solo en la de derechas. Ha descolocado a PP y Ciudadanos, que ya no saben ni quiénes son cuando la diestra extrema les pone un espejo delante. Tan despistados andan que quienes abrazan ideologías cavernícolas hacen lo que quieren con ellos en Andalucía y les bailan en Madrid, hasta el punto de que Ciudadanos, en vez de competir con el PP por ver quién es más útil en política, acaba compitiendo con Vox por ver quién propone la mayor tontería: Villacís quiere turnarse con Almeida en la alcaldía de Madrid. Y olé.

Más pruebas

En 2018 avisé a un responsable de campañas de que en 2019 iba a gastarse más dinero que nunca en Internet con menos certezas que nunca, ante el asentamiento de los medios digitales y la situación de zozobra de Facebook, Twitter e Instagram. Por si fuera poco, los cambios en Google remataron el desastre. Hoy podemos observar que ni la segmentación ni las grandes inversiones ofrecieron nada a los partidos: Ramón Salaverría tuiteba esta semana el dato de que Podemos fue el partido del continente que más gastó en Facebook para las elecciones Europeas… Y obtuvo 6 escaños.

Una vida arruinada

No sé cuántos años pasará en la cárcel Josu “Ternera” Urrutikoetxea a partir de ahora. Solo sé que, hasta hoy, su vida se ha basado en destrozar la de otros, en huir y esconderse, y en contar días entre rejas. ¿Le ha merecido la pena? ¿A cambio de qué, de unas pintadas con su apodo, de unas declaraciones del mismo Arnaldo Otegi que ha terminado copiando el discurso y las campañas de EAJ-PNV? El final de Ternera, como elemento distorsionador de una campaña electoral e icono de una derrota sin honor, dolerá a muchos que nos deben explicaciones y flagelo (sí, flagelo), pero es un epílogo irremediable.

Pero, ¿qué dices?

Cristian Campos ha logrado hacer un hueco en el periodismo de parte que se sitúa entre la derecha y la pared: sus columnas en El Español y sus colaboraciones con Federico Jiménez Losantos vienen siempre caldeadas por unos cuantos tuis de “neocon” histriónico que llegan a sus casi 40.000 seguidores. Esta semana, cómo no, criticaba los fichajes en el trabajo (como buen neoliberal) argumentando que no son pocos los que pierden horas laborales a base de pausas. Sí, existen y todos les vemos hacerlo. Pero sabemos que son la excepción: la norma es el regalo de horas a la empresa, y hay que cambiarla.

Y, ¿qué hacéis?

En esta carrera por ver quién es más liberal de derechas que libran algunos (políticos y opinadores en su mayoría), la gasolina la ponen otros que se autoproclaman de izquierdas: el escrache a Begoña Villacís, embarazada de ocho meses, en la pradera de San Isidro, no es justificable por mucho que la de Ciudadanos ejemplifique, precisamente, ese liberalismo troglodita. La fotógrafa Lupe de la Vallina tuiteaba al respecto: “¿Podéis no escrachear a la gente como si fuéramos una tribu de hooligans borrachos en vez de una democracia donde podemos votar, publicar y esas cosas aburridas de gente adulta? Gracias”.

Díaz Ayuso, icono del PP de Casado

Aunque Pablo Casado intente salvar el desastre de su partido por todos los medios, incluido el de cambiar a Aznar por Rajoy como padre político, lo va a tener difícil precisamente porque él mismo ha puesto en marcha la maquinaria que va mascando la tragedia lentamente: Isabel Díaz Ayuso está empeñada en demostrar su torpeza en Madrid, como ya hiciera Cayetana Álvarez de Toledo en Barcelona, y en el PP, claro, están desesperados. El viraje que quiere dar Casado, por lo tanto, es imposible con el equipo y las candidaturas que él mismo diseñó. La noche de los cuchillos jamoneros está por venir.

El norte

En esta misma columna he criticado el documental que Piqué produjo para que Griezmann diera calabazas al FC Barcelona (el nivel de “impresentable” del capitán blaugrana llegó a cotas insuperables), he alabado el vídeo con el que Ibai Gómez agradeció al Alavés su confianza y anunció que volvía a casa fichando por el Athletic y, si se confirma, criticaré nuevamente a Griezmann por el documental que parece que estaría grabando para anunciar su salida del Atlético. No es que me importe más el quién que el cómo, es que algunos futbolistas se gustan demasiado y no entienden que ellos pasarán y los aficionados seguiremos.

El problema no es el colchón

Como las redes se alimentan sobre todo de las mentiras gruesas y las verdades a medias, el cambio de colchón que ordenó Sánchez con su mujer cuando entró a Moncloa ha eclipsado otros pasajes del libro del presidente español que retratan mejor al político, que es el que nos debería de ocupar: para el socialista, según destaca Dani Sánchez en Twitter, “el 155 fue como un bálsamo para la sociedad catalana” y el “horizonte electoral” resultó “tranquilizador”. Después de eso, ya sabemos lo que vino: Torra y más enfrentamiento desde España. Sánchez es de esos que creen que con él empieza y termina todo.

Si se lleva el populismo…

Podemos ya ha bosquejado cómo será la campaña para ellos: si se lleva el populismo, a tope con el populismo. Su posición en las encuestas, de decadencia imparable, les empuja a arriesgar, está claro, pero creo que han elegido mal, porque si entre la copia y el original de la socialdemocracia el votante elegirá el original, entre la copia y el original de la demagogia el votante elegirá también el original. Y en este caso se trata de Vox. Además, Podemos ya pisa moqueta, así que las grandes promesas, como la devolución del rescate bancario, se convierten en grandes decepciones en cuanto las pronuncian.

La dignidad de Turull

Ni por el mitin político de Oriol Junqueras ni por el alegato práctico de Joaquim Forn: Jordi Turull ha optado por golpear con la verdad en el juicio al que está siendo sometido por intentar buscar una solución al conflicto catalán. Durante su intervención no dudó en enumerar los incumplimientos reiterados de sentencias, del Estado con Catalunya en materia económica. Como bien decía el del PDeCat, con el traje de constitucionalista uno puede saltarse la Constitución y la justicia. Con el de nacionalista la búsqueda de diálogo conlleva un año de prisión preventiva para empezar.

Felisuco, te queda camino por recorrer

Lo mejor de la democracia es que cualquiera puede ejercerla. Ahí reside su grandeza: se nutre de economistas, abogados, periodistas, agricultores, operarios, estudiantes, profesores, actores y humoristas. Todos, absolutamente todos tienen que aprender a hacer política. Pero algunos se muestran desde el principio como unos inconscientes o ignorantes y, por extensión, muy atrevidos. Como Felisuco: el cómico cántabro recibió en Twitter una aclaración del partido nacionalista bávaro. Por supuesto que ellos también buscan la independencia de Alemania. Y nadie les procesa ni amenaza por hacerlo.

Por qué les importa el impuesto de sucesiones

Ayer mismo hablábamos en esta columna de la sociedad con la que Begoña Villacís y su marido habían adquirido una parcela de más de 2.000 metros cuadrados para construir una vivienda de más de 600 mientras el resto de los humanos comprábamos nuestro piso a lo pobre, sin sociedades. Hoy les hablamos del patrimonio de cien pisos en Madrid que heredará Villacís y que actualmente gestiona su madre. Y también del impuesto de sucesiones que los de Ciudadanos quieren eliminar. Esa supresión, por supuesto, le vendría de maravilla a Villacís y a tantos políticos ricos como ella. Así de crudo.