No, no se ha cansado de trabajar

En la empresa privada se vive mejor que en política. Hasta los tradicionales cuneros ahora tienen mucho más de lo que preocuparse que hace tan solo unos años. Así que, pese a que el chiste fácil sea una tentación, Borja Sémper ha dado un paso adelante hacia vivir peor. Ha decidido volver a una arena que conoce y que si no quema, congela, pero que nunca resulta cómoda cuando la pisas. Se ha lanzado, de nuevo, a las jornadas sin fin, a la parte que enfoca de las cámaras y a que opinadores como yo hagamos eso, opinar, sobre qué dice, cómo lo dice y dónde lo dice. Pero también a que lo haga cualquier tuitero a cara tapada.

Pero…

Borja Sémper no es un mirlo blanco: no dejó la política por principios, sino por una oferta que le satisfacía. De no haber mediado esa oferta, hubiera seguido en política. Nada hay criticable en ello, pero sí en hacernos creer lo contrario. Y tampoco vuelve a ella por principios: vuelve a ella, de nuevo, por una oferta que le satisface y que le asegura un futuro en Madrid, posiblemente, como diputado por lo menos. Tampoco ha cambiado tanto el PP: él va a ser el portavoz de un comité electoral cuyo fin es dejar al partido en las mejores condiciones para pactar con Vox, esto es, con la ultraderecha. No defiende ningún otro objetivo.

Lo dice Hermann

Borja Sémper va a trabajar para que el PP converja con el partido de Hermann Tertsch, que hace solo unos días lanzaba este divertidísimo tuit: “Queridos niños varios, escribís Bakio o Azkoitia en ese nuevo vascuence que vosotros chapurreáis aun peor que el español. Pero en español -todas las ciudades y pueblos y españoles tienen un nombre en español- son Baquio y Lequeitio y Azcoitia y Guipúzcoa como son Gerona o Lérida”. Lo dice Hermann que, sin embargo, no traduce su nombre como Germán porque, claro, una cosa es el euskera, que es de paletas y paletos, y otra el alemán para un ultraderechista.

De caradura en caradura, y tiro porque me toca

Harry de Inglaterra, el cojonazos. Visto lo visto, no se me ocurre mejor sobrenombre para el hijo de Carlos III, siguiendo la tradición monárquica de buscar un calificativo que describa al personaje. En España, “el preparado” y “el campechano” son los grandes candidatos en nuestros tiempos (espero que Leonor sea “la última”), y en Inglaterra la historia nos ha traído a “la sangrienta”, “el bastardo” o “el martillo”. Por méritos propios, insisto, Harry está ganándose un mote que tenga que ver son su capacidad para vivir de la familia real y de lo que dice sobre la familia real. Esperar a la muerte de Isabel II, sin embargo, ha sido un detallazo.

Ya solo Gales y golf

Pese a su excepcional currículum y los fogonazos de fútbol que nos ha dejado, con carreras y remates extraordinarios, no creo que Gareth Bale sea un personaje que merezca odas. Su retirada del fútbol, a los 33 años, ha llegado tarde: el desprecio con el que ha tratado a quien le pagaba, y muy bien, y a un deporte que se lo ha dado todo, no me parece justo. En su lista de prioridades, que él mismo exhibió, y que consistía en “Gales, golf y el Real Madrid”, ya solo quedan dos. Veremos dónde vive y paga sus impuestos, y veremos si da el paso a competir entre hoyos, pero lo veremos de lejos, como él hizo con la afición a un magnífico juego.

Te lo recomienda Agustín

Agustín Rosety, diputado de Vox, tuiteaba esto hace solo un par de días: “Francisco Franco fue uno de los fundadores de la Legión y protagonista de algunas de sus acciones militares más heroicas. No se puede celebrar el centenario de la Legión honrando a todos los legionarios, menos a uno de ellos. Os recomiendo el libro de Niko Roa. ‘El joven Franco’”. Por si acaso a alguno le quedaban dudas de qué son los de Vox. Lo que no entiendo es que, en democracia, pueda glosarse la figura del dictador que la precedió sin ningún problema. Porque no me hace falta leer el libro que recomienda Rosety para saber de qué va.

Algo más ya queda

Visto el tuit de Agustín Rosety, el de Borja Sémper sobre el enésimo homenaje a un preso de ETA, parece un poco deslavado: “Si algo queda en España del franquismo son los rescoldos de ETA: sus apologetas”. Bueno, algo más ya queda: quedan los franquistas y hasta un partido político fundado por un ministro de Franco. Un partido que a Sémper le tiene que sonar, por mucho que haya cambiado de vida (un cambio bien hecho porque en política se vive mal). Franquismo aparte, las imágenes del recibimiento en Hernani son las del fracaso de una parte importante de la sociedad, como dijo Arkaitz Rodríguez.

¡Claro que hay diferencia!

En una situación tan complicada como esta, me he puesto siempre del lado del gobierno, de cualquier gobierno, porque en una pandemia tomar decisiones difíciles, encontrar recursos y soportar la presión de todo el mundo que pide: “¿Qué hay de lo mío?”, no es fácil. Al contrario. En resumen: la pandemia nos afecta a todos por igual pero hay diferentes maneras de hacerla frente. Y hay algunos responsables que lo están haciendo mal: colocar dispensadores de hidrogel en 50 estaciones de metro en Madrid (hay más de un centenar) el 22 de septiembre debería de darles vergüenza en vez de sacarlo en su televisión autonómica.

No estarán tan mal en Nafarroa…

No estarán tan mal en Nafarroa cuando ELA y LAB no han convocado una huelga ni han anunciado más movilizaciones, y UGT y CCOO no se han puesto a disposición de los sindicatos vascos. Pero parece que pese a esa paz sindical, el coronavirus está golpeando al territorio, sobre todo en los municipios donde han celebrado “no-fiestas”. Lo que nos lleva a otro debate: pueden hacerse los indignados tanto como quieran los de siempre, pero el principal punto de contagio del coronavirus está en el ocio y luego los contagiados difunden el virus. No se trata de criminalizar, sino de ser realistas y atajar los contactos.

¿Cuántos avisos más tendrá?

Ojalá Javier Negre no haga caso a las recomendaciones y siga subiendo a su canal en YouTube contenido censurable. Al final y después de varios avisos o suspensiones temporales, llega un momento en que las plataformas cierran definitivamente los espacios problemáticos, que es en lo que se está convirtiendo el de este periodista que da voz a lo más fascistoide de las redes sociales (el nuevo famoseo rancio, un primor): solo hace un mes que le habían devuelto el canal en YouTube cuando han vuelto a cerrárselo por un tiempo. Así que, ¡ánimo, Javier, que tú puedes lograr el cierre definitivo!

Algo hemos hecho mal todos

Si no recuerdo mal, a Borja Sémper se lo dijo Edu Madina. Palabras más, palabas menos. Y ahora, el exconcejal de Donostia se lo dice al expresidente del PP vasco: “Tu vida va a mejorar y tu familia lo va a agradecer”. Esa frase me invita a una autocrítica: algo hemos hecho mal todos los que sabemos que, en política, la vida es dura e ingrata para que la ciudadanía tenga la percepción de que se trabaja poco, se cobra mucho y se trinca lo que se puede. Algo hemos hecho mal los que lo contamos y los que lo dicen, como Iglesias (que ahora es “casta”) pero también muchos del PP que rebotan argumentos si les conviene.

El fachómetro, disparado

La llegada de Iturgaiz, además de provocar la salida de Alonso a una mejor vida (se dedique a lo que se dedique va a vivir mejor que en política, sin duda), está provocando que el fachómetro se dispare. Santiago Abascal decía esto a Federico Jiménez Losantos: “Iturgaiz sólo tiene un problema y es que está en el PP”. Después de leer lo que dice el propio Iturgaiz es evidente que entre ambos hay química. Sus partidos en Euskadi parece que no van a entenderse pero los líderes, sí, porque vienen del mismo punto, del mismo pensamiento, de la misma ideología… Y no acabarán muy lejos el uno del otro.

Andalucía, más caricatura que nunca

Ha tenido que llegar a Andalucía el trifachito del PP, Ciudadanos y Vox (que allí sí se han entendido y han sacado representantes los tres) para que la comunidad autónoma sea una caricatura de sí misma más que nunca. No solo por el impulso a la tauromaquia o la caza: lo último de la Junta es digno de chiste de revista satírica, pero la realidad supera a la ficción una vez más. El mismo Juanma Moreno anunciaba vía Twitter que “Andalucía propone una rebaja del IVA en las sillas de Semana Santa. Su importancia religiosa y cultural y la labor social de las hermandades y cofradías lo justifican”.

Para la galería

El gran problema de Podemos en el Gobierno español no va a ser la oposición, sino la gestión de las expectativas que los representantes y agitadores del entorno de ese partido han creado. Y más difícil les va a resultar si siguen generándolas: la regulación de la publicidad de casas de apuestas que anunciaba el ministro Garzón ha acabado siendo un coladero. A la libertad para colocarla en los partidos emitidos más tarde de las 20:00 se une ahora la excepción de “los famosos” haciendo publi: durante las retransmisiones los presentadores estrellas podrán mencionar las marcas, como recuerda en Twitter Antonio Maestre.

¿Cómo pueden hacerlo?

El acto de vandalismo de esta misma semana contra el monumento que recuerda a los fallecidos en el 11-M en El Pozo me ha sorprendido, como siempre me sorprenden este tipo de ataques. No son vándalos, no son inconscientes rompiendo material urbano, son personas sin alma, sin empatía, sin sensibilidad, sin memoria… Que podemos encontrar en todos los sitios: solo unos días antes, Dani Álvarez tuiteaba que el mural en Deusto de Yolanda González, asesinada por un ultraderechista en Madrid, había sido atacado. La llamaban “zorra” y pintaban sobre ellas banderas españolas.

Una oferta para dejarlo

Borja Sémper lo deja como un político reconocido (solo hay que ver las palabras que le dedican representantes de otros partidos) y que entró en política cuando, literalmente, te jugabas la vida. Lo deja después de intentar desmarcarse de su propio partido varias veces y de protagonizar una campaña arriesgada que hizo subir al PP contra todo pronóstico. Y lo deja cuando ha tenido una oferta de la empresa privada que no sé si le habría llegado antes de ser político. “Si no seguiría aguantando como hasta ahora”, tuitea José Miguel Gamboa. Vamos, que lo deja de un modo muy humano. Ojalá le vaya divinamente.

El nivel ha bajado

Es innegable que Borja Sémper siempre ha mantenido ese tono conciliador que tanto se agradece y que, por desgracia, en el PP vasco siempre fue excepcional. Es innegable también que con la marcha de representantes como él y con las nuevas incorporaciones el nivel político está bajando. Solo hay que ver a Marcos de Quinto del que, como millonario ejecutivo de Coca-Cola que fue, nadie espera que en Ciudadanos defienda una bebida innecesaria, carbonatada, azucarada y excitante. Pero de ahí a su tuit: “No hay alimentos buenos o malos” va un trecho. El trecho que, si lo recorres, te retrata.

Ya puede andar vivo Puigdemont

La llegada al Parlamento Europeo de Puigdemont y Comín fue una gran noticia, para empezar, para ellos. Pero cualquiera con un poco de sensibilidad y conocimiento de lo que pasó sabe que es más justo que les dejen ejercer como políticos a que les condenen por hacerlo, como a algunos de sus compañeros. Pero el de Puigdemont no va a ser un paseo triunfal en la Eurocámara y tendrá que estar espabilado para no ser usado por un tramposo como Farage, que le ha sumado a su grupo de “euroescépticos” (¿acaso Puigdemont lo es?) o para que Los Verdes no hagan política contra la N-VA a su costa, por ejemplo.

¡Y una m…!

Empresas como Uber, Glovo o Deliveroo, que cuentan con el apoyo de medios lanzados al abismo como La Razón y de gobiernos formados por liberales que solo buscan su puerta giratoria, son una mala noticia: normalizan que el trabajador tenga que pagarse sus gastos laborales, siempre pagan menos impuestos y tienen menos obligaciones que la competencia tradicional en su sector, buscan cambios legislativos, y empeoran cuando no encarecen el servicio: los restaurantes sirven más tarde y peor a sus clientes en los locales en las horas punta de envíos. Pan para hoy pero salas vacías para mañana.

Ridículo

Quique Setién, encantado con la oportunidad que le ha dado el Barça y la vida, puso en evidencia el tipo de gestor que es Bartomeu: después de que el presidente dijera que llevaba meses tratando con él, su nuevo entrenador aseguró que le llamaron el día anterior y en 5 minutos aceptó la oferta. Vamos, que el que más manda en el Barcelona abrazó el ridículo, como lo define Fermín de la Calle. Ser un mal dirigente y equivocarte es posible. Mantenerte pese a ello en una de las empresas más importantes del mundo es sorprendente. Hacerlo público, ya, solo demuestra incapacidad.

Sí, estos son vuestros cuervos

Voy a guardarme el tuit del Sr. Brus para usarlo cada vez que vea a alguien del PP intentar hacer frente a la ultraderecha con la boca pequeña: “Estos cuervos son vuestros”. El tuitero se lo lanzaba a Borja Sémper, que mantenía una discusión para la galería (porque hasta que no rompan con Vox todo lo que hagan en el PP contra ese partido es solo para la foto) con un defensor de las ideas ultras de los de Abascal. Así que, que no nos vengan los Alonso, los Martínez Almeyda, los García Egea ni los Casado a decirnos que ellos ya afean a Vox, porque solo les legitiman cuando intercambian poder político.

Y también son vuestros

Todo lo que he escrito en el párrafo anterior sobre el PP es aplicable también a Ciudadanos, ese partido cada vez más irrelevante desde que calentó a los votantes de extrema derecha tanto que acabaron abandonándoles para irse, en masa, al verdadero partido ultra. Imágenes bonistas como las de Felisuco anunciando que van a trabajar para erradicar la violencia machista son un insulto mientras abrazan poder político gracias a los votos de Vox vía acuerdo a tres bandas con el PP. Para hacer política que sume es necesario empezar por apartar a la extrema derecha. Todo lo demás es palabrería.

Donde no dan los números dan las firmas

Donde no les dan los números para hacerlo medio escondidos, PP y Ciudadanos tienen que pactar abiertamente con Vox: “Hoy, en El Espinar, el PP, C’s y Vox firman esta moción pidiendo la derogación de la Ley contra la violencia de género y alertan contra la violencia en aquellos países que ‘no pertenecen a la civilización occidental’. Machismo y racismo todo en uno. Es tan repugnante…”, tuitea el socialista castellano Luis Tudanca. Esta y no otra es la realidad, y cuanto más intentan ocultarla con mensajes bonistas más indignante resulta la situación porque hablamos de personas que son asesinadas.

Esto es lo que son

El vídeo de Ortega Smith ignorando a una víctima de la violencia machista que le increpa (Nadia Otmani recibió tres disparos cuando intentó evitar que su cuñado asesinara a su hermana) es el que tienen que ver Borja Sémper, Felisuco y todos los representantes, afiliados y simpatizantes de PP y Ciudadanos, porque es el vídeo de la vergüenza, de una ultraderecha que ni siquiera mira a la cara a una víctima después de hacer un discurso contra un consenso básico, como el de la violencia de género. Si son capaces de ver ese vídeo sin romper con Vox por lo menos que tengan la vergüenza de callarse.

Y no, no son víctimas

El colmo del recochineo e incluso la humillación hacia las verdaderas víctimas es que Vox se presente como víctima de un linchamiento mediático solo porque señalamos la cobardía de Ortega Smith, lo ultra de su discurso y la hipocresía de todos, absolutamente todos los miembros de PP y Ciudadanos que les dan poder político. “Resistid y no tengáis miedo. En VOX siempre defenderemos a los que son perseguidos por ser valientes en la defensa de España”, dicen en su tuit los de Abascal. Lo único que no sé es si se descojonaban mientras lo escribían o eran capaces de contener la risa.