Si a Otegi le molesta…

Todas y todos, incluidas e incluidos aquellos a quienes les parece bien la provocación y las agresiones a la Ertzaintza y a quien pasara por allí (que los hay y las hay), no lo olvidemos, hemos reconocido esas provocaciones y esas agresiones. Todas y todos las hemos visto y hemos pensado que ya las habíamos visto antes. Y si Arnaldo Otegi se ha dado por aludido con las palabras de Josu Erkoreka, él sabrá por qué. Lo que no puede hacer ni Arnaldo Otegi, que ahora va de amo de la baraja, es tomar a la ciudadanía por tonta, como también hacen quienes revientan manifestaciones u organizan altercados antes de los partidos de fútbol.

Quienes te toman por tonta y tonto

La pregunta clave es: ¿ganará Bildu las elecciones tomando por tonta a la ciudadanía? No sería la primera vez: lo hizo Isabel Díaz Ayuso, cuya respuesta a la ministra que sugirió una limitación horaria en hostelería es perfecta (con ese “materialista” que brilla con luz propia por lo extemporáneo) para ejemplificar cómo una política te toma por tonto: “Es que somos diferentes. España tiene la mejor vida nocturna del mundo, con las calles llenas de vida y libertad. Y eso también da empleo. Nos quieren puritanos, materialistas, socialistas, sin alma, sin luz y sin restaurantes porque les da la gana. Aburridos y en casa”.

Lo feo de la política

El conocido como “Caso Koldo” es un caso de corrupción de manual: con un Víctor de Aldama que, supuestamente y por lo que cuentan las crónicas, pudo corromper a un Koldo García que estaba en el lugar más adecuado y en los momentos más adecuados para ser corrompido, insisto, supuestamente. Es tan de manual que no faltan los mensajes obscenos, en este caso, para abonar bizums, las colocaciones de esposas, familiares y amigos, y los sueldos que al común de los mortales nos resultan inalcanzables: “Koldo cobró en los tres años de asesor de Fomento 365 mil euros” (El Independiente).

¿Que convoque elecciones?

Incluso en este clima de tormenta resulta incongruente la petición del PP que hace, en este caso, Martínez-Almeida, de que Pedro Sánchez convoque elecciones. ¿Por un caso de corrupción que estamos aún conociendo? ¿Cuántos gobiernos del PP tenían que haber caído ante investigaciones judiciales y periodísticas de casos de corrupción? Diego E. Barros acertaba con su tuit: “Esta gente está fuera de la realidad”. Esa es la impresión que da el PP y se equivoca, porque sus prisas no son las de la ciudadanía, que ve con cierto pasmo las noticias del “Caso Koldo” y se pregunta cuál será el alcance global de la trama.

Un señorito

Ernest Urtasun ha demostrado, de momento, que usa el congreso para hacer campaña por Sumar en Euskadi, y que tiene bastante poca cultura política para ser ministro, precisamente, de Cultura. Pero lo que hace y dice en el ejercicio de su cargo suena todavía peor: “Seguiremos trabajando para conseguir el IVA reducido para la compra de arte contemporáneo”. ¿Quién compra arte contemporáneo? Los señoritos y las señoritas bien que van a verse beneficiados por esa rebaja del IVA. ¡Claro que sí! ¿Quién lo necesita más que ellas y ellos para llenar sus casas grandes de cuadros, esculturas y montajes? Urtasun, siempre a lo que importa.

Un win-win de libro

No me cabe duda de que la “E” serpenteante justo antes de las letras “T” y “A” de “aldaketa” en el cartel de Otxandiano está puesta con toda la intención (además, son las únicas que se unen): Bildu demuestra que es una opción atractiva incluso con ese guiño perverso donde más se ve. Y un fascista siempre enseña la bandera, no lo olvidemos. Pero su señuelo necesitaba a un tonto útil, en este caso, una tonta útil, que picara y, de paso, victimizase a quienes se ríen de nosotras y nosotros. Y esa tonta útil ha sido Isabel Díaz Ayuso, que ha colocado el tuit al que ha hecho la ola toda la izquierda abertzale. Pues bueno, pues vale, pues me alegro.

Orgullosas y orgullosos de ensuciar

Más allá que el negro anzuelo del cartel, me sorprende que en Bildu siguen pensando que la de ensuciar es buena idea: el mismo día que el lehendakari Urkullu anunció la convocatoria electoral, Bilbao fue inundado con la cara de Pello Otxandiano (con foto del genial David Herranz, el buen gusto no se lo niego). Sin espacio para colocar publicidad electoral aún, todas las paredes valían. No solo eso: han grabado y difundido en un vídeo su nulo respeto a las normas de la junta electoral y a las más éticas de la ciudadanía, porque no todas las paredes son lienzos ni un sitio para colocar propaganda electoral. Pero igual hasta les funciona.

Hablando de ensuciar…

Como si volviésemos a los 90, Bilbao apareció empapelado por quienes no respetan normas ni éticas, y también han vuelto a nuestra vida la oposición a proyectos que generan riqueza y la pintura, en este caso, roja y contra el Guggenheim. Dice Mikel Segovia en El Independiente que “la ampliación del Guggenheim” es “otro pulso electoral que enfrenta a PNV y EH Bildu”. No estoy de acuerdo. Creo que tenemos que empezar a hablar del proyecto en Gernika-Lumo y Murueta como lo que es: una oportunidad para recuperar un espacio natural, no una lucha partidista con las mismas mentiras de quienes siempre han dicho “no”.

Que hable Ábalos

El personaje más importante del conocido como “caso Koldo” es, sin duda, José Luis Ábalos. De momento, no tanto por lo que hizo, pero sí por lo que está haciendo y diciendo. Su discurso, que quería sonar emotivo y sonó casi a chiste, intentando basar su inocencia en su propio sacrificio de no tener chófer y secretaria, y pasar al grupo mixto en el Congreso, es para “tallar en mármol blanco”, como tuiteaba Álvaro Berro. Otra usuaria le puso música: la canción “El muelle de San Blas”, de Maná. Y esto es solo el principio: cuando el fango suba y empiecen a mancharse los bajos de los trajes, empezarán los saltos y las huidas.

No va a hacer nada extraño

Pero Ábalos no va a hacer nada extraño, estoy seguro: su paso al grupo mixto no va a suponer un dolor de cabeza para el PSOE. No lo digo yo y el sentido común, lo confirman en EPE: “Ábalos tranquiliza al PSOE: ‘El Gobierno va a contar con mi voto’”. Aunque su decisión resulte difícil y sus alocuciones, extemporáneas, la situación del socialista es muy complicada, y el primer interesado en que no se complique más es él. Un paso desapercibido en el Congreso, en la que seguro que va a ser su última legislatura, sería la mejor noticia para el diputado y el PSOE. Pero ni las circunstancias ni la política se lo van a permitir.

Sí se puede

La Bundesliga tendrá que sobrevivir sin un adelanto de mil millones de euros. Lo han decidido las y los fans, según Palco 23. O lo que es lo mismo: es posible decir “no” a los cantos de sirena de los fondos de inversión y es posible escuchar a las y los aficionados a este deporte, que somos quienes pagamos la fiesta. Los clubes estaban de acuerdo pero la corriente entre las aficiones ha sido tan intensa que han tenido que rechazar la oferta del fondo CVC británico que acechaba, y por lo tanto seguirán gestionando el total del reparto televisivo. Porque ese dinero, en la alemana como en la liga española, no cae del cielo: compran ingresos futuros.

No es rentable

El fútbol actual no es rentable, y el modelo de negocio se basa solo en que el dinero, como el balón, no deje de moverse y rodar. En el momento en el que alguien pisa la bola y se detiene el juego, también el de los despachos, los Excel y las presentaciones financieras, queda claro que el dinero podrá correr mucho, pero no es suficiente: “La UEFA anticipa una desaceleración en la compraventa de clubes tras el ‘boom’ de los holdings”, adelantan en 2 Playbook. ¿Y por qué habrá cada vez menos inversores en la propiedad de los clubes? Pues por el mismo motivo por el que están en fondos que compran derechos sobre emisiones futuras.

Seguimos hinchando el globo

En los clubes de fútbol hay personas encargadas de hinchar los balones y la mayoría se ocupan de seguir hinchando el globo que permita al dinero correr de lado a lado para que se les quede algo entre las uñas: un chaval de 16 años puede estar ganando 20.000 € en la cantera de un club de la élite. Si forman parte del top 3 de su categoría, podemos llegar a hablar de 50.000 anuales a partir de los 14 años. Chicos, niños, adolescentes en el mejor de los casos, que puede que no lleguen a profesionales. El reportaje en El Independiente sobre “Niños futbolistas y padres que viven de ellos”, del que están sacadas las cifras, merece una búsqueda en Google.

¿Y si no es solo Negreira?

Reconozco que el tema me tiene enganchado: cómo en el FC Barcelona han pagado más de siete millones de euros al vicepresidente del comité de árbitros para obtener, según las investigaciones, beneficios arbitrales mientras contaban con el mejor jugador y el mejor entrenador del mundo, dice tanto del club y de un modo de hacer las cosas… Pero ojo a esto que ha adelantado Alejandro Entrambasaguas en El Debate: “La Guardia Civil concluye que la cúpula arbitral protegió a Negreira mientras influía para beneficiar al Barça”. En cualquier caso, no hace falta que el caso se agrave más para que haya castigo ante lo grave que es ya todo.

Y no solo en el fútbol

El fútbol sigue reinando: un deporte y un espectáculo globales, mundiales, sin rival posible. Dan igual las pérdidas o los intentos de otros deportes: “Un grupo de milmillonarios se ha propuesto romper con las limitaciones y patrocinar los Enhanced Games, unos Juegos Olímpicos alternativos en los que se permita el uso de sustancias dopantes con el objetivo de convertir a los atletas en auténticos superhéroes con ayuda de la ciencia, y no solo por su esfuerzo” (Xataka). Sus promotores se justifican así: “Las pruebas de drogas en los Juegos Olímpicos tienen que ver con la equidad, no con la seguridad por la salud”.

No solo es el cielo, también es el mar

No me escondo: sí, hablo de emergencia climática. Sí, creo que es indemorable la intervención en los sectores productivos. Sí, es imprescindible que un organismo internacional empiece a recaudar dinero de quienes se han hecho ricos destruyendo nuestro planeta y generándonos necesidades, para crear puestos de trabajo encaminados a encontrar, esta vez, soluciones. Y sí, no solo debemos mirar al cielo porque no llueve: “Algunos expertos en clima abogan por un objetivo diferente: en su lugar, quieren establecer límites para la subida del nivel del mar”, explican en National Geographic. En EE.UU. el nivel del mar ha subido ya 30 cm.

Eskerrik asko, Lehendakari

Empezando por EGI, terminando por personas anónimas, evidentemente simpatizantes de EAJ-PNV, y pasando por supuesto por quienes han colaborado con él desde 2012, no son pocas ni pocos quienes han publicado en sus redes sociales su agradecimiento al lehendakari Iñigo Urkullu por su labor al frente del Gobierno Vasco. 12 años que empezaron en medio de una crisis y que, tras una fase de recuperación, han terminado enlazando una pandemia mundial y la invasión de Rusia sobre Ucrania. Un período intenso de la historia global que él ha liderado desde este rinconcito llamado Euskadi que, objetivamente, está hoy mejor que entonces.

El eterno retorno

Esta semana Sumar y Podemos han confirmado que su confluencia en Euskadi es imposible. Es decir: han decidido presentarse como caballos perdedores. ¿Quién quiere subir a uno de ellos? Aunque nadie negará que han corrido mucho, tanto que todo nos parece ya un retorno constante, eterno, como el del filósofo. Hasta esta noticia en The Objective, que va más allá de las elecciones vascas, suena a sobada: “Podemos prevé una lista europea de Sumar repleta de ‘traidores’ del partido morado”. ¿Y quién no lo prevé? Pero que en Podemos se lo hagan mirar: ¿cuánto capital humano dilapidaron o despreciaron?

Hablando de campañas…

Vamos a tener mucho tiempo para analizar las identidades digitales de las candidatas y los candidatos a lehendakari, y para averiguar si se han lanzado a TikTok o no. De momento, y mirando procesos más lejanos, sí sabemos que Joe Biden ha abrazado esa red social después de haber señalado sus peligros incluso a nivel institucional. Con un presidente y candidato de 81 años, el partido demócrata quiere acercarse a la juventud que, por lo que cuentan en El Independiente, rechazan en mayor medida a Trump. Así que buscarán la movilización de ese segmento a golpe de meme y refrito. ¿Esto es lo que funciona?

Nadie paga voluntariamente

Sigo pensando que el internet comercial es lo peor que nos ha pasado como especie: un agujero negro de recursos y tiempo disfrazado de entretenimiento y acceso universal a la información. Una mierda voraz que hay que alimentar, por ejemplo, con imágenes. La mayoría son robadas vilmente para cuestiones irrelevantes. Pocas y pocos pagan por ellas pero menos hacen donaciones: en Photolari cuentan el experimento de Alexandre Rotenberg, que decidió hacer accesible temporalmente su archivo a cambio de donaciones voluntarias, en vez de cobrar una tarifa por imagen, como solía hacer. Para sorpresa de nadie recaudó cero euros.

El que tiene que tomar nota es el PSE

Xavier Tomás ha escrito en X, en dos líneas, el mejor resumen, posiblemente, de la noche electoral gallega: “Alguien debería reflexionar acerca de la utilidad de crecer solamente a costa de tu socio, y no de tu rival”. Dicho de otra manera: la estrategia política del PSOE no la rentabiliza electoralmente el PSOE, es evidente, y ahí hay una disonancia. En Euskadi, el PSE crece solo a costa del PNV cuando deberían de llevarse algo de la sangría de Podemos-Sumar y, sobre todo, disputar con Bildu ese espacio de izquierdas cada vez menos abertzale. Sánchez ha instaurado el cortoplacismo, pero hay salida, y toca a Andueza encontrarla.

Ha sido una gran victoria

La del PP en Galiza ha sido una gran victoria: “Gana la Xunta con más votos que el BNG y el PSOE juntos”, titulan en El Independiente. No solo eso: mantiene el 47% de los votos emitidos que logró en 2020 con una participación, esta vez, del 67% del censo. La victoria es absoluta, en números y en lo intangible: la moral del PP sube después de haberse alejado del discurso más duro (es cierto que en la última semana dieron algunos volantazos, incluido el que llevó a Díaz Ayuso a Vigo), e incluso después de haber superado la voladura controlada que salió mal con la amnistía como detonante. Ha ganado Rueda y ha ganado Núñez Feijóo.

No, la gente no es tonta

Me sorprendieron los comentarios en La1 durante la noche electoral, a medida que se consolidaban los 40 escaños del PP, justificando el resultado con el sistema electoral que discrimina positivamente a regiones “rurales” y que, al parecer, votan al PP. Pero los de Rueda ganaron en todas las circunscripciones y en todas las grandes ciudades salvo Vigo. La gente no es tonta, analfabeta o caudillista cuando vota. Al respecto, también debería de tomar nota Oskar Matute, al que aplaudían en Público el sábado por su tuit: “Bah, en serio. Gente así no puede ganar. Llámenme ingenuo, pero creo en el intelecto de la gente”. Yo, también.

Pues les ha pillado el carrito del helado

Y el carrito del helado lo manejaba Alfonso Rueda, un político aparentemente anodino que, sin embargo, ha arrasado. Rafa Cabeleira alertaba de ello en X: “Ha ganado las elecciones ‘el candidato gris, el candidato ausente, el candidato indigno’. Y quienes así lo definían han perdido contra ese mismo candidato gris, ausente e indigno. Esto también es importante señalarlo, creo”. Y cree bien. Y contra lo que pudiese parecer, ha ganado el político que tenía en contra al frente mediático español (hoy, claramente progresista al estilo del PSOE). Y es en ese mismo frente en el que hoy no entenderán algo muy sencillo: solo votaban en Galiza.

La izquierda de la izquierda

Sigo esperando al análisis que haga Pablo Iglesias en su medio de comunicación, porque estoy convencido de que lo hará. De momento, en Canal Red solo han puesto una descripción de los datos entre los que destaca, para mí, este que casi pasa desapercibido en el texto: Sumar ha obtenido el 1,85% de los votos, y Podemos, el 0,25%. Vox, por su parte, el 2%. Es decir, casi lo mismo que Sumar y Podemos, juntos. Los extremos no sé si se abrazarán, pero que se pueden mirar el uno al otro como si fueran un espejo, lógicamente, invertido, sí que lo creo. También es destacable que Yolanda Díaz no haya conseguido nada y Pablo Iglesias, menos.