En pleno auge de Podemos fue Pablo Iglesias el que acabó con la posibilidad de que Pedro Sánchez desplazara a Mariano Rajoy de la presidencia. Lo hizo con aquella ridícula rueda de prensa rodeado de sus ministrables mientras el socialista se reunía con Felipe VI. Y lo hizo Iglesias convencido de que en la repetición de las elecciones mejoraría. Punto. Con Podemos no han acabado “las cloacas”. ¿Les investigaron usando subterfugios como el robo de un móvil y con dinero del Estado? A todos nos parece verosímil… Porque tenemos la certidumbre de que ya ha ocurrido. Y es tan grave ahora, en precampaña, como siempre.
También esto podía haber pasado
España tiene un problema de autopercepción. Es un problema global porque es un país mejor de lo que les parece a los españoles: hasta Rajoy cayó por la corrupción en el PP. No es menos cierto que algunos jueces, guardianes de las esencias, aportan negatividad a ese “percibido”. España es un país en el que crece el fascismo en intención de voto, y a los españoles les están induciendo a odiar desde los medios y las tribunas. Por todo ello resultó tan verosímil que algunos vecinos de Madrid hubiesen arrancado cintas amarillas contra las orugas creyendo que eran elementos de apoyo a los presos políticos catalanes.
No, no son “perdidos”
Además de lo jodida que está España políticamente (eso es innegable, solo hay que ver a los líderes de sus principales partidos), la ciudadanía española está machacadísima en lo laboral. A años luz de la situación en Euskadi, le pese a quien le pese incluso admitiendo el margen de mejora que siempre existe. En este contexto de trabajadores exprimidos, resulta vergonzoso que Europa Press califique como “perdidos” los días de baja laboral. Y si es Asepeyo, la fuente, quien así los nombra, lo que tendría que haber hecho la agencia es usar el entrecomillado. Nadie debería tomarse una baja laboral a la ligera.
Empecemos a tomarlo así
Pese a que en Euskadi estemos mejor, en lo laboral, que en España, el estrés causado porque la mayoría desempeñamos tareas durante horas que deberíamos repartir con más trabajadores, es indiscutible. Por eso perdemos el tiempo, según un estudio que recogen en Magnet y que, acertadamente, rebate todos esos mensajes de lo bueno que es optimizar cada segundo sin perderlo. El descanso, también el mental con lecturas ligeras e incluso un videojuego (somos esa generación, sí), no está suficientemente valorado, y el “no procastines” o “no pierdas el tiempo” se mantienen peligrosamente de moda.
Es su hora
Hoy hay partido en San Mamés. Juegan ellas. Y veremos hasta qué punto en Bilbao y Bizkaia apoyamos lo que se han ganado a pulso, porque hoy es un partido de Liga, contra el tercero, el Levante, y hay que pagar aunque solo sean 5 euros. Todo lo bueno que consigan nuestras jugadoras sin duda se lo han peleado, también los más de 4.000 seguidores en la nueva cuenta de Instagram del primer equipo femenino del Athletic, que han estrenado esta semana. Si hoy tuviera que dar un consejo a un periodista que empieza le diría que se especializase en fútbol femenino: es el fenómeno que viene y es irreversible. Celebrémoslo.