Quién y Enrique Dans

No podía pensar hace unos días que para hablar sobre el cambio climático en 2019 iba a traer a la columna a Enrique Dans, pero así es. Y lo rescato, unos cuantos años después, porque en su blog recoge las “variadas formas de ser imbécil” negando ese cambio climático y sus consecuencia. Dans es duro contra quien rechaza el consenso científico, contra quien lo admite pero pide a otros que hagan algo antes, contra quien cree que si hacemos algo perderíamos calidad de vida e incluso pondríamos en riesgo a parte de la población mundial. Sí, todos estos tipos de imbécil existen y Dans rechaza sus argumentos con habilidad.

Si les pides que aprieten… Aprietan

La política es un arte difícil en el que es imposible contentar a todo el mundo. Por eso precisamente tienen éxito los populismos. Y su presencia, para cerrar el círculo, complica la política (y la empeora). Por eso en política es importante no regalar la capacidad de influir, error que han cometido algunos en Catalunya: hoy los CDR presionan a ERC para que no negocie con el PSOE y Podemos una investidura o lo haga en términos maximalistas. ¿A quién beneficia este pulso? Al PP y a los populismos de distinta tendencia (a esos, siempre). Así que toca ser valiente… Y generar descontentos.

¿Qué es el “impeachment”?

Hemos hablado de buena política y ahora lo hacemos de buen periodismo con el hilo en Twitter de José Ángel Abad sobre el “impeachment” a Trump. El corresponsal ha demostrado la diferencia entre un profesional y un periodista del montón: ha usado un canal, se ha adaptado a sus especificidades, ha aprovechado su conocimiento específico en un tema y ha explicado una cuestión compleja con claridad. Porque ese puñado de tuits vale más que muchas crónicas para conocer a qué se somete Trump y qué puede pasar después. Abad adelanta que, honestamente, nadie lo sabe.

Nos toca demostrar que nos lo creemos

El próximo 5 de enero hay partido en San Mamés: el Athletic se enfrenta al Barcelona, que va líder en la Liga, y parece que el Club pondrá entradas baratas a disposición de los socios, como ha hecho en otras ocasiones. ¿Por qué no íbamos a llenar nuestro campo para animar y participar de la gesta de enfrentarnos al mejor equipo? ¿Porque son jugadoras y no jugadores? ¿Porque no salen en los cromos ni en los periódicos deportivos? Nos toca demostrar que nos creemos lo de la igualdad, que no hacemos diferencias cuando el resto de circunstancias son las mismas y que somos capaces de pagar por ver también su esfuerzo.

¡Qué viejos somos!

Muchos de los lectores (sobre todo, ellos) reconocerán el Doom, aquel videojuego “en primera persona” que nos tuvo enganchados a una pantalla y que supuso una revolución en el sector. Ayer este entretenimiento con nombre propio cumplió 26 años para recordarnos lo viejos que somos y lo que ha cambiado el sector: hoy los juegos son parecidos en mecánicas y precios… Pero no tienen nada que ver en motores, desarrollos y animaciones a aquel montón de formas geométricas que a veces se cargaban con dificultad. Entonces no se jugaba en línea, claro, y entonces tampoco nos escondíamos para jugar.

¿Y esto no es malversación?

Me lo preguntaba Gorka Mostajo en Twitter y solo pude responder que, en mi opinión, sí: después de todo lo que estamos viendo la justicia española debería de entrar a valorar si es malversación la campaña que lanzaba el gobierno español ayer, asegurando en castellano e inglés que el suyo es un estado democrático, al mismo tiempo que salía la sentencia a los presos políticos del Procés. Una campaña que es la del gobierno pero también la del PSOE y que está pagada por todos, también por los que creemos que la sentencia es una salvajada y por las familias de los condenados.

El delito es la intención

Si a alguien le quedaban dudas de que los catalanes no son políticos presos (eso lo son los del PP a los que trincaron por corrupción) sino presos políticos, la sentencia de ayer lo confirmaba: “Actos simbólicos condenados con cárcel. No es que la realidad supere a la ficción; es que la realidad castiga la ficción”. Esto lo tuiteaba Roberto Enríquez, una de las figuras televisivas del momento y para nada sospechoso de connivencia con el nacionalismo. Solo hay que tener ojos en la cara para darse cuenta de que cuando Puigdemont proclamó la república catalana y luego la dejó en suspenso ni arrió la bandera española.

¿Y qué resuelve? Nada

José Corbacho nunca me ha gustado, pero lo de ayer no va ni de filias ni de fobias, sino de tener o no la sensibilidad suficiente. Junto a una imagen completamente negra, el director dejaba en su Instagram esta reflexión sobre las condenas: “Muchos años. Demasiados. Muchos días tristes llevamos ya y muchos otros vendrán. Hoy es uno de esos días. La tristeza es algo individual. Puedes sentirla o no. Yo hoy la siento. Y no pienso como ellos. Ni los conozco personalmente. Pero me siento triste. Por ellos, por sus familias y por sus amigos. Y lo peor de todo, es que las cosas no van a mejorar con esta decisión. Al contrario”.

Nos afecta a todas y todos

El periodista Arturo Puente destacaba de la extensa sentencia la explicación por la condena a Jordi Cuixart (9 años de prisión): básicamente, los jueces consideran desobediencia a cualquier acto en el que un grupo de personas se oponga al orden establecido. El humorista gráfico catalán Ferrán Martín quiso poner en Twitter el énfasis también en esta cuestión porque no se trata ya de condenar que uno sea nacionalista y actúe en consecuencia, sino de poner a disposición de los jueces cualquier queja y un riesgo de pena grave: “¿Que la sentencia no os afecta? ¿Seguro? ¿Seguro?”. No, esto no es solo un aviso a los vascos.

Sí, queremos que se manifiesten

Ante la salvaje sentencia de ayer igual que ante la exhumación de Franco uno no puede permanecer indiferente: o pones pie en pared o dejas que te avasallen y te arrastren. Hay que elegir. Y del mismo modo que si no te importa la salida de Franco de su mausoleo, entérate, eres franquista, si crees que la sentencia es justa e incluso insuficiente, y pones el acento en que en poco tiempo puede que estén en la calle (lo veremos), no estás enterándote de nada. Lo de ayer fue un ataque a la línea de flotación de la democracia, y que el FC Barcelona se haya manifestado en contra solo honra al club y su directiva.

Populares, pero no del pueblo

¿Cuánto dan de sí tres millones de euros en Sanidad? Mucho, evidentemente. Según leemos en Eldiario.es, esa podría ser la cifra del desfalco organizado por el PP de Madrid en una trama que apunta, directamente, a Esperanza Aguirre. Según relatan en el digital, las adjudicatarias de contratos públicos para infraestructuras médicas tenían la obligación de destinar un 1% de su presupuesto a agencias para promocionar las obras, “las campañas de publicidad ficticias se encargaban a empresas que devolvían el favor inyectando importantes sumas de dinero para financiar actos electorales”.

Socialistas, pero poco

Con la recesión o crisis o lo que sea que nos avecina, pero nada bueno en lo económico, el PSOE prefiere pelearse por unos 10 o 15 escaños con Podemos. No parece muy responsable pero todos sabemos que en ese partido las siglas y los principios son siempre eludibles. Por ejemplo, la ministra Calviño se opone a la derogación de la reforma laboral que puso en marcha el PP y eso estaría provocando roces con algunos ministros. De momento, lo único que sabemos es que Sánchez como presidente después de la moción de censura y como presidente en funciones después del 28 de abril, no ha cumplido su palabra.

De Podemos, pero también de la Falange

Cuando los partidos políticos son formados por un aluvión de personas, muchas de ellas con recorrido político e insatisfacción en sus mochilas, y no hay una ideología que los compacte, no suelen terminar bien. Esto lo sabe también Pablo Iglesias, que fía su subsistencia a entrar en el gobierno como sea porque cuanto más tiempo pase más casos como el de Julio Alfonso González conoceremos: el secretario de organización de Móstoles y coordinador de Educación fue candidato de la Falange por Gipuzkoa en 2008, y en el que sería su perfil de Facebook hay mensajes a favor de la extrema derecha hasta 2011, según El Independiente.

Ciudadanos, pero no sé si civilizados

Parece que la cuarta campaña en cuatro años para unas elecciones generales va a ser más corta, de ocho días, pero también parece que a Albert Rivera se le va a hacer muy larga. Él llega bajo de forma y popularidad, y su partido en unas condiciones lamentables. El abandono de Nart (que no deja su acta de eurodiputado, por supuesto) y el del compañero en el Congreso del propio Rivera, Francisco de la Torre, acusándole de que el líder de su partido ni le saludaba ni hablaba con él en los peores momentos, como el fallecimiento de su padre, muestran un partido en descomposición en plena precampaña.

Del Barça, pero más de su dinero

Neymar ha dejado en ridículo al FC Barcelona, que se ha arrastrado por un jugador problemático a petición de sus estrellas. Neymar también ha dejado dos vestuarios rotos: el del PSG, que tendrá que recibirle después del parón por selecciones, y el del FC Barcelona, con media docena de jugadores que han sido ofrecidos como moneda de cambio. Finalmente, Neymar pretende dejar al FC Barcelona con unos cuantos millones menos: a finales de mes empezará el juicio en el que reclama la prima de renovación pese a que solo unos meses después se fue a París, de donde quiere salir… rumbo al Barça. Epítome del fútbol moderno.

Las series, en la tele

Tuitea César Calderón con su habitual retranca que “hemos pasado de la democracia participativa a la democracia guionizada”, en clara alusión a “la batalla del relato” que mantienen PSOE y Podemos. Una batalla que resulta ya intragable. Miren: las series sobre política en la tele, mejor sobre política estadounidense y completamente de ficción. Esta escenificación permanente en los medios y, lo que es peor, en Twitter, de cómo va (o no va) todo es cansina, aburrida, desmovilizadora y descorazonadora. Si alguien quiere negociar, avanzar, progresar de verdad no hace lo que estamos viendo.

Lo que nos jugamos de verdad

“Hablan sobre programas de gobierno a las puertas de una nueva crisis que llegará con nuevas exigencias de Europa. ¿Qué van a hacer cuando lleguen? Ahí debería estar el debate”. Mejor no puede colocar el marco (como dicen los expertos en comunicación política) el periodista Roberto García. Esto es lo que nos jugamos de verdad en España, en Euskadi, en Catalunya y en Europa: nuestra capacidad de respuesta ante una nueva crisis con todas las medidas ya tomadas y muy poco margen de maniobra. Me da igual que el gobierno sea de coalición o no, quiero saber qué proponen para lo que ya tenemos encima.

Que lo hagan ya

Porque pueden ponerse Sánchez e Iglesias tan estupendos como quieran, pueden intentar convencernos en los medios de que su postura negociadora es más legítima que la del otro gallo, pueden ir a las elecciones a pelearse por ese puñado de votantes que se considera de la verdadera izquierda, que no van a poder hacer casi nada de lo que prometen: “El BCE avisa: España no tiene margen ni para subir gasto ni bajar impuestos”. Y en noviembre o diciembre (que ya será enero con lo que alargan las negociaciones dejándose mensajes en los medios Pedro y Pablo), el margen será menor.

Asumir lo inasumible

¿Acaso cree Sánchez (primer responsable de esta parálisis) que la paciencia de los votantes es infinita? Y no me refiero a que las cuatro elecciones generales en cuatro años (más las municipales, forales, autonómicas y europeas que hemos celebrado en este ciclo), me refiero a todas las OPE pendientes, inversiones, planes de desarrollo, incentivación y activación económica, o la legislación sobre nuevos problemas (desde la vivienda turística a criptomonedas). Sánchez (como presidente en funciones) no puede asumir esto: “Calviño admite que no habrá mejoras del rating de España hasta no tener Gobierno”.

Una competición de verdad

Son pasos demasiado pequeños y todos llegan tarde, pero vamos dándolos: en la web de Mundo Deportivo hemos leído la cara de la Liga Iberdrola de fútbol ya el Barcelona ha estrenado su nuevo vestuario exclusivo para el primer equipo femenino (a ver si cunde el ejemplo más cerca). Pero también la cruz: el Zaragoza acusa a la federación aragonesa de haber primado un Segunda B masculino a un Primera femenino al otorgar el campo al primero en vez de al segundo. Desconozco los motivos, pero sí conozco la necesidad de que todos nos creamos que ellas juegan igual y con las mismas cartas.

No es lo que hace, es lo que dice

Por supuesto, Vox sí aceptará los 9 millones de euros en subvenciones que le corresponden como partido político: si no es una formación ilegalizada por su ideología tiene derecho a cobrarlos. Pero en este caso lo importante no es lo que hacen, porque realmente nunca pensaron en dejar de poner las manos cuando el dinero cae, por mucho que en su argumentario digan que está en contra de esas subvenciones. Lo importante es lo que dice: miente y genera alarmismo ante un hecho necesario, que es mejor una política pagada por todos que una pagada por mecenas… Como tuvo Vox hasta las subvenciones.

¡Qué sorpresa!

Estoy siendo sarcástico, por supuesto, porque no me sorprende nada que Trivago posicione mejor a las empresas que más dinero pagan a la web en los resultados que ofrece, según FACUA. Por supuesto, debería de anunciar qué hoteles y ofertas son las promocionadas, y no caer en subterfugios como ordenar las opciones por “recomendadas” (por la web y en función de la facturación, y no por los usuarios y su experiencia), pero espero que a estas alturas por lo menos la sospecha de que este es el modelo de negocio estuviera extendida. Al final, lo más fiable de Internet serán los módulos de publicidad.

Facebook también dejará de escucharnos

Después de que lo hayan hecho Apple y Google, Facebook también admite que ha escuchado las conversaciones de sus clientes. En la red social aseguran que lo han hecho para valorar el nivel de las transcripciones de Messenger. Pueden poner la excusa que quieran y prometernos solemnemente con la mano derecha apoyada sobre la biografía de Mark Zuckerberg que no volverán a hacerlo, que no me creo nada. Un aviso más para que actuemos con inteligencia y no hagamos nada raro con una App. Se lo recuerdo: hoy con la tecnología todo es posible. Por eso yo siempre actúo como si me estuvieran escuchando.

El cambio climático ya está aquí

En lo cercano lo notamos con variaciones de temperatura extremas, pero en lo lejano también podemos observar claramente los efectos del cambio climático que hemos generado (y no solo por comer carne): el Okjökull, en Islandia, pasará a la historia como el primer glaciar declarado oficialmente muerto. Por desgracia, según La Vanguardia, en los próximos 200 años todos los glaciares acabarán de la misma manera. Ahora, que no nos vengan los paletos de turno, arrogantes como todos los ignorantes, a decir que lo del cambio climático es un cuento. Esto es real. Y los principales culpables tienen que pagar.

Todo lo peor del fútbol, en una foto

Mientras escribo esta columna desconozco si Neymar fichará por el Barcelona o por el Real Madrid, pero estoy seguro, como lo he estado desde que conocí al personaje y a su cohorte, de que este jugador representa todo lo malo del fútbol contemporáneo: una colección de intermediarios, un padre que comisionista por el morro, un futbolista hábil pero que no hace equipo, denuncias de acoso sexual y vinculaciones política con Bolsonaro… No se le puede pedir más a un tío que parece ajeno a todo mientras gana una millonada cada hora. El equipo que lo fiche cuenta ya con mi desprecio.