Podría escribir todos los días cinco párrafos solo con lo que hacen y dicen otros tantos fachas. Están desatados, agigantados, enaltecidos. Son impunes, tienen fuerza y creen que ha llegado su momento en España, en Europa y en el Mundo. Solo así se explica que el heredero de un dictador hoy sea millonario y use las redes sociales para alabar la memoria de su abuelo, golpista y represor. Twitter debería cerrarle la cuenta y la Fiscalía del Estado actuar de oficio. Pero de momento no pasa nada y el monstruo ultra sigue engordando porque nadie impide que le den de comer.
Pero no vale todo
Del mismo modo, no entiendo que alguien crea que vestir a la Virgen del Pilar con el manto de La Falange la víspera del 20-N no es una mala idea, empezando por los responsables directos y terminando por las autoridades del Estado. Si España ha llegado al punto (o nunca lo abandonó) de no distinguir entre la democracia y la dictadura, y los ultras y el resto, España tiene un problema que, vuelvo a insistir, alguien tiene que atajar. No puede ser que no pase nada, pero tengo pocas esperanzas en que sí suceda y se ponga pie en pared ante tanta soberbia fascista.
No, Marchena no es un héroe
Manuel Marchena ha hecho un roto al sistema judicial español, controlado en sus más altas instancias por PSOE y PP (y Podemos, que entró en el juego). Pero su acción no es heroica, precisamente: abandona el barco cuando se filtra la intención de Cosidó (PP) de manejar salas y tribunales como el que preside. Pero si conocíamos a Marchena era porque un partido le había propuesto y él había entrado en el juego. El juez juega ahora sus cartas e intenta salir airoso, pero si Cosidó hubiera sido más hábil en sus comunicaciones el reparto del pastel judicial se habría consumado.
Pedro, ¡gobierna y tira!
Muchas veces tengo la sensación de que Pedro Sánchez y su gobierno pasan más tiempo reflexionando sobre Pedro Sánchez y su gobierno que, simplemente, gobernando. El último capítulo es la amenaza (adelantada por Ábalos el lunes) de un adelanto electoral si no hay presupuesto. Cuando Sánchez puso en marcha la moción de censura y la ganó ya sabía qué escenario le esperaba, y prorrogar los presupuestos del PP era una posibilidad real. Si no lo tenía en cuenta, malo. Si lo tuvo en cuenta y siempre pensó en adelantar elecciones si no le salían, peor. Para él y para todos.
Facebook se muere
Que el artículo en Linkedin de Gina Banchini haya corrido por Twitter es solo una muestra más de que esta consultora tiene razón: Facebook cae irremediablemente y los usuarios estamos ya buscando alternativas. El post es interesante porque Bianchini demuestra conocer bien el ecosistema: no hay una red social que vaya a “matar” a la que ha reinado (y sigue siendo la más usada, ojo). Aunque Instagram tiene mucha ventaja, son varias las plataformas que existen, algunas privadas como WhatsApp, y otras, especializadas, además de las que ya son viejas conocidas.