El baño de masas

El pasado viernes, el rector de la UPV/EHU, José Ramón Bengoetxea, “Joxerra”, para los amigos y las redes, se pegó un baño de masas. Un chombito, más bien, porque la lluvia deslució la fiesta universitaria que este rectorado “magnífico” decidió hacer suya. Porque a la uni hace tiempo que se va “también” a estudiar: desde que Bolonia despreció las clases magistrales (poca culpa tiene Bengoetxea) y empoderó a un alumnado que, oh, sorpresa, no sabe porque no se lo han enseñado, la deriva parece incorregible. Ante eso hay que decidir: o le añades el acelerante del populismo o te pones serio (que no necesariamente aburrido).

Pero no son los ochenta

En la temporada final de El Ala Oeste, el más demócrata de los candidatos republicanos pierde las elecciones ante el más republicano de los candidatos demócratas por un accidente en una central nuclear (falso, por supuesto). El personaje de Alan Alda había apostado por esa energía con argumentos pragmáticos, pero la casualidad lo lamina. Me he acordado de ello cuando he leído este titular en El Independiente: “Vuelve la década de los ochenta: ‘¿Nucleares? No, gracias’”. Han pasado cuarenta años, la tecnología ha evolucionado pero los argumentos, no. ¿Por qué? Por uno de los grandes enemigos de nuestro tiempo: el populismo. Otra vez.

No me parece interesante

Me temo que no me alejo del tema central de los primeros párrafos. Esta vez me voy a El Plural, donde se preguntan: “¿Te parece ético que se publiquen conversaciones privadas de Pedro Sánchez?”. A mí lo que no me parece es interesante, la verdad. A menos que la exclusiva de hoy en El Mundo (único periódico del que soy suscriptor junto a DEIA) sea revolucionaria, no hemos leído nada que no esperásemos. La publicación de conversaciones privadas en las que se promueven delitos o maniobras políticas escandalosas es necesaria, pero no lo es la de chats entre dos compañeros cercanos con contenido que no nos sorprende.

Él sabrá

Entiendo la estrategia de Núñez Feijóo: quiere parecer preparado para ser presidente. Pero si fuera asesor de Pedro Sánchez yo lo tendría muy claro: o elecciones el 5 de julio (cuando el PP celebrará el consejo que acaba de anunciar) lanzadas apurando el plazo legal para hacerlo, o al final de la legislatura agotando el plazo legal, esta vez, para extenderla tanto como sea posible y que, así, las nuevas caras del PP parezcan viejas y cansadas de esperar y exponerse. Tampoco soy optimista: el gallego no ha acertado con las y los portavoces que ha designado… o que le han salido espontáneamente, como Isabel Díaz Ayuso.

Se acabó la travesía del desierto

El FC Barcelona va a ganar la Liga (salvo sorpresa), ha ganado la Copa y ha alcanzado las semifinales de la Champions (con la millonada que ello supone) con un equipo que no podía pagar. No solo eso: hace menos de seis meses, Dani Olmo fue desinscrito pero gracias al CSD pudo jugar sin problemas. Mientras el resto de clubes tienen límites presupuestarios, el Barça, no. Así, el Athletic no pudo renovar a Iñigo Martínez pero los culés pudieron fichar a su mejor central de la temporada, y han seguido haciendo incorporaciones como si no costaran hasta que, por fin, su travesía del desierto ha llegado al final. Pues molt bé.

Todo lo que supone

El regreso del “profesor de la UPV/EHU en Vitoria investigado por mensajes ‘fascistas’” (El Diario) en su cuenta de X tiene muchas aristas y todas son muy interesantes. Empezando porque el juez ha decidido “archivar el caso por falta de pruebas que identifiquen al docente como el autor”. Podríamos hablar de los riesgos de que te suplanten la identidad (“él ha negado ser el autor de los mensajes”). Y si hablamos del escrache, ¿se disculparán con él las y los que se lo hicieron? ¿O harán otro ahora que el equipo de Joxerramon Bengoetxea “no ve motivos suficientes para apartarlo”? ¿Quién decide cuál fascismo es el bueno y cuál, el malo?

Sánchez entrega a Euskadi lo que es suyo

Me hace mucha gracia cómo los medios españoles siguen enfocando la cuestión de que las transferencias lleguen con cuentagotas a Euskadi. No es el PNV el que mercadea con ellas, sino PSOE y PP, por turnos. El Estatuto debería de estar completo y la ley, que obliga al traspaso de las competencias, cumplida. Si esto no ha pasado no es por la voluntad de las y los vascos, sino porque los partidos españoles han decidido que las transferencias eran moneda de cambio. Han sido PSOE y PP los partidos que las han retenido, los que las sueltan en función de sus necesidades y los que han creado el relato de que los vascos las arrancamos.

Sí, nos afecta

Antes o después Pedro Sánchez tendrá que hablar de esto: la nueva situación que ha generado Trump, acabando con el frágil equilibrio con el que se sostenía Europa en el mundo, requiere una respuesta. Macron la ha dado. Stramer la dio incluso antes. Y poco a poco todos los líderes europeos tendrán que transmitir a sus naciones el mismo mensaje: “La amenaza rusa nos afecta a todos en Europa y ya no se puede confiar en EE.UU.” (El Independiente). Eso supone que tendremos que rearmarnos energéticamente, que rearmar nuestros mercados internos y exteriores, y también que tendremos que rearmar nuestros ejércitos. Esto va en serio.

Discursos realistas, por fin

Nunca he sido un mojigato respecto a la industria armamentística: prefiero no tener que recurrir a los ejércitos pero en este mundo el equilibrio militar es imprescindible. Todo lo que no sea reconocer eso son discursos buenistas y postureo pacifista, pero no es la realidad. La verdad es más parecida a esto que escribe Ignasi Guardans en Bluesky: “Sí, las empresas europeas del sector de la defensa van a ganar dinero y van a subir en valor. Y van a aportar empleo. Y van a producir bienes y servicios esenciales para mantener nuestro modelo social, nuestras libertades colectivas y personales (y las de EEUU lo van a perder)”.

Fíate de Trump

Con una Europa bien armada Ucrania no tendría que ceder al chantaje de EE.UU., puede que incluso el Kremlin no se hubiese atrevido a invadir Ucrania. De eso va tener ejércitos fuertes, de mantener los equilibrios, no de agredir a nadie… A menos que seas Putin o Netanyahu. No podemos ya fiarnos, lo dijo Macron y lo dice el sentido común: “Trump corta el intercambio de información de inteligencia con Ucrania” (Vozpópuli). Lo único que busca son esas preciadas “tierras raras” y no le importa poner en riesgo a la población ucraniana, ni dar a conocer a Rusia que puede avanzar sin que nadie avise a Zelenski.

Ganó quien hizo campaña

La victoria contundente de Joxerra Bengoetxea en la UPV/EHU es otra muestra de que la ciudadanía, cuando vota, quiere aventuras, que da por hecho que nada está en juego que, realmente, no importa quién esté al frente y qué ha demostrado antes. También es otra muestra de que quien hace campaña suele ganar. Y su candidatura ha hecho una campaña muy intensa (y lo escribo como un piropo) y a muchos niveles. Y finalmente es, para mí, otra muestra de que no es posible presentarse a unas elecciones como diciendo: “Nadie quería, la verdad es que yo tampoco pero, bueno, aquí estamos y a ver si ganamos”.

A tope

Yo estaba equivocado: Joseba Permach no estaba solo para tuitear. Su incorporación a la UPV/EHU tampoco ha sido solo para colocar un jarrón chino. Su aportación, al menos desde las redes, a la campaña de Bengoetxea ha dado su fruto. Y esta es otra muestra, enlazando con el párrafo anterior, de que la sociedad vasca ha querido olvidar de dónde viene, académica y éticamente, cada persona en Euskadi. Esta es la realidad, sí, pero yo no me resigno. Igual que la realidad dice que mi DNI es español pero yo me aferro a que también dice que caduca. Entre quienes lavan la cara al fascismo vasco no van a encontrarme. Allá a quien sí.

El regalo del victimismo

Todos éramos señalados como fascistas y los fascistas eran ellos, que justificaban a quien asesinaba por pensar diferente. De la misma manera, todos somos victimarios ahora y ellos, las víctimas. No es menos cierto que Guillermo Quindós se lo puso fácil a la candidatura de Bengoetxea con aquella cuenta anónima en X. Pero también es verdad que una parte de la campaña de Bengoetxea se ha basado en asegurar que eran víctimas de bulos inexistentes. Y eso en sí mismo es un bulo. Señalar al lobo con piel de cordero es una obligación social y moral, y algunos no dejaremos de hacerlo, en público y en privado.

“Reconstrucción, progreso y unidad”

No soy yo, lo dice un facha, de esos de libro: Manuel Mariscal, diputado de Vox, aseguró en el congreso español que “la etapa posterior a la Guerra Civil no fue oscura sino de reconstrucción, progreso y unidad nacional” (InfoLibre), y no paso absolutamente nada. No se paró la sesión. No se le quitó la palabra. Mariscal también agradeció la existencia de redes sociales que han permitido “a los jóvenes descubrir” las bondades del franquismo que él quiere poner en valor. Este discurso de mierda y el uso de las plataformas digitales son perfectamente extrapolables a la Euskadi de hoy y a un modo muy concreto de hacer política.

Está todo pagado

Sánchez anuncia un tercer paquete de ayudas para la DANA frente a la inacción de Mazón: ‘Que no paguen justos por pecadores’”, titulan en El Plural. “Una palanca de 2.274 millones de euros”, explican. “16.600 millones de euros en total”, ponen entre paréntesis, como si fuera poca cosa. Por supuesto, me parece necesario: ver las zonas afectadas un mes después en los informativos resulta indignante. Pero el espectáculo de ayer en el Congreso, que seguí por televisión, también lo fue. El tono de bronca, especialmente entre PP, PSOE y Vox, resulta completamente extemporáneo. Como lo de meter temas por el morro, como hizo Podemos.

Ah, vale, los presos

Cero sorpresas: Bildu ha arrancado al gobierno español beneficios para los presos de ETA, otra vez. Por mucho que Mertxe Aizpurua se muestre categórica asegurando que esto no va como parece, me temo que lo explicó con claridad Arnaldo Otegi en Eibar después de la declaración pomposa en Aiete, y me temo también no es la primera vez que lo vemos. En este caso, además, llama la atención la colaboración del gobierno español: “Moncloa cuela la reforma exigida por Bildu para reducir la pena a 41 etarras, entre ellos Txapote”. “Viene de tramitarse una ley orgánica con efectos en el Código Penal por la vía de urgencia” (The Objective).

Mal momento para su ley

Sin entrar a valorar el morro con el que Bildu ha cogido una propuesta de reforma de ley del PNV, ha cambiado cuatro cosas y se ha anotado el tanto, es evidente que su propuesta de ley mordaza, que debilita la autoridad de las y los agentes (una de esas cuatro cosas que ha modificado Bildu, por supuesto) ha llegado en un mal momento, visto solo la actuación de los hooligans en Euskadi y alrededores: los ultras belgas en Anoeta, las trifulcas en Bilbao entre hinchas vascos y holandeses (con protagonismo también de los tontos locales) o lo que ha pasado en Coruña con los fachas malagueños no generan seguridad, precisamente.

Libertad para masacrar

Se cumple un año del condenable ataque de Hamás sobre población civil israelí. Un hecho que podemos y debemos repudiar y rechazar, igual que podemos repudiar y rechazar la masacre que Israel ha cometido sobre Gaza, y ahora extiende Líbano y Cisjordania con una impunidad vergonzante. Quien justifique uno u otro ataque, aunque haya diferencias claras entre ellos, sabe lo que hace y lo que es. Y condenar ambos no es equidistancia esta vez, es humanidad. Por mucho que llevemos un año viendo bombardeos, víctimas y ciudades arrasadas, no podemos caer en la indolencia: debemos denunciarlo cada día.

Ni un minuto más

El comunicado de las y los alumnos de la UPV/EHU que han denunciado que iban a tener como profesor a un homófobo, machista y catalanófobo, según los mensajes que muestran, y que ha publicado El Diario, me parece muy interesante: está bien escrito y bien planteado, y relata unos hechos intolerables. Además, el comunicado deja mal a quien ha querido apropiarse de la acción (un saludo para Ikasle Abertzaleak, que no ha cambiado nada en 25 años) y a quien se ha apoyado en la izquierda abertzale para girar el foco. Yo solo pido que lo sucedido sirva para revisar el sistema: lo que piensan las y los docentes, y lo que hayan dicho o escrito, importa.

No podemos hacer como que no está publicado

Volvería a denunciar desde esta columna la retención de Pablo González en una cárcel polaca sin que supiéramos (por lo menos, yo no los vi publicados) los cargos. Y volvería a reclamar que se levantara la incomunicación que denunciaba su propia familia en Euskadi. No me cabe duda. Pero después de que entrase en un intercambio de presos, como un agente ruso más, y de lo que está publicando El Mundo, con Xavier Colás, gran conocedor de aquel país, y que habla de un falso periodista y un espía ruso real, no puedo hacer como si esto no estuviera pasando. Lo estamos viendo y tenemos la obligación de contarlo. Si no, ¿en qué nos convertimos?

En todo momento y en todo lugar

El antifascismo es en todo momento y en todo lugar o no es, por lo que el alumnado que ha escracheado “al profesor ‘fascista’ recién contratado” (El Salto) en la UPV/EHU solo será verdaderamente antifascista si muestra el mismo rechazo a las y los otros docentes declaradamente fascistas (siempre señalo a Joseba Permach por evidente, pero hay más) que alberga la institución. Si el señalado ha escrito lo que dicen creo que está claramente inhabilitado para la docencia universitaria y me parece bien que la UPV/EHU tome decisiones. Pero también lo creo de otras y otros cuya falta de humanidad está en las hemerotecas.

“18 años”

El Atlético de Madrid tiene un problema con sus ultras. Quien discuta esto es, sin duda, parte del problema. Y quien los defienda, como ha hecho Simeone intentando señalar al supuesto provocador en vez de al agresor declarado, también. “Así es el primer ultra identificado por lanzar mecheros durante el Atlético-Real Madrid: 18 años, español y sin antecedentes”, y “llevaba una navaja”, explican en EPE, generando aún más preocupación, porque el Frente Atlético se ha regenerado y, por lo que parece, los más jóvenes no son tan disciplinados como los ultras veteranos. Cuanto antes intervenga el Atlético, mejor para todas y todos.

¿Y esto?

“El cabecilla de la trama Koldo, Víctor de Aldama, no ha denunciado a la Policía Nacional o la Guardia Civil el tiroteo de uno de sus vehículos” “debido al miedo a sufrir represalias”. Lo cuentan en The Objective, donde también contaron lo de los disparos. “Este incidente también podría estar relacionado con otros negocios del cabecilla, ajenos a la trama investigada”, explican. El vehículo, “valorado en 150.000 euros”, “no se encontraba en un garaje en ese momento, ya que Aldama suele reservar ese espacio para vehículos de mayor gama”. ¿Vale la pena tenerlos y recibir tres balas del calibre 22 en la ventanilla del conductor?

¿Quién es el enemigo?

En 2024 el peso de ninguna culpa histórica explica o justifica la impunidad con la que actúa el actual gobierno de extrema derecha israelí (sí, cuando los ultras llegan al poder pasan estas cosas). La masacre que hemos visto en Gaza, el modo en el que ha atacado Líbano por el morro (todavía no ha reconocido el ataque terrorista por medio de dispositivos móviles explosivos, lo que sería un escándalo internacional sin precedentes) y, ahora, cómo pretende defenderse de la respuesta iraní con el primo del Zumosol, es decir, EE.UU., solo deben ser pruebas de crímenes internacionales y contra la humanidad.

Ya es Navidad en Venezuela

Ya es Navidad en Venezuela. Lo es por decreto de Nicolás Maduro, un tirano tan absurdo que pretende desviar la atención de la falta de transparencia en las elecciones y la crisis democrática y económica del país marcando el inicio de las fiestas navideñas el uno de octubre. Y todavía hay gente, en nuestro pequeño país, sin ir más lejos, que le saca la cara y que defiende que no es un dictador bananero que machaca a reprime a la población venezolana y ataca a la oposición con lo que sea necesario para debilitarla. Quien le compre el argumentario es tan ridículo como él. Que quede claro.