Eso es lo único que ha hecho Mariano Rajoy: sentarse a la orilla del río y esperar a que los cadáveres de sus enemigos bajen arrastrados por la corriente. Albert Rivera se desinfla, Pablo Iglesias se ha convertido en su propia caricatura, Pedro Sánchez ha sido eliminado por su propio partido… Y de los internos solo le dan preocupaciones Luis Bárcenas y Francisco Correa, pero sin que estos afecten a la intención de voto, aparentemente. Así que el community manager hasta se toma a chufla la próxima victoria de Rajoy con un tuit que ha sido borrado pero que capturó el blogger de DEIA Ugaitz Zabala.
¿Qué votará Pedro Sánchez?
¿Qué votará Pedro Sánchez? ¿Y qué dirá Hernando, que fue su portavoz y ahora va a serlo de la comisión que ha derrocado a quien le nombró? ¿Qué votará Patxi López, que recibió con alborozo los votos del PP en el Parlamento Vasco y su nombre vuelve a estar en el tablero de posibles secretarios generales socialistas? ¿Aguantará Odón Elorza su particular pulso contra el mundo? Hoy veremos cómo se vuelve a partir el PSOE, posiblemente en una de las últimas crisis inevitables que le quedan.
Todos menos IU son “mafia”
En Bildu aprendieron a base de derrotas electorales que manifestarse delante de la institución que gobernaban era tan ridículo como parecía. En IU puede que empiecen a aprenderlo esta semana, en la que se manifestarán delante de un Congreso de los Diputados en el que hacía décadas que no tenían tanta fuerza (de la mano de Podemos). O puede que no aprendan nada: después de dos elecciones generales en seis meses insistir en que en ese Congreso no habita la voluntad popular es, simplemente, mentira.
En el fondo, da igual quién gobierne
Creo que el PSOE ha hecho lo que tenía que hacer: llevarnos a terceras elecciones para que el escenario resultante sea similar carece de sentido. E incluso como partido, si Pedro Sánchez hubiera sabido irse, la jugada no era mala: permites al PP que gobierne y se coma los palos que le va a dar Bruselas mientras tú recompones el partido socialista. En El Plural nos recuerdan que, básicamente, da igual quién gobierne: Europa obligará a más hachazos.
No eres tú, Pili, son todos
Pili Zabala sigue equivocándose: si ella es la dueña de su Twitter y su discurso debería dejarse asesorar. Si tanto sus redes sociales como sus declaraciones en estas son manejadas por otros, debería de cambiar de asesores. Zabala no puede pedir ayuda de Alonso para ella, sino para el colectivo de víctimas, como representante de todos los vascos que es. Del mismo modo: no puede seguir presentándose como la hermana de Josi Zabala como si no importara nada más. La primera persona en política suena mal y se conjuga peor.