Ya no es una casualidad

Lo lamento muchísimo por los profesores e investigadores de la Universidad Rey Juan Carlos, pero es evidente que en esos despachos alguien tomó decisiones muy, muy equivocadas. Tanto es así que el Tribunal Supremo ha invalidado un curso que, de modo on-line, permitió a 200 mandos policiales sacarse fraudulentamente el grado de Criminología. Quienes se matricularon solo cursaron 60 créditos, muy lejos de los 180 que exigía una diplomatura antigua o los 240 que componen hoy un grado universitario. Otra mala noticia que quedará en los buscadores para perjuicio de la URJC.

Abascal y Vox, mejor sin voz

Argemino Blanco, corresponsal en Nueva York, lo tiene claro: no podemos repetir con Abascal y Vox los errores que los periodistas estadounidenses cometieron con Trump durante su campaña. Mientras le regalaban minutos de atención aunque solo sea para criticarlo, difundían sus mensajes y le convertían en una víctima. Yo lo tengo claro: solo podemos mencionarles si vamos a señalar sus mentiras, sus engaños y sus atrevimientos. Es un error que se difundan entrevistas en las que nadie contradice sus barbaridades. “Error” que algunos cometen con total conciencia e incluso yendo de progres.

El fenómeno explicado en un tuit

Chucky resume muy bien en Twitter cómo algunos medios están colaborando en el crecimiento de la extrema derecha española: “La tele: ‘Preocupante el auge de la extrema derecha en nuestro país. Nadie sabe a qué se debe realmente. Estamos preocupadísimos’. Also la tele: ‘Veamos qué cosas nos tiene que decir este señor facha de Vox llamado ‘Facha McFáchez’ durante esta entrevista de más de 18 horas’”. Evidentemente, este “tuitstar” (con más de doce mil seguidores) exagera y provoca el chiste, pero el mecanismo es así de sencillo, no hace falta una reflexión compleja.

Otra mala noticia: un informativo menos

Precisamente estaban haciéndolo bien en Cuatro: al estilo que está imponiendo ETB, sobre todo en programas como “En Jake”, en los espacios informativos de esta cadena iban desmontando con pantallas gigantes y explicaciones las mentiras de Vox. La semana pasada, sin embargo, supimos que estos espacios se cancelaban. También nos enteramos de que, al mismo tiempo, Risto Mejide iba a presentar un programa para desmontar bulos. Bienvenido sea, pero no puedo evitar que me invada el escepticismo: un publicista metido a sohwman no sustituye a un equipo de periodistas.

Los periodistas necesitan ganar dinero

Al mismo tiempo nos enterábamos de un ERE en uno nuevo medio: PlayGround, que ha pasado de ser un referente de crecimiento en Internet a tener que despedir a la mitad de la plantilla si quiere tener una posibilidad de sobrevivir. ¿Por qué? Algunos apuntan a que Facebook ya no les envía tráfico, pero no lo creo: casi nadie iba a la web y sus famosos vídeos simplemente eran compartidos y consumidos en las redes sociales. En resumen: a ellos les faltaba un modelo de negocio, y a todos nos falta capacidad de concienciación para dejar claro que la información hay que pagarla directamente o con publicidad.

Acojonante eres tú, Alfonso

Alfonso Rojo no debería tener ningún espacio en los medios de comunicación, del mismo modo que su digital no lo tiene salvo para señalar que es basura disfrazada de periodismo. Un periodista que tuitea esto: “Lo acojonante de los que quieren ganarle ahora la Guerra del 36 a Franco, no se atrvieron a rechistar durante 40 años… ni ellos, ni sus padres. ni sus abuelos” (sic) debe ser tratado con el mayor desprecio posible por la profesión y por cualquiera que sabe que tiene delante a un fascistilla de esos a los que hay que dar la espalda después de señalar por lo que es.

La universidad, en entredicho

No solo los curríclums de Carmen Montón, Pablo Casado y Cristina Cifuentes están en entredicho: su capacidad para ser políticos honestos también está en duda. No solo la de ellos, también la de muchos otros compañeros de la política con currículums vistosos. No solo los que han cursado posgrados en la Rey Juan Carlos: la Academia y su sistema de estudios complementarios está señalada. Y por desgracia es la propia universidad la que se ha buscado esta situación despreciando sus propias licenciaturas y grados al obligar a pasar por el máster y el TFM a quien quisiera destacar.

El problema eres tú, Willy

Podría entender que una persona comprometida decidiera poner en riesgo su integridad saltándose la ley para denunciar una situación injusta, aunque jamás se lo recomendaría a nadie: si un juez ha admitido a trámite en 2018 una denuncia por blasfemia lo mejor que puedes hacer es presentarte al juicio y demostrar que es una soberana tontería que se celebre. Pero lo que no me parece tolerable es que un tipo como Willy Toledo, incapaz de reconocer una dictadura cuando la tiene delante (ni hablemos ya de denunciarla o intentar boicotearla), pretenda dar lecciones de nada.

Marcelo, también

La banda de asesores que han andado al asalto en el Real Madrid también debería de pagar por sus hechos. Y no por ello quito ni un milímetro de culpabilidad a los jugadores y entrenador que están pasando por el despacho de la fiscalía para negociar penas de cárcel menores a dos años y multas que restituyan lo defraudado a Hacienda. Acaba de tocarle a Marcelo regatear esa negociación pero, ¿cuántos quedan después de Alonso, Ronaldo o Mourinho? En Barcelona tampoco andaban faltos de cuatreros de los impuestos, que Messi pagó también una pasta.

No existe lo “détox”

Reconozco que como maniobra de marketing ha sido efectiva. Lo malo es que se ha basado en un puñado de mentiras que en Maldita Ciencia, la web para destapar los bulos con argumentos científicos, han desgranado bien: la primera, que nuestro cuerpo acumula toxinas. Solo lo hace si estamos enfermos. La segunda, que el hígado o los riñones necesitan depurarse: lo mismo, solo si hay un mal funcionamiento de estos órganos. Mientras caíamos en la cuenta de estas obviedades, nos han vendido bien batidos con colores imposibles y texturas diversas que, según las marcas, nos limpiaban por dentro.

Primero, lo grave

Los nazis avanzan en Europa: en Suecia no han retrocedido y en Italia, según recogen en Electomanía, ganarían hoy las elecciones con diez puntos de ventaja sobre la segunda fuerza. Su líder, Salvini, además, aprueba como ministro de Interior y el 59% de los encuestados también da su aprobado al gobierno de coalición entre el Movimiento 5 Estrellas, que algunos quisieron ponernos como modelo, y la ultraderecha. Ese es el escenario real que está aderezado, para mal, con pequeños y preocupantes incrementos de los partidos xenófobos en otros países de Europa. Hay que pararlo.

También en España

En Euskadi, los fascistas no han sido de ultraderecha pero sí han andado con pistolas hasta antes de ayer para aterrorizar o matar a quien no pensaba como ellos, y con otros fascistas que les justificaban (algunos siguen haciéndolo). En España, hemos visto fascistas en el Valle de los Caídos y en las manifestaciones por la unidad de España que se celebran en Catalunya. Están ahí, con sus banderas con el aguilucho y sus esvásticas tatuadas y, como denuncia PabloMM en Twitter (que no me gusta nada pero en esto tiene razón), con los medios españoles dispuestos a legitimarlos.

Ahora, una ministra socialista

El nombre de Carmen Montón, la ministra española de Sanidad, no era muy conocido hasta ayer, cuando el diario digital de Ignacio Escolar la llevaba a portada por las irregularidades de su máster, obtenido, como otros cuestionados, en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid. La situación es interesante: Montón ha defendido la legalidad de su máster con algunas lagunas (como que no sabe dónde lo cursó porque iba en taxi) y Pablo Casado, que está en la misma situación, con un máster en entredicho, ha anunciado que no usará el tema para atacarla. ¿Y los profesores de la URJC, qué opinan?

Carmena se presenta pero, ¿en qué condiciones?

Manuela Carmena ha cambiado de opinión y volverá a presentarse como candidata a la alcaldía de Madrid. Hasta ahí, todo me parece muy bien, pero, ¿en qué condiciones? Y sobre todo: ¿cómo las ha negociado? ¿En un cuarto cerrado con Pablo Iglesias, como el propio Iglesias denunciaba que hacía la casta… Antes de ser casta? El periodista madrileño Ángel Calleja ha recopilado una serie de noticias y situaciones que Carmena ha tenido que soportar durante la legislatura por las particularidades de su gobierno y que, seguro, no quiere que se repitan.

Twitter no representa nada

No quiero cargar las tintas contra la cuenta de Adurizpedia en Twitter, al contrario: quien la lleva nos ilustra con un montón de estadísticas sobre nuestro Athletic y solo puedo darle las gracias y animarle a que siga haciendo su trabajazo. El otro día lanzó un dato: que el Athletic estaba en el puesto 12 del ranking de interacciones en Twitter de los clubes españoles. ¿Y qué? ¿Y eso qué significa? ¿Interacciones para bien o para mal? Twitter no es la medida de nada, al contrario, el perfil del tuitero activo se parece al de un hooligan de sus propias convicciones y, en general, poco tiene que aportar.

Y ahora, Trillo

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Basagoiti se bajó a tiempo. El PP de Quiroga y Rajoy se desangra a golpe de titular con cifras. Cifras que son euros contantes y sonantes, y que han acabado en los bolsillos de los miembros más importantes de los gobiernos del PP. El último, hasta hoy, Federico Trillo: a los 354.000 € que una constructora pagó a su asesoría mientras éste era diputado, se unen los 4,5 millones que facturó, también con sospechas de irregularidad, después de abandonar el ministerio (‘El Confidencial’).

Las facturas de Rita Barberá

Compromís ha hecho públicas facturas del gobierno de Rita Barberá porque, según ellos, la alcaldesa de Valencia “ha destinado cientos de miles de euros de los presupuestos municipales a gastos innecesarios”. Estoy tan seguro de que muchos de ellos son explicables en su contexto, como de que encontraremos algunos injustificables. Pero yo iría más allá: si todos los estamentos públicos enseñaran las facturas (que se pagan con dinero de todos), no necesitaríamos a estos justicieros digitales.

El “Honoris Causa” de Rato

Me sorprende que en un espacio lleno de gente con conocimiento probado y creatividad para solucionar problemas, como es la universidad, no hayan encontrado un reconocimiento más justo que un doctorado honoris causa: “Rodrigo Rato mantiene todavía el título de Doctor Honoris Causa de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid. Se trata del mismo centro universitario que ‘coloca’ con asiduidad a parientes y altos cargos del PP y que está considerada en Génova 13 como una de sus universidades más afines” (‘El Plural’).

Actualización a 28 de abril de 2015: finalmente, la Universidad Rey Juan Carlos sí retirará el doctorado «honoris causa» a Rodrigo Rato, según ‘El Confidencial’.

Ciudadanos también se rompe

No se han presentado ni una sola vez a las elecciones municipales y Podemos ya se ha roto en Bilbao. Dos candidaturas concurrirán para pelear por el mismo espacio. Algo parecido encontramos a muchos kilómetros y con otro partido de esos que presumen de no tener ideología (que es precisamente lo que aglutina a los partidos): una escisión de Ciudadanos en Murcia se presentará con su propia candidatura porque consideraba que la llegada de ex afiliados de UPyD desdibujaba el partido (‘La Información’).

23 de abril… en YouTube

Desde que tengo iPad, Twitter e Instagram, leo poco. Y ayer, 23 de abril, decidí autorregalarme el tebeo de Mortadelo y Filemón en el que Francisco Ibáñez parodia a Luis Bárcenas y al PP. Vamos, que no soy el más indicado para ponerme finolis y listillo, y decirles que lean. Bueno, sí puedo escribir: lean, no hagan como yo. Más apropiado me parece que, dadas las circunstancias, les recuerde que ayer se cumplieron 10 años del primer vídeo subido a YouTube: uno de los fundadores de esta web en el zoo.