Dos periodistas asesinados

Victoria Marinova y Jamal Khashoggi son dos periodistas que han sido brutalmente asesinados por hacer su trabajo hace tan solo unos días. La primera fue violada y golpeada hasta la muerte después de haber investigado una serie de fraudes en Bulgaria con partidas de la Unión Europea. El segundo no salió de la embajada saudí en Turquía, donde fue a continuar con su investigación, crítica con el régimen, y terminó torturado, asesinado y desmembrado. Mientras tanto, los periodistas de Reuters, Wa Lone y Kyaw Soe Oo siguen en la cárcel porque el gobierno birmano ha querido impedir que hicieran su trabajo.

Esta vez, sí: fachas

Tiene toda la razón Isidoro Tapia cuando argumenta que en España hemos usado el término “facha” con demasiada ligereza y que, cuando por fin tenemos enfrente a los verdaderos fascistas, no tenemos una manera lógica de denominarlos. Pero eso es lo que son los de Vox y “los constitucionalistas” que se han manifestado en Catalunya varias veces sin que casi ningún medio les llamara fachas. Hasta las teles más progres, esas que en los programas presumen de izquierdas y en las ficciones solo exhiben a policías gringos ultraconservadores, han colaborado en este blanqueo que hay que parar ya.

Y la izquierda, a sus cositas

Ya no es una deriva política en Hungría o Polonia, no son los frikis Le Pen o Farage, no es la excepción italiana de Salvini: la ultraderecha española ha salido de la caverna y pretende ser llave en todos los parlamentos. Así que urge que el primero de nuestros argumentos, el de todos y todas, sea detener a los fascistas. Después, todas y todos podemos seguir con nuestros objetivos políticos legítimos. Lo que no es recomendable ni parece muy inteligente es la autocrítica que ahora se hace “la izquierda” de que mientras estaban con los huertos urbanos los fachas les han comido la tostada.

Les hemos hecho el caldo gordo

El hilo de Pedro Vallín en Twitter sobre cómo los medios han colaborado en el ascenso de la ultraderecha en España como en el resto del mundo me parece de lo más interesante que he leído últimamente: Vallín cree que les hemos hecho el juego colocando en la agenda mediática sus argumentos. La peor cara de la inmigración, el conflicto catalán exagerado, una sensación de inseguridad irreal, dar voz las corrientes críticas a la reinserción de las personas presas… Toda esa alerta que generamos “los medios”, en genérico, es lo que necesitan los fachas para triunfar. Y lo aprovechan bien.

La voz de Coque Malla

No me voy a quedar sin comentar la respuesta que Coque Malla ha dado a Vox por medio de su página de Facebook. El partido de ultraderecha había usado una de sus canciones durante el mitin, “No puedo vivir sin ti”, una canción con una historia curiosa que el propio Malla explica con regocijo: el bulo sobre que esta canción iba sobre la adicción a la cocaína fue muy efectivo, pero nunca dejo de ser una canción de amor. Lo que no sabía y el cantante madrileño explica, es que se trata de una canción de amor entre dos hombres, dos amigos suyos, a los que quiso dedicársela.

La España «viva»

Ha sido un ejercicio interesante observar las diferentes crónicas que los digitales han colgado sobre el acto de Vox en Vistalegre. Sin duda, me quedo con la de Ángeles Caballero en El Confidencial. Caballero “pinta” muy bien el fresco de asistentes al mitin de Santiago Abascal, y concluye que lo previsible se hizo realidad: “Por eso, cuando se habla de tramos del IRPF y exenciones aplauden pocos, por eso cuando se habla de ‘invasión de inmigrantes’ se recogen ovaciones”. Se trata, como afina Caballero, de la España del cabreo, la de la víscera, la que necesita atizar para triunfar.

Los blanqueadores, en la lista

La ola de la extrema derecha llega desde Europa y la hemos detectado hace tiempo. En estos mismos meses muchos han optado por blanquear a los fascistas. ¡Hasta en las teles más progres han hablado de manifestaciones de constitucionalistas en Catalunya para referirse a los cabeza rapadas que ahora se disfrazan de hípsters! Pero para tomar nota, el blanqueamiento de Gonzalo Adán, que defienden que Vox no es ultraderecha en El Español el mismo día que en Pedro J. Ramírez enfoca una noticia tirando claramente de racismo y publica una entrevista a Aznar.

¿Y la derecha tradicional, qué?

Además de interesante, en el caso de Libertad Digital u OK Diario, ha sido divertido observar la posición que han adoptado. Los de Inda han hecho una pieza pulcra que han colocado en medio del marasmo. Sus hermanos mayores, los fachorros tradicionales, han publicado un editorial en el que, cómo no, para hablar de Vox hablan primero de “la izquierda siniestra” y en el que dejan claro que “Vox no es el enemigo” porque, evidentemente, ¿cómo van a señalar a sus propios lectores, compradores y votantes? La derecha se reestructura pero en su conjunto: también los medios.

Las cosas, por su nombre

Pocos han sido tan valientes como los de República.com, que han titulado con esta claridad: “Los ultraderechistas de Vox llenan el Palacio de Vistalegre con más de 10.000 seguidores”. Llevo tiempo diciéndoles que en este digital conservador hacen bien las cosas, pero no logran diferenciarse del resto porque les falta esa personalidad que sí tienen el resto de medios tirando a la derecha que les he mencionado en esta columna. Lo dicho, que bien dicho (permítanme el trabalenguas) porque casi nadie se ha atrevido a llamar por su nombre a los fachas de Vistalegre.

No son pocos. No somos cobardes

Llevo meses escribiéndolo y diciéndolo donde me piden opinión: la amenaza de la extrema derecha es real y seria. No ya solo en Europa (Francia, Italia, Reino Unido, Hungría, Polonia, Holanda…), en Brasil el líder del partido más a la derecha ha barrido en las primarias y, salvo sorpresa, seré el próximo presidente. Ese país gigantesco en el que Lula encabezó una revuelta progresista en el mundo, ha reaccionado apostando solo unos años después por el extremo derecho. Así, Bolsonaro sigue la estela de Trump que, por supuesto, también forma parte de esta liga ultra.

¡Qué poca vergüenza!

Solo que lo planteen ya me parece una desvergüenza: la familia de Francisco Franco tendría que estar escondida, tendría que haberse cambiado el apellido, tendría que haber sido despreciada o, por lo menos, ignorada. Sin embargo, cuentan sus millones, salen en revistas del couché y en los telediarios, hacen lo que les da la gana con las propiedades que consiguió el dictador robándolas a sus propietarios, y hasta se atreven, con una soberbia asquerosa, a reclamar honores para el caudillo. ¡Honores! Un dictador lo único que se merece es que le señalen como tal.

Les haremos frente de nuevo

No piensen que Franco y los franquistas son el pasado. Si los herederos de la fortuna del dictador no se viesen arropados no se atreverían a reclamar honores para el golpista. Por desgracia, la extrema derecha resurge en Europa y, a España, como siempre, llega con un poco de retraso pero ya está aquí. Vox prepara un acto potente para este fin de semana, y parece que su insistencia (¿con qué dinero han llegado hasta hoy?) puede dar a Abascal por fin frutos en forma de un concejal en la ciudad Madrid, un representante en la Comunidad y, por qué no, un diputado.

Son antisistema

El objetivo de la extrema derecha contemporánea es el mismo de siempre: cuanto peor, mejor. Cuanto más caos, más necesidad de orden, fuerza y violencia, que es lo único que saben hacer. Cuanto más se les necesite, más dinero mueven y con más libertad roban, que es lo único que han hecho los fascistas a lo largo de la historia. Por desgracia, parece que los equilibrios son hoy tan justos que generar un desastre europeo es tan fácil como endeudar un país hasta las cejas. Es lo que pretende Salvini en Italia: obtener más liquidez para su populismo y, de paso, cargarse Europa.

Sobre la fortuna de los Trump

El New York Times ha decidido publicar una extensa investigación sobre el origen de la fortuna de Donald Trump que comenzó su padre, Fred. Adivinen: nada parece demasiado limpio. La manera de amasar millones de padre e hijo pasaba por inversiones, influencias para librarse de las deudas y obligaciones, y una artimaña tras otra para mover liquidez hasta en un pagaré de 10 millones que tuvo Donald. En medio, sombras de evasiones fiscales y, por supuesto, un relato, el del hombre hecho a sí mismo con una fortuna inicial de “solo” un millón que, en realidad, eran más de 60.

Y la izquierda, en su batalla

Mientras la extrema derecha escala en Europa y la derecha se escora para tapar sus vergüenzas con discursos extremos en lo social y superliberales en lo económico, la izquierda sigue, por lo menos en España, fiel a su tradición de perder el tiempo en su propia organización. Sánchez piensa en cómo llegar a las elecciones e Iglesias, en cómo conservar su poder interno mientras antiguos colaboradores le obligan a hacer prestidigitación de palabras y malabarismo de hechos. Ahora es Bescansa la que quiere ubicarse como contrapeso en Galiza.

El ventilador salpica a todos

Cuando en el PP se den cuenta de que la estrategia del ventilador les enfanga como al que más y perjudica a la calidad de la democracia en España, seguramente, ya será tarde. No quiero ni pensar que son conscientes ya y que su propio sistema les importa un guano, cuando tuitean, como hizo ayer Maroto, por ejemplo, dos mentiras en los currículums y una corruptela (la conocida como “beca black” de Errejón) de otros partidos para que el escándalo de Cifuentes parezca uno más.

Todo puede ir a peor

Cuando Ignacio Escolar anunció en Twitter que su digital, Eldiario.es, lanzaba esta exclusiva: “El ‘posgrado en Harvard’ de Pablo Casado fue un curso de cuatro días en Aravaca”, desde El Mundo Today le respondieron: “PERO VAMOS A VER” (sic) porque la realidad, a este paso, les deja sin chistes. Pero que todo el marasmo de currículums hinchados no nos despiste: lo que ha hecho Cifuentes es hasta delito si se confirma que falsificó documentos públicos y firmas. Casado solo chuleó.

Pero, ¿por qué mienten?

Eso es lo que no entiendo: ¿por qué nos mienten? ¿Qué necesidad tiene Cifuentes de exhibir el título de un máster que no cursa o Casado de hacernos creer que ha estado en Harvard cuando se pasó cuatro días en Aravaca oyendo a un señor que venía de EE.UU.? ¡Si van a ganar el mismo dinero y en su partido eligen los sucesores a dedo! Y parece que no son los únicos: “El máster de Ana Pastor y de otros cargos que desparecen de la web del Congreso” titulan en El Nacional.

¡Qué vergüenza!

La universidad tenía ya sus propios problemas, con el del sistema de publicación de trabajos científicos como uno de los más graves, pero pocos esperábamos que el de los títulos “easy access” fuera a ser uno de ellos hasta que hemos visto cómo la Rey Juan Carlos (¡poco hemos hablado de lo apropiado del nombre!) facilitaba “licenciaturas exprés” a altos mandos policiales o rebajaba el 50% de la matrícula de un máster a los afiliados a Vox, además de lo de Cifuentes.

Y va Podemos, y la caga

Con Cifuentes acorralada y Ciudadanos dudando entre apretar la soga o quitársela, va Podemos y se mete en un lío: Espinar maniobra para adelantar el proceso de “elección” de candidato que no servirá para nada porque Iglesias y él ya han acordado con el propio Errejón que lo será… Pero con el equipo de Espinar, a lo que Errejón se niega. “Ni media tontería”, le responde Iglesias, para alborozo de sus adversarios que ven cómo Podemos se diluye por sus propios medios.

Precaución: agua

Es probable que esté usted comenzando las vacaciones y que hasta se haya llevado el periódico o la tablet a la playa o la piscina. En cualquier caso, levante la vista si algún ser querido está en el agua y mire, vigile, mantenga la atención, porque en España y Euskadi ya se han ahogado casi 300 personas en lo que llevamos de 2017, una cifra extraordinariamente alta. La crónica negra en El Español al respecto da miedo y la conclusión es clara: falta conciencia.

Así, no

La deriva de IU es una evidencia. Alberto Garzón se ha echado en brazos de Podemos, el partido que se tomó la desaparición de IU como primer escalón, a cambio de mantener un puesto de diputado, una brizna de poder y un dinero con el que pagar su deuda. Y si miramos las formas la imagen es aún más desoladora: IU de Madrid maltrata en público a Gaspar Llamazares para alegría de parte de su afiliación… Y tristeza para una aún mayor.

¿Eres menor? Bebe alcohol con Vox

IU fue alguna vez un partido a tener en cuenta, algo que nunca ha sido Vox. Santiago Abascal no es un tipo al que se puede tomar en serio y sus postulados (desaparición de Europa, ubicación en la extrema derecha mundial) dan para chiste. Al final, han sublimado su propia caricatura invitando a los menores de edad a tomar cañas. Su mensaje es tan sencillo que da hasta risa: no tienes edad para votar ni beber alcohol pero puedes ir de cañas con sus representantes.

¿El millonario menos rentable?

Me ha sorprendido que Jeff Bezos se haya convertido en la persona más rica del mundo gracias a sus acciones en Amazon, la empresa que fundó. Este encumbramiento me parece la foto sobre la socioeconomía actual, basada en lo virtual. Amazon no es una máquina de hacer dinero como Microsoft, Apple, Facebook o Google, precisamente, pero su valor en bolsa no deja de crecer por lo que puede ser en un futuro. O no. El que ya lo ha rentabilizado es Bezos.

Los otros idiomas más antiguos

Del origen del euskera sabemos poco, pero nos lo sabemos bien: es una de las pocas lenguas no indoeuropea del continente y es muy antigua. Pero, ¿qué otras lenguas le acompañan desde ese origen que se pierde en la noche de los tiempos (cómo me gusta esta expresión)? Islandés (con pocas variaciones, además), Macedonio, Lituano, Tamil (en India), Farsí (hablado desde Irán a Rusia) y Hebreo son otros idiomas que se han mantenido con esfuerzo durante siglos, según Magnet.