El sinsentido de la violencia en el fútbol

La estupidez en su grado mas alto nos ha llevado a una nueva tragedia relacionada con el fútbol. Ha fallecido, mejor dicho, han asesinado a un aficionado del Deportivo. Toda disculpa es buena para cometer auténticas barbaridades. En este caso la disculpa es un partido de fútbol, el deseo es la violencia por la violencia y el resultado es una nueva muerte.

Otra muerte absurda
Otra muerte absurda
Bien, repito lo dicho. La estupidez en su grado más alto. ¿Quién puede entender que con motivo de un partido se haga una quedada entre las aficiones para pegarse, saldar cuentas pendientes (no sabemos ni qué cuentas, ni contra quiénes son, ni por qué), e intentar «matarse», sólo por el hecho de animar a distintos equipos? Supongo que ellos lo entenderán, los que lo han hecho. Pero… ¿estarán contentos del resultado?, ¿es lo que querían? No sé. Quizá mi entendimiento es muy limitado para poder comprender la sinrazón de la violencia por la violencia. No es la primera vez que ocurre, ni por desgracia va a ser la última que va a ocurrir.
Según parece los aficionados del Deportivo, del grupo Riazor Blues y los del Atlético de Madrid, del Frente Atlético, habían quedado antes del partido para… ¿matarse? Muy bien. Pues lo han conseguido. Quedan una viuda y dos hijos, uno de ellos de 4 años. Una familia rota y más odios y más disculpas para poder volverse a matar en cuanto tengan media oportunidad. Las imágenes que circulan por las redes y por los medios son impresionantes. Una auténtica batalla campal. ¿Y la culpa? Pues evidentemente de unos y de otros. Del Frente Atlético y de Riazor Blues. De todos aquellos que se amparan en cualquier cosa para pegar a alguien. De hecho, en A Coruña durante el partido 6 «valientes» encapuchados han agredido a dos aficionados del Atlético que estaban viendo el partido en un bar. Seguro que ni les conocían pero ya tenían disculpa… Violencia y más violencia sin sentido.
Por supuesto que no me olvido que hace 16 años estos personajes del Frente Atlético también mataron a otro aficionado. En aquel caso le tocó a Aitor Zabaleta, seguidor de la Real, porque pasaba por allí. Como nos podía haber pasado a cualquiera. Hoy le ha tocado a otro que según parece iba ya predispuesto a pegarse, pero el resultado ha sido el mismo. Unos grupos son más violentos que otros pero todos tienen culpa, más o menos, pero culpa.
Eso sí. La responsabilidad de los dirigentes del fútbol está ahí por mucho que no lo quieran ver. Gil Marín asegura que «no es quién para disolver el Frente Atlético». Perdona, más bien deberías decir que no quieres. Que no te interesa. Que no te atreves. Cualquiera me vale o todas me sirven. Lo sabe él y lo sabemos todos. Queda muy bien tener un grupo que anima mucho, que da mucho ambiente en el campo. El precio que hay que pagar por aguantar que animen es demasiado alto pero los clubes lo pagan… Para el Atlético de Madrid sería tan sencillo como coger todos los nombres de los detenidos ayer, de los que han sido identificados y no volverlos a dejer entrar en su campo. Y en A Coruña podían hacer lo mismo. Y si ha habido detenidos del Rayo como se dice, igual, que no vuelvan a entrar en un recinto deportivo. Sin más. Y eso lo pueden hacer los presidentes o las Juntas Directivas.
Por supuesto también meto en el mismo grupo a Herri Norte o a los violentos que tienen dentro. Que ellos también han quedado o han ido a esperar a alguien, si mal no recuerdo el año pasado o el anterior a los Riazor Blues, dándose otra batalla campal en las calles de Bilbao. Que salvajes también tenemos aquí. No estamos libres, ni mucho menos. ¿Y nuestro club también podría hacer algo más para evitarlo? Yo creo que sí. Pero… es que animan mucho. Ya. Y también insultan mucho incluyendo a los aficionados de su mismo equipo. Con que no piensen como ellos ya les insultan. La violencia por la violencia. Se mete como disculpa la política o … aquella vez en que uno del Atlético de Madrid hizo algo, o que otro de los Ligallos dijo…, o del Sporting, o del Alcorcón,… que más da, cualquier disculpa es buena.
Y repito, muchos dirigentes de clubs les apoyan. Les bajan los precios, les proporcionan entradas, les guardan las banderas,… Como animan tanto… como no quieren líos,… ¡Qué pena!
Y con todo ¿adónde vamos? A dónde estamos ya. A la imposibilidad de poder ir a ver un partido de tu equipo a otra ciudad porque igual te parten la cara, o peor. Incluso en tu misma ciudad te puede salpicar si estás en mal momento en el sitio inadecuado. Nos ha llevado a no poder llevar la bufanda de tu equipo. A no pasar por determinadas zonas o a ir, si tienes valor, cagada o escondiéndote. Eso ni es futbol ni es nada. Ni es deporte ni es nada. Ni es deportividad ni es nada.
Así mismo en Mestalla han dado un botellazo a Messi durante la celebración del gol del Barça. Otro impresentable que amparado en el anonimato tira una botella al campo sin pensar en las consecuencias o peor, queriendo tener consecuencias. ¿Dónde queda el deporte? Muy lejos de la imagen que debería dar. Muy lejos de eso bueno que me gustaría poder transmitir a mis hijos.
Pero buscando lo positivo, como siempre me gusta, he de decir que estamos, como siempre que ocurre una desgracia, ante una magnífica oportunidad de poner las medidas necesarias para que no se vuelva a repetir. Ahora es el momento. Los clubes, la Federación, la LFP, la AFE, los aficionados, todos podemos hacer algo. Si no lo hacemos la culpa será de todos aunque no queramos verlo. Y mientras a sobrellevar la vergüenza de lo ocurrido.
Descansa en paz, Francisco José Romero.

Pobre imagen del Athletic contra el Betis

Necesitábamos los 3 puntos para seguir manteniendo la renta de Champions, era fundamental. Así que objetivo cumplido. Eso sí, si hay que analizar el modo en que se han conseguido ahí ya hay que poner unas cuantas pegas más. Para empezar hay que hablar del árbitro, Gil Manzano, que desde luego esta vez nos ha favorecido de lo lindo.

Protagonistas: Gil Manzano e Iker
Protagonistas: Gil Manzano e Iker (Foto: El Correo)

Si lo digo cuando es lo contrario también lo tengo que decir cuando es a favor. Ha sido uno de los máximos protagonistas del partido con tres decisiones muy favorables al Athletic y contrarias al Betis. Dos de ellas en el intervalo de un minuto que ya han dejado bastante tocado al equipo sevillano. Balenziaga pisa a Ruben Castro en el área, y quizá éste por exagerar la caída, consigue que le saquen una tarjeta y que no se pite la pena máxima, para mí clara. En la siguiente jugada, Kike Sola que se inventa una jugada perfecta yéndose por la banda del defensor. Se adentra hacia el área en una maniobra milimétrica, cruzándose por delante de Perquis, con lo que éste quiera o no quiera, le hace falta. El árbitro estaba encima, a un metro, y ha pitado penalti. A mí en vivo también me lo ha parecido, pero tras muchas repeticiones da la sensación de que es fuera. Pero… Penalti y gol de Muniain (buf… ¡qué susto que Adán casi lo para con el pie! y ¡qué alivio que no haya sido así!). Vamos, pasar del 1-0 posible, con un jugador menos del Athletic por la, también posible, expulsión de Mikel, al 0-1, gracias a un penalti que no era tal, por ser una falta fuera del área. Además en el segundo tiempo un balón del Betis que iba a gol parece que Balenziaga lo saca con la mano. Y entre medio, por si fuese poco, dos expulsados béticos, eso si, bien expulsados (aunque una de las tarjetas de Lolo es por protestar el penalti no señalado). Vamos, que por primera vez en toda la temporada nos han favorecido de una manera clara y visible. Eso sí, para mí el gol de Kike Sola sí que era válido porque parece que está en línea con uno de los defensores, por lo que no era fuera de juego. Así que mal anulado. ¿A éste le meterán a la nevera? ¿O sólo meten a los que sacan rojas al Real Madrid o a Cristiano Ronaldo?

Otro protagonista positivo del partido ha sido Guillermo que sólo ha tardado 30 segundos entre que ha saltado al campo y [Enlace roto.]. Su primer gol en Primera. Perfecto en ejecución porque se separa del defensa para tener espacio, quedándose sólo y dando la suficiente fuerza y colocación a un balón, que llegaba suave, para que fuese a donde no estaba el portero. Enhorabuena. Así mismo, en lo poco que ha estado en el campo, ha puesto otro balón buenísimo, de gol, a centro desde la derecha. Muy bien por el delantero.

Todo lo demás del partido creo que es negativo. El Athletic cuando el Betis estaba con 9 jugadores daba un poco de pena porque era incapaz de combinar una sola jugada de peligro, y sí era capaz de permitir a los rivales que las generaran a pesar de la manifiesta inferioridad. Daba la sensación de que el Betis en un balón parado iba a conseguir empatar la contienda, y así lo ha reconocido Valverde. Los jugadores parecían temerosos de que eso ocurriera y no daban con la tecla de un ataque claro. Se perdían balones absurdos dando vida a los verdiblancos (que estaban más muertos que vivos). Sólo hemos respirado tras el gol de Guillermo. Ahora a pensar cómo es posible que haya ocurrido esto contra el colista, que venía de jugar el jueves, y sobre todo, estando éste con 9 jugadores. Sacar conclusiones, ver errores e intentar que no vuelvan a ocurrir porque llevamos ya tres últimos partidos bastante parecidos. Pero eso sí, todo desde la cuarta plaza y sacando todavía 4 puntos al inmediatamente perseguidor, la Real Sociedad, que viene pisando muy fuerte. Por tanto, a ponerse las pilas y… ¡A por el Granada!