Triunfo solvente del Athletic en Almería

Hace tiempo que no veía una superioridad tan manifiesta de un equipo sobre otro en el campo.

Don Óscar De Marcos (Foto: Athletic Club)

Cosa que me sorprendió, porque cuando al mediodía vi que Osasuna le había ganado al Betis, y que nos podíamos poner si ganábamos a dos puntos de distancia, me dio un poco de miedo. Solemos desaprovechar esas situaciones. Ese poder dar un paso adelante que te da solidez y te permite avanzar en la clasificación. En momentos así, el Athletic, bastantes veces, ha soltado petardazos buenos. De ahí mi cautela. Pero nada más lejos de la realidad. Ayer, salvo en los 5 últimos minutos de partido, el dominio del encuentro por parte de los nuestros fue impresionante. Quizá también, por ser un poco generosos, podemos excluir los 5 primeros minutos. Pero el resto, lo controlaron nuestros rojiblancos de cabo a rabo. Pena que no se materializara alguna otra de las múltiples ocasiones que se tuvieron, porque el marcador podía haber sido de escándalo.

El primer tiempo, se vio favorecido por el gol tempranero, de Nico, con la pequeña ayuda de Fernando su portero. Un gol casi en frío siempre facilita las cosas. El Almería nervioso para el minuto 8. Estando cerca del descenso no es fácil jugar con el marcador en contra. Además teniendo en cuenta que no eran capaces de liberarse de la presión alta, ni de sacar el balón, sufrían continuas pérdidas, que hicieron que casi todo el juego se desarrollará en su campo. Perfecto.

El segundo tiempo, más de lo anterior, e incluso bastantes más oportunidades. En el minuto 11 De Marcos y Sancet, partiendo del saque de banda hicieron una pared y Óscar definió como un killer. Don Óscar, que en rueda de prensa dijo que todavía no sabía si iba a seguir otro año o no. Francamente, teniendo en cuenta que será uno de los jugadores con más minutos de este año y que por dinero no va a ser, supongo que renovará. Lo cual a mí me parecería genial, porque se lo está ganando en el campo, cada día, a pulso.

Uno que esta semana ha declarado que no sigue es Mikel Balenziaga, son casos diferentes porque Mikel ha jugado este año muy poco. Eso sí todo mi respeto y cariño para un jugador de Club que lo ha dado todo y que desde mi punto de vista siempre ha cumplido. 12 temporadas. 321 partidos. Dos títulos. Así que, permitidme que le ponga también el Don delante, Don Mikel Balenziaga. Gran profesional y por lo que dicen gran persona. No hay más que verle llorar en su despedida a Óscar, para saber que tiene que ser un gran tipo. Sus palabras en la despedida me hicieron llorar, me emocionaron porque se veía que le salía el sentimiento rojiblanco por todos los poros. Siendo importante en el campo en temporadas anteriores, seguro que ahora que juega poco lo es en el vestuario. Su gesto de aplaudir a sus compañeros en el campo o a sí mismo, lo tomo ahora yo prestado para darle mi mayor aplauso. Eskerrik asko, Mikel! Claramente, ¡Uno de los nuestros! Os dejo el enlace de su rueda de prensa aquí. Mila esker, berriro, Mikel!

Volviendo al partido decir que me alegré por la titularidad de Ander Herrera. Jugó 60 minutos y su calidad se nota, diría que casi en cada pase, en su colocación y en cómo ve el juego. Sin ser un escándalo, sí que hizo un buen partido. A ver si puede tener continuidad.

El caso de Guruzeta es otro. Cada vez más asentado, aunque no está metiendo goles, la sensación es que Valverde está encantado con él porque está casi acabando todos los partidos. Baja bastante a surtirse de balones y deja huecos a sus compañeros que posibilitan ocasiones de gol. De hecho, el gol de Óscar, así lo vi yo. Encontró el espacio porque Gorka salió hasta el borde del área, llevándose con él a los defensas. Muy buen trabajo el suyo.

La única pega que encuentro a lo de ayer es que no hubiesen metido algún gol más para que no nos pasase lo que vivimos en el descuento. ¡Qué agobio! Álex Centelles, metió, cómo no, su primer gol en Primera división contra nosotros. Minuto 91. ¡Ay, madre! Y tuvieron, en esos 3 minutos que quedaban, y que el árbitro por ciencia infusa convirtió en 4 y algo, una oportunidad, que Íñigo sacó. Siendo un partido como fue de dominio absoluto, pasar esos apuros al final, es para desesperarse. Hay que afinar la puntería y también mejorar el último pase, por ejemplo, Zárraga no metió gol porque Nico le hizo un pase un poco atrasado. Una pena.

Por último, mención especial para el sinvergüenza de amarillo. En este caso, el señor Pizarro Gómez. ¡Vaya recital dio con las faltas y las tarjetas a los nuestros! Nada más empezar el partido la amarilla a Oihan Sancet es de risa, por ser, no es ni falta. Y la de Vesga, alucinante. Encima acarrea suspensión. Y al pobre Berenguer lo asaron a patadas y eso que solo estuvo en el segundo tiempo, y dos de ellas escandalosas, no es que no sacase tarjeta, es que ni siquiera pitó falta. ¿Y el minuto que prolonga el descuento por su cara bonita?… Un jeta. Un amigo me dice que cada vez son más malos. Yo le he contestado que en este caso es malvado, no malo. Porque es solo hacia un lado, o contra un solo equipo. Malvado. Pero que se fastidie porque hemos ganado. Por cierto, tercer triunfo consecutivo. 13 puntos de los últimos 15 posibles, y los 3 últimos partidos jugados fuera de casa, 3 triunfos como 3 soles. Muy bien encaminados hacia Europa, pero hay que seguir partido a partido. Y esta semana y media que viene es de pegolete, con 3 encuentros, también importantísimos. Empieza el Sevilla el jueves, a esa mierda de horario (perdón, pero es que…), 10 de la noche. Así que…¡a por los hispalenses! Y…

¡Aúpa Athletic!

El Athletic a semis a costa del Valencia

Vesga el gol de la tranquilidad (Foto: Borja Guerrero)

A los que no hacen más que recordar lo que le limita la filosofía al Athletic, les diría que echen una ojeada a las estadísticas, por ejemplo de la Copa. Cuarto año consecutivo que llegamos a semifinales. Es una locura de dato. Orgullosa no, lo siguiente. A los que menciono al principio les puedo reconocer que claro que te limita, ¿y? Pero la alegría que te llevas cuando se logra algo no tiene precio. Y este equipo nos ha dado muchas alegrías. Sí, ya sé que también tristezas, pero para llegar a perder finales hay que llegar a jugarlas y para nosotros parece casi que es lo habitual, jugarlas. No estamos en la final y será complicado llegar a ella porque sea el rival que sea ninguno lo va a poner fácil, pero de momento estamos en las puertas. Sobresaliente el equipo y sobresaliente el partido que hicieron, que se distingue de los anteriores que hemos perdido o empatado recientemente, en la pegada. El gol te da la vida y te la quita si no llega. Contra el Real Madrid se hizo un muy buen partido en el que se falló arriba y se regaló más de la cuenta. Contra la Real igual. Ayer contra el Valencia, a pesar de jugar en su casa, se salió como siempre con el cuchillo entre los dientes para hacer una presión feroz que hizo parecer, en buena parte del primer tiempo, que el Valencia era un equipo menor. Los «ches» estaban ahogados y no podían sacar el balón. Su idea era sacarlo combinando desde su portero, pero la enorme y eficaz presión, les hacía perder el balón una y otra vez. Pocas veces llegaron a nuestra área, aunque una sí con peligro, con Cavani poniendo a prueba a nuestro portero de la Copa, Julen Agirrezabala, que no hace más que confirmar que es un muy buen portero. Prácticamente todo lo demás discurrió por los dominios valencianistas, donde los nuestros recuperaban e intentaban hacer daño. Pero no. Hasta que Herrera metió un centro al área, y el por mí siempre criticado Iñaki, le dejó de cabeza el balón a Iker, que fusiló con calidad, para ponernos por delante. Por cierto, titularidad de Herrera y Muniain, juntos, que no se daba desde hace mucho. Buen trabajo de ambos. A ver si recuperamos a los dos para la causa, porque calidad tienen. Ya sabéis los que me leéis que la suplencia de Iker la he aplaudido. No me parece nada malo que pasen por el banquillo. Y si cuando luego vuelven a salir, cumplen, como ayer, miel sobre hojuelas.

El empate del Valencia nos dejó fríos, a los espectadores, digo. Vino de un triple fallo. Diakhaby se internó hasta la línea de fondo, para que su pase de la muerte, lo alojase en las redes De Marcos. Ello dio vida al Valencia y sobre todo a su «encantador» público que hasta entonces estaba de uñas con su equipo. Pero los nuestros tuvieron la fortuna, calidad, de seguir percutiendo y casi seguido, gracias a otra asistencia de Iñaki, el balón le llegó a su hermano, que también fusiló a gol. Momento, el ideal, al final del primer tiempo, para ir al vestuario con ventaja. Perfecto.

El segundo tiempo similar, el Valencia incapaz de sacar el balón con criterio por la presión rojiblanca. Y nosotros sin crear grandes oportunidades en un acercamiento conseguimos el penalti sobre Nico. Llamativa la actuación del árbitro Del Cerro Grande en esta jugada. Primero ni lo vio ni lo señaló. Lo acepto porque siempre es difícil verlo en vivo. Lo de luego ya me parece peor y me explico. El VAR le avisó, por lo que pensé, que si le llamaban era porque era una jugada clarísima. Pero a él le costó un mundo, incluso acercarse al monitor. Al final, decidió que iba a verlo. Yo mientras pensaba… Seguro que es evidente que es pena máxima aunque no le apetece nada pintarlo. Mal pensada que es una. Lo que ocurre es que una vez que va a verlo, a los telespectadores nos sacaron un montón de veces las imágenes y ya desde la primera se veía que era escandaloso, porque le golpea el tobillo y lo desplaza. Clarísimo. Nítido. Manifiesto. Para todos, excepto para Del Cerro, que daba la sensación que estaba buscando algo inexistente para no tener que pitarlo. ¿Soy exagerada? O ¿a vosotros os dio la misma sensación que a mí? Al final, penalti. Gracias Del Cerro. En fin. Y Vesga que nos dio la enorme alegría de meterlo. 1 a 3. A partir de ahí, a controlar el partido e intentar evitar errores propios. Hubo uno garrafal de Yuri, cesión horrorosa y balón al delantero, que tiene un mano a mano con Julen que volvió a solventar de lujo. Hay portero. Hay portero. Ellos tampoco metieron mucho miedo ya y así se llegó al final, con el público sacando pañuelos. Y por nuestra parte, venganza cumplida y agradable, ya que la eliminación del año pasado, con este mismo equipo en modo SÚPER DESAGRADABLE, gracias a la ”amable» participación de Bordalás, nos dejó sin final, a pesar de merecerla, es decir, no muy bien recuerdo. Así que esta victoria sabe mucho mejor. A semifinales y a esperar al lunes para saber quién es el rival, entre Real Madrid, Barcelona y Osasuna. A por el que toque.

Y el domingo a Vigo a romper la racha negativa en Liga. Se necesita y lo pueden hacer. Así que… para no descolgarnos en esta competición… ¡a por el Celta! Y…

¡Aúpa Athletic!

Como siempre perder contra el Madrid

Este partido ya lo habíamos visto antes. Se repite siempre cada año, dos veces y el guión no cambia nunca. No jugamos mal, pero… se dan unas variantes que impiden que se pueda conseguir algo.

Incapaces (Foto: Oskar M. Bernal)

Lo primero es nuestra propia incapacidad. Hubo momentos en los que se embotelló al equipo blanco pero sin hacerle verdadero daño. Las últimas decisiones son siempre erróneas y no se define como se debe. La más clara es la de Nico que incomprensiblemente solo, recibió el balón y sin que le encimase nadie fue capaz de tirar el balón, no sólo fuera, sino a tomar vientos. Y todos nos preguntamos qué cómo es posible rematar tan mal. Ni idea. En segundo lugar, también entra en juego la enorme calidad del Real Madrid, que con 3 jugadas de gol, te mete dos. En su segunda llegada, ya se pusieron con un 0 a 1. Se estaba bien colocado y atacando, pero 0 a 1. Gol que hizo mucho daño a los nuestros y dio aire a los rivales.

A pesar de ello, en el segundo tiempo hubo una recuperación en el dominio del juego, se volvió a atosigar a los madridistas, pero para conseguir solo un gol que fue anulado por fuera de juego, ya que Guruzeta lo estaba. Se volvieron a sacar un buen montón de corners, nada menos que 12, y seguimos para bingo, 146 corners en Liga y ningún gol. Ya es hasta aburrido verles sacarlos. Se sabe que no va a producir nada y es desesperante.

Y hablando de desesperación no puedo dejar de hablar de los arbitrajes. El trabajo del árbitro para allanar o facilitar el partido a los blancos se inicia la semana anterior cuando el trencilla de turno se decide a expulsar de manera increíble a uno de tus mejores jugadores del año. Te quedas sin tu central titular por obra y gracia de la arbitrariedad de un señor, que posteriormente el Comité Técnico de Árbitros dice que se confundió y que no era penalti, por tanto, tampoco era expulsión. Pero ninguna de las alegaciones y recursos, para que le retirasen la tarjeta, llega a buen término ( ya sé sabía). Yeray no juega. Buen trabajo. Y ayer en el encuentro, el árbitro actúa como la gota malaya, continuo, sin descanso, persistente y empeñado en pitar cosas distintas según la camiseta del jugador. DESESPERANTE EL DISTINTO CRITERIO. Y es así todos los años, unos más descarado que otros, pero repetitivo. Camavinga ya tenía tarjeta y en un salto le dió bien a Herrera y por si acaso, no pitó ni falta, ya que quizá había que sacarle la segunda amarilla. IMPOSIBLE. Luego en rueda de prensa se quejó Ancelotti de que a Vinicius se le habían dado muchas patadas. ¡Vaya jeta! Pues habrán sido en el vestuario porque en el campo no. Y encima…. tenemos que ver este pisotón, que es más roja que amarilla.

Sin disputar el balón

Imposible. Nos pueden ganar igual, pero es aburridísimo y me enerva, a mí y a todos los aficionados al fútbol de cualquiera equipo del mundo, excepto a los del Madrid. Es una vergüenza. El Real Madrid tiene calidad suficiente para ganarte, pero siempre tienen ayuda arbitral. Siempre.

Y para poner más nombres sobre el papel, destacar que Aitor Paredes no parecía un novato. Estuvo apunto de marcar, se dejó ver en ataque en varios remates. Estaba con Benzema en el primer gol, pero poco que hacer ante la genialidad.

Zárraga, de nuevo, muy bien. Sancet como el Guadiana, aparece y desaparece, hay que pedirle más. Iñaki inexistente. Ni está y yo ya ni le espero. Berenguer debe aportar más. Yuri defensivamente le vi muy superado y en un par de jugadas, bajó a defender paseando. No es posible. Bueno, posible sí, porque pasó. Lo que es, es inaceptable. De Marcos muy bien , no dejando hacer grandes cosas al desagradable (y soy generosa en el apelativo para lo que se merece), Vinicius. Óscar fue sustituido y Lekue quedó retratado en el inicio del segundo gol blanco. Los cambios de Valverde vinieron tarde, en el 65, y quitando a Zárraga, que yo hubiese mantenido. A Raúl le dio 6 minutos…. No lo entiendo.

Y así seguimos octavos pero con inercia negativa y dos equipos echándote el aliento en el cogote. Hay que meter goles. Hay que mejorar. Y esperemos que el Copa sigan metiendo porque hay que pasar de eliminatoria. Así que ¡a por él Valencia! Y…

¡Aúpa Athletic!

La falta de puntería penaliza al Athletic contra el Sevilla

Es curioso comprobar cómo cambian las perspectivas de un año para otro.

Vesga celebrando su empate (Foto: AFP/EFE)

Este punto sacado ayer en el Sánchez Pizjuán tras empatar a uno, nos hubiese sabido a gloria el año pasado, y casi cualquier otro año, de los de este siglo, en los que el Athletic solo ha sido capaz de ganar allí, dos veces. Pero este equipo hace que no sea así. Hace que veamos este punto como una pérdida de los otros dos, ya que el equipo, salvo la caraja inicial, fue a por el partido de una forma descarada, como nos tiene acostumbrados esta Liga. En el primer tiempo, algunos minutos jugó mejor el Sevilla, pero el Athletic tuvo oportunidades como para empatar el gol inicial de los hispalenses. Aunque tampoco me olvidó de dos muy buenas intervenciones de Unai. Ni por supuesto del árbitro, Gil Manzano, al que le echo parte de la culpa del resultado. En el primer tiempo, se comió un penalti como una casa de Dmitrović a Berenguer. Como una casa. Lo del VAR es una milonga que favorece a los mismos de siempre y a los demás nos deja muchas veces, demasiadas, con cara de idiotas. Porque ayer, ¿nos pretendían vender que esta jugada citada, partía de fuera de juego previo de Álex? ¿O que no era penalti? Pues no acepto ni una cosa ni otra. ¡Lamentable!

El segundo tiempo, ya fue un monólogo rojiblanco (aunque fuesen de negro). Las oportunidades se sucedieron de manera continuada, hasta que llegó el empate de Vesga, que volvió a taladrar la red con un zurdazo, imparable. Y, además, al poco de salir al terreno de juego, puesto que el titular fue Dani García. Muy difícil se lo está poniendo a Valverde. Como digo siempre: bendito problema. El equipo siguió a lo mismo, ir a por los tres puntos, sin escatimar esfuerzos, pero sí, desaprovechando una tras otra todas las oportunidades que tuvieron. Muniain, Nico, Iñaki, Lekue, Raúl, otra vez Iñaki…

Y de nuevo paso a hablar del árbitro, que cobarde y casero, se negó a sacar dos amarillas, también como dos casas a Carmona y a Acuña, porque hubiesen supuesto sus expulsiones. ¡Un cobarde y un sinvergüenza! Eso sí, a Ander le expulsó sin problemas. Bien expulsado, pero… y a los otros dos ¿por qué no? Herrera nos libró de otra cosa peor, porque el gol era cantado, y ahora no tendríamos ni el punto del empate. Gracias Ander. Y en su línea, le dijo a Gil Manzano que había acertado. Lo de que se había confundido en un montón de jugadas anteriores no, eso no le dijo.

Por todo ello, nos quedamos con sensación, de haber perdido dos puntos. Sobre todo, por la ocasión final de Iñaki, que era más difícil fallarla que marcarla, pero…

A pesar de la pena, me sigo quedando con la reacción del equipo al golpe inicial, con el ir a por el partido hasta el último segundo, y con elo dejarse ni una gota de sudor,… creando todo tipo de oportunidades. 21 tiros a puerta, de nuevo. Este es el camino, aunque con la puntería de las jornadas anteriores. Jejeje

Y la semana que viene a recibir al Atlético de Madrid, que nos sigue a un punto en la clasificación. ¡A por ellos! Y…

¡Aüpa Athletic!

Vallecas no da la solución al Athletic

Todos nos las prometíamos muy felices porque el Athletic tenía desplazamiento a este barrio madrileño tan propicio. Al que vamos, puntuamos y volvemos. Pero,…este año el equipo no está para nada. Un cúmulo de errores dan los puntos a los vallecanos en el último minuto del partido. Si os digo la verdad y para tranquilizarme yo mismo tengo que reconocer que no veo mucha diferencia entre el juego que despliegan los rojiblancos este año y el que desplegaban al principio de la Liga pasada. La única diferencia es la suerte. El año pasado se metían goles a pesar de jugar malos partidos. El equipo estaba en fase de construcción y Txingurri estaba buscando su titulares. Pero,… se ganaban o se sacaban puntos. Muchos de los primeros partidos de la Liga pasada fueron malos. Muy malos pero con puntos. Hasta que se dio con la tecla. Este año al irse Ander Herrera, Valverde vuelve a tener que buscar sus jugadores titulares. Se está desplegando por fases el mismo juego pero sin goles, sin resultados y lo que es peor, con unos errores individuales en cada partido que nos están amargando y bien amargado. Curiosamente hoy, el mejor en todos los partidos anteriores, el portero, la ha pifiado y bien. Gorka hasta hoy sobresaliente, ha regalado un gol que ha dado alas a los madrileños. Ha sido el principio del fin para el Athletic que estaba jugando hasta ese momento más y mejor que su rival. Pero… se acabó. El gol ha sido una losa y no se han sabido sobreponer. Hay más nombres propios que no puedo dejar de mencionar.

Markel no es el del año pasado (Foto: Deia)
Markel no es el del año pasado (Foto: Deia)
Susaeta el hombre no da una. Se mata trabajando pero su último pase es siempre defectuoso. No desborda por banda nada de nada. Y el equipo lo sufre. Con Muniain pasa tres cuartos de lo mismo. Lo intenta y lo vuelve a intentar pero no solo no avanza sino que pierde el balón dando posibilidades al rival de montar contras. El hecho de que las dos bandas fallen es un lastre muy difícil de solventar. Además De Marcos hasta ayer también en el último pase estaba horrible. Ayer no. Por fin una de sus internadas hasta la línea de corner fue seguida de la precisa asistencia para que Aduriz sólo tuviese que empujar. ¿Tan difícil es? Está claro que sí. Otro de los balones rematados por Aritz en este partido ha sido puesto por De Marcos. Bien, Oscar, bien.
Beñat por su parte, acabó el partido y para mí siendo uno de los mejores (dentro de la mediocridad generalizada). De cara a la ofensiva se inventó el pase en profundidad a Oscar, que acabó en gol y lo intentó todo, de todas las maneras posibles. Siempre se ofrece y busca apoyar y hacer el último pase. No llega con frescura arriba porque en concreto en este partido ha sido increíble su trabajo defensivo, sacando bastantes balones peligrosos e incluso del área. Dentro de las probaturas de Valverde se ha visto que ha intercambiado su posición con Rico. Atrasado al primero y adelantando al segundo. Ernesto intentando dar con la tecla. Hoy a mí Beñat me ha gustado más. A ver…
Para sustituir a las dos bandas en baja forma (o desafortunados) dio de nuevo minutos a Viguera y menos a Guillermo. Creo que Borja puede aportar. Lo intenta. Si va entrando así poco a poco nos va dar resultados, seguro. A Guillermo al contar con menos tiempo necesito verle más.
Para colmo de males… cuando no consigues ganar un partido tampoco hay que perderlo, pero de nuevo unos errores que no se deben cometer se suceden. Despeje defectuoso de Gurpegi, que deja el balón en el borde del área a su delantero que se interna, centra flojo, pero… Balenziaga se deja comer la tostada permitindo al doble goleador de ayer, Baptistao (sus dos primeros goles este año, bien) entrar con todo y sólo, para fusilar a Gorka, y a la segunda meterla. Mierda, perdón. Un punto a la basura y tres para tú rival. Buf… Fatal. ¿Quién da más errores? Espero que nadie…
Para acabar decir que no estoy nerviosa porque veo que tenemos buen equipo, y sé que van a salir de ahí, pero si empiezan a salir el sábado mejor que mejor. En el derbi. Contra el Eibar, que está por encima nuestro y va a ser un hueso duro de roer. ¡A por el Eibar!
¡Aúpa, Athletic!