Los colchoneros otra vez ganan al Athletic

Desesperante que volviesemos con las manos vacías del Calderón, aún sin merecerlo pero… las cosas son así.

No pudo ser (Foto: Pablo Viñas)
No pudo ser (Foto: Pablo Viñas)
El Athletic jugó el mejor partido en muchos años contra el Atlético de Madrid, una de nuestras bestias negras, desde la final de Bucarest, de infausto recuerdo. El mejor partido. Se compitió desde el minuto uno al noventa y en muchas fases siendo superior a ellos. No sólo tuteándoles sino que incluso jugando mejor. A pesar de ello, por tres matices pequeños, pero que no insignificantes, volvemos otra vez con cara de tontos, aunque orgullosos por cómo se desarrolló el partido.
Empiezo por el primer detalle, el que más me enfada, porque es el de la participación del árbitro, tomándose un protagonimo que no le competía, pero… para eso están los árbitros, en nuestro caso… para… pues eso… Por supuesto, me refiero a que el gol del empate de ellos no debería haber subido al marcador, por lo menos en ese momento porque el primer tiempo ya estaba acabado. El trencilla dio un minuto de prolongación y ya ese minuto se había sobrepasado. El córner se sacó después del minuto 46. Su reloj es igual que el de todos. Si das un minuto más, es sólo un minuto. Sino, prolonga dos. Fue una faena que encima después ni nuestros defensas ni Iraizoz estuviesen inspirados. Al contrario. Estuvieron fatal. Ir al vestuario con cero a uno hubiese sido otra cosa.
Segundo detalle: la lesión de Iturraspe se notó mucho. Estaba haciendo un muy buen partido junto con Beñat, también a gran nivel. La salida de Rico hizo perder control en el centro del campo. Estuvo fallón, y encima no despejó como debía en el borde del área, haciendo un enorme favor a Griezmann, dejándole el típico balón que desean todos los jugadores… para completar el desastre. El francés, todo hay que decirlo, metió un golazo, imparable para Gorka y para cualquiera.
El Atlético de Madrid no hizo más. Bueno sí. Un buen puñado de faltas que como siempre son sancionadas con distinto criterio que las que comenten nuestros jugadores, con respecto a las tarjetas. Supongo que todos estaréis hartos de que nuestras faltas sean tarjetas y las de los contrarios, siendo iguales o mucho peores, casi nunca conlleven cartulina. Misterios, como que Giménez acabe sin cartulina cuando hizo cantidad de faltas por detrás. Faltas o léase patadas. Pero… Así es el Villarato… no hace más que favorecernos… ¡Ah… No…! ¡que es al revés! Bueno algún día ya me lo explicará alguna mente preclara porque yo desde luego no lo entiendo.
Un tercer punto que contribuyó al resultado, fue que Raúl García estuviese tan igualmente fallón y menos intenso que en los otros partidos que había jugado hasta ahora. No hay más que ver la repetición de la jugada en la que rechaza el portero la ocasión clara de Aduriz. El balón llega al borde del área donde están un defensor atlético, no me acuerdo quién es, y Raúl. Y no pasó nada… Una pena, pero… También me parece humano. Son muchos años allí, muchos amigos y no consiguió jugar como lo hace siempre. Yo le hubiese sustituido. Pero repito, que lo que le ocurrió me parece muy humano y lógico.
Para acabar, decir que nos quedaremos con que el equipo compitió, tuteó y en momentos, fue superior a los colchoneros, y así pensaremos que la próxima vez les ganamos seguro. A la vuelta lo comprobaremos.
Ahora de momento, mañana nos llega el Linense en la Copa. ¡A por ellos y aúpa Athletic!

¡Qué tres puntos más importantes!

Si el Valencia se llega a llevar los puntos ahora estaríamos bastante nerviosos. Mirando la clasificación con agobio porque estar en puestos de descenso no es el ideal para ningún equipo. Y ahí estaríamos precisamente. Encima con quince largos días por delante para seguir lamentándonos. Menos mal que no ha sido así. Tres puntos que te saben a gloria porque te permiten subir peldaños en la clasificación y estar un poco más tranquilo. Ahora estas dos semanas, te tienes que preocupar sólo de recuperar a los jugadores, de que carguen pilas porque llevan un buen tute de partidos.

Historia viva del Athletic: Don Txetxu Rojo (Foto: EFE/AFP)
Historia viva del Athletic: Don Txetxu Rojo (Foto: EFE/AFP)
Ayer el Athletic fue superior en la mayor parte del partido. El Valencia aparte del gol sólo tuvo la ocasión clarísima de Negredo, que incomprensiblemente no aprovechó y hubiese supuesto el 0 a 2. Gracias majete. Quizá también unos minutos después del gol valencianista, el Athletic se vio sorprendido. Pero fue un espejismo porque los zurigorris siguieron a lo suyo. A seguir como estaban jugando desde el minuto uno. Intentado ser rápidos para sorprender a los ches. De hecho para el minuto seis los rojiblancos ya acumulaban tres ocasiones de las que se llaman claras. Luego llegó una falta en contra del Athletic, en la primera vez que los valencianistas se acercan a puerta. Y gol. Otra vez con cara de primos. De nuevo la duda de si Gorka pudo hacer algo más. Minuto 20. Balance: un montón de ocasiones nuestras y ellos sólo con una, nos la clavan, poniendo el 0 a 1 en el marcador. Totalmente injusto pero es lo que hay. Si no que se lo pregunten al Bilbao Athletic que perdió tras jugar mucho mejor que el Córdoba. Pero si no se meten las oportunidades… Menos mal que antes de acabar el primer tiempo el gol de Laporte hizo justicia.
El segundo tiempo fue todavía de más dominio rojiblanco (salvo la ocasión de Negredo ya mencionada) y por dos veces se consiguieron culminar dos contrataques en gol, algo en lo que nuestros chicos no suelen destacar, pero ayer, se notó la presencia de Raúl García. ¡Qué bien en los dos goles! En el primero peinando el balón y dejándoselo franco a Aduriz, para que éste le meta un pase medido a Markel, que consiguió el gol. En el segundo, Raúl es el que conduce y espera al momento ideal para meterle el balón entre líneas a Aritz que también marca. Perfectos y preciosos ambos goles. ¡Qué maravilla! Así da gusto. Esa es la diferencia de tener a Raúl o no tenerlo. Ya no es sólo Aritz el que salta a los balonazos y los prolonga. Tiene además visión y es potente y listo. Muy bien.
Fundamental en el partido, así como en todo lo que llevamos de temporada, Beñat. ¡Qué partidazo! En lo que se le criticaba, que si la falta de físico… que si el Betis nos la había colado. La de bocas que está cayando. En el tercer gol es él el que recupera el balón. Fue colocarle Valverde en su posición y destacar inmediatamente. Txingu,Txingu, que a los jugadores hay que colocarlos en su sitio.
Para seguir con los nombres propios, Aymeric marcó el importantísimo gol del empate, pero sigue alternando los aciertos con errores de bulto. Ayer no supusieron gol pero por lo menos creo tres peligros totalmente absurdos. Por otro lado, se ve que ahora se anima más a subir, algo que parece que le ha solicitado el entrenador. Es potente y cuando sale crea problemas al equipo contrario porque es alguien más al que hay que controlar arriba. Cuando sea más regular va a ser buenísimo pero de momento hay que exigirle mucho más porque esos errores que tiene todos los partidos son inadmisibles.
Por último, aunque no menos importante, agradecer al Club el buen detalle con Txetxu Rojo, otra de las instituciones del Athletic, que se merece eso y más. La Catedral así lo ha reconocido y se ha dejado las manos aplaudiéndole. Ovación que supongo le habrá emocionado, como lo he hecho conmigo. Chapeau para la Junta Directiva, porque el Athletic no es sólo fútbol y actualidad. El Athletic es sobre todo Historia.
¡Aúpa Rojo y aúpa Athletic!

El Athletic mereció el triunfo en Anoeta

Estoy harta de hablar siempre de los árbitros pero es que en poco tiempo nos están haciendo unos arbitrajes que no tienen un pase. En dos de los tres últimos partidos han influido de manera negativo clara, afectando con seguridad al resultado, Y en el tercero quizá no influyó en el resultado pero fue desquiciante, Mateu Lahoz en estado puro. Ayer fue Velasco Carballo, que no quiso ver las manos en el área de la Real. La primera tras un pase atrás de Sabin y la segunda clarísima de Ilarramendi cortando un tiro que iba a puerta teniendo las manos totalmente separadas del cuerpo. Penalti claro y tarjeta amarilla para el jugador, que hubiese supuesto su expulsión ya que tenía una anterior. Nada, ni una ni otra. También Illarra, en otra jugada, saltó con los brazos separados e impactó en la cara de Raúl García. Nada. No hubo tarjeta. El único que no puede saltar con los brazos separados es Aduriz, pues es al único que le sacan tarjeta. En el segundo tiempo, otra mano de Illarramendi cortando el juego. Velasco la pitó pero tampoco la consideró tarjeta. Por dar una nota de humor, quizá la explicación es que el árbitro todavía le ve jugando con la camiseta blanca… y ya se sabe… si es del Madrid tiene bula… Ah, no, que es de la Real. Que me lo expliquen porque no lo entiendo. Estas decisiones influyen en el resultado y ya son demasiados partidos. ¡Ya está bien! Pero como dije en los comentarios anteriores no me olvido de hablar del juego y los jugadores, incluso del entrenador.

Tampoco ha podido ser en este partido (Foto: Deia)
Tampoco ha podidosr en este partido (Foto: Deia)
Me quedo con un malísimo sabor de boca porque me da la sensación que este partido había que haberlo ganado. La Real me pareció muy floja y salvo cuatro ramalazos poco hizo. Sobre todo si tenemos en cuenta que esos cuatro ramalazos partieron casi todos de errores nuestros, que ya se están conviertiendo en algo endémico. La primera picia, un pase atrás de Susaeta que es casi un pase al jugador de la Real y al hueco. Iraizoz estuvo súper atento y lo arregló. El siguiente una salida de balón errónea de Etxeita que va directa a un jugador blanquiazul. Luego las suficiencias de siempre de Laporte, que son para matarlo, un despeje horroroso con la cabeza devolviendo el balón al realista, y otra parecida. En el segundo tiempo, nada más salir Iturraspe, me alegro de su recuperacion física, hizo un pase paralelo horrible, que sus compañeros perdieron pero no por su culpa. No se puede regalar tanto. Es desesperante. Si sigo hablando de lo que me desespera tengo que añadir que los pases al área de De Marcos… buf… Y los de Susaeta… Insisto. Teniendo en cuenta que Susaeta, de todo lo que ha jugado, sólo un partido ha estado bien… ¿No se puede poner a Sabin en su sitio, en la derecha, que desborda más? Y sobre colocar a la gente en su sitio… ¿No puede jugar de titular Iñigo Lekue de lateral en la derecha? De Marcos no es lateral y sube muy bien pero pasa fatal. No es defensa y lo demuestró en los primeros minutos cuando defendiendo a Zurutuza en el borde del área, incomprensiblemente, se fue hacia el exterior, dejándole al jugador el camino despejado a puerta, e incluso la posibilidad de entrar hasta su casa. Gracias a que chutó fatal, sino… ¿Y si se prueba en su sitio a Iñigo? Además, tras el partido, en rueda de prensa Valverde se medio quejó de tenerle que haber dado hasta ahora a Oscar tantos minutos. Pues Txingu, tienes una solución muy sencilla.
Por cierto, dicho todo lo de arriba, también tengo que decir lo de siempre, que ni soy entrenadora, ni sé cómo están los jugadores en el día a día. El que más sabe, o el único que sabe es el propio entrenador. Soy consciente, pero… como quiero dar mis ideas, simplemente las digo.
Más cosas: Reaparición de Williams de la que también me alegro muchísimo. Pero hago pregunta. ¿Está totalmente recuperado? Lo digo porque en lo que jugó ayer hubo un par de balones a los que no fue por no correr como lo hacía antes. Uno de ellos le costó la tarjeta, muy rigurosa (es lo que tiene Velasco), pero tarjeta. ¿Está totalmente bien? Supongo que Iturraspe y él tendrán que ir teniendo minutos para volver a su nivel anterior. El de Itu espero que sea el ritmo de hace dos años porque sino lo tiene claro.
Aparte de los errores propios de nuestros jugadores, la Real estuvo más incisiva en los últimos minutos y estuvimos a punto de tener algún disgusto. ¿Que pasó? ¿Dieron un paso atrás los nuestros? También eso deberían mirarlo porque la cara de gilipollas que se nos hubiese quedado hubiese sido de órdago.
Último tema. Estoy harta también de que saquen tan horriblemente mal los saques de banda. El 70% de ellos al segundo pase ya es de los contrarios, y el 30% restante casi al primero. ¡Qué desastre!
Bueno acabo ya. Como veis no estoy muy contenta. A pesar de eso, si lo miro de manera objetiva, algo que me cuesta mucho, tengo que decir que está bien sacar un puntito fuera. Me agarraré a la media inglesa… los tres puntos de casa y uno de fuera.
Ahora a pensar en el AZ que ya nos espera el jueves en Europa League. Sin complejos a por los holandeses.
¡Aúpa Athletic!

Regalos a pares al Real Madrid

Lo que nos faltaba es hacer semejantes regalos, a pares y encima contra el Real Madrid. Si no son suficientemente buenos… toma. ¡Vaya manera más estupida de perder un partido! Se ha visto desde los primeros minutos que encima no era el día de Aduriz y si no es el día de Aritz ya sabemos todos que todavía lo tenemos más difícil. Casi al comenzar le ha llegado un pase en profundidad y raro en él… se ha dormido. No sé si eso le ha afectado pero a partir de ahí todos los balones que ha tocado en el primer tiempo los ha perdido, todos han sido pases demasiado cortos, imposibles para sus compañeros. En el segundo tiempo ha tenido un par de remates pero no era su noche. Una faena.

¡Vaya cantada! (Foto: Athletic Club)
¡Vaya cantada! (Foto: Athletic Club)
Más grave ha sido lo de Mikel San Jose, con la inestimable colaboración de Gorka. El portero ve a todos los jugadores y jamás le debe hacer ese pase, porque Mikel está de espaldas y no ve dónde están los atacantes. Mikel tenía dos demasiado cerca como para que Gorka le pase. Fatal Gorka. Y fatal San José por devolverle el balón sin mirar. Un desastre… vamos… el ideal para Benzema que se tenía que frotar los ojos para entender el regalo. Gol que evidentemente facilita el juego al Madrid que se dedica a mantener el balón, pases por aquí y por allá, que no van a nada pero que pretenden que adelantemos aún más las filas y matarnos al contrataque, que si algo les sobra es calidad y rapidez. Los nuestros a partir de ahí a correr detrás de sombras porque no olían el esférico. Por momentos los blancos me recordaban al Barcelona más pesado sobando la bola, pero les servía de sobra. Encima San José, quizá por el error desaparece. Encima nosotros no teníamos bandas. Sabin Merino por la izquierda ha estado desaparecido todo el primer tiempo y en el segundo se ha presentado para meter el golazo en plancha. Pero por la izquierda nada más. Ha mejorado muchísimo cuando ha pasado a la derecha. ¡Qué diferencia! y lo poco que ha estado lo ha hecho mucho mejor que Susaeta, que sí, ha hecho el pase del gol pero así mismo ha destrozado tres contrataques con un último pase horroroso. Sabin, también por la derecha ha dado un cabezazo que ha puesto a prueba a Keylor Navas. ¿No se puede poner a Sabin por la derecha?
Una vez que ha empatado el Athletic, repito con un gol precioso, incomprensiblemente tras dos minutos… los dos de la banda izquierda desaparecen y le dejan a Isco una autopista hacia el gol. Pase sencillo y sin oposición para que Benzema fusile. Otro regalo que no tiene explicación. ¿Cómo es posible dejar esa vía de agua? Isco se frota las manos y entra hasta la cocina, pasando, para que Benzema empuje, y si no es él, Cristiano que estaba detrás. Todo el esfuerzo a tomar vientos.
Otra cosa llamativa. Sacas a Kike Sola, mantienes a Aduriz, sacas a Ibai, y se siguen sin enviar balones desde las bandas para que se rematen de cabeza. Una de las jugadas ha sido especialmente llamativa. Íbamos ya perdiendo 1 a 2, llega el balón a la banda izquierda y Balenziaga, en vez de pasarle a Ibai, centra él al área. Él. Cuando sabemos todos cómo centra Mikel. Que me lo explique alguien porque no lo entiendo.
Por supuesto no me voy al olvidar de quien ya avise el lunes que nos podía amargar. El de amarillo… Mateu Lahoz. El mayor bluf que incomprensiblemente tiene fama de ser buen árbitro. Lo que sí es, es protagonista. Se tiene que dejar ver. Le puede. Con mucha diferencia ha sido el que más tiempo ha perdido cuando el Madrid iba por delante. Todo el rato hablando y vuelta a perder el tiempo. Da la ley de la ventaja según le convenga al equipo grande. Faltas clarísimas no las pita y corta el juego cuando nadie ha visto nada. Desquicia. Es horrible. Y encima se ha dedicado a coger la cara de los jugadores con las dos manos hasta dos veces… Es es… es… no sé ni que decir… es… por decir algo suave… es desesperante. Y lo peor de todo… es malvado. Porque su arbitraje siempre favorece a los mismos.
Y para acabar decir, que así, tras los regalos se pierde un partido en el que el Athletic podía o merecía haber obtenido algo más. Pero si a los errores clamorosos le unes que ni Aduriz ni Beñat han estado inspirados como lo suelen estar… es muy complicado. Conclusión: cero puntos y con cara de primos para casa. En Liga seguimos con tres puntos, pero las sensaciones han sido un poco mejores. Con ello nos quedamos y ahora a preparar el siguiente. El domingo nos toca en Donosti contra la Real y … a por los tres puntos. ¡Qué así sea!
¡Aúpa Athletic!

Nuevo fiasco en Villareal

Lo primero que quiero decir es que el partido del Athletic ayer en Villarreal fue malo. Muy malo. Y eso no admite ninguna disculpa. Pero a partir de ahí (ya volveré sobre ello), quiero dejar claro también, que el árbitro Clos Gómez influyó en el resultado. A saber qué hubiese pasado si su actuación hubiese sido correcta o si los errores no fuesen siempre hacia el mismo lado.

Clos Gómez mal y determinante (Foto: ED)
Clos Gómez mal y determinante (Foto: ED)
El primer tiempo fue un desastre por parte de los dos equipos. Ni el Villarreal lo estaba haciendo bien, ni nosotros tampoco. El Athletic fundamentalmente mantenía el tipo. Defendía pero no creaba nada. Suficiente todo para mantener el empate inicial. El árbitro sin embargo ya estaba dejando unos apuntes peligrosos, como lo es el no sacar tarjeta al Villarreal, cuando algunas eran claras. Por ejemplo, la patada que le dan por detrás a Balenziaga fuera del campo para impedir que saque rápido. Patada en el tobillo, sin balón en juego. Increíble. Sin olvidarme que Bailly se pasó todo el primer tiempo enviándole recados a Sola, lo que le debía haber supuesto una amarilla. Bruno ya tenía cartulina cuando le hace una falta por detrás a De Marcos durísima, cuando Oscar estaba cubriendo un balón que iba fuera por la línea de fondo. Un balón al que nunca hubiese llegado Bruno, que lo que hizo simplemente fue darle una patada por detrás a Óscar. Debería haber supuesto su expulsión. Tarjeta clara, que tampoco saca porque… ya tenia una… A Kike Sola le hacen un penalti escandaloso también con un agarrón en el área. Y en el colmo del despropósito tampoco da una falta que Baptistao le hace a Gurpe antes de meterse en el área, no sólo no la pita, sino que en la continuación de la jugada considera que Carlos le hace penalti por detrás, aunque no le toca, como bien le reconoce el delantero amarillo a nuestro defensor. Penalti que casualmente marca Bruno que no debería estar sobre el césped. Y así el Villarreal, a pesar de no jugar nada, se va a descanso con un injustísimo 1 a 0. Gracias, Clos.
En el segundo tiempo sigue con el recital y el distinto rasero para las tarjetas. Por cierto, le saca la primera a Bailly, lo que en buena lógica debería haber sido la segunda por «los recaditos» que dio en el primer tiempo. Aduriz al poco de salir al campo saltó con los brazos despegados y al caer le dio con el codo al defensa. Tarjeta sin dudarlo. Pero cuando Jaime le metió el codo en la cara a Beñat parando un contrataque, ni tarjeta, ni aviso, ni nada. Muy ecuánime. Por no hablar del penalti que le hacen a Carlos en un saque de esquina cuando lo agarran hasta tirarlo al suelo a la vista de todo el mundo. En esa misma caída desequilibraron a San José que estaba en posición inmejorable para meter un gol, el del empate. Conclusión sobre el árbitro: que hizo un arbitraje sibilino y desesperante para los jugadores, y, los más importante, que determinó el resultado.
Pero como he dicho al principio eso no quita que también se pueda criticar a los jugadores por el partido que hicieron. Pocos resultados positivos van a sacar jugando así. El segundo gol da la sensación que les hundió en la miseria y eso no se lo pueden permitir. Quedaba muchísimo partido y se podía remontar. Mal. Muy mal. Y Laporte… madre mía, dio un recital en el segundo tiempo de cómo perder el balón de la peor forma posible, y la mejor para los contrarios. Y en el tercer gol, yo por mas que le busquė en la pantalla es que ni aparece. Aketxe estuvo intrancesdente todo el partido. Sabin tampoco aportó mucho. San José y Rico crear lo que se dice crear tampoco nada. En el segundo gol Mario soltó un trallazo que encima va con efecto y se abre hacia el palo pero… ¿Gorka estaba bien colocado? Mario venía por la derecha y me da la sensación por las imágenes que Gorka estaba cubriendo más parte izquierda de la portería, cuando debería haber basculado hacia su izquierda. Kike Sola me gustó aunque no luciese mucho, pero considero que le hicieron un penalti, lo que podia haber sido determinante y también deberían haber expulsado a su marcador. Así que cosas ya hizo. Me gustó.
Por último, comentar el tema de las rotaciones. El equipo ha tenido un principio de temporada muy intenso. Se están jugando un montón de partidos, y ya sabemos que el Athletic tiene muchísimo desgaste físico por el juego que realiza. Me parece normal que Valverde rote. ¿Que han sido demasiadas ocho? Quizá sí, pero los jugadores necesitan descanso. No podemos quemarlos con tantos minutos al 100%. De hecho, el miércoles ya tenemos aquí al Real Madrid. Y el siguiente domingo partido contra los vecinos en Anoeta. A mí la alineación de primeras no me pareció mal. Otra cosa ya es ver luego el partido, pero a priori no me disgustó. Valverde sabrá cómo están los jugadores y si necesitan descanso o no. Si los cambió fue por algo.
Ahora el miércoles a derrotar a los blancos y supongo que también al de negro o amarillo, porque me parece imposible encontrar un árbitro peor para jugar contra el Real Madrid que Mateu Lahoz… el de «dejen dejen jugar»… pero sólo a los mal llamados grandes, a los otros los asa a tarjetas, incluido al Athletic. En fin… habrá que confiar en que nuestros chicos recuperen su nivel…
¡Aúpa Athletic!